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641-654
ISSN 0214 - 9915 CODEN PSOTEG
Copyright © 1998 Psicothema
media de los grupos tratados con técnicas dios, partimos de un modelo funcional se-
cognitivo-conductuales solas o en combina- gún el cual, los resultados de las interven-
ción, se situaría en el percentil 89.8% de la ciones pueden verse afectados por diferen-
distribución de los sujetos que no han reci- tes tipos de características de los estudios
bido tratamiento (Glass et al., 1981). Trans- (Lipsey, 1994): Características relacionadas
formándolo a coeficiente de correlación de con el tratamiento (tipo de tratamiento, du-
Pearson, esta eficacia se correspondería con ración, intensidad), con los sujetos tratados
un valor r+ = 0.535. Con el paso del tiempo, (edad, género, tipo de problema), con el
el tamaño del efecto se reduce casi a la mi- contexto en el que se aplicó el tratamiento,
tad (d+ = 0.768), aunque continúa siendo características metodológicas (mortalidad
significativa la eficacia del tratamiento.3 experimental, calidad del diseño, tipo de di-
En lo que respecta a los tipos registro, com- seño) y características externas a la propia
probamos que los autorregistros alcanzan los investigación (fecha del estudio, fuente de
mayores tamaños del efecto en el postest (d+ publicación).
= 1.285) frente a los registros de observación Para comprobar si existía eficacia dife-
(d+ = 1.032) y los autoinformes (d+ = 0.745). rencial entre las técnicas cognitivo-con-
Volviendo a los valores del tamaño del ductuales y la combinación entre ellas, lle-
efecto, d, otro resultado importante es la gran vamos a cabo dos tipos de análisis com-
heterogeneidad existente entre los tamaños plementarios. En primer lugar, realizamos
del efecto de los estudios. Es en el postest un análisis de varianza sobre los estudios
donde se dispone del mayor número de estu- que habían utilizado sólo una de las técni-
dios y donde se ha obtenido la mayor hetero- cas, un total de 29. Mediante este análisis
geneidad [QB(33) = 206.668; p = .000]. Por comprobamos que existían diferencias es-
tanto, pasamos a continuación a explorar las tadísticamente significativas entre ellas
características de los estudios que pueden ex- [QB(2) = 7.262; p = .026], alcanzando el
plicar la variabilidad observada. mayor tamaño del efecto la categoría de
habilidades de afrontamiento (d+ = 1.431)
Búsqueda de variables moderadoras y dentro de ésta las técnicas de autocontrol
(d+ = 1.971). En cualquier caso, todas las
Para analizar la heterogeneidad encontra- combinaciones resultaron efectivas (véase
da entre los tamaños del efecto de los estu- la tabla 1).
Tabla 1
ANOVA ponderado de las técnicas de intervención
I.C. al 95%
Categorías k d Li Ls Q GL p
+j wj
k: Número de estudios. d : Tamaño del efecto medio. I.C. al 95%: Intervalo de confianza al 95%. Q : Prueba de homoge-
+j wj
neidad intra-grupo. GL: Grados de Libertad. p: Nivel crítico de probabilidad. Q : Prueba de homogeneidad intra-grupo global.
W
Q : Prueba de homogeneidad inter-grupos.
B
Tabla 2
ANOVAs ponderados de otras variables moderadoras cualitativas
k: Número de estudios. GL: Grados de Libertad. p: Nivel crítico de probabilidad. Q : Prueba de homogeneidad inter-grupos.
B
Tabla 3
Análisis de regresión simples ponderados de las variables moderadoras cuantitativas
VARIABLES DE TRATAMIENTO:
Duración (en meses) 24 -0.302 5.449(1) .020 103.477(22) .000 .007
Intensidad total (total de horas por sujeto) 16 -0.273 4.628(1) .031 51.494(14) .000 .017
Intensidad media (horas semanales) 20 0.025 1.389(1) .239 85.777(18) .000 .000
VARIABLES DE SUJETO:
Edad (en años) 28 0.011 1.961(1) .161 190.635(26) .000 .000
Sexo (% de varones) 32 0.024 39.821(1) .000 153.296(30) .000 .180
VARIABLES METODOLÓGICAS:
Mortalidad (% sujetos) 34 0.029 31.272(1) .000 171.114(32) .000 .128
Calidad (de 0 a 10) 34 -0.228 25.246(1) .000 177.140(32) .000 .097
Seguimiento (en meses) 23 -0.040 3.119(1) .077 60.309(21) .000 .004
VARIABLES EXTRÍNSECAS:
Fecha 34 -0.123 27.904(1) .000 174.482(32) .000 .111
C. Regres.: Coeficiente de Regresión. QR: Suma de cuadrados ponderada debida a la regresión. GL: Grados de Libertad. p: Ni-
vel crítico de probabilidad. QE: Suma de cuadrados ponderada de error. R2aj.: Coeficiente de determinación ajustado.
