Sie sind auf Seite 1von 258

EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN

“¿QUIÉN ERA CONMIGO?”


EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

148
____________

La Brharanyaka Upanisad comienza así…˜ “Antes del Principio…˜ nada de todo


esto era”…˜ La Upanisad llama “Nada” a lo que era antes del Principio…˜ y niega ab-
solutamente que en esa “Nada” hubiera algo de todo esto que Ahora parece estar ha-
biendo…˜ Dice afirmativamente que Nada era…˜ que lo que la palabra Nada nombra…
˜ era…˜ y que en ese ser absoluto de esta Nada…˜ toda experiencia de nosotros mismos
era completamente inexistente…˜ La Upanisad nos llama Nada…˜ y lejos de negar
nuestro ser lo que nosotros somos…˜ lo afirma absolutamente…˜ No dice que nosotros
no éramos…˜ nos llama Nada…˜ y dice que esta Nada era lo único que era…˜ Nada…˜
de donde estaba absolutamente excluida la experiencia de nuestro propio conocimiento
de ser…˜ Nada…˜ donde nosotros no nos sentíamos ser…˜ Nada…˜ donde no se sentía
esta sensación intensa e irrefutable de nuestro ser nosotros lo que nosotros somos…˜
La Upanisad no está hablando de antes del principio de otro que nosotros mismos…˜
“Nada de todo esto era”…˜ saber por nosotros mismos que “nada de todo esto era”…˜
es la verificación más profunda de que nosotros sí éramos…˜ Podrá llamársenos
Nada…˜ pero esta Nada está sabiendo Ahora…˜ que…˜ efectivamente…˜ nosotros co-
nocemos un estado…˜ y lo conocemos por nosotros mismos…˜ en que absolutamente
nada de todo esto era…˜ La Upanisad no habla pues del inconcebible comienzo del
mundo…˜ habla de nosotros…˜ pues sólo en nosotros está el conocimiento real de cómo
han sido verdaderamente las cosas…˜ La Upanisad nos llama Nada…˜ no para decir
que nosotros no éramos…˜ sino para afirmar la negación absoluta de que nosotros sea-
mos algo de lo que ahora parece ser…˜ Quiere decir realmente que “De todo cuanto
ahora parece ser…˜ nosotros no somos absolutamente nada de ello…˜ puesto que nada
de todo esto estaba con nosotros en ese “Nada de todo esto era”…˜
Profundizad bien en vosotros mismos…˜ ved sin temor vuestro propio estado cuan-
do “Nada de todo esto era”…˜ sabed por vosotros mismos que esto es verdadero…˜ Re-
cobraos de vuestra postración…˜ lo que vosotros sois no es nacido ni mortal…˜ no vie-
ne ni pasa…˜ ES simplemente vosotros…˜
Por otra parte…˜ el Maestro Eckhart dice…˜ “Dios tiene su ser Dios de la criatura…
˜ y la criatura tiene su ser criatura de Dios”…˜ Preguntaos a vosotros mismos…˜ ¿qué
es lo que es criatura en mí?…˜ ¿No es precisamente eso que no estaba conmigo cuando
yo era y absolutamente nada más era conmigo?…˜ ¿qué es lo que es criatura en mí?…˜
¿no es ello precisamente todo esto…˜ este cuerpo-y-mente-y-alma-y-espíritu-y-univer-
so…˜ con cuyo concurso…˜ que no estaba conmigo en ese estado miísimo antes del
principio…˜ ahora…˜ en este preciso Ahora…˜ yo estoy sintiendo esta sensación de

2
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

ser…˜ yo estoy sabiendo que yo soy…˜ y también que el mío es el estado…˜ en que yo
no sabía que yo soy?…˜ Lo que es criatura en mí…˜ ¿no es precisamente lo que co-
mienza y lo que acaba…˜ lo que no era antes del principio…˜ lo que no estaba conmi-
go…˜ lo que yo no soy?…˜
Centraos en vuestro propio “Nada de todo esto era”…˜ Ved cuán verdadero es…˜
ved cuán realísimo es…˜ Calculad cuánto pudo haber durado vuestro estado antes de
que vinierais a saber que vosotros sois…˜ calculad cuánto pudo haber durado vuestro
propio “Nada de todo esto era”…˜ ¿Cuándo dio comienzo el sufrimiento?…˜ ¿cuándo
comenzó la angustia?…˜ ¿cuándo comenzó la sed ardiente a quemaros el corazón?…˜
¿Había en vosotros alguno de estos estados en vuestro propio “cuando nada de todo esto
era?…˜ ¿Sois vosotros quienes habéis pedido este estar sintiendoos ser que no estaba
con vosotros “cuando nada de todo esto era”?…˜ ¿Sois vosotros quienes habéis pedido
la venida a vosotros…˜ el toque a vosotros de lo que en vosotros es la criatura…˜ de
todo esto que no estaba con vosotros?…˜ ¿sois vosotros quienes habéis deseado nunca
sentiros a vosotros mismos ser?…˜

3
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

149
____________

Cuando la Upanisad dice que “Nada de todo esto era”…˜ no está hablando de un an-
tes del principio inconcebible…˜ lejanísimo…˜ completamente fuera de nuestro alcan-
ce…˜ sumergido en la profundidad insondable de un pasado temporal que nos ha prece-
dido…˜ La Upanisad está hablando de nosotros…˜ y está hablando de Ahora…˜ de este
mismo Ahora en que…˜ debido a que nosotros somos la Mismidad que no comienza ni
acaba…˜ tenemos acceso inmediato a nuestro propio estado “cuando nada de todo esto
era”…˜ ¿Por qué sabemos nosotros que “nada de todo esto era”…˜ y por qué lo sabe-
mos Ahora?…˜ Porque el Ahora en que nada de todo esto era…˜ es este mismo Ahora
en que lo sabemos…˜ Ello es como un Mar de Mismidad perfectamente idéntico a sí
mismo…˜ Él es el mismo Mar ahora que el pez del nacimiento bulle en sus aguas…˜
que el Mar que era cuando el pez del nacimiento no bullía en sus aguas…˜ Lo que im-
porta verdaderamente es el Mar de Mismidad…˜ no el pez del nacimiento que le
revela…˜
Puesto que “cuando nada de todo esto era” no había tiempo…˜ nosotros no podemos
concebir ni remotamente cuánto veníamos durando hasta que hemos llegado a saber que
nosotros somos…˜ a sentir el ardor de esta sensación de ser…˜ Sin embargo…˜ “cuando
nada de todo esto era”…˜ este estado omnipresente como el Mar a todos sus peces…˜
este estado verdaderamente nosotros mismos…˜ Mismidad de nuestra propia
Mismidad…˜ es perfectamente accesible y visible…˜ comprehensible…˜ verificable…˜
y saboreable para nosotros Ahora…˜ Todos nosotros conocemos integralmente el estado
en que “nada de todo esto era”…˜ Y lo conocemos sencillamente porque lo somos…˜
No imaginéis vuestro propio ser lo que vosotros sois…˜ Vedlo…˜ verificadlo…˜ sa-
boreadlo…˜ No os hagáis la pregunta…˜ “¿de qué me sirve a mí ser el estado eterno…˜
cuando yo ya no sepa que lo soy?…˜ No os hagáis esta pregunta…˜ porque esta pregun-
ta es falsa…˜ Vosotros sí sabéis que sois el estado eterno…˜ y lo sabéis Ahora…˜ Voso-
tros no sabíais que sois el estado eterno…˜ y no lo sabíais también Ahora…˜ En ningu-
na de estas dos maneras de conoceros se ha planteado nunca la pregunta falsa “¿de qué
me sirve a mí ser el estado eterno…˜ cuando yo ya no sepa que lo soy?”…˜ Esta pre-
gunta surge solamente de la falsa identificación con el cuerpo-y-mente-y-alma-y-espíri-
tu…˜ y en realidad habría que expresarla así…˜ “¿de qué me sirve a mí ser el estado
eterno si yo no lo sé Ahora?”…˜
Si nosotros no sabemos Ahora que somos siempre el estado eterno…˜ ello se debe
únicamente a que tenemos la creencia ciega de ser otro que él…˜ Este otro que el estado
eterno es el nacimiento…˜ Debido a nuestra sed insaciable de experiencia…˜ nosotros

4
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

necesitamos al nacimiento…˜ puesto que el nacimiento es nuestro artefacto de sentirnos


ser…˜ De manera que…˜ finalmente…˜ la pregunta falsa queda así…˜ “¿de qué me sir-
ve a mí ser el estado eterno…˜ si yo no puedo eternizar este estarme sintiendo ser?…˜
¿de qué me sirve a mí ser el estado eterno…˜ si yo no puedo eternizar el nacimiento?”…
˜
Así pues…˜ no es verdadero que nosotros no sepamos que nosotros somos el estado
eterno…˜ Nosotros sabemos que somos el estado eterno Ahora…˜ ¿qué más podemos
querer?…˜ Ahora está siempre con nosotros…˜ Con el conocimiento de ser…˜ con esta
sensación de ser…˜ Ahora estamos sabiendo que somos el estado eterno…˜ La verdade-
ra pregunta es ésta…˜ ¿de qué me puede servir a mí estar sabiendo siempre que yo soy
el estado eterno?…˜ ¿de qué me puede servir a mí estar sabiendo durante una duración
indefinida de tiempo que yo soy el estado eterno?”…˜ ¿Comprendéis?…˜: Una indefini-
dad de tiempo sabiendo que yo soy el estado eterno es una indefinidad de tiempo cons-
ciente de que yo soy…˜ consciente sin ninguna pausa…˜ consciente sin sueño profun-
do…˜ ¿Es esto lo que queremos cuando preguntamos…˜ “de qué me sirve a mí ser el
estado eterno cuando yo ya no sepa que yo lo soy”?…˜

5
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

150
____________

Para nosotros…˜ ser omnisciente de cuando nada de esto era…˜ es el estado


natural…˜ Todos sabemos in extremis…˜ en abundancia inagotable…˜ que nada de todo
esto era…˜ Lo que se llama el nacimiento…˜ no es más que una minúscula interrupción
aparente de la continuidad sin principio ni fin de nuestro estado real…˜ Lo que se llama
el nacimiento es sólo una instrumentalidad reflexiva en nuestro seno…˜ un instante de
conocimiento y sensación de que nosotros somos…˜ donde…˜ como un espejo…˜ nues-
tra realidad se refleja…˜ y devuelta instantáneamente a nosotros…˜ nos hiere como hie-
re una flecha…˜ con el conocimiento de que nosotros somos…˜ Pero somos nosotros
quienes sabemos y sentimos que nosotros somos…˜ no el nacimiento…˜
El Maestro Eckhart dice que Dios tiene su ser Dios de las criaturas…˜ Cuando no
hay criatura tampoco hay Dios…˜ ¿Y qué es la criatura?…˜ La criatura es precisamente
esta instrumentalidad nacimiento con cuya presencia a nosotros estamos sintiéndonos
ser…˜ La criatura es precisamente lo que nosotros no somos…˜ y no hemos sido
jamás…˜ ¿Por qué es ello así?…˜ Ello es así porque si nosotros somos realmente…˜ si
nosotros somos lo que sabemos que nosotros somos cuando absolutamente nada de todo
esto era…˜ cuando la criatura que ahora nos revela no era…˜ entonces no podemos ser
lo que realmente no es un ser sino sólo una instrumentalidad…˜ ¿Estaba con nosotros
esta criatura…˜ estaba con nosotros esta instrumentalidad nacida…˜ cuando nada de
todo esto era?…˜ No…˜ esta criatura…˜ esta instrumentalidad no estaba con nosotros…
˜ y nosotros lo sabemos…˜ Nosotros sabemos que esta criatura…˜ que esta instrumenta-
lidad nacimiento…˜ no estaba con nosotros…˜ Sabemos que ha aparecido en nosotros…
˜ sabemos que con su concurso nosotros estamos sintiéndonos ser…˜ y sabemos que
cuando sobreviene el estado de sueño profundo…˜ esta criatura se subsume integral-
mente en una desaparición irrastreable…˜ Preguntémonos entonces…˜ cuando el estado
de sueño profundo traga y subsume integralmente a esta criatura…˜ a esta instrumenta-
lidad nacimiento…˜ ¿quién queda entonces sabiéndose ser y sintiéndose ser en noso-
tros?…˜ ¿quién se sabía ser y sentía ser en nosotros…˜ cuando la criatura nacimiento no
era?…˜
La respuesta la tenemos todos…˜ Nadie…˜ nadie se sabía ser…˜ nadie se sentía ser
en nosotros…˜ cuando esta criatura nacimiento no era…˜
Luego si Dios tiene su ser Dios de la criatura…˜ luego si cuando la criatura no es
Dios tampoco es…˜ ¿no conocemos nosotros por nosotros mismos ese estado en que ni
la criatura ni su Dios son?…˜ ¿No conocemos nosotros por nosotros mismos ese estado
en que la criatura no era…˜ y en que Dios mismo no era?…˜

6
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

Verdaderamente…˜ con una abundancia integral…˜ nosotros conocemos ahora lo


que nosotros somos…˜ No lo conocemos como otro que nosotros…˜ lo conocemos por
nuestro propio ser-Lo…˜
Si no había ningún Dios con nosotros cuando nada de todo esto era…˜ si no había
ninguna criatura “nacimiento” con nosotros cuando nada de todo esto era…˜ entonces
nosotros no somos ningún Dios…˜ ni tampoco somos la criatura de la cual el Dios tiene
su ser Dios…˜
Nuestro ser es antes de que el Dios y su criatura…˜ la criatura y su Dios sean…˜
Ninguno de ambos estaba con nosotros…˜ Nada de todo esto era…˜ ninguno de ambos
estaba con nosotros…˜

7
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

151
____________

Contemplemos cuando nada de todo esto era…˜ Eso es nuestro verdadero estado…˜
Está completamente abierto…˜ es Ahora…˜ y sólo nosotros podemos contemplarlo…˜
cada uno por sí mismo…˜ cada uno sabiendo por sí mismo…˜ de sí mismo…˜ este esta-
do verdaderamente sí mismo…˜ que era…˜ que es…˜ que será…˜ cuando nada más que
ese estado sea…˜
Ese estado no puede ser saqueado…˜ ese estado no puede ser sacado de sí mismo…˜

8
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

152
____________

El punto focal de toda nuestra contemplación es este sentirnos ser…˜ La sensación


de ser…˜ este estarnos sintiendo ser…˜ es la mismidad Dios-y-su-criatura…˜ en un acto
de adoración conjunto dentro de nuestro corazón…˜
Cuando miramos y contemplamos profundamente este par conjunto…˜ Dios y su
criatura en el templo de nuestro corazón…˜ nuestra contemplación traspasa los límites
de la sensación de ser misma…˜ y nos devuelve a nuestro estado real…˜ cuando nada de
todo esto era…˜
No es necesario que nadie nos lo diga…˜ Nosotros sabemos por nosotros mismos…˜
nosotros sabemos con nuestro ser mismo que nosotros éramos y nada de todo esto era
con nosotros…˜ Somos Eso…˜ y así es nuestra contemplación final…˜
En nosotros no había otro que nosotros mismos…˜ En nosotros no había Dios ni
criatura…˜ En nosotros no había contemplación de nosotros mismos…˜ Nadie rastreaba
nuestro paradero…˜ nadie sabía nuestro ser…˜ Nuestro estado era una Ocultación Abso-
luta…˜ No había el menor indicio de que pudiéramos ser encontrados…˜ ni absoluta-
mente nadie buscándonos…˜
Al mismo tiempo nada era excepto nosotros…˜ Ello quiere decir…˜ que nuestra
Ocultación Absoluta no se ocultaba de nadie…˜ pues otro que nosotros mismos…˜ sim-
plemente no era…˜ Ello quiere decir que nuestra Ocultación Absoluta era una Oculta-
ción Absoluta…˜ no por falta de Ser en nosotros…˜ sino por falta de Testigo…˜ No era
que nosotros no fuéramos…˜ sino que nadie nos contemplaba ser…˜ Nuestro Ser lo que
nosotros somos era completo y absoluto…˜ sin ninguna fisura o partición en sí mismo…
˜ que hiciera de sí mismo dos…˜ el contemplado y el contemplador…˜
¿Cuánto había durado nuestra Ocultación Absoluta?…˜ ¿Durante cuánto…˜ nosotros
mismos …˜ no supimos que nosotros somos?…˜
“Dios tiene su ser Dios de la criatura”…˜ Ahora bien…˜ en nosotros no había criatu-
ra…˜ Nosotros sabemos intensamente el estado en que no había criatura en nosotros…˜
Sumergíos en ese estado vuestro…˜ vuestrísimo…˜ en que no había criatura…˜ ¿Cómo
sabéis que en vosotros no había criatura?…˜ ¿Qué es la criatura?…˜ ¿Qué es lo que no
había en vuestro estado primero…˜ primerísimo…˜ verdadero?…˜ Contemplad…˜ con-
templad sin desmayo hasta que entendáis…˜ ¿qué es lo que no había en vuestro estado
primero…˜ primerísimo…˜ antes del principio?…˜

