Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
Epidemiología:
En 1983 se logró establecer que el agente causal del SIDA, era un virus RNA de la
familia de los Retrovirus, subfamilia de los lentivirus, que se denominó virus de la
inmunodeficiencia humana (VIH). Ello permitió en 1985, desarrollar un test diagnóstico de
esta infección por método de ELISA (Enzime-Linked Immunosorbent Assay), como
también un test confirmatorio específico (Western blot).
En la actualidad sabemos, que luego que el virus ingresa al organismo, se localiza
en los ganglios linfáticos regionales (en el caso de transmisión sexual) o bazo y otros
organos linfoides en caso de transmisión sanguínea o vertical. Con posterioridad, el virus se
disemina al resto del organismo, invadiendo el tejido linfoide y el sistema nervioso central.
Allí se une a células que posean el receptor CD4+ en su superficie, tales como
monocitos/macrófagos, células dendríticas/Langerhans y por supuesto linfocitos T CD4+.
Además se requiere de la presencia de un co-receptor, que corresponde a un receptor de
quimioquinas (citoquinas quimiotácticas) y que es distinto para el caso de
monocitos/macrófagos (CCR5) o linfocitos CD4+ (CXCR4). Este último descubrimiento es
muy importante, porque ha permitido entender por ejemplo, porque algunas personas que
tienen una mutación homocigota del receptor CCR5 no se infectan con el VIH a pesar de
exposiciones repetidas. Así también, aquellos pacientes que tienen mutado en forma
heterocigota este receptor, tienen una enfermedad de curso mas lento y benigno.
La estructura del virus consiste de una envoltura que contiene parte de la membrana
citoplasmática de la célula que le dió origen y dos glicoproteinas: gp 120, que participa en
la unión a CD4 y receptor de quimioquina y gp 41, que es una estrutura de transmembrana
y que participa en la fusión del virus con la célula infectada. En su interior el virus posee
dos hebras positivas de RNA que contienen toda la información genética, proteinas
estructurales (incluyendo p24 que sirve para diagnóstico de infección) y enzimas que
permiten la replicación del virus (transcriptasa reversa, proteasa e integrasa). El genoma del
VIH posee alrededor de 9.700 pares de bases y contiene 3 genes estructurales que codifican
las glicoproteinas de superficie (gen env), enzimas (gen pol) y proteinas estructurales (gen
gag), además de varios otros genes regulatorios. Una vez que el virus se fusiona con la
célula blanco, libera sus 2 hebras de RNA al interior del citoplasma, donde por efecto de la
enzima trancriptasa reversa se transforman en DNA de doble hebra, que puede integrarse al
genoma del huesped por acción de la integrasa. Una vez integrado, puede permanecer
latente como provirus o iniciar un proceso de transcripción y traducción, que dará origen a
un nuevo virus. Una parte del DNA viral se mantiene no integrado al DNA de la célula
infectada.
Las proteinas virales se sintetizan como una gran poliproteina, que luego de un
proceso de clivaje mediado por la enzima proteasa, dan origen a las proteinas maduras, que
incluyen las enzimas antes mencionadas.
El VIH-1 es extraordinariamente variable desde el punto de vista génetico, debido a
su alto nivel de mutabilidad. Ello es especialmente notable en los genes env y gag. Basados
en el análisis de esta variabilidad genotípica, ha sido posible establecer que existen 3
grandes grupos del VIH-1: M o mayor, O o externo y N. Dentro del grupo M, existen 10
diferentes subtipos o “clades”, que se designan con letras de la A a la J. De estos, el
predominante en América y Europa es el subtipo B; en Africa en cambio, el subtipo A es el
más frecuente, como lo es el subtipo E en Tailandia. Esta caracterización en subtipos, ha
permitido estudiar el desarrollo de la infección en diferentes regiones del mundo y entre
diferentes grupos de riesgo.