ciso interpretar este resultado con suma cau- 12.8% de varianza explicada [QR(1) =
tela, ya que presenta un porcentaje de va- 31.272; p = .000]; es decir, los estudios que
rianza explicada muy bajo (el 0.7%) y, ade- más sujetos perdían antes de finalizar el tra-
más, el rango de valores de la duración del tamiento alcanzan los tamaños del efecto
tratamiento es muy estrecho (entre 0.75 y 3 más elevados. El tipo de diseño, clasificado
meses), lo que limita seriamente la generali- en pretest-postest de un solo grupo vs. dise-
zabilidad de este resultado. Entendemos que ños de dos grupos, influye en la magnitud
este resultado, contrario a los de Seligman de los efectos [QB(1) = 14.800; p = .000], a
(1995, 1996), puede haberse producido por favor de los primeros. Por último, la calidad
la interrelación entre los diversos tipos de del estudio correlaciona negativamente con
técnicas y de problemas tratados. Un análi- los tamaños del efecto [QR(1) = 25.246; p =
sis más preciso de estas interrelaciones hu- .000], con un 9.7% de varianza explicada.
biera sido muy deseable, pero el número de
estudios meta-analizados no es lo sufi- Discusión y conclusiones
cientemente elevado como para permitir tal
análisis. Por otro lado, la intensidad total El objetivo de este meta-análisis fue de-
(total de horas de tratamiento por sujeto) co- terminar la eficacia de las técnicas cogniti-
rrelacionó negativamente con los tamaños vo-conductuales en el tratamiento de pro-
del efecto [QR(1) = 4.628; p = .031]. Otra blemas clínicos y de salud, así como anali-
variable relacionada con la implementación zar qué características de los tratamientos,
del tratamiento, el modo de intervención, de los sujetos, del contexto y metodológicas
influyó de forma significativa en los tama- pueden estar afectando a los resultados.
ños del efecto [QB(2) = 8.657; p = .013], Hemos comprobado que las técnicas
siendo más efectiva la categoría individual, cognitivo-conductuales solas o en combina-
como era de esperar (d+ = 1.515). El sopor- ción son eficaces tanto a corto como a largo
te de entrenamiento también afectó a los re- plazo, aunque a medida que transcurre el
sultados [QB(1) = 6.021; p = .014], alcan- tiempo, los tamaños del efecto van disminu-
zando mayores tamaños del efecto los gru- yendo (d+ = 1.268 en el postest y d+ = 0.768
pos entrenados de forma oral (d+ = 1.211). en el seguimiento).
Dentro del bloque de variables modula- En cuanto a las hipótesis formuladas,
doras relacionadas con las características de nuestros resultados confirman que existen
las muestras de sujetos tratados, analizamos diferencias en cuanto a la eficacia entre las
el influjo de la edad media (en años), el gé- diferentes técnicas, destacando las habilida-
nero de la muestra (porcentaje de varones) y des de afrontamiento y, en concreto, las téc-
el tipo de problema, obteniéndose mejores nicas de autocontrol. Estos resultados podrí-
resultados en las muestras con mayor por- an deberse a la interacción de la variable ti-
centaje de sujetos varones [QR(1) = 39.821; po de técnica con tipo de problema. Por
p = .000] que padecen problemas de depre- ejemplo, hemos comprobado que una gran
sión y adicción al tabaco [QB(1) = 52.612; p parte de los problemas presentados por los
= .000]. La variable edad de los sujetos no sujetos en este meta-análisis son problemas
influyó en los resultados. de adicción (un típico ejemplo de autocon-
Los resultados de los estudios también trol -Newman y Bloom, 1981) tratados con
pueden verse afectados por los aspectos me- técnicas de autocontrol; estos problemas
todológicos. Así, hemos encontrado que la son los que mayores tamaños del efecto al-
mortalidad experimental está positivamente canzan debido a que son tratados con las
asociada a los tamaños del efecto, con un técnicas más adecuadas, como ya pudimos
torregistros, mientras que en nuestro estudio percepción de sí, motivación para el cam-
han sido separados. bio, etc.) y fisiológicas. En nuestro meta-
análisis tan sólo obtuvimos doce medidas de
Perspectivas de futuro autoinforme, cuatro de registro de observa-
ción y ninguna de registro psicofisiológico.