9
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

153
____________

¿Qué quiere decir que Dios tiene su ser Dios de la criatura?…˜ Ello quiere decir
exactamente que cuando la criatura no era en nosotros…˜ Dios…˜ lo que la palabra
Dios significa…˜ tampoco era…˜ Ello quiere decir…˜ exactamente…˜ que Dios y la
criatura son una única aparición en nosotros…˜ y que nosotros conocemos exactamente
el estado en que esta aparición no era…˜
El punto último de nuestra contemplación es entonces este estado nuestro en que la
aparición de Dios y de su criatura no eran…˜ No os canséis de la evocación de este esta-
do…˜ no os digáis que no hay nada que conocer en él…˜ Es nuestro estado…˜ Es nues-
tro verdadero estado…˜ Y lo es Ahora…˜ Poco a poco veremos inclinarse la balanza de
nuestro amor…˜ desde amar sentirnos ser…˜ a amar lo que nosotros somos…˜ Poco a
poco veremos lo mucho que hay que ver en nuestro estado…˜ cuando absolutamente
nada más era…˜
Sólo parece inhóspito…˜ porque queremos sentirlo…˜ Sólo parece muerto…˜ por-
que nosotros creemos estar vivos…˜ Sólo parece vacío…˜ porque queremos agarrarlo…
˜ ¿Por qué no nos fiamos de nuestra comprehensión a secas?…˜ Nosotros sabemos…˜
por nosotros mismos…˜ que hay un estado en que nosotros no nos conocemos a noso-
tros mismos como este hombre o como esta mujer…˜ simplemente…˜ porque este hom-
bre o esta mujer no están con nosotros…˜ Este estado es el sueño profundo…˜ Pero hay
otro estado más profundo…˜ un estado nuestro que es Ahora…˜ en el que nosotros sa-
bemos que nada de todo esto era…˜ Y lo sabemos por nosotros mismos…˜ por una sen-
cilla llamada a nuestro recuerdo…˜ cuando ni este hombre ni esta mujer eran en noso-
tros…˜
¿Cómo es este estado nuestro en que ni este hombre ni esta mujer eran en
nosotros?…˜ Vedlo por vosotros mismos…˜ Sabeos a vosotros mismos en ese estado
vuestro…˜ en que absolutamente nada más que vosotros era…˜ Sabeos a vosotros mis-
mos en ese estado ahora…˜ No lo eludáis…˜ no deis nada por sabido…˜ Es muy impor-
tante que os veáis exactamente cuando nada más que vosotros era…˜ es muy importante
que os veáis a vosotros mismos en vuestro propio estado Ahora…˜
Es muy importante que veáis por vosotros mismos que en ese estado vuestro no hay
comienzo ni fin de nada…˜ es muy importante que veáis por vosotros mismos que en
ese estado vuestro no hay Dios ni criatura…˜ ni Sol ni Luna…˜ ni Cielo ni Tierra…˜ ni
ningún vosotros mismos como este hombre o esta mujer…˜ Es muy importante que
veáis por vosotros mismos…˜ que en ese estado vuestro…˜ vosotros seáis la suma total
de vuestra Mismidad…˜

10
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

Sentíos ser ese Estado…˜ Pasaos completamente a ese estado…˜ La barca de vuestro
paso es precisamente este mandato…˜: “Sentíos ser ese estado”…˜ Una vez completa-
mente pasados a vuestra verdadera realidad…˜ que la barca esté o no esté…˜ no supone
ninguna diferencia…˜ Conoceos ser lo que sois por submersión absoluta en vuestra pro-
pia Mismidad…˜ conoceos ser lo que vosotros sois…˜

11
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

154
____________

Contemplemos crepitar…˜ y subir…˜ y ascender el fuego encendido dentro de la ca-


verna de nuestro corazón…˜ Este fuego está aquí para consumir todo lo que no es noso-
tros ni nuestro…˜ Este fuego está aquí para consumir todo lo que no estaba con nosotros
cuando nada de todo esto era…˜ Este fuego está aquí para consumir…˜ y será implaca-
ble…˜
El fuego está presente…˜ todos lo sentimos…˜ El fuego es esta sensación de ser…˜
cuyo sentirla…˜ debe ser alimentado…˜ Todo cuanto ahora parece ser es sólo
alimento…˜ El alimento está siendo consumido por esta sensación de ser…˜ ¿Y cómo
consume el alimento esta sensación de ser?…˜ Ello es como una llama que consume un
combustible…˜ Finalmente…˜ cuando ya no queda más combustible…˜ la llama se con-
sume a sí misma…˜ ¿Cómo se consume a sí misma una llama?…˜
Comprended de vosotros mismos…˜ comprended de vuestra verdadera naturaleza…
˜ que esta sensación de ser en vosotros…˜ es como un fuego…˜ Su combustible es la so-
lubilidad nacimiento…˜ Este fuego de sentirse ser…˜ está consumiendo todo…˜ Este
todo no estaba con nosotros cuando nada de todo esto era…˜ Luego nosotros …˜ lo que
nosotros somos verdaderamente…˜ no tenemos nada que perder en esta combustión de
estar sintiéndonos ser…˜
Nosotros no podemos cifrar nuestro ser en sentirnos…˜ Para que haya sensación de
ser…˜ tiene que haber combustión…˜ Para que haya sensación de ser…˜ la llama de la
sensación de ser tiene que ser alimentada…˜ A este propósito de alimentar la llama de la
combustión…˜ cuya luz es esta sensación de ser nosotros lo que nosotros somos…˜ sir-
ve todo esto que no estaba con nosotros en ese estado de nuestro verdadero ser…˜
Debido a que es un fuego…˜ sentirse ser…˜ sentirse ser así como nosotros nos senti-
mos ser…˜ nos abrasa y nos quema…˜ Debido a que este fuego crepita en nuestra entra-
ña…˜ nosotros no podemos tener paz hasta que comprendemos…˜ Y comprendernos a
nosotros mismos…˜ como nosotros somos realmente…˜ es ir a ese estado nuestro en
que absolutamente nada de todo esto era…˜ Ese estado ES…˜ ese estado es lo único que
ES…˜ ese estado es verdaderamente real…˜ ese estado es verdaderamente lo que noso-
tros somos…˜
IR a ese estado ahora…˜ es comprender que ese estado ES…˜ No es comprender
que ese estado fue…˜ sino comprender que ese estado ES…˜ ¿Y qué es comprender que
ese estado ES?…˜ Es verse a uno mismo como uno Es realmente…˜ una insondable
Plenitud de frescor donde jamás prospera ningún fuego…˜

12
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

Este estado Es…˜ Nosotros lo sabemos…˜ Nuestro saberlo…˜ es verlo…˜ Nuestro


verlo es SER-LO…˜ No es difícil comprenderse a uno mismo cuando absolutamente
nada más era…˜ No es difícil…˜ porque ESO es lo que somos…˜

13
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

155
____________

Así pues…˜ cuando se nos dice que contemplemos…˜ ¿qué es exactamente lo que se
nos pide que hagamos?…˜ ¿en qué debe consistir esencialmente nuestro contemplar?…˜
Contemplar no puede ser algo difícil…˜ contemplar no puede depender de elemen-
tos que no estén a nuestro alcance siempre…˜ Y hay que comprender que para nosotros
siempre quiere decir ahora…˜
Mirad…˜ escuchad…˜ y comprended…˜: Comprended por todos los medios…˜
comprended que se trata de vosotros…˜ de vosotros mismos sólo…˜
Contemplar es ver incesantemente…˜ y comprender que nada de lo que vemos esta-
ba con nosotros en nuestro estado verdadero…˜ ¿Y qué es ver incesantemente?…˜ Ver
incesantemente es ver incesantemente…˜ una operación completamente natural y sin es-
fuerzo desde que somos conscientes…˜ Nosotros estamos viendo siempre…˜ pero no
siempre estamos comprendiendo que nada de lo que vemos es nosotros mismos ni nues-
tro…˜ Por falta de contemplación…˜ nosotros…˜ al mismo tiempo que vemos lo que
quiera que estamos viendo…˜ no estamos viendo igualmente el Estado en que lo que es-
tamos viendo no era…˜

14
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

156
____________

La señal de nuestro estado eterno es precisamente esta sensación de ser abierta den-
tro de la montaña de nuestro corazón…˜ Esta sensación de ser no podía no encontrar-
nos…˜ y no podía no encontrarnos porque nosotros somos lo que nosotros somos siem-
pre y por todas partes…˜ Si alguien tenía que sentirse a sí mismo ser…˜ ese alguien es
nosotros…˜
¿Qué es sentirse ser?…˜ Sentirse ser es este fuego crepitante que consume dentro de
la caverna del corazón…˜ sentirse ser es este estar sabiendo que uno es…˜ Para saber
que uno es…˜ la sensación de ser es necesaria…˜ De manera que…˜ sin haberlo pedido
nosotros…˜ la sensación de ser nos está tocando…˜ Este toque genera lo que se llama la
sensación de privación…˜ ¿Y qué es la sensación de privación?…˜ La sensación de ser
nosotros lo que nosotros somos se alimenta…˜ La sensación de ser nosotros lo que no-
sotros somos se genera en la combustión del alimento…˜ De manera que cuando el ali-
mento falta…˜ la sensación de ser se cambia en hambre y sed…˜ El hambre y la sed lle-
vados a su extremo conforma lo que se llama la sensación de privación…˜ Cuando la
sensación de ser está teñida de privación es extraordinariamente intensa…˜

15
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

157
____________

Sintamos profundamente nuestra propia sensación de ser…˜ Toda la meditación se


resuelve en la contemplación de ser…˜ Sentirnos ser…˜ estarnos sintiendo ser es la
prueba y la señal de nuestro estado eterno…˜ Este estar sintiéndonos ser…˜ este estar
sintiéndonos ser lo que nosotros somos…˜ no podía no encontrarnos…˜ ¿Y por qué no
podía no encontrarnos?…˜ Debido a que nosotros somos lo que nosotros somos por to-
das partes y siempre…˜
Pero nosotros no hemos pedido nunca sentir que nosotros somos…˜ Si miramos pro-
fundamente adentro de nosotros buscando el instante en que dimos nuestro consenti-
miento para ser tocados por la solubilidad nacimiento…˜ no lo encontraremos…˜ Aun-
que conocemos integralmente nuestro estado cuando la solubilidad nacimiento no nos
tocaba…˜ aunque conocemos integralmente nuestro estado cuando nosotros no nos sen-
tíamos ser…˜ sin embargo…˜ el conocimiento de cuándo dimos nosotros el consenti-
miento para que la solubilidad nacimiento nos toque…˜ ese conocimiento…˜ nosotros
no lo tenemos…˜
¿Qué es lo importante entonces…˜ ser lo que nosotros somos o sentir que nosotros
somos?…˜ Ser lo que nosotros somos es eterno…˜ sentir que nosotros somos ni siquiera
ha buscado nuestro consentimiento…˜

16
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

158
____________

Mirad…˜ este estar sintiendo la propia sensación de ser uno mismo lo que uno es…˜
este estar sintiendo quemar y abrasar y consumir esta incandescencia abrasiva dentro de
la caverna de nuestro pecho…˜ este estar sintiéndose ser…˜ por mucho que nos duela…
˜ es el puente de retorno a nuestra verdadera naturaleza real…˜ Lo que importa no es lo
que ahora se siente…˜ lo que importa es lo que comprendemos que nosotros somos
cuando presenciamos el instante en que este sentirnos ser no era…˜
Efectivamente…˜ hay un estado en nosotros…˜ un estado real…˜ un estado que es
integralmente lo que nosotros somos…˜ en el cuál este estarnos sintiéndonos ser no
era…˜ ¿Acaso no estamos viendo Ahora que no siempre nos hemos sentido a nosotros
mismos ser?…˜ ¿cómo es ese estado nuestro en que nosotros no estábamos sintiéndonos
ser?…˜ ¿cómo es ese estado?…˜ Yo quiero saber por mí mismo cómo es ese estado…˜
yo quiero saber por mí mismo todo de ese estado absolutamente mío…˜ Yo sé ahora
que yo no sabía que yo era…˜ yo sé ahora que esta sensación de ser…˜ que esta abrasi-
vidad que consume no estaba conmigo…˜ Ella no está hecha de mí…˜ lo que yo soy
verdaderamente no depende de ella…˜
Mirad…˜ esto debe comprenderse profundamente…˜: nuestra paz y nuestro equili-
brio dependen de ello…˜ Presenciad el instante en que vuestro conocimiento de ser no
era…˜ Saboread a plenitud el instante en que este estarnos sintiendo ser no era…˜ Pene-
trad en ese estado vuestro…˜ penetrad en vuestra propia mismidad…˜ Nadie os ha roba-
do lo que sois…˜ nadie os ha creado como esta sensación abrasiva de ser…˜ Ella es sólo
un puente…˜ ella no es vosotros…˜ ella no está hecha de vosotros…˜ ella no estaba con
vosotros cuando vosotros erais y absolutamente nada otro que vosotros era…˜ Ella es
sólo un puente…˜ Está aquí únicamente para que comprendáis que ella no estaba…˜ que
ella no era…˜ que vosotros no os sentíais a vosotros mismos ser…˜ y que esto mismo…
˜ lejos de ser para vosotros una privación de vuestro verdadero ser…˜ era un plenum de
felicidad absoluta que nadie saboreaba…˜
Todo esto lo estamos sabiendo Ahora que la sensación de ser está…˜ Ella no
estaba…˜ pero ahora está…˜ Inútil preguntar cómo…˜ Además…˜ el cómo y el por qué
de algo que no es nosotros no nos devolverá instantáneamente a lo que nosotros
somos…˜ Pero esta devolución a nosotros mismos…˜ a nuestra propia Mismidad ama-
da…˜ queda instantáneamente efectuada cuando vemos lo que no estaba con nosotros en
nuestro estado eterno…˜ Y esta sensación de ser nosotros lo que nosotros somos…˜ no
estaba…˜: En nuestro estado eterno nadie conocía ni sentía ni saboreaba esta sensación
de ser…˜ Ella no estaba…˜ ¿Comprendéis lo que quiero decir?…˜ Debéis presenciar

17
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

por todos los medios el estado vuestro en el que vuestra propia sensación de ser no esta-
ba…˜ Hacedlo…˜ hacedlo Ahora…˜ Presenciaos a vosotros mismos cuando vuestra
propia sensación de ser vosotros lo que vosotros sois…˜ no estaba con vosotros…˜ Pre-
senciaos así una y otra vez…˜ incesantemente…˜ hasta que veáis…˜ hasta que os en-
contréis…˜ hasta que saboreéis intensamente lo que vosotros sois…˜
Por sí misma…˜ la sensación de ser es insufrible…˜ Tomada como un fin en sí mis-
ma se convierte en nuestro atormentador…˜
Pero se siente como un fuego subterráneo…˜ que quema las entrañas…˜ Es evidentí-
simo que no estaba con nosotros…˜ Eso es lo que tenemos que comprender…˜

18
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

159
____________

Esta sensación de ser arde y crepita…˜ Con su estar presente mismo nos está gritan-
do que ella no estaba con nosotros…˜ Veámonos pues Ahora exactamente como noso-
tros somos cuando ella no era…˜ saboreemos pues Ahora exactamente como nosotros
somos cuando ella no era…˜
No digáis que no podéis…˜ Ella…˜ esta sensación de ser está aquí para eso…˜ para
que nos comprendamos integralmente a nosotros mismos como nosotros somos real-
mente…˜ No os preguntéis ni el por qué ni el cómo de esta sensación de ser…˜ Si lo ha-
céis…˜ todo el tiempo que lo hacéis…˜ estáis frustrando su verdadera función…˜ Su
función es dar respuesta a todas las preguntas sobre nosotros mismos cuando ella no es-
taba…˜

19
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

160
____________

Nuestro faro guía en el descubrimiento de lo que somos…˜ es esta sensación de ser


que nos quema en el corazón…˜ Tenemos que se conscientes de que esta sensación de
ser no ha estado siempre con nosotros…˜ Y siendo conscientes de que esta sensación de
ser no ha estado siempre con nosotros…˜ tenemos que ser absolutamente conscientes de
lo que sí ha estado siempre con nosotros…˜ Ser lo que nosotros somos…˜ esto es lo que
ha estado siempre con nosotros…˜ Nosotros sabemos que este sentirnos ser no ha esta-
do siempre con nosotros…˜ ¿Sabemos esto porque alguien nos lo ha dicho?…˜ ¿Sabe-
mos nosotros que este sentirnos ser no ha estado siempre con nosotros porque alguien
nos lo está diciendo?…˜ No…˜ nosotros sabemos por nosotros mismos…˜ desde dentro
de nosotros mismos…˜ por nuestro ser nosotros lo que nosotros somos…˜ que esta sen-
sación de ser…˜ que esta abrasividad que nos quema…˜ no ha estado siempre con noso-
tros…˜
Al mismo tiempo…˜ en lo profundo de nuestra consciencia de ser…˜ estamos sa-
biendo ahora…˜ que nosotros sí éramos cuando esta sensación de ser no era…˜ Este es
un conocimiento muy profundo que no puede estar jamás ausente de nosotros…˜ Y no
puede estar jamás ausente de nosotros…˜ porque procede de nuestro ser mismo…˜ de
nuestro ser lo que somos…˜ Y lo que somos…˜ no viene ni va…˜ no comienza ni
acaba…˜