Durante la infección primaria por VIH, ocurre una rápida replicación del virus que
es seguida por una enérgica respuesta inmune tanto celular como humoral, que lleva al
cabo de aproximadamente 4 meses, a un nivel de equilibrio entre la producción y la
destrucción del virus. El nivel de virus circulante (carga viral) en que se establece este “set
point”, constituye un factor pronóstico a largo plazo. El nivel de linfocitos CD4+ es un
excelente marcador de riesgo de desarrollar complicaciones oportunistas; sin embargo, el
mejor predictor de progresión a SIDA o muerte es la carga viral. Uno de los estudios más
completos es el de Mellors y colaboradores, quienes estudiaron una cohorte de 1.604
hombres homosexuales con infección por VIH. En este estudio se identificó 5 categorías de
riesgo de progresión a SIDA o muerte basados en sus cargas virales iniciales. Así por
ejemplo, pacientes con cargas virales por técnica de transcripción reversa –reacción de
polimerasa en cadena (RT-PCR)- inferiores a 1,500 copias/mL tuvieron un riesgo de
progresión a SIDA a 6 años de sólo un 5.4%; en cambio el 80% de los pacientes con cargas
virales superiores a 60,000 copias/mL habían desarrollado SIDA en el mismo período de
tiempo. Cuando se combina la información de cargas virales con recuentos de CD4+, se
observa que a menor carga viral y mayor recuento de CD4+, menor es el riesgo de
progresar a SIDA. Lo contrario ocurre con elevadas cargas virales y bajos recuentos de
linfocitos. Por ejemplo, pacientes con cargas virales <500 copias/mL y recuentos de CD4+
> 750 céls/mm3 tienen un riesgo de progresión a SIDA a 6 años de 1.7%. Para el caso de
pacientes con cargas virales >30,000 copias/mL y CD4+ <200 céls/mm3, el riesgo de
progresión en 6 años es de un 97.9%. En estado de equilibrio, la producción diaria de virus
es de alrededor de 10 billones de partículas, con una vida media en el plasma de
aproximadamente 1.2 días (24 hrs intracelular y 6 hrs. extracelular). La vida media de los
linfocitos CD4 + circulantes por otro lado es de 0.6 a 1.9 días y son estos las que producen
más del 90% de los viriones que circulan en el plasma. Diariamente se recambian un 6% a
7% de los CD4+. La vida media de células en el compartimiento que da origen al resto de
los viriones (macrófagos, células foliculares dendríticas y linfocitos T CD4 + quiescentes),
se estima que es de una a cuatro semanas. Ello explica el porqué de dos fases con distinta
pendiente, en la curva de desaparición de virus VIH en el plasma que sigue al inicio de
terapia antiretroviral de alta potencia.
BIBLIOGRAFIA RECOMENDADA
Center for Disease Control and Prevention: 1993 Revised classification system for HIV
infection and expanded surveillance case definition for AIDS among adolescent and adults.
MMWR. 1992;41(No. RR-17):1-19
Center for Disease Control and Prevention. Kaposi´s sarcoma and Pneumocystis carinii
pneumonia among homosexual men- New York city and California. MMWR.
1981;30:305-308.
Fauci AS and Laine HC. Human immunodefiency virus (HIV) disease: AIDS and related
disorders in Harrison´s Principles of Internal Medicine. Mc Graw-Hill Eds. 14th Edition.
1998. p 1791-1855
Hogan CM & Hammer SM. Host determinants in HIV infection and disease. Part 1:
Cellular and humoral responses. Ann Intern Med 2001;134:761-76.
Hogan CM & Hammer SM. Host determinants in HIV infection and disease. Part 2:
Genetics factors and implication for antiretroviral therapeutics. Ann Intern Med.
2001;134;978-96.
Mocroft A, Johnson MA, Phillips AN. Factors affecting survival in patients with the
acquired immunodeficiency syndrome. AIDS 1996;10:1057-6513
Perelson AS, Neumann AU, Markowitz M, Leonard JM , and Ho DD. HIV-1 dynamics in
vivo: virion clearance rate, infected cell life-span, and viral generation time. Science.
1996;217:1582-6.
Time from HIV-1 seroconversion to AIDS and death before widespread use of highly
active antiretroviral therapy: A collaborative reanalysis. Lancet 2000;355:1131-7.
Lalezari JP, Henry K, O`Eran M et al. Enfuvirtide, an HIV-1 fusion inhibitor, for drug-
resistant HIV infection in North and South America. N Engl J Med 2003;348:2175-85.
Revisado AD 14/8/2004
Tabla 1. Clasificación revisada de la infección por VIH (CDC,1993).
Categorías Clínicas
A B C
_________________ _________________ _________________
Recuento Linfocitos Asintomático Sintomático Condiciones *
T CD4+ Infección Primaria (condiciones no A o Indicadoras de
Linfadenopatía gene- B) SIDA
ralizada persistente
1. ≥ 500 cél/ul A1 B1 C1
2. 200-499 cél/ul A2 B2 C2