Una de las metas perseguidas en nuestra Por otra parte, y de cara a la práctica clí-
investigación era plantear líneas de acción y nica, nuestros resultados nos inducen a
recomendaciones sobre la base de los resul- apostar por una terapia cognitiva (principal-
tados hallados, con la finalidad de orientar mente, las habilidades de afrontamiento)
en las futuras investigaciones que apliquen cuyas sesiones de entrenamiento estén espa-
técnicas cognitivo-conductuales en el trata- ciadas en el tiempo, sin ser éste excesiva-
miento de problemas clínicos y de salud. mente largo, aplicadas individualmente y de
Algunas de las propuestas son las que si- modo oral, especialmente eficaces en suje-
guen a continuación. tos de alto nivel sociocultural.
Consideramos que sería conveniente que Finalmente, aunque la base teórica de es-
en futuras investigaciones se simplificasen tas intervenciones continúa en proceso de
los paquetes de tratamiento, una vez depu- cambio, su evidencia empírica es incuestio-
rados de los elementos que lo componen, a nable y su papel vertebrador y dinamizador
fin de determinar a qué elementos se debe la de la intervención psicológica en distintos
eficacia de las intervenciones. Aunque pre- ámbitos clínicos y de salud es muy amplia
tendimos evaluar la eficacia de cada técnica (Muñoz y Pérez, 1997).
de tratamiento, ello no ha sido posible debi-
do a que muchos de los estudios no han in- Notas
formado de qué técnica concreta se trataba,
por lo que las categorías de tratamiento han 1 El manual para la codificación de las carac-
sido excesivamente amplias. terísticas de los estudios puede solicitarse a
Por otra parte, nuestro meta-análisis no los autores.
ha podido examinar el influjo de algunas 2 Muchas de las variables moderadoras inicial-
variables potencialmente moderadoras de mente contempladas en el manual de codifi-
los resultados por falta de información en cación no fue posible analizarlas por falta de
los estudios. Éste ha sido el caso de varia- información en los estudios. Éste fue el caso
bles tan importantes como la relación tera- de variables tan relevantes como la frecuen-
peuta-paciente, la afiliación del investiga- cia, intensidad y duración del problema, las
dor, las expectativas del sujeto, el tipo de expectativas del sujeto, las habilidades entre-
habilidades entrenadas, la frecuencia, inten- nadas, variables referentes al terapeuta
sidad y duración del problema, etc. (Dush, (edad, género, experiencia y formación), etc.
Hirt y Schroeder, 1983). Sería muy benefi- La base de datos completa del meta-análisis
cioso que los estudios futuros informen so- puede solicitarse a los autores.
bre estas variables. 3 Una de las amenazas contra la validez de los
Consideramos que sería aconsejable que resultados de un meta-análisis es el fenóme-
las investigaciones evalúen los cambios ha- no del sesgo de publicación, según el cual
bidos en los sujetos, no sólo mediante medi- existe una mayor tendencia a publicar estu-
das de autorregistro, ya que éstas presentan dios con resultados significativos que estu-
el problema de la reactividad, sino que con- dios con resultados nulos (Rosenthal, 1991).
templen la modificación paralela de deter- Dado que en nuestra investigación sólo he-
minadas variables cognitivas (autoeficacia, mos podido localizar estudios publicados,
calculamos el «Índice de tolerancia a los re- después de una búsqueda exhaustiva no lo-
sultados nulos», para determinar cuántos es- gramos encontrar ninguno. Por tanto, pode-
tudios no publicados (y no recuperados por mos concluir que el sesgo de publicación no
nosotros) deberían encontrarse archivados en es una amenaza contra la validez de nuestros
las editoriales de las revistas para que los re- resultados.
sultados de nuestro meta-análisis quedaran
anulados por éstos. El resultado hallado fue Agradecimiento
que deberían estar almacenados en las edito-
riales de las revistas (y no recuperados por Agradecemos la colaboración de los Dres. F.
nosotros) 363 estudios. Tratándose del terri- Javier Méndez Carrillo y Fulgencio Marín Mar-
torio español, es muy improbable que pue- tínez en el estudio de la fiabilidad de la codifica-
dan existir tantos trabajos no publicados y no ción de las características de los estudios y de los
recuperados sobre este tema, máxime cuando cálculos de los tamaños del efecto.
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