20
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

161
____________

Yo quiero poner fin a la ilusión de que sois nacidos y mortales…˜ Para ello…˜ sed
completamente conscientes de que la sensación de ser no ha estado siempre con voso-
tros…˜ y sed completamente conscientes también de ese siempre vuestro cuando la sen-
sación de que vosotros sois no era…˜
Sintamos profundamente que nosotros somos…˜ dediquemos este instante única-
mente a sentirnos ser…˜ No este hombre…˜ no esta mujer…˜ Sino únicamente SER…˜
Sintamos el fuego crecer dentro…˜ sintámonos ser…˜ Escrutemos profundamente cuan-
do esta sensación de ser no era…˜ No seamos superficiales…˜ no nos digamos que no
podemos escrutar nuestro propio ser cuando la sensación de ser no era…˜ Podemos…˜
podemos escrutar esa Realidad Magnífica…˜ y podemos hacerlo ahora…˜ en este ins-
tante…˜ gracias a esta misma sensación de ser…˜: Cuando la sensación de ser no era…˜
Eso es lo que tenemos que escrutar…˜
No tengáis prisa…˜ Ahora es siempre…˜ No se puede hacer que Ahora se precipite a
nuestro encuentro…˜ Ahora es siempre…˜ no hay manera ni de entrar ni de salir del
Ahora…˜ De manera que el Ahora de vuestra comprensión de vosotros mismos es este
Ahora…˜ Sólo dejaros abrir y llenar por completo vuestra propia Realidad…˜ Descom-
primíos completamente en vuestro ser…˜ llenad de vosotros mismos la totalidad de lo
que sois…˜ sed completamente cuando la sensación de ser no era…˜ Ese Plenum es vo-
sotros…˜ Ocupad completamente vuestra propia Mismidad…˜

21
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

162
____________

Presenciemos profundamente cuando nuestra propia sensación de ser no era…˜ Ello


es posible ahora que nuestra sensación de ser lo que nosotros somos es…˜ pero ello no
era posible cuando nuestra sensación de ser no era…˜
Todo el misterio de nuestra verdadera naturaleza está en esta presenciación
sublime…˜ Ahora que nuestra sensación de ser es…˜ haciendo uso de ella como de una
instrumentalidad perfectamente adecuada a este propósito…˜ presenciémonos a noso-
tros mismos cuando esta sensación de ser no era…˜ presenciémonos a nosotros mismos
cuando nosotros no sabíamos que nosotros somos…˜ Escrutémonos…˜ entremos en no-
sotros mismos…˜ entremos en nuestra propia Mismidad…˜
Esta sensación de ser nosotros…˜ este nosotros somos…˜ no era sentido…˜ La sen-
sación de ser no era…˜ ¿Cómo es Eso?…˜ ¿cómo es nosotros cuando la sensación de
ser no era?…˜ Ahí tenemos que entrar…˜ en Eso debemos sumergirnos…˜ Se trata de
nosotros…˜ aunque la sensación de ser no era…˜ se trata de nosotros…˜ Ahora que la
sensación de ser está con nosotros…˜ con ella como conocimiento de nosotros
mismos…˜ entremos en nosotros mismos…˜ sepamos todo de cuando la sensación de
ser no era…˜
Esto es lo más importante…˜ toda la presenciación debe concentrarse en la sensa-
ción pura de este “yo soy”…˜: “yo siento que yo soy”…˜ Digo la sensación pura…˜ la
sensación de ser a secas…˜ Ella es instantánea…˜ no está sujeta al tiempo…˜ De mane-
ra que basta un solo instante para preguntarse…˜: “Eso…˜ eso que es mí mismo…˜
cuando esta sensación de ser no era…˜ Eso…˜ ¿cómo es Eso?”…˜ y basta igualmente
un solo instante para entrar en Eso y verlo…˜

22
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

163
____________

¿A qué se debe nuestra angustia?…˜ ¿a qué se debe nuestro terror?…˜ Todo se debe
a un malentendido…˜ Este estarnos sintiéndonos ser transcurre en la zozobra…˜ en el
sobresalto…˜ y en la angustia…˜ debido a que nosotros ciframos todo nuestro ser en
este estarnos sintiendo ser…˜ Sin embargo…˜ este estarnos sintiendo ser…˜ no era…˜
¿Y qué angustia…˜ qué zozobra nos acongojaba el corazón…˜ cuando este estar sin-
tiéndonos ser no era?…˜
¿Cómo era cuando este estar sintiéndonos ser no era?…˜ ¿Cómo es Ese nosotros que
sí era cuando este estar sintiéndonos ser no era?…˜
Yo no os pregunto como si yo no supiera de qué se trata…˜ yo no os pregunto como
si yo mismo no estuviera presenciando ahora mismo cómo era mí mismo cuando este
estar sintiéndome ser no era…˜ Antes al contrario…˜ porque presencio lo que soy…˜ de
ese presenciarme ser lo que yo soy…˜ surgen estas preguntas que ya están
respondidas…˜ La respuesta está en la pregunta misma…˜ Cuando yo me pregunto…˜:
“¿cómo era ese mí mismo que era cuando esta sensación de estarme sintiendo ser no
era?”…˜ cuando yo me hago esta pregunta…˜ me estoy viendo a mí mismo…˜ me estoy
presenciando a mí mismo…˜ me estoy saboreando a mí mismo…˜ ahora…˜ en este pre-
ciso instante…˜ exactamente en ese estado en que la sensación de estarme sintiendo ser
no era…˜ La pregunta misma sale del estado…˜ Si no hay ese estado…˜ no hay ningún
preguntarme “¿cómo es este mí mismo mío…˜ verdadero mí mismo mío…˜ júbilo de
mis entrañas…˜ paz de todas mis zozobras…˜ que era…˜ que es…˜ y que será…˜ cuan-
do esta sensación de estarme sintiendo ser ya no sea?…˜
Lo que soy lo tengo que ver ahora…˜ Lo que soy no es este estarme sintiendo ser…˜
lo que yo soy no es esta angustia…˜ lo que yo soy no es esta zozobra…˜ lo que yo soy
no es este sin-vivir que me desvive…˜ ¿Cuándo dio comienzo esta zozobra?…˜ ¿cuándo
dio comienzo esta angustia?…˜ ¿cuándo dio comienzo este sin vivir?…˜ ¿Qué era antes
de esta zozobra?…˜ ¿qué era antes de esta angustia?…˜ ¿qué era antes de este sin
vivir?…˜ Yo quiero saber por mí mismo si esta zozobra ha estado siempre conmigo…˜
yo quiero saber por mí mismo si esta angustia y este sin vivir han estado siempre con-
migo…˜ Yo quiero conocerme a mí mismo cuando esta zozobra no era…˜ yo quiero co-
nocerme a mí mismo cuando esta angustia no era…˜ yo quiero conocerme a mí mismo
cuando esta sensación de estarme sintiendo ser no era…˜ ¿Cómo es ese estado mío…˜
cómo es ese estado verdaderamente mío sólo…˜ en que esta sensación de estarme sin-
tiendo ser no era?…˜

23
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

164
____________

Si ese estado no fuera nuestra verdadera naturaleza que jamás hemos abandonado…˜
no podríamos reconocerlo…˜ Pero nosotros lo reconocemos…˜ Reconocemos efectiva-
mente ese “cuando esta sensación de estarnos sintiendo ser no era”…˜ reconocemos
efectivamente ese “cuando no había ninguna zozobra…˜ ninguna angustia…˜ ningún
sin vivir”…˜
¿Cómo lo reconocemos?…˜ ¿Cómo reconocemos nosotros Eso que era cuando abso-
lutamente nada más era?…˜

24
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

165
____________

¿Cómo no vamos a saber de qué se trata…˜ cuando esta sensación de ser no era…˜
si es de nosotros de quien se trata?…˜
Mirad…˜ que sintamos la adicción de sentir esta sensación de que nosotros somos…
˜ ello no puede impedirnos ser conscientes de que esta sensación no era…˜ de que no
estaba con nosotros…˜ de que nosotros nunca la habíamos sentido…˜ y de que en su au-
sencia de nosotros…˜ nosotros mismos no sabíamos que nosotros somos…˜
Nosotros no sabíamos nada de esta angustia…˜ nosotros no sabíamos nada de esta
adicción a sentirnos ser…˜ Ningún fuego quemaba nuestras entrañas…˜ En nosotros no
había entrañas…˜ Nosotros no éramos interiores ni exteriores a nada…˜ Nosotros no es-
tábamos en ninguna parte…˜ nosotros no estábamos en ningún tiempo…˜ Nadie sabía
que nosotros somos…˜ Aunque nos hubieran buscado…˜ jamás nos habrían
encontrado…˜
Saboread vuestro ser vosotros lo que vosotros sois en ese antes de que esta sensación
de ser fuera…˜ Saboread vuestra propia Mismidad con la lengua de vuestra mismidad…
˜ Saboread lo que erais…˜ cuando vuestra sensación de ser no era…˜ Lo que erais cuan-
do vuestra sensación de ser no era…˜ con eso mismo saboread lo que erais cuando vues-
tra sensación de ser no era…˜
Mirad…˜ por muy intensa que sea la adicción a sentir esta sensación de ser que nos
abrasa…˜ ello no puede impedir que comprendamos quién somos…˜ Nosotros sabemos
quién somos porque hemos presenciado todo…˜ Nosotros somos lo que nosotros somos
siempre…˜ Por ello…˜ no es nosotros quienes hemos salido de nosotros mismos en bus-
ca de esta sensación de ser para sentirnos…˜ Antes al contrario…˜ nosotros hemos pre-
senciado su toque a nosotros…˜
De manera que…˜ por muy intensa que sea nuestra adicción a sentirnos ser…˜ ella
no puede impedirnos conocernos a nosotros mismos sin ella…˜ Mirad…˜ esta sensación
de ser comerá alimento hasta el instante final en que se disuelva en nuestro ser eterno…
˜ pero ello no debe hacernos pensar nunca que somos nosotros quienes comemos…˜ De
la misma manera…˜ sentir la sensación de ser es una suerte de comer que encierra en sí
todas las comidas…˜ todas las bebidas…˜ todas las sensaciones…˜ toda esta intensa
sensación de ser yo quien se está sintiendo ser…˜ Sin embargo…˜ ello no puede impedir
que nosotros sepamos por nosotros mismos que nada de todo esto era…˜

25
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

166
____________

A la pregunta…˜ “¿dónde estaba esta adicción intensa mía…˜ de sentirme ser como
me siento ser…˜ cuando nada de todo esto era?”…˜ a esta pregunta…˜ ¿quién
responde?…˜ Yo quiero saber quién responde en nosotros Ahora…˜ en este preciso ins-
tante…˜ a esta pregunta…˜ “¿dónde estaba esta adicción intensa mía…˜ de sentirme ser
como me siento ser…˜ cuando nada de todo esto era?”…˜
Yo puedo ansiar sentirme ser…˜ pero no es mí mismo quién ansía verdaderamente
este ansia de sentirme ser…˜ ¿Por qué digo que no es mí mismo quien ansía verdadera-
mente este ansia de sentirme ser?…˜ Lo digo porque este ansia de sentirme ser…˜ esta
adicción de sentirme ser…˜ no estaba conmigo…˜ Yo no soy este ansia…˜ yo no soy
esta adicción…˜
Por el momento…˜ me veo a mí mismo como uno de quien se abusa…˜ He sido sen-
tado y maniatado…˜ y se me ha inoculado la solubilidad nacimiento…˜ un tóxico alta-
mente adictivo…˜ cuyo síntoma es esta ansiedad de sentirse ser…˜ Pero el tóxico no ha
hecho que yo olvide en absoluto mi verdadero estado…˜

26
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

167
____________

Entremos en nosotros mismos…˜ entremos en nuestro propio “cuando nada de todo


esto era”…˜
Ciertamente nada de todo esto era…˜ El nacimiento no era…˜ no había en nosotros
comienzo ni fin de nosotros mismos…˜ El niño…˜ la niña no eran…˜ no había en noso-
tros nada engendrado…˜ El conocimiento de ser no era…˜ no había en nosotros ningún
conocimiento de que nosotros somos…˜ La sensación de ser no era…˜ no había en no-
sotros ninguna sensación de ser…˜ ninguna sensación de ser nos comunicaba que noso-
tros somos…˜ El hombre o la mujer no eran…˜ el padre y la madre no eran…˜ la
niñez…˜ la adultez…˜ y la vejez no eran…˜ No había deseos…˜ no había
servidumbres…˜ no había pasiones…˜ no había esclavitud…˜ No había consciencia…˜
no había conocimiento…˜ no había angustia…˜ no había miedo…˜ No éramos
muchos…˜ no éramos pocos…˜ no había ningún mundo…˜ No había Cielo…˜ no había
Tierra…˜ no había amanecer…˜ no había atardecer…˜ no había noche ni día…˜ no ha-
bía mundo…˜
No había ningún nosotros como nosotros creemos conocernos ahora…˜ No se había
producido el nacimiento…˜ La solubilidad nacimiento no había instilado en nosotros su
veneno alucinógeno…˜ Nosotros no nos veíamos a nosotros como dos…˜ nosotros no
veíamos doble…˜ No había ningún nosotros como este escuchador que escucha…˜ No
había ningún nosotros como este presenciador que presencia…˜ El nosotros que ahora
creemos ser no era…˜ ¿Quién lo sabe?…˜ ¿quién está sabiendo ahora que todas estas
proposiciones son verdaderas?…˜ ¿Quién está sabiendo en nosotros todo esto de cuando
el nosotros que ahora creemos ser no era?…˜
Todas estas proposiciones encierran en ellas la expresión de una verdad de nosotros
mismos que nosotros estamos reconociendo como verdad Ahora…˜ Es grandísimamen-
te misterioso que nosotros tengamos un conocimiento tan exacto…˜ tan idéntico a lo
que conoce…˜ de cuando nada de todo esto era…˜
Sumerjámonos completamente en este grandísimo misterio que ningún otro que no-
sotros es…˜ Somos nosotros quien sabe que nada de todo esto era…˜ Saboreemos el sa-
bor inaudito de este conocimiento…˜ “Nada de todo esto era…˜ ni siquiera este conoci-
miento era”…˜ Saboreémonos de mismidad a mismidad…˜ Se trata de nosotros…˜ Na-
die más puede saborear este misterio de nosotros mismos…˜ …˜ nadie puede saborear
este misterio por nosotros…˜
Es prodigioso que nosotros sepamos todo de nosotros mismos…˜ Nuestra omnis-
ciencia se debe sólo a que nosotros somos lo que es antes de todo…˜ Por ello hemos

27
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

presenciado la venida de este todo…˜ Por ello sabemos todo de este todo…˜ Por ello sa-
bemos todo de cuando este todo no era…˜

28
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

168
____________

Cuando nada de todo esto era…˜ ¿qué era?…˜ Yo quiero que encontréis esta res-
puesta…˜ y quiero que la encontréis ahora…˜ Cuando nada de todo esto era…˜ Eso…˜
¿qué es?…˜
Observad en vosotros mismos la aparición de la respuesta…˜ Nadie…˜ excepto vo-
sotros…˜ tiene vuestra respuesta…˜ Cuando nada de todo esto era…˜ Eso…˜ ¿qué
es?…˜
Observad que no podéis decir…˜ Eso…˜ Eso que es cuando nada de todo esto era…˜
Eso es la muerte…˜ Observad que cuando nada de todo esto era…˜ la muerte…˜ lo que
la palabra muerte significa…˜ tampoco era…˜
Sabed por vosotros mismos qué era…˜ cuando nada de todo esto era…˜

29
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

169
____________

¿Cómo se ha hecho que esta solubilidad nacimiento está emitiendo en nosotros su


soluble?…˜ Debido a que esta solubilidad nacimiento está emitiendo su soluble en no-
sotros…˜ se siente aquí…˜ en nuestra entraña…˜ la llamarada incandescente de esta
sensación de ser nosotros lo que nosotros somos…˜ Pero lo que yo me pregunto ahora
es “¿cómo se ha hecho…˜ en qué ha consistido el hacerse…˜ que esta solubilidad naci-
miento está emitiendo su soluble en nosotros?…˜ Y aún más profundamente…˜ mi pre-
gunta me turba y me sacude…˜ ¿cómo se hace que yo soy sin nacimiento?”…˜
Yo sé que yo soy sin nacimiento…˜ Me veo y me presencio y me conozco a mí mis-
mo integralmente sin nacimiento…˜ Esto es tan llano…˜ tan simple…˜ tan absoluta-
mente natural…˜ que no suscita ninguna incógnita…˜ Y yo amo las incógnitas…˜ amo
ser sacudido…˜ amo ser pasmado…˜ amo quedarme sin respuesta…˜ vacío de conoci-
miento…˜ amo quedarme completamente abierto a la no-respuesta…˜ Cuando la res-
puesta es una no-respuesta…˜ eso…˜ eso es lo que amo…˜
De manera que por ello me pregunto…˜ “¿Cómo se hace que yo soy sin
nacimiento?”…˜ Y me lo pregunto para escuchar mi propia no-respuesta…˜ para darme
a mi propia no-respuesta…˜ para sumergirme en mi propia no-respuesta…˜ ¿Cómo pue-
de tener respuesta la pregunta “¿cómo se hace que yo soy sin nacimiento?”…˜ Sin em-
bargo…˜ tiene respuesta…˜ Esta pregunta imposible tiene respuesta para el paciente que
ama las incógnitas…˜
Mirad…˜ no hay ninguna incógnita en nacer y morir…˜ aparentemente…˜ Cuando
nosotros nos aceptamos a nosotros nos aceptamos a nosotros mismos como nacidos y
mortales…˜ lo que nosotros creemos ser es tan des-incognotizado como lo que dicen
que somos las enciclopedias de biología…˜ Algo verdaderamente trivial…˜ indescripti-
blemente frustrador y angustioso…˜
El crédulo de esta falsa proposición de ser nacido y mortal es un enfermo de angus-
tia…˜ Es completamente terrible y angustioso creer que sabemos cómo hemos comen-
zado y cómo vamos a acabar…˜
Ello no es así…˜ Ciertamente…˜ la bellísima no-respuesta nos envuelve por todas
partes…˜ Basta para mamarla con que hagamos la pregunta adecuada…˜ Los libros de
biología ni siquiera cuentan cómo se ha hecho que esta solubilidad nacimiento nos esté
tocando…˜ Describen una instrumentalidad…˜ la describen como la describen…˜ pero
no dicen nada del usuario…˜ Pareciera enteramente que la instrumentalidad
nacimiento…˜ por el solo hecho de nacer…˜ funcionara por sí misma…˜

30
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

Por ello yo me pregunto…˜ ¿Dónde nos está tocando nuestro cuerpo?…˜ Veámoslo
por nosotros mismos…˜ Nosotros no somos el cuerpo…˜ Pero si el cuerpo nos toca…˜
debe estar tocándonos en algún lugar…˜ ¿Dónde…˜ pues…˜ nos está tocando nuestro
cuerpo?…˜ ¿Y nuestra mente?…˜ ¿dónde nos está tocando nuestra mente?…˜ ¿Y nues-
tra alma?…˜ ¿dónde nos está tocando nuestra alma?…˜ ¿Y nuestro espíritu?…˜ ¿dónde
nos está tocando nuestro espíritu?…˜
Yo quiero saborear la no-respuesta a estas preguntas…˜ quiero pasmarme con mi
propia no-respuesta a estas preguntas…˜
¿Cómo se hace que yo soy sin nacimiento?…˜ ¿a quién o a qué se debe que yo soy
sin nacimiento?…˜

31
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

170
____________

En nuestro ser nosotros sin nacimiento no ha habido ningún hacer nuestro ni de na-
die…˜ Nosotros somos perfectamente lo que nosotros somos…˜ nosotros somos inte-
gralmente lo que nosotros somos…˜ cuando ningún nacimiento es…˜ De manera que en
nuestro ser nosotros sin nacimiento no ha habido ningún hacer nuestro…˜ ningún hacer
de nadie…˜
No hay ningún truco para llegar a ser lo que nosotros somos…˜ no hay ningún hacer
nuestro…˜ ningún hacer de nadie…˜ para hacernos llegar a ser lo que nosotros somos…
˜ Nuestro ser es ya eso que sin saberlo nosotros…˜ nosotros queremos ser…˜
Entonces…˜ ¿cuál debe ser nuestro esfuerzo…˜ y a qué debe aplicarse?…˜ Escuche-
mos atentamente…˜ Nosotros no podemos creer que nuestro ser es ya la eternidad que
anhelamos…˜ Es como si se nos excluyera…˜ porque nosotros queremos trabajar para
ganarnos…˜ ¿Pero cómo se gana uno lo que uno ya es?…˜
Volviendo nuestra atención a cuando no había en nosotros este otro nosotros que no
puede creer que nosotros somos ya sin nacimiento…˜ presenciemos ese estado nuestro
en que nada de todo esto era…˜ Presenciemos ese estado…˜ presenciémonos a nosotros
mismos en ese estado…˜ ¿Es necesario que os pregunte si vosotros erais cuando nada
de todo esto era?…˜ ¿es necesario que os pregunte cómo erais vosotros…˜ cómo sois
vosotros…˜ cuando nada de todo esto es?…˜ Vedlo por vosotros mismos…˜ presenciad-
lo por vosotros mismos…˜ sabedlo por vosotros mismos…˜
Hay que poner un punto y final a la mentira a nosotros mismos que tanto daño nos
hace…˜ Si fuera una mentira piadosa…˜ aún podría estar justificada…˜ Pero es una
mentira…˜ cuyo crédito…˜ genera en nosotros una angustia y un terror sin fin…˜
El secreto de nuestro ser está en nosotros mismos…˜ Está somero…˜ como agua so-
mera…˜ Es llano…˜ libre de angustia y libre de terror…˜ Nosotros no somos el naci-
miento…˜ El nacimiento no era…˜ este nacimiento al que nosotros llamamos “mí mis-
mo y mío”…˜ no estaba con nosotros…˜ no era…˜ ¿Por qué entonces lo atamos como
una piedra a nuestro cuello y aceptamos como nuestra su caída y destrucción?…˜ Ello
sólo puede ser por un amor equivocado…˜ ello sólo puede ser por una pasión incontro-
lada…˜ ¿qué esperamos nosotros del nacimiento para que su estado nos produzca tanta
angustia?…˜ Lo miramos con preocupación…˜ miramos al nacimiento con preocupa-
ción…˜ mientras nos decimos…˜ ¿dará de sí lo suficiente?…˜ ¿Qué esperamos nosotros
del nacimiento para que su declive nos lleve a la desesperación?…˜

32
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

171
____________

Presenciémonos cuando el nacimiento no era…˜ Nacimiento quiere decir “sensación


de ser”…˜ nacimiento quiere decir “consciencia de ser”…˜ Dondequiera que lo que ES
tiene sensación de ser y consciencia de ser…˜ ello quiere decir que dispone de esta ins-
trumentalidad “nacimiento”…˜ para saborearse y presenciarse…˜
El “nacimiento” parece ser muchos…˜ pero es sólo uno…˜ “Nacimiento” quiere de-
cir “sensación de ser”…˜ no quiere decir perro ni gato…˜ ni hombre ni mujer…˜ Una
sola es la “sensación de ser”…˜ una sola es la “consciencia de ser”…˜ y Uno sólo es el
que se siente SER y el que se sabe SER con el nacimiento…˜
¿Os sentís ser vosotros ahora?…˜ ¿Sois conscientes y sabedores de que vosotros sois
ahora?…˜ Ello no quiere decir que vosotros habéis nacido…˜ ello quiere decir sólo que
lo que ES siempre se está sabiendo a sí mismo SER…˜ Lo que ES siempre sabe que este
nacimiento no era…˜
¿No es vosotros lo que ES siempre?…˜

33
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

172
____________

Repentinamente…˜ ha surgido en mí esta pregunta…˜ “¿Qué era conmigo en ese es-


tado?”…˜
La pregunta crecía y se abría en ese estado mismo mío…˜ desde donde yo mismo
me estaba preguntando por ese “¿qué era conmigo en ese estado…˜ en ese estado en que
yo era…˜ y absolutamente nada más era conmigo?…˜ ¿Qué era conmigo en ese
estado?…˜
Hagámonos esta misma pregunta…˜ hagámonosla con completa ecuanimidad…˜
¿Qué era con nosotros en ese estado…˜ en ese estado Benigno…˜ en ese estado
Eterno…˜ en que nosotros éramos y absolutamente nada más era con nosotros?…˜ ¿Qué
era con nosotros en ese estado?…˜ Pongámonos en ese estado…˜ en nuestro estado…˜:
real…˜ absoluto…˜ limpio…˜ jamás tocado…˜ jamás cambiado en nada otro que sí mis-
mo…˜ integralmente ahora…˜ en este instante…˜ lo que era cuando absolutamente nada
más era…˜ Pongámonos en nuestro estado…˜ y hagámonos la pregunta…˜ “¿Qué era
con nosotros en este estado…˜ en que nosotros somos y absolutamente nada más es con
nosotros?”…˜
¿Era con nosotros este cuerpo?…˜ ¿era con nosotros esta mente?…˜ ¿era con noso-
tros este alma?…˜ ¿era cono nosotros este espíritu?…˜ ¿era con nosotros este hombre o
esta mujer que ahora parecen ser con nosotros?…˜ ¿era con nosotros este correr de los
años?…˜ ¿era con nosotros alguna salida y puesta del sol?…˜ ¿era con nosotros algún
universo?…˜ ¿era con nosotros la ronda de los tres estados?…˜ ¿era con nosotros lo que
llamamos nuestra vida?…˜ ¿era con nosotros lo que llamamos nuestro destino?…˜
¿Qué era con nosotros?…˜ Yo quiero saber qué era con nosotros…˜ yo quiero que
comprendáis que hablo de vosotros mismos…˜ quiero que comprendáis que os estoy di-
ciendo que lo que ES es vosotros…˜ que lo que ES es ese estado desde donde quiero
que os preguntéis qué más era con vosotros…˜ Quiero que comprendáis que ese estado
es vosotros…˜ y que absolutamente nada más era con vosotros que vuestro propio ser
vosotros lo que vosotros sois…˜
La pregunta es en sí misma despertadora absoluta de vuestra propia Mismidad cuan-
do nada más era…˜ La pregunta os pone integralmente en vuestra propia Mismidad sin
permitiros la menor duda…˜ La pregunta no os pregunta…˜ “¿erais o no erais vosotros
cuando absolutamente nada de todo esto era?”…˜ La pregunta no os pone ni un solo ins-
tante en duda…˜ La pregunta os llama Absolutos…˜ La pregunta os comunica que voso-
tros sois Lo Que ES…˜ “¿Qué era conmigo?”…˜ Admirad su poder…˜ Preguntáosla sin
temor…˜ Presenciad su prodigioso poder de recordación…˜ Ella os está diciendo…˜

34
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

“Yo era y absolutamente nada más era conmigo”…˜ Pero si os quedaba alguna duda de
quién sois…˜ a subsanar esa llaga concurre la segunda parte de la pregunta “cuando ab-
solutamente ningún otro que mí mismo era”…˜
Finalmente la propuesta queda expresada así…˜ “¿Quién era conmigo…˜ cuando ab-
solutamente ningún otro que mí mismo era”…˜
Y esto es lo que yo os pregunto…˜

35
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

173
____________

Estas preguntas brotan de la Fuente misma de nuestra propia Mismidad…˜ Están he-
chas de su agua…˜ saben a su agua…˜ y tienen el poder de establecernos en nosotros
mismos…˜ en lo que somos realmente…˜ desde el mismo instante en que se
proponen…˜
“¿Qué era conmigo?”…˜ Preguntáoslo…˜ Dejad que la pregunta haga su trabajo…˜
Dejad que la pregunta os revele quién sois…˜ Lo importante no es responder la pregun-
ta…˜ sino tomar consciencia absoluta de a Quién se dirige…˜
Se dirige a mí…˜ Se dirige a un Mí mismo que era cuando absolutamente ningún
otro que Mí mismo era…˜ Por ello pregunta…˜ “¿Qué era conmigo?”…˜

36
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

174
____________

“¿Qué era conmigo?”…˜ “¿qué era conmigo?”…˜ Cuando yo era…˜ y absolutamen-


te nada otro que mí mismo era conmigo…˜ ¿qué era conmigo?…˜
Retengamos esta pregunta…˜ retengamos esta pregunta como se retiene el aliento…
˜ algo pasmoso se esconde en esta pregunta…˜ Retengámosla un momento…˜ como se
retiene la respiración…˜ como se retiene el aire…˜
Comprendamos a quién preguntamos…˜ comprendamos a quién dirigimos nuestra
pregunta…˜ “¿quién era conmigo?…˜ ¿quién era conmigo cuando absolutamente nada
otro que mí mismo era conmigo?…˜ ¿A quién estamos preguntando esta pregunta?…˜
¿quién conoce esta pregunta?…˜ ¿quién conoce este conocimiento?…˜
“¿Quién era cuando nada de todo esto era?”…˜ “¿Quién era conmigo…˜ cuando
nada de todo esto era?”…˜
¿Era conmigo el nacimiento?…˜ ¿era conmigo esta instrumentalidad
“nacimiento”…˜ con cuya estancia en mí mismo ahora…˜ yo me estoy preguntando a
mí mismo…˜ “¿quién era…˜ quién era conmigo?”…˜ ¿Era conmigo esta solubilidad na-
cimiento?…˜ ¿Me estaba revelando a mí mismo esta solubilidad nacimiento…˜ emitien-
do sus solubles en mi seno?…˜ ¿Era conmigo otro que mí mismo?…˜ ¿Quién era…˜
quién era otro que mí mismo?…˜
Yo quiero saber la respuesta a estas preguntas…˜ ¿A quién creéis que debo pregun-
társelas?…˜ ¿A quién preguntaremos nosotros por nosotros mismos…˜ cuando absoluta-
mente ningún otro que nosotros mismos era?…˜
No penséis que son preguntas que no tienen respuesta…˜ En realidad no son pregun-
tas…˜ son desafíos…˜ Os pongo en vuestra verdadera Esencia…˜ Os digo que vosotros
sí Erais cuando absolutamente ningún otro que vosotros mismos era…˜ y entonces os
pregunto: ¿Quién?…˜ ¿Quién más era con vosotros…˜ cuando absolutamente ningún
otro que vosotros mismos era?…˜
No…˜ no son preguntas para volverse loco…˜ son preguntas cuya finalidad es que
absolutamente todo se venga abajo excepto vosotros mismos…˜ que ERAIS cuando ab-
solutamente ningún otro que vosotros era…˜
¡Pero si es un conocimiento evidente!…˜ ¡Todo el mundo lo sabe!…˜ ¡Todo el mun-
do es sólo vosotros…˜ el vosotros mismos que ERA cuando absolutamente ningún otro
que vosotros era!…˜ Por ello…˜ todos tenéis la respuesta a todas estas preguntas…˜ Un
Único responde a todas estas preguntas en cada corazón…˜ Y ese Único es sólo voso-
tros…˜

37
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

No tengáis miedo de no ser…˜ eso no ocurrirá jamás…˜ Pero presenciad minuciosa-


mente todo lo que no era con vosotros…˜ todo lo que no estaba con vosotros…˜ cuando
absolutamente ningún otro que vosotros era…˜ Presenciadlo bien…˜ porque nada de
todo eso que no era con vosotros…˜ que no estaba con vosotros…˜ se salvará de volver
a no ser con vosotros…˜ a no estar con vosotros…˜ cuando os veáis tales cuales sois…˜
Cuando uno se ve a sí mismo tal cual es…˜ ve exactamente que nada era con él…˜ Y
viéndose a sí mismo así…˜ su Paz es absoluta…˜ su Amor está colmado…˜

38
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

175
____________

Todas estas preguntas deben hacerse de uno mismo a uno mismo…˜ en lo recóndito
del corazón…˜ Sólo así descubrirá uno esa Presencia que era cuando absolutamente
nada otro que uno mismo era…˜ Sólo así obtendrá uno de su propia Mismidad a su pro-
pia Mismidad la certeza absoluta de ser sin nacimiento…˜ la certeza absoluta de ser Eso
que se llama lo Absoluto…˜
Quién puede responder a la pregunta…˜ “¿qué era conmigo cuando absolutamente
nada otro que mí mismo era?”…˜ ¿quién puede responder a esta pregunta…˜ otro que
uno mismo…˜ en la pregunta misma…˜ mientras uno mismo se hace la pregunta…˜ vi-
niendo de la Presencia que era…˜ de la Presencia que uno descubre que ya era uno…˜
cuando absolutamente nada otro que uno mismo era?…˜ En la pregunta misma…˜ uno
se descubre a sí mismo SER ESO que ERA…˜ ESO que ES…˜ Y es ESO mismo que
uno se descubre SER en la pregunta…˜ lo que ES la respuesta…˜ La respuesta es que
Yo Soy antes de saber que YO SOY…˜ la respuesta es que YO SOY cuando absoluta-
mente nada otro que mí mismo ES…˜ Por ello lo veo tan claro…˜ por ello lo veo tan
irrefutable…˜ por ello lo veo como una inmutabilidad serena cuya edad no se cuenta…˜
Mi Ser yo lo que yo soy no tiene edad…˜ no tiene nacimiento…˜ no tiene devenir…˜
Nada era conmigo en mi SER yo lo que yo soy…˜ Lo sé porque lo Soy…˜ lo sé porque
lo veo…˜ lo sé porque lo presencio…˜ Ahora es el mismo Ahora en que nada era con-
migo en mi SER lo que yo soy…˜ Por ello…˜ mi SER lo que yo soy no lo fui…˜ lo soy
Ahora…˜ Por ello…˜ mi SER lo que yo soy lo veo Ahora…˜ Por ello…˜ mi SER lo que
yo soy lo presencio Ahora…˜ Por ello…˜ es Ahora cuando hablo de lo que yo soy…˜
¿Y cómo estoy haciendo yo que yo soy?…˜ Miro este cuerpo…˜ miro esta mente…˜
miro este alma…˜ miro este espíritu…˜ y me pregunto…˜ “¿cómo hago yo que yo
soy?”…˜ “¿cómo uso yo esta instrumentalidad cuerpo-y-mente-y-alma-y-espíritu para
hacerme a mí mismo ser lo que yo soy?”…˜ “¿cómo uso yo esta instrumentalidad naci-
miento…˜ cómo uso yo a este hombre o a esta mujer…˜ para hacer este yo soy que yo
soy?”…˜
¿Quién o qué era conmigo?…˜ ¿cómo hice yo que yo soy?…˜ ¿cómo hice yo para
ser?…˜ ¿quién o qué era conmigo?…˜
Quiero que os escuchéis a vosotros mismos preguntándoos estas preguntas…˜ Así…
˜ en silencio…˜ en lo profundo de lo profundo…˜ ¿Quién era conmigo?…˜ No había na-
cimiento…˜ ¿era entonces conmigo el cuerpo?…˜ ¿era entonces conmigo la mente?…˜
¿era entonces conmigo el alma?…˜ ¿era entonces conmigo el espíritu?…˜ ¿Quién era

39
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

conmigo cuando el nacimiento no era?…˜ ¿cómo hice yo que yo soy?…˜ ¿quién era
conmigo?…˜

40
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

176
____________

¿Quién era…˜ quién era conmigo…˜ cuando lo que yo soy era…˜ y absolutamente
nada…˜ nada otro que mí mismo…˜ era conmigo?…˜
Esta proposición es indescriptiblemente verdadera…˜ Su carga de verificación se di-
rige directamente a nuestra Realidad Última…˜ Esta proposición no nos considera en
viaje…˜ esta proposición no nos considera alguien…˜ esta proposición no nos considera
nacidos y mortales…˜ Su carga de verificación nos pone como la Realidad Absoluta que
era…˜ Esta proposición pregunta por nosotros…˜ El “quién” de ¿quién era?…˜ es noso-
tros…˜: ¿Quién era?…˜ ¿Quién escucha la pregunta?…˜ En este instante nosotros sabe-
mos Quién era…˜ en este instante nosotros sabemos que este Quién es nosotros…˜
¿Y cómo es posible no saberlo?…˜ Nosotros no podemos abdicar de nuestra verda-
dera naturaleza real…˜ ¿Quién era?…˜ es lo que nosotros somos…˜ Poder descubrir y
reconocer que ese “¿Quién era?”…˜ es realmente nosotros…˜ ello es el privilegio de
este instante en que se hace la pregunta…˜ Es un verdadero privilegio…˜ porque aunque
nosotros somos siempre lo que nosotros somos…˜ no siempre lo sabemos…˜ Por ello…
˜ en el momento en que comprendemos al fin quién somos…˜ nuestra dicha no conoce
límites…˜
Habiéndonos creído nacidos y mortales…˜ habiéndonos creído el tristísimo mortal
que suplica por su vida…˜ viene el Ahora de la comprensión…˜ y nuestra auto-expan-
sión esfuma todas las fronteras…˜ Entonces nos vemos a nosotros mismos SER la res-
puesta a la pregunta “¿quién era conmigo…˜ cuando yo era…˜ y absolutamente nada
otro que mí mismo era?”…˜ Y si hubiera habido algún otro quien conmigo…˜ cuando
yo era…˜ y absolutamente nada otro que mí mismo era conmigo…˜ este otro “quien”
también es mí mismo…˜ Mí mismo…˜ mi propia Mismidad…˜ es la respuesta…˜ una
respuesta que mana certeza dentro del fondo de mi lengua…˜ Y aunque no puedo decir
la certeza de lo que veo…˜ esta certeza impregna completamente la integralidad de mi
Ser lo que yo soy…˜ Es una auto-posesión completa por la Verdad…˜ Yo no soy otro ni
menos que la Verdad…˜ Es verdad que me veo a mí mismo SER el Quien de la respues-
ta “¿Quién era?”…˜ Y este verme a mí mismo SER el Quien de la pregunta “¿Quién
era?”…˜ es la Respuesta final a todas mis preguntas…˜
Reconocerse así a uno mismo como lo que uno es…˜ no tiene nada que ver con un
hacer o un no hacer…˜ no ha sido dicho jamás…˜ no puede ser descrito…˜ no es nacido
ni mortal…˜ no está en la presa de la muerte…˜ Es un sabor intenso…˜ intenso…˜ a
Mismidad pura…˜ Me fundo en este amor total…˜ y me reencuentro siendo absoluta-
mente mí mismo…˜

41
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

No hay en ello ningún privilegio otorgado por nadie…˜ El privilegio es este poder
reconocerse como lo que uno es…˜

42
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

177
____________

Mirad…˜ todo lo que en nosotros es derecho de herencia…˜ no es nosotros…˜ Lo


que en nosotros no es derecho de herencia…˜ ¿de qué es derecho?…˜
Me veo a mí mismo…˜ y no veo absolutamente nada que fuera conmigo…˜ Nada
otro que mí mismo era conmigo…˜ Yo era y absolutamente nada otro que mí mismo era
conmigo…˜ ¿De quién o de qué tengo yo entonces…˜ como derecho de herencia…˜ mi
ser lo que yo soy?…˜
Mi ser lo que yo soy no es un derecho de herencia…˜ mi ser lo que yo soy no es en-
gendrado ni nacido…˜ mi ser lo que yo soy no es antes ni después del tiempo…˜ Yo veo
exactamente lo que yo soy…˜ Lo veo por mi ser mismo…˜ y mi visión es irrefutable…˜
Mirad…˜ todas las escrituras que se dirigen a mí como nacido…˜ como un heredero
de mi ser lo que yo soy…˜ como engendrado y parido…˜ me ponen en un grave
aprieto…˜ Yo nunca sabré quién soy…˜ yo nunca me veré a mí mismo exactamente…˜
irrefutablemente como yo soy…˜ desde el momento en que acepte que yo soy un nacido
y mortal…˜
Esto es muy importante…˜ porque la gran mayoría de las escrituras sagradas co-
mienzan con el comienzo…˜ comienzan con lo que yo no soy…˜
Hay un simbolismo en el budismo Zen que refleja perfectamente este dilema…˜ Se
cuenta que cuando el Patriarca Bodhidharma transmitió el budismo a China…˜ su ense-
ñanza consistió en estar sentado en silencio de cara a la pared durante todos los años que
duró su magisterio…˜ ¿Qué quiere decir esta proposición?…˜ ¿Qué budismo se puede
enseñar de esta manera tan alejada de los modos de la palabra?…˜ Ciertamente…˜ se
trataba del budismo que no estaba en los libros…˜ ciertamente se trataba del budismo
que está en el corazón…˜ ¿Y cuál es este budismo?…˜ Si a mí me enseñan que soy naci-
do y heredero de todos los nacimientos que me han precedido…˜ el fardo a mis espaldas
será tan oneroso que un millón de vidas como esta no será suficiente para disolverlo…˜
¿De qué me sirve a mí saber que la liberación es posible…˜ que hubo un liberado…˜
que hubo un Buddha…˜ y que su enseñanza es ésta…˜ si yo mismo no soy capaz de ver-
me a mí mismo exactamente como yo soy?…˜ Ciertamente…˜ es posible que yo apren-
da todo de lo que yo mismo no soy…˜ ciertamente es posible que yo hable de Buddhas
y de doctrinas…˜ de cómo fue que él se liberó…˜ de en qué consiste su enseñanza…˜
Pero yo no sabré nada de mí mismo…˜ Es mí mismo lo que importa realmente…˜ Por
ello…˜ Bodhidharma tragó enteramente al Buddha y al budismo…˜ y sentándose de
cara a la pared…˜ su enseñanza consistió en la enseñanza del estado cuando nada otro
que mí mismo era…˜

43
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

Nada otro que mí mismo era…˜ quiere decir que no había creador ni creación…˜
que no había manifestador ni manifestación…˜ que no había legislador ni legislación…˜
que no había escrituras…˜ que no había enseñanza…˜ que no había absolutamente nadie
creado ni nacido a quien manifestarse…˜ ni a quien legislar…˜ ni a quien enseñar…˜
que no había Buddha ni budismo…˜
¿Cómo os diré este estado?…˜ ¿cómo os diré este estado?…˜ ¿Quién era?…˜ ¿quién
era conmigo?…˜ ¿quién era conmigo cuando yo sólo era…˜ y absolutamente nada
otro…˜ que mí mismo era?…˜
Veis…˜ finalmente se trata de mí mismo…˜ Yo no acepto que mí mismo sea una he-
rencia…˜ ni siquiera veo cómo lo que yo soy puede ser innato en lo que yo soy…˜ Es
muy misterioso…˜ pero misterio es mi alimento…˜

44
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

178
____________

Como misterio…˜ Viéndome a mí mismo tal cual soy…˜ no veo comienzo ni fin de
mi ser…˜ Yo no soy hijo…˜ yo no soy padre…˜ yo no tengo genealogía…˜ Cuando las
dos puntas del tiempo se tocan…˜ eso lo veo…˜ eso lo veo Ahora…˜ Y me veo a mí
mismo donde ni el tiempo ni el espacio son…˜ Mismidad es lo que soy…˜ exactamente
idéntico a mí mismo haya conocimiento o no…˜ Donde yo soy…˜ el conocimiento no
está conmigo…˜ la consciencia no está conmigo…˜ Y yo sé todo de ese estado…˜ y no
hay ningún momento en que mi ser lo que yo soy esté velado de mí…˜
Si os miro…˜ lo que encuentro es mi propia mismidad conociéndose a sí misma…˜
Por ello…˜ sabiendo todo de mí mismo…˜ sé absolutamente todo de vosotros…˜ No de
lo que vosotros no sois…˜ sino de lo que vosotros sois…˜
¿Era alguien con vosotros…˜ en ese estado en que vosotros erais…˜ y absolutamente
nada otro que vosotros mismos era?…˜ ¿Era alguien con vosotros?…˜ Os suplico que
veáis por vosotros mismos…˜ Mi visión de mí mismo no os servirá…˜ Tenéis que ver
por vosotros mismos…˜ tenéis que comer misterio por vosotros mismos…˜

45
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

179
____________

Mientras queda un reducto de insatisfacción en nuestro corazón…˜ por pequeño que


sea…˜ mientras no podemos decir a corazón descubierto de nosotros mismos…˜ que
nosotros presenciamos y saboreamos y nos verificamos a nosotros mismos…˜ como Eso
que era cuando nada otro que nosotros mismos era…˜ la raíz del terror no se ha disuelto
completamente en nosotros…˜
¿Y cómo se disuelve esta raíz del terror y de la angustia que mana incesantemente la
cortina de espanto que nos vela de nosotros mismos?…˜ ¿cómo se disuelve esta raíz de
amargura que nos susurra que nosotros nos estamos perdiendo mucho gozo…˜ mucha
felicidad…˜ mucho bienestar…˜ mucho amor merecido…˜ mucha experiencia placente-
ra?…˜ Esta raíz se disuelve manteniendo la pregunta que nos revela tal cual somos…˜
“¿Quién era?…˜ ¿quién era conmigo?…˜ Cuando yo no me conocía a mí mismo…˜
cuando yo no escuchaba este susurro de terror que me atemoriza con mi propia
muerte…˜ cuando yo no había conocido este cuerpo…˜ ni esta mente…˜ ni este alma…˜
ni este espíritu…˜ cuando el susurro en este oído no me convencía de que yo soy un na-
cido y un mortal…˜ cuando el susurro en este oído no me convencía de que yo me estoy
perdiendo mucho gozo…˜ mucha felicidad…˜ mucho bienestar…˜ mucho amor mereci-
do…˜ mucha experiencia placentera…˜ cuando el susurro en este oído no me convencía
de que yo soy un nacido…˜ yo me pregunto y os pregunto…˜ ¿quién era conmigo?…˜
¿quién era con nosotros cuando absolutamente nada otro que nosotros mismos era?”…˜
Hay que volver una y otra vez a la pregunta…˜ Tenemos que vernos…˜ y verificar-
nos…˜ y saborearnos cuando absolutamente nada otro que nosotros mismos es…˜ Y te-
nemos que hacer esto Ahora…˜ Sólo viendo a corazón abierto que ESO es lo que noso-
tros somos…˜ sólo saboreando una y otra vez que ESO es lo que nosotros somos…˜
sólo encontrándonos a nosotros mismos SER ESO que es la respuesta a la pregunta
“¿Quién era con nosotros?”…˜ sólo encontrándonos a nosotros mismos completamente
conformes…˜ e idénticos…˜ a ESO que es nuestra propia respuesta a la pregunta
“¿quién era conmigo?”…˜ sólo encontrándonos a nosotros mismos idénticos a esa Rea-
lidad misteriosa que se revela a sí misma como nosotros dentro de nuestra
comprensión…˜ sólo así encontraremos que se ha disuelto la raíz del temor y de la an-
gustia…˜
Cuando la raíz del terror y de la angustia se ha disuelto…˜ nosotros ya no buscamos
alivio…˜ cuando la raíz del susurro de que nos falta algo se ha disuelto…˜ nosotros ya
no buscamos nada…˜ Viendo incesantemente lo que nosotros somos…˜ el susurro de
que somos nacidos cesa por completo…˜ Entonces nuestra felicidad es completa…˜ ab-

46
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

soluta…˜ No siendo una felicidad buscada…˜ no puede perderse…˜ No siendo una feli-
cidad que venga a llenar una aflicción…˜ no es una felicidad que esté en la
experiencia…˜ Nuestra felicidad…˜ simplemente no va ni viene…˜ no nos deja más ni
juega ya nunca al escondite con nosotros…˜ Está hecha sólo de saber exactamente
Quién somos…˜ No es una felicidad ostentosa…˜ no es una felicidad ruidosa…˜ es lla-
na…˜ simple…˜ natural…˜ No está sujeta al tiempo…˜ Y es extraordinariamente
activa…˜ Anhela comunicarse…˜ Es como el agua…˜ que anega todo…˜ cubriéndolo
de codos y codos de Realidad…˜

47
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

180
____________

El Buddha dice que el fin del sufrimiento está donde está el fin del mundo…˜ No ha-
bla nunca de que se tenga que conseguir la felicidad…˜ ¿Por qué?…˜ Porque la felici-
dad del Sabio es la positividad absoluta de toda ausencia de aflicción…˜ De manera que
la felicidad del Sabio no es una experiencia…˜ no consiste en un alivio del sufrimiento
al cual se le superpone un gozo…˜ La felicidad del Sabio no es algo que va y viene…˜
¿Dónde está lo que el Buddha llama el Fin del Mundo?…˜ ¿Dónde está lo que el
Buddha llama el fin del sufrimiento?…˜
Si queréis saberlo y encontrarlo en vosotros mismos…˜ preguntaos “¿Quién era con-
migo…˜ qué mundo o qué comienzo de mundo era conmigo…˜ cuando absolutamente
nada otro que mí mismo era?”…˜ Vuestra respuesta a esta pregunta…˜ que está presente
Ahora a vosotros mismos en vuestro propio templo…˜ es precisamente ese Donde don-
de ni siquiera el comienzo del mundo era…˜ Ese es vuestro estado donde jamás tiene
entrada el sufrimiento…˜ Frecuentradle…˜ presenciadle…˜ saboreadle una y otra vez…
˜ Vuestra sed será saciada…˜ hasta tal punto…˜ que aún en esta vida…˜ olvidareis por
completo que un día fuisteis como huérfanos…˜ sedientos…˜ perdidos en un desierto
hecho completamente de sed de vosotros mismos…˜
El fin del mundo está donde está su comienzo…˜ Conoceos Ahora antes de que co-
mience el mundo…˜

48
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

181
____________

Aunque yo os hablo de mi estado…˜ del cual ya nada me vela…˜ yo no estoy dicien-


do nada que sea sólo mío y no vuestro…˜ Mi verdadero estado…˜ del cual ya nada me
vela…˜ es sólo visión…˜ Veo todo desde mí mismo…˜ En el foco de mi visión…˜ que
es donde la sensación de ser mí mismo me está revelando a mí mismo…˜ todos los don-
des y todos los cuandos están presentes a mí…˜ Y yo sólo los presencio…˜ Mi realidad
es real…˜ mientras que la realidad de lo que comienza y acaba…˜ yo la veo comenzar y
acabar…˜ aquí y ahora…˜ Sin embargo…˜ yo no tengo comienzo ni fin…˜
Yo no hago nada para ser lo que yo soy…˜ Todo comienza y acaba en mí…˜ Yo lo
veo comenzar y acabar…˜ y entonces me digo…˜ “Cuán extraño es que yo haya creído
nunca que otro que mí mismo haya sido jamás…˜ Este mundo no tiene realidad…˜
¿cómo puede ser un ser real, algo que yo veo que comienza…˜ y que yo veo que
acaba?”…˜ Y antes de que termine de decirme esto…˜ todo lo que ha comenzado está
encontrando un final…˜ “¿Qué queda entonces?”…˜ me pregunto…˜ Y estoy viendo lo
que queda…˜ Me veo a mí mismo quedando…˜ Mí mismo…˜ que soy sólo visión…˜
que soy sólo presenciación…˜ quedo…˜
Todo se ve desde mí…˜ Yo soy el foco al cual todo está presente…˜ Hay una felici-
dad extrema en saber lo que soy…˜ Y mientras uno no sabe lo que es…˜ siempre queda
la herida de la ausencia de esta felicidad…˜ La ausencia de la felicidad de saber quién
soy…˜ es completamente abrumadora…˜ es la infelicidad misma…˜ No se puede ser fe-
liz habiéndose aceptado como nacido y mortal…˜ debido a que entonces está ausente la
felicidad de saberse a uno mismo quién es uno mismo…˜ Esta ausencia de la felicidad
de saberse a uno mismo quién es uno…˜ no puede ser rellenada…˜ Al sentirla clamar en
el corazón…˜ quemando las entrañas…˜ ya no podremos cesar de buscar…˜ Todo con-
siste en que se nos indique dónde buscar…˜ Pero nosotros tenemos que saber reconocer
lo que nosotros somos…˜ A falta de nuestro propio saber reconocer lo que nosotros so-
mos…˜ nosotros no somos mejores que los cadáveres que se entierran…˜ Y se puede re-
sucitar a un muerto…˜ pero no se puede resucitar a un cadáver…˜
¿Cuál es la diferencia?…˜ Estar muerto es no saber quién soy…˜ Ser un cadáver es
haber dejado pasar absolutamente la posibilidad de saber quién soy…˜
Es entonces nuestra responsabilidad que el infierno dure…˜ ¿Y qué es el infierno?…
˜ El infierno es la ausencia de la felicidad que todos conocemos…˜ Si no la conociéra-
mos no sabríamos que falta…˜ y entonces no la buscaríamos…˜
Esta felicidad suprema no va ni viene…˜ sólo se redescubre…˜ Es el lecho donde
duerme el Sabio…˜ La vigilia…˜ el sueño con sueños…˜ el sueño profundo…˜ vienen y

49
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

se presentan a ella…˜ Entonces ella es consciente de que ella es…˜ entonces se auto-sa-
borea…˜ y auto-saboreándose…˜ exclama para sí misma…˜ “Esto es mismidad de mí
misma…˜ nada otro que mí misma es jamás conmigo”…˜ Yo escucho esta exclamación
y siento integralmente esta felicidad que es mí mismo…˜ Mi propio conocimiento de ser
quien yo soy está hecho de esta felicidad…˜ En ella me despierto…˜ en ella me
duermo…˜ Ella es mi lecho…˜

50
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

182
____________

La llamo felicidad…˜ pero no es una experiencia…˜ ni muchas experiencias…˜ ni


todas las experiencias…˜ No tiene principio ni fin…˜ no tiene nacimiento…˜ Es más
bien una convicción indestructible…˜ inatacable…˜ no-ausente…˜ inmediata…˜ sin
causa…˜ no-hecha…˜ una convicción exclusiva de todo otro que sí misma…˜ una con-
vicción de ser lo que yo soy…˜
Yace como un océano…˜ en cuya superficie aparece este conocimiento de ser yo
Eso…˜ Toda mi carne y mi sangre se ha cambiado en este océano de felicidad que me
confirma incesantemente quién soy…˜ No me encuentro principio ni fin…˜ Mi visión
de mí mismo coincide exactamente conmigo mismo…˜ Y a este verme a mí mismo
exactamente como yo soy…˜ mi corazón lo llama Amor…˜ Esta vigilia que me
ilumina…˜ me ilumina como Amor sólo…˜ El océano de felicidad se ama a sí mismo
viéndose…˜ y sabiéndose a sí mismo ser sólo lo que Es…˜
Dejad que estos sonidos levanten las olas de simpatía de vuestro propio océano…˜
Yo no hablo de mí mismo sólo…˜ Si yo hablara de mí mismo sólo…˜ ¿qué valor ten-
dría?…˜
Sólo quiero que os reconozcáis en vuestro propio océano de felicidad que os aguar-
da…˜ Como él mismo…˜ su aguardaros no tiene principio ni fin…˜

51
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

183
____________

¿Cuál es ese instante en que lo que es pasado ya no es…˜ y lo que es futuro no es to-
davía?…˜ ¿Es o no es ese instante…˜ en que lo que es pasado ya no es…˜ y lo que es
futuro no es todavía?…˜
Preguntémonos a nosotros mismos…˜ preguntemos a la omnisciencia de todo, que
mora en nuestro propio corazón…˜ Hubo un instante…˜ un instante inmenso…˜ un ins-
tante jamás medido…˜ en que nosotros éramos y absolutamente nada otro que nosotros
mismos era con nosotros…˜ El conocimiento de ese instante eterno está vigente ahora
en nuestro corazón…˜ Ese instante no ha nacido…˜ ese instante no pasa…˜ ese instante
no va hacia ningún final del tiempo…˜ ¿Cuál es ese instante en que lo que es pasado no
ha sido jamás…˜ y lo que es futuro todavía no ha comenzado?…˜ Ese instante es el
tiempo eterno de nuestra absoluta submersión en el océano beatífico de nuestra propia
mismidad…˜ ese instante es este mismo instante en que lo que es pasado ya no es…˜ y
lo que es futuro no es todavía…˜
¿Quién era conmigo?…˜ ¿quién era conmigo en ese instante en que lo que es pasado
jamás ha sido…˜ y lo que es futuro todavía no ha comenzado?…˜ Yo no me veo a mí
mismo limitado por el instante de mi ser lo que yo soy…˜ Sin embargo…˜ mi visión de
mí mismo es tan rotunda como lo que me veo a mí mismo ser…˜ Para mí ha cesado
toda angustia por atribuirme grandezas que no tengo…˜ Ser antes de todos los tiempos
es no tener pasado ni futuro…˜ ¿Qué grandeza o pequeñez puede atribuirse quien no tie-
ne pasado?…˜ Me lo pregunto…˜ y me veo a mí mismo tal cual soy…˜ Y no hay ningu-
na angustia en verme a mí mismo tal cual soy…˜ Y no hay ninguna angustia en verme
eterno y al mismo tiempo saber que lo sé sólo mientras dure este tiempo que no soy…˜
Todo lo que está en devenir…˜ todo lo que tiene un comienzo…˜ con su comienzo
comienza su propio tiempo…˜ No ha acabado de comenzar cuando ya su comienzo es
pasado…˜ Y cuando alcanza al fin lo que es el final de su futuro…˜ todo se desvanece…
˜ Ha sido sólo el espejo donde se reconoce el Instante eterno en que yo soy…˜ No me
canso de presenciar el comienzo del tiempo de mi propia comprensión de mí mismo…˜
Lo presencio…˜ y no me veo a mí mismo comenzando con el comienzo del tiempo de
mi propia comprensión…˜ Presencio mi comprensión de mí mismo…˜ y me veo como
un recipiente sin fondo y sin bordes…˜ donde todos los tiempos tienen su comienzo…˜
su devenir…˜ y su fin…˜ Y cuando todos los tiempos han comenzado…˜ han
devenido…˜ y han acabado…˜ me veo a mí mismo quedando exactamente lo que yo
soy…˜ ni acrecido ni amenguado…˜ Y mi visión de mí mismo es tan rotunda como un

52
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

gran amor correspondido…˜ Es sólo felicidad…˜ porque me veo a mí mismo sin princi-
pio ni fin…˜
No hay ninguna angustia de estar usurpando nada a nadie…˜ No hay absolutamente
nadie más conmigo…˜ Otro que mí mismo…˜ no es…˜ y jamás ha sido…˜

53
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

184
____________

Donde todo lo que pasa ha devenido ya pasado…˜ ¿quién queda?…˜ Presenciemos


lo que en nosotros ha devenido ya pasado…˜ ¿qué queda de todo ello?…˜ ¿Hemos aca-
bado nosotros con su acabar?…˜ Y cuando todo lo que pasa haya devenido ya pasado…
˜ ¿quién queda?…˜
¿Hemos pasado nosotros con el pasar mismo de lo que en nosotros ha pasado?…˜
¿Dónde está la materialidad…˜ la tactibilidad…˜ el gozo o la aflicción de todos los
aconteceres que han conocido su momento en nosotros?…˜ ¿Somos nosotros algunos de
esos aconteceres?…˜ ¿Somos nosotros la suma de todos esos aconteceres…˜ esa
suma…˜ que una vez pasados…˜ es cero?…˜
Nuestra angustia no conocerá fin mientras nos creamos nacidos…˜

54
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

185
____________

¿Quién era conmigo?…˜ ¿Quién era conmigo donde en este instante…˜ donde en
este Ahora…˜ yo sé que yo era…˜ y que nada otro que mí mismo era conmigo?…˜ ¿No
sé yo este estado?…˜ ¿no veo yo este estado?…˜ ¿no presencio yo este estado…˜ en
este instante…˜ Ahora?…˜ ¿No presencio yo ese estado…˜ en que yo era y absoluta-
mente nada otro que mí mismo era conmigo?…˜
¿Qué está diciendo de mí mismo esta proposición?…˜ “¿Quién era conmigo?”…˜
¿Qué está diciendo de mí mismo esta proposición?…˜ En qué se diferencia esta proposi-
ción de la proposición que me dice que me pregunte a mí mismo “¿Quién soy yo?”…˜
Mirad…˜ como es la proposición…˜ así es la verificación…˜ La proposición
“¿Quién era conmigo?”…˜ directamente preguntada a mí…˜ afirma absolutamente mi
realidad…˜ Al aceptar la pregunta…˜ veo inmediatamente este Quien que yo soy…˜
Aunque nunca haya reparado en ello…˜ lo veo…˜ Veo este Quien que yo soy…˜ porque
no puedo no verlo…˜ Veo este Quien que yo soy…˜ porque acepto la pregunta…˜ Pero
el Quien que yo soy…˜ no es el quien por el que pregunta la pregunta…˜ La pregunta
me pregunta por quien…˜ otro que mí mismo…˜ era conmigo…˜ La pregunta no me
pregunta por mí mismo…˜ La pregunta me pregunta a mí…˜ Y no me pregunta por
mí…˜ me pregunta por otro que mí mismo…˜ Y pregunta si otro que mí mismo era con-
migo…˜
La pregunta asume mi Realidad Absoluta…˜ La pregunta me pone en mi verdadero
estado de Presenciador Último de todo…˜ Sin decir una sola palabra de mí…˜ dice todo
de mí…˜ Me dice que yo soy cuando absolutamente nada otro que mí mismo es…˜ Me
pregunta si algo de lo que ahora parece ser era conmigo…˜ Inmediatamente…˜ yo veo
por mí mismo que no…˜ inmediatamente…˜ yo sé por mí mismo que absolutamente
nada otro que mí mismo era conmigo…˜ Yo no necesito ser convencido de esto…˜ lo
veo y lo sé por mí mismo…˜ Veo por mí mismo…˜ sé por mí mismo…˜ ese estado feli-
císimo mío en que absolutamente nada otro que mí mismo era conmigo…˜ De manera
que lo que ahora parece ser conmigo…˜ se esfuma y se disuelve en su verdadera reali-
dad…˜ Porque su verdadera realidad es que no era…˜ su verdadera realidad es que no
estaba conmigo…˜ ¿Y cómo puede lo que no era conmigo tener otra realidad que no ser
absolutamente?…˜
Pasemos ahora a la proposición de que yo me pregunte a mí mismo “¿quién soy
yo?”…˜ Esta pregunta ignora quién soy…˜ Esta pregunta no me pone inmediatamente
en mi verdadero estado…˜ Dependiendo de aquello con lo que me identifique…˜ así
será mi respuesta…˜ Y si alguna vez me conduce a la verdad…˜ ello será sólo a través

55
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

de un arduo trabajo de desidentificación…˜ ¿Pero puede conducirme esta pregunta a la


Verdad?…˜ ¿Cómo puede conducirme esta pregunta a la Verdad?…˜ ¿Cómo puede con-
ducirme a la verdad de mí mismo una pregunta que confiesa ignorar quién soy?…˜
Comprendéis…˜ la falta de sabor en la pregunta “¿Quién soy yo?”…˜ está justifica-
da…˜ Esta proposición ha sido presentada por algunos sabios como conductiva a la ve-
rificación de quién soy…˜ Sin embargo…˜ yo siempre la he encontrado falta de sabor…
˜: Nada en ella sabía a mí mismo…˜ La pregunta es ignorante de Quién soy…˜ y lo con-
fiesa abiertamente en su propuesta…˜
Esto no puede ser…˜ ¿Cómo puede ser conductiva a la verificación de quién soy
yo…˜ si ella misma se pregunta quién soy yo?…˜

56
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

186
____________

Con la pregunta…˜ “¿Quién era conmigo…˜ cuando absolutamente nada otro que
mí mismo era?”…˜ el estado Eterno…˜ que estaba ausente…˜ deviene inmediatamente
presente…˜ y el estado efímero…˜ que estaba presente…˜ deviene inmediatamente au-
sente…˜ ¿Y qué significa la ausencia Ahora de todo lo que implica el estado efímero?…
˜: El fin del mundo…˜ el fin de la angustia…˜ el fin del sufrimiento…˜ ¿Y qué significa
la presencia Ahora de todo lo que implica el estado eterno?…˜: la emergencia bienaven-
turada de nuestro verdadero estado real…˜ No estando ausentes a nosotros mismos…˜
nuestra felicidad está colmada…˜

57
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

187
____________

Presenciémonos en el espejo de la proposición “¿Quién era conmigo…˜ cuando ab-


solutamente nada otro que mí mismo era conmigo?”…˜ Presenciémonos a secas…˜ De-
jemos que la respuesta de nuestro verdadero Estado Real emerja de la profundidad del
Mar de nuestro SER Eterno…˜ Presenciemos que nada era…˜ Presenciémonos a noso-
tros mismos presenciando que nada era…˜ Dejemos que nuestro verdadero Estado
Real…˜ Eterno…˜ indestructible…˜ inatacable…˜ inconsumible…˜ sin nacimiento…˜
emerja de nuestro propio terreno…˜ donde nosotros jamás no hemos sido…˜ Dejemos
que nuestro verdadero Estado Real nos comunique que nosotros no somos otro que
nuestro verdadero Estado Real…˜
Sintamos profundamente que este estado no pasará…˜ Veámonos sin nacimiento…˜
Toda esta artefactosidad nacida…˜ es sólo para que nos conozcamos a nosotros mismos
como lo que somos realmente…˜ un Océano de felicidad donde el tiempo deviene ins-
tantáneamente inexistente…˜ Siendo el tiempo el marco de todo lo que nace…˜ pasa…˜
y perece…˜ cuando el tiempo mismo deviene instantáneamente inexistente…˜ ¿Quién
queda?…˜ ¿Quién queda que ya era cuando el tiempo no era?…˜
El fin de la angustia…˜ el fin del sufrimiento está integralmente donde el tiempo no
era…˜ ¿Y dónde está donde el tiempo no era?…˜ ¿No conocemos nosotros ese
estado?…˜ ¿No somos nosotros ese estado?…˜ Dejemos que la respuesta aflore de no-
sotros mismos…˜ Preguntémonos…˜ preguntémonos una y otra vez por nosotros mis-
mos a nosotros mismos…˜
Mirad…˜ donde la angustia y sufrimiento son…˜ la felicidad no puede
manifestarse…˜ ¿Cuál es el obstáculo para que la felicidad…˜ para que el Océano de
nuestra propia naturaleza real…˜ suba y aflore y se manifieste…˜ y nos anegue y trague
toda nuestra angustia y sufrimiento?…˜ El obstáculo es que nosotros creemos ciega-
mente ser otro que el que somos…˜
Sin embargo la respuesta es clara…˜ y es rotunda…˜ y procede de nosotros
mismos…˜ “¿Quién era conmigo…˜ cuando absolutamente nada otro que mí mismo era
conmigo?”…˜ Ciertamente…˜ entonces no había experiencia…˜ pero nosotros no pode-
mos negar contra nuestra propia verdad…˜ emergida de nosotros mismos…˜ que noso-
tros ERAMOS cuando nada otro que nosotros mismos era…˜ No podemos negar…˜
contra nuestra propia comprehensión de nosotros mismos…˜ que el que queda…˜ cuan-
do el tiempo y todo lo que contiene ha pasado ya…˜ es nosotros…˜ un nosotros exacta-
mente idéntico al nosotros que era cuando el tiempo y todo lo que contiene no era…˜

58
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

La angustia y el sufrimiento vienen de que nunca lograremos ser…˜ en el tiempo…˜


lo que ya somos cuando el tiempo no es…˜ Como nacidos y mortales jamás lograremos
ser idénticos a lo que ya somos y nunca hemos cesado de ser…˜ cuando el tiempo no
es…˜

59
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

188
____________

Toda angustia y todo sufrimiento tienen su raíz únicamente en el hecho de que noso-
tros no nos damos cuenta de que quien nosotros somos…˜ es lo que nosotros somos…˜
por sí mismo…˜
Nuestro ser nosotros lo que nosotros somos…˜ Es por sí mismo…˜ En saber esto…˜
en comprender esto…˜ en ver esto…˜ está el fin de toda angustia y de todo
sufrimiento…˜
Nosotros somos lo que nosotros somos por nosotros mismos…˜ esto es lo que tene-
mos que comprender…˜ Comprender esto…˜ es lo que significan las palabras “el fin del
sufrimiento…˜ el fin de la angustia…˜ está en el fin del mundo”…˜
¿Qué ocurre entonces cuando nosotros nos creemos nacidos y mortales?…˜ ¿Qué
ocurre entonces cuando nosotros nos creemos un producto del funcionamiento del mun-
do?…˜ Ocurre que lo que nosotros somos realmente está ausente de nuestra compren-
sión…˜ ocurre que nosotros creemos tener nuestro ser de otro que nosotros mismos…˜
ocurre que las decisiones que nos afectan tan de lleno…˜ como son el nacimiento y la
muerte…˜ se toman en otro que no es nosotros…˜ ocurre que nosotros no tenemos en-
tonces ningún ser por nosotros mismos…˜ ocurre que nuestro darnos cuenta de esto nos
sobrecoge de angustia y de terror…˜
De manera que no hay ningún fin para nuestra angustia y sufrimiento…˜ mientras
que nosotros no comprendemos…˜ y aceptamos…˜ y verificamos…˜ y saboreamos…˜
que nuestro ser nosotros lo que nosotros somos…˜ lo somos únicamente por nosotros
mismos…˜
¿Y cuál es la ayuda fundamental a esta comprensión que se hace más necesaria que
el aire que respiramos?…˜
La ayuda fundamental a esta comprensión sólo puede venirnos de quien sabe todo
de nosotros mismos…˜ de quien es omnisciente de nosotros mismos…˜ ¿Y quién es este
quien que es omnisciente de todo de nosotros mismos?…˜ ¿Quién otro que nosotros
mismo podría ser este quien?…˜
Este Quien es el quien que era cuando nosotros éramos y nada otro que nosotros
mismos era con nosotros…˜ Este Quien…˜ que es verdaderamente el nosotros que
siempre hemos buscado…˜ deviene inmediatamente presente a sí mismo con la pregun-
ta…˜ “¿Quién…˜ quién era conmigo…˜ cuando absolutamente nada otro que mí mismo
era?…˜
Vedlo por vosotros mismos…˜ se trata de vosotros mismos…˜ se trata de lo que sois
realmente…˜ se trata del fin de la angustia y del sufrimiento…˜ Este quien no es

60
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

nacido…˜ este quien es lo que es…˜ este quien es por sí mismo…˜ viene de sí mismo…
˜ está en sí mismo…˜ se vuelve a sí mismo…˜ se regocija intensamente en sí mismo…˜
y se duerme profundamente en sí mismo…˜ En este quien no hay ni rastro de
angustia…˜ ni rastro de sufrimiento…˜ ni rastro de separación…˜ ni rastro de soledad…
˜ Eternamente auto-mismado…˜ es lo que nosotros somos…˜ Este quien es la cura ins-
tantánea de la angustia y del terror…˜
No renunciemos a la claridad de nuestro propio sí mismo…˜ Si lo hacemos…˜ no
conoceremos el fin de la angustia y del terror…˜ Se trata de nosotros…˜ se trata de no-
sotros mismos…˜ Tenemos que comprender que nuestro ser es ser por sí mismo…˜

61
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

189
____________

¿Quién era conmigo…˜ quién era conmigo…˜ cuando absolutamente nada otro que
mí mismo era?…˜
Con esta pregunta debe quedar revelada a nosotros mismos la absoluta consistencia
de nuestro ser nosotros lo que nosotros somos…˜ Si estamos viendo el estado que es la
respuesta…˜ entonces estamos viendo que absolutamente nadie ha creado nuestro ser…
˜ estamos viendo que nuestro ser es ser por sí mismo…˜ estamos viendo que nuestro ser
es ser siempre…˜ consistentemente inaudito…˜ una convicción absolutamente irrefuta-
ble…˜
Estamos viendo igualmente que no estamos usurpando nada a nadie…˜ No había na-
die con nosotros cuando nosotros éramos y absolutamente nada otro que nosotros mis-
mos era…˜ ¿Cómo entonces…˜ estaríamos nosotros usurpando nuestro ser nosotros lo
que nosotros somos…˜ y a quién estaríamos usurpando su habernos dado lo que no nos
ha dado?…˜
Estamos viendo igualmente que nadie nos está dando el ser…˜ que nuestro ser es por
sí mismo…˜ Esto es el fin del mundo…˜ esto es lo que significa el fin del mundo…˜ el
fin de la angustia…˜ el fin del sufrimiento…˜

62
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

190
____________

El fin de la angustia…˜ el fin del sufrimiento…˜ está en ser nosotros Ahora exacta-
mente el Quien que era…˜ cuando nosotros éramos y absolutamente nada otro que no-
sotros era…˜
¿Es ahora la angustia?…˜ ¿es ahora el sufrimiento?…˜ ¿en qué consiste la
angustia?…˜ ¿en qué consiste el sufrimiento?…˜
La angustia consiste en que nosotros hemos aceptado que tenemos el ser por otro
que nosotros mismos…˜ A esto se llama “aceptar que uno ha sido engendrado…˜ que
uno ha sido gestado…˜ que uno ha nacido…˜ Todo ello sin que haya mediado en esta
operación…˜ ninguna petición nuestra…˜ ningún querer expreso nuestro en cuanto a la
configuración y tendencias…˜ deseos y aversiones…˜ de esto a lo que falsamente lla-
mamos yo-y-nuestro…˜ Nuestro haber aceptado sin verificación que nosotros somos
esto que ha nacido…˜ hace de nosotros seres que han comenzado…˜ seres que tienen su
ser por la voluntad de otro…˜ seres que van a terminar cuando su posibilidad de ser se-
res en el tiempo termine…˜ Vernos a nosotros mismos como nacidos y mortales…˜ ver-
nos a nosotros como seres que tienen su ser por la voluntad de otro que nosotros mis-
mos…˜ vernos a nosotros mismos como absolutamente ignorantes del porqué de nuestro
presunto comienzo…˜ del porqué de nuestro devenir…˜ y del porqué de nuestro termi-
nar…˜ vernos a nosotros mismos absolutamente ignorantes del conocimiento que sobre
este nacido y mortal tiene ese Otro al cual se debe nuestro ser cuando creemos falsa-
mente que somos nacidos y mortales…˜ no puede no generar angustia…˜ Nosotros esta-
mos angustiados porque no sabemos quién somos…˜ nosotros estamos angustiados por-
que creemos que somos este nacido y mortal…˜ que no estaba con nosotros…˜ y sobre
el cual no tenemos ninguna posesión…˜ ni ejercemos ningún control…˜
¿Cuándo nos ha sido presentado jamás este nacido y mortal que tan ciegamente cre-
emos ser…˜ para recabar nuestra aprobación?…˜ ¿Por qué aceptamos tan ciegamente
ser este nacido y mortal que no conocíamos…˜ que no éramos…˜ cuando nosotros éra-
mos y absolutamente nada otro que nosotros era?…˜ No…˜ nosotros no somos este na-
cido y mortal…˜ nosotros no somos este devenir que no es un ser…˜ nosotros no somos
este flujo de experiencia cuyo registro de comienzo está tan fielmente grabado en noso-
tros…˜ Este nacido y mortal…˜ este hombre o mujer…˜ no estaba con nosotros…˜ Su
devenir en nosotros es muy reciente…˜ Sin embargo nosotros…˜ lo que nosotros so-
mos…˜ es Antiquísimo…˜
No había ninguna angustia ni sufrimiento en nosotros…˜ ¿No estamos viendo…˜ y
verificando…˜ y saboreando…˜ que no había ninguna angustia ni sufrimiento en noso-

63
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

tros?…˜ Nosotros no éramos creados…˜ ni hechos…˜ ni formados…˜ ni planeados por


absolutamente nadie…˜ no había en nosotros comienzo…˜ ni pasar…˜ ni acabar de
nada…˜ ¿No estamos viendo…˜ y verificando…˜ y saboreando…˜ que no había angus-
tia ni sufrimiento en nosotros?…˜ ¿No estamos viendo…˜ y verificando…˜ y saborean-
do…˜ que nosotros no éramos creados…˜ ni hechos…˜ ni formados…˜ ni planeados por
absolutamente nadie?…˜ ¿No estamos viendo…˜ y verificando…˜ y saboreando
ahora…˜ que no había en nosotros ni comienzo…˜ ni pasar…˜ ni acabar de nada…˜ que
no había en nosotros ni angustia ni sufrimiento?…˜ ¿No estamos viendo…˜ y verifican-
do…˜ y saboreando Ahora…˜ que nosotros éramos y que absolutamente nada otro que
nosotros mismos era con nosotros?…˜ ¿No estamos viendo…˜ y verificando…˜ y sabo-
reando ahora…˜ que lo que nosotros somos realmente es Ahora exactamente a como era
cuando absolutamente nada otro que nosotros mismos era?…˜ ¿No es nuestro verdadero
ser por sí mismo?…˜

64
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

191
____________

Verifiquemos por nosotros mismos que absolutamente nada otro que nosotros mis-
mos era con nosotros…˜ Verifiquemos por nosotros mismos que hay un estado en que
nosotros éramos sin nacimiento…˜ Verifiquemos por nosotros mismos qué era este esta-
do nuestro en que el nacimiento no era…˜ ¿Qué estaba ausente de nosotros cuando el
nacimiento no era?…˜ ¿Estábamos nosotros mismos ausentes de nosotros mismos…˜
cuando el nacimiento no era?…˜ Es muy importante que descubramos por nosotros mis-
mos este punto fundamental…˜ Si nos descubrimos a nosotros mismos como lo que era
cuando el nacimiento no era…˜ entonces sabremos por nosotros mismos que nosotros
no somos el nacimiento…˜ Sabiendo por nosotros mismos que nosotros no somos el na-
cimiento…˜ toda empresa de acercamiento a nuestra verdadera Realidad se revelará
completamente errónea…˜ Uno no puede acercarse jamás a lo que uno es siempre…˜ A
lo que somos verdaderamente…˜ no se llega por ninguna vía…˜ Lo que somos verdade-
ramente…˜ uno sólo lo descubre…˜ ¿Cómo?…˜ ¿cómo descubre uno lo que uno es?…˜
Uno descubre lo que uno es preguntándose a sí mismo por su estado cuando el naci-
miento no era…˜ Preguntémonos…˜ preguntémonos a nosotros mismos…˜ ¿cuál es ese
estado mío…˜ verdaderamente mío…˜ cuando el nacimiento no era?…˜
Es evidente que para preguntarnos a nosotros mismos por nuestro estado cuando el
nacimiento no era…˜ el nacimiento…˜ que es lo que nosotros no somos…˜ que no era
con nosotros…˜ debe de estar presente…˜ Pero fijaos bien…˜ el instante en que el naci-
miento no era…˜ es este mismo instante en que estamos comprendiendo que el naci-
miento no era…˜ ¿Cómo es ello posible?…˜ ¿cómo es posible que lo que era cuando el
nacimiento no era…˜ lo estemos comprendiendo ahora que el nacimiento es?…˜ Ello se
debe a que en realidad aquel instante en que el nacimiento no era es este mismo instante
en que el nacimiento es…˜
Por ello vemos exactamente…˜ minuciosamente…˜ como realmente presente Ahora
a nosotros…˜ lo que parece que tuvo lugar antes de que el nacimiento fuera…˜ Aquel
instante es este instante…˜ aquel Ahora es este Ahora…˜
Para el que comprende verdaderamente este punto…˜ para el que saborea verdadera-
mente este punto…˜ sus días como nacido y mortal han terminado…˜ Ya nada le vela de
la Presenciación incesante de su verdadera naturaleza…˜ Se sabe a sí mismo un Pleroma
atemporal de dicha sin fin…˜ Se ve a sí mismo sin nacimiento…˜ se ve a sí mismo Aho-
ra…˜ exactamente idéntico a sí mismo cuando el nacimiento no era…˜
Habiendo cesado la persecución de sí mismo…˜ el nacimiento ya no está bajo su re-
proche…˜ Nadie reprocha a un árbol por ser un árbol…˜ ni a una nube por ser una

65
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

nube…˜ El verdadero comprehensor ya no reprocha al nacimiento ser el nacimiento…˜


Para él es perfecto como nacimiento…˜ Por supuesto…˜ ya no le pide que le haga
feliz…˜ ni tampoco le pregunta por qué no es más bello…˜ o por qué no es más joven…
˜ El verdadero Comprehensor ve incesantemente al nacimiento…˜ como nacimiento…˜
pero a sí mismo ya no se ve en el nacimiento…˜ A sí mismo se ve en sí mismo…˜ y por
sí mismo…˜ sin hacedor…˜ sin creador…˜ sin Causa…˜

66
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

192
____________

Aquel instante en que absolutamente nada otro que nosotros mismos era con noso-
tros…˜ es este mismo instante en que lo comprendemos…˜
Nuestra comprensión no puede decirse en palabras…˜ nuestra comprensión es el es-
tado verdadero mismo…˜ Nos vemos sin nacimiento…˜ y nuestro vernos sin nacimiento
es enteramente delectable…˜ Nos vemos ser por nosotros mismos…˜ sin comienzo ni
fin de nuestro ser…˜ sin creador…˜ sin hacedor…˜ sin causa…˜ Esto es el fin de la an-
gustia…˜ esto es el fin del sufrimiento…˜

67
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

193
____________

El fin de la angustia y del sufrimiento está justamente donde la angustia y el sufri-


miento no eran…˜ ¿Y cuál es ese estado nuestro donde la angustia y el sufrimiento no
eran?…˜ Ese estado es la respuesta en nosotros a la pregunta “¿Quién era conmigo…˜
cuando absolutamente nada otro que mí mismo era?”…˜
Nosotros sabemos la respuesta a esta pregunta…˜ Y por mucho y muy grande que
sea nuestro miedo de no ser…˜ no podemos no ver…˜ y no presenciar…˜ y no saborear
que absolutamente nada otro que nosotros mismos era…˜
De manera que no os dejéis sobrecoger por las apariencias…˜ Aparentemente nada
era…˜ “Nada era” suena como a ausencia absoluta de nosotros…˜ Efectivamente…˜
ninguno de nosotros recuerda haber sido esto o eso antes de que se produjera el naci-
miento…˜ Pero este “nada era” habla sólo de que nosotros no aparecíamos a nosotros
mismos como esto o eso…˜ como este hombre o esta mujer…˜ En realidad…˜ “nada
era” quiere decir exactamente que “nada era con nosotros”…˜ que ni siquiera el conoci-
miento de que nosotros somos era…˜ Pero lo que nosotros somos…˜ lo Real…˜ lo Ab-
soluto…˜ lo que no viene de ninguna parte ni va a ninguna parte…˜ sí era…˜ ¿Y cómo
sabemos nosotros que nosotros sí éramos cuando absolutamente nada más era?…˜ La
respuesta a esta pregunta se impone por penetración intuitiva en la realidad de nuestro
ser…˜
Ved así…˜ presenciad así…˜ saboread así vuestro propio ser vosotros lo que voso-
tros sois…˜ cuando absolutamente nada otro que vosotros mismos era…˜ Ved que el na-
cimiento consiste únicamente en la revelación a vosotros mismos de que vosotros sois
sin nacimiento…˜ El artefacto nacimiento es únicamente para saber que vosotros no
sois nacidos…˜
Seamos lo que somos…˜ veámonos ser lo que somos…˜ Nuestro ser lo que somos es
el fin de la angustia y del sufrimiento…˜ Ni la angustia ni el sufrimiento eran con noso-
tros…˜ Nosotros sabemos…˜ nosotros presenciamos que ni la angustia ni el sufrimiento
eran con nosotros…˜ ¿Por qué entonces…˜ decirlos nuestros?…˜
Nada era…˜ nada era con nosotros…˜ ¿No conocemos nosotros este estado?…˜ ¿Y
cuándo estamos conociendo nosotros este estado?…˜ ¿Lo estamos conociendo enton-
ces…˜ o lo estamos conociendo Ahora?…˜
La verdad es que nada era con nosotros está siendo comprendido Ahora…˜ Amad
ese estado…˜ Ese estado es lo que somos…˜ y lo somos Ahora…˜ Sólo en nuestra ver-
dadera casa cesa toda angustia y todo sufrimiento…˜ Y nuestra verdadera casa es este
estado que descubrimos que es nosotros…˜

68
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

¿Quién era?…˜ ¿quién era con nosotros cuando absolutamente nada otro que noso-
tros mismos era con nosotros?…˜

69
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

194
____________

Un verdadero comprehensor de su naturaleza real…˜ que tiene y que presencia por


sí mismo la respuesta a la pregunta “¿quién era conmigo…˜ cuando absolutamente nada
otro que mí mismo era?”…˜ que se sabe y que se saborea por sí mismo ser sólo por sí
mismo…˜ sin dominio ni servidumbre a absolutamente nada…˜ puesto que está
viendo…˜ sin que sobrevenga velación alguna de su naturaleza real…˜ que absoluta-
mente nada otro que sí mismo era…˜ este comprehensor…˜ sabe y ve por sí mismo sólo
a sí mismo en todos los corazones…˜ No que vea muchos iguales a sí mismo…˜ no…˜
Lo que ve…˜ y lo que presencia en todos los corazones…˜ es esta misma respuesta a la
pregunta “¿quién era?…˜ ¿quién era conmigo…˜ cuando absolutamente nada otro que
mí mismo era?”…˜
No habiendo entonces el hombre ni la mujer…˜ no habiendo entonces el Cielo ni la
Tierra…˜ este comprehensor de sí mismo…˜ no ve en nadie al hombre o a la mujer que
no eran…˜ Lo que ve en todos es este ser por sí mismo que es la respuesta a la pregunta
“¿quién era?…˜ ¿quién era cuando absolutamente nada otro que nosotros mismos
era?…˜
Este es el verdadero propositor de la Verdad última en todo…˜ No viéndose a sí mis-
mo como servidor ni como servido de nada…˜ conociendo exactamente…˜ minuciosa-
mente ese estado que era…˜ ese estado que no carecía ni sobraba de nada…˜ este com-
prehensor de su verdadera naturaleza…˜ si es un propositor…˜ no buscará ser servido…
˜ Su único servicio…˜ servicio al que se entrega como a un océano de delectación…˜
consiste en revestir de preguntas el anhelo que siente suspirar en todos los corazones…˜
Revestir de preguntas el anhelo que siente suspirar en todos los corazones es su tra-
bajo…˜ trabajo delectabilísimo…˜ puesto que las preguntas mismas brotan de la visión
de la respuesta…˜ Esta visión de la respuesta que el propositor ve…˜ y de la cual surge
la pregunta…˜ es toda la intención de la proposición…˜ La intención de la pregunta es
que se recupere la visión del estado que la hace brotar…˜
Y en esto consiste esencialmente un maestro espiritual…˜ Consiste en preguntas…˜
Preguntas cuya única intención es que se recupere la visión y presenciación y saborea-
ción del estado…˜ cuya visión y presenciación y saboreación hace que las preguntas
surjan…˜
Un verdadero propositor no ve en vosotros a personas…˜ un verdadero propositor no
ve en vosotros al nacimiento…˜ Un verdadero propositor ve y presencia y saborea en
vosotros el estado que es la respuesta a la pregunta “¿quién era?…˜ ¿quién era conmigo
cuando absolutamente nada otro que mí mismo era?”…˜ Vosotros podréis decir que no

70
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

veis…˜ que no presenciáis…˜ que no saboreáis el estado que es vuestra propia respuesta
a la pregunta…˜ pero el verdadero propositor sí lo ve…˜ sí lo presencia…˜ sí lo sabo-
rea…˜ en vosotros…˜
Por ello presencia enteramente todos los obstáculos…˜ por ello ve los nudos donde
vuestra propia respuesta queda represada…˜

La doctrina más alta sobre el maestro espiritual es verle exactamente como él nos
ve…˜ a saber…˜ teniendo por uno mismo la respuesta a la pregunta “¿quién era?…˜
¿quién era conmigo cuando absolutamente nada otro que mí mismo era?”…˜ Tener por
uno mismo la respuesta a esta pregunta…˜ es verse y presenciarse y saborearse a uno
mismo Ahora…˜ exactamente idéntico a como uno es siempre…˜ por toda la
eternidad…˜
No hay ningún nacimiento de nada donde uno ve y presencia y saborea su propia
respuesta a la pregunta que le descubre integralmente lo que uno es…˜ Y este ver y pre-
senciar y saborear la propia respuesta de uno a la pregunta “¿quién era?…˜ ¿quién era
conmigo?”…˜ no precisa ningún traslado nuestro a aquel imposible pasado en que el na-
cimiento no era…˜ Este ver y presenciar y saborear la propia respuesta de uno a la pre-
gunta “¿quién era?…˜ ¿quién era conmigo?”…˜ tiene lugar Ahora…˜
¿Qué quiere decir esto?…˜ Lo que esto quiere decir es que lo que nosotros llamamos
el nacimiento…˜ es sólo la pregunta…˜ El nacimiento es sólo una indefinidad de pre-
guntas…˜ hasta dar con la pregunta cuya respuesta es nuestro estado real…˜

71
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

195
____________

La doctrina del maestro…˜ en su expresión más alta…˜ se reduce a la respuesta de la


presencia de vuestro propio estado eterno…˜ en vuestro propio corazón…˜ cuando la
pregunta “¿quién era?…˜ ¿quién era conmigo…˜ cuando absolutamente nada otro que
mí mismo era?”…˜ os encuentra…˜
¿Y qué quiere decir que la pregunta “¿quién era?…˜ ¿quién era conmigo?”…˜ os en-
cuentra?…˜ Ello quiere decir que vosotros…˜ el vosotros real…˜ estáis viendo que la
respuesta es vosotros mismos…˜ un vosotros mismos que emerge como una plenitud de
Paz anegándoos de certeza de ser lo que vosotros sois…˜
Este es el maestro real con el que os quiero ver a solas…˜: vosotros mismos…˜ el
vosotros mismos que es ese Quien por el que pregunta la pregunta…˜
Yo no os pido que me sirváis…˜ tampoco os pido que me améis…˜ A mí mismo me
veo como el Quien por el que pregunta la pregunta…˜ Entonces me pregunto…˜ ¿qué
me faltaba o qué me sobraba…˜ cuando absolutamente nada otro que mí mismo era
conmigo?…˜ ¿En qué puede servírseme o amárseme cuando absolutamente nada otro
que mí mismo era?…˜
¿Qué os pido entonces?…˜ Es muy simple…˜ Os pido que escuchéis la pregunta
como viniendo de vosotros mismos y que veáis…˜ y presenciéis y saboreéis la respuesta
que es vosotros mismos…˜ el vosotros mismos real…˜ el vosotros mismos que vosotros
sabéis que vosotros sois…˜
Y en esto consiste esencialmente toda la relación de este maestro con estos discípu-
los…˜
No consideréis el nacimiento como nada más que el artefacto que pone palabras a
todas las preguntas y respuestas…˜ No le consideréis poco ni mucho…˜ Y esto quiere
decir que no pongáis vuestras esperanzas en él…˜ y que al mismo tiempo le hagáis tra-
bajar a fondo con vuestra pregunta…˜ Esto quiere decir que el nacimiento es precioso
como artefacto pero una maldición como esperanza…˜ Sirve para preguntar la
pregunta…˜ pero él no es la respuesta…˜
Sólo las falsas esperanzas depositadas en el nacimiento…˜ sólo su mal uso y su abu-
so…˜ nos impiden ver la verdad…˜ No haciendo las preguntas pertinentes…˜ nosotros
no obtenemos las respuestas infalibles…˜ Entonces…˜ el nacimiento deviene una razón
de ser por sí mismo…˜ y la frustración y el sufrimiento es la respuesta que tenemos a
nuestra ausencia de preguntas…˜
Toda nuestra angustia y sufrimiento se disuelve instantáneamente con la visión y
presenciación y saboreación de nosotros mismos…˜ del nosotros mismos real…˜ que es

72
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

la respuesta a la pregunta “¿quién era?…˜ ¿quién era con nosotros cuando absolutamen-
te nada otro que nosotros mismos era?”…˜
Por ello…˜ no preguntéis por vuestro nacimiento…˜ si será así o no así…˜ Más
bien…˜ servíos rectamente del nacimiento para preguntar por vosotros…˜

73
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

196
____________

¿Por qué…˜ si partimos de la creencia de que nosotros somos lo que el nacimiento


es…˜ nosotros no podremos ver nunca lo que nosotros somos realmente?…˜
Fijaos bien y comprended…˜ si nosotros aceptamos ser lo que el nacimiento es…˜
entonces…˜ lo que nosotros somos para nosotros mismos…˜ es este hombre o esta mu-
jer…˜ en este preciso momento de nuestro estar pasando…˜ ¿Qué quiere decir aceptar
que nosotros somos este hombre o esta mujer…˜ en este preciso instante de nuestro es-
tar pasando?…˜ Ello quiere decir que nosotros no somos ya el niño o la niña que fui-
mos…˜ y que todavía no somos el anciano o la anciana que seremos…˜ ¿Y cuándo…˜
entonces estamos nosotros completos…˜ terminados…˜ acabados?…˜ ¿cuándo…˜ en-
tonces…˜ somos nosotros enteramente lo que el nacimiento es…˜ si el nacimiento es
como una emisión de días y de meses y de años que no se detiene a ser lo que él es ni un
solo instante nunca?…˜ Si nosotros decimos que nosotros somos lo que el nacimiento
es…˜ ahora…˜ en este ahora…˜ una parte considerable de lo que el nacimiento es…˜ a
saber…˜ todo lo que ha pasado hasta este instante…˜ todo eso ya no lo somos…˜ e
igualmente…˜ la parte de lo que todavía no ha pasado…˜ esa parte tampoco la estamos
siendo…˜ ¿Cuándo entonces somos nosotros completos?…˜ ¿cuándo entonces…˜ so-
mos nosotros completamente lo que el nacimiento es?…˜ Y quiero que os preguntéis a
vosotros mismos esta pregunta…˜ quiero que sintáis profundamente vuestras propias
respuestas a estas proposiciones…˜ quiero que veáis bien lo que aceptáis cuando acep-
táis que sois lo que el nacimiento es…˜ y quiero que comprendáis por qué las proposi-
ciones que se dirigen a vosotros como nacidos…˜ como creados…˜ como hechos…˜ no
sólo no son verdaderas…˜ sino que son una imposibilidad…˜ La verdad no tiene contra-
rio…˜ ni opuesto…˜ ni igual…˜ ni semejante…˜ Y tampoco hay verdades a medias…˜
La virtud de la verdad es que es excluyente…˜ ¿excluyente de qué?…˜ Excluyente de lo
que no es la verdad…˜
No es verdadero que nosotros seamos lo que el nacimiento es…˜ Cuando lo que co-
mienza con el nacimiento llega a su término…˜ entonces puede decirse que el nacimien-
to es verdaderamente lo que el nacimiento es…˜ entonces puede decirse que el naci-
miento está completo…˜ entonces puede decirse que su llegar a ser ha alcanzado com-
pletamente eso a donde estaba llegando…˜ ¿Y cómo se llama cuando lo que el naci-
miento es acaba…˜ cuando lo que tenía que pasar ha pasado ya completamente?…˜
¿Cómo se llama ese término en que el nacimiento es lo que verdaderamente el naci-
miento es?…˜ ¿Y qué tenemos que ver nosotros con ese comienzo y con ese término?…

74
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

˜ Si nosotros somos verdaderamente el nacimiento…˜ ¿en qué punto de su pasar…˜ so-


mos nosotros realmente lo que nosotros somos?…˜
Si partimos de la creencia de que nosotros somos lo que el nacimiento es…˜ noso-
tros no podremos ver nunca lo que nosotros somos…˜ ¿Por qué?…˜ ¿por qué es ello
así?…˜

75
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

197
____________

Nosotros no somos Ahora otro que el que nosotros éramos cuando absolutamente
nada otro que nosotros mismos era con nosotros…˜ ¿Qué quiere decir esto?…˜ Esto
quiere decir exactamente que la nuestra es la Identidad de lo que Es siempre…˜ a cuya
actualidad sin tiempo…˜ el tiempo mismo no puede poner ninguna frontera…˜ ¿Cómo
vamos a ser nosotros el nacimiento…˜ si lo estamos viendo pasar?…˜
Nada era con nosotros…˜ En este instante mismo…˜ nosotros no somos otro que el
que nosotros éramos cuando absolutamente nada otro que nosotros mismos era con no-
sotros…˜

76
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

198
____________

Mirémonos bien…˜ mirémonos bien…˜ y comprendamos qué nos ha ocurrido…˜


Comprendamos bien el proceso por el que nosotros mismos llegamos a aceptarnos
como nacidos y mortales…˜ Fijémonos bien…˜ en que no estoy proponiendo que vea-
mos cómo llegamos a darnos cuenta por nosotros mismos de que el nacido en nosotros
es sólo el nacimiento…˜ y no nosotros…˜ Esta comprensión es muy importante…˜ Por-
que de habernos dado cuenta por nosotros mismos de que el nacido en nosotros es sólo
el nacimiento…˜ y no nosotros…˜ nunca hubiera triunfado sobre nosotros la falsa pro-
posición de que el nacido en nosotros es nosotros…˜
Todo era exactamente conforme a la verdad…˜ El nacimiento se había abierto en no-
sotros exactamente como se abre un ojo…˜ Todo en nosotros era visión sólo…˜ audi-
ción sólo…˜ Este es el estado de infancia…˜ Entonces…˜ desde innumerables proposi-
tores…˜ comenzó a llegar hasta nosotros la proposición de que el nacimiento era noso-
tros…˜ Esta proposición contradecía toda experiencia real…˜ esta proposición no era
acorde con los hechos…˜ pero todo en nosotros era ausencia de referencia…˜ Una sana
credulidad escuchaba una y otra vez la falsa proposición…˜ hasta que llegamos a estar
convencidos…˜ más allá de lo razonable…˜ de que efectivamente el nacimiento en no-
sotros había sido en realidad el nacimiento de nosotros…˜
Esta aceptación de nosotros mismos como nacidos y mortales…˜ sustrajo de nuestra
experiencia inmediata la gran Pradera de nuestra realización…˜ ¿Por qué no está inco-
modo un niño en el mundo?…˜ ¿Por qué el niño que nosotros fuimos no estaba incomo-
do en el mundo?…˜ Por una razón muy simple…˜ a saber…˜ porque no estaba en el
mundo…˜ y porque no era un niño…˜ El niño que fuimos era el Estado Eterno viéndose
a sí mismo con entera confianza…˜ El niño en nosotros era el Ojo del Estado Eterno
viéndose a sí mismo…˜ Por ello…˜ aquella máxima confianza…˜ confianza que era la
expresión de la experiencia inmediata de la Realidad que somos…˜
Por ello…˜ ninguna vía afirmativa…˜ religiosa u otra…˜ que nos propone que noso-
tros somos el nacimiento…˜ podrá proponernos nunca una salida real…˜ ¿Cómo se saca
a un nacido del proceso de pasar desde el nacimiento a la muerte?…˜ No hay que ser
muy sabio para comprender que esto es una imposibilidad…˜ La cuestión no es enton-
ces sacar lo que no somos de su proceso de estar pasando…˜ la cuestión es entonces sa-
ber si nosotros somos lo que el nacimiento es…˜
Si nosotros somos lo que el nacimiento es…˜ entonces…˜ por mucho que nos esfor-
cemos en pulir este artefacto…˜ nunca lograremos detener su pasar…˜ No hay purifica-
ción…˜ ni espiritualización…˜ que sea capaz de sacar a un nacido de su pasar…˜ Si no-

77
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

sotros somos lo que el nacimiento es…˜ entonces este pasar nos llevará inevitablemente
a su punto final…˜ y no habrá ningún salto de este tren que nos ponga a salvo de la des-
trucción como un nacido…˜
Como nacidos…˜ si nosotros nos comprendemos a nosotros mismos como
nacidos…˜ no solo está sustraída de nosotros la gran Pradera de nuestro verdadero esta-
do real…˜ sino que no podremos librarnos de ninguna manera de lo que se llama la
muerte…˜
La proposición que os hago va entonces directamente al vosotros que era cuando ab-
solutamente nada otro que vosotros mismos era…˜

78
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

199
____________

El nacimiento no puede poner nunca fronteras a lo que nosotros somos…˜ Por


ello…˜ lo que nosotros somos…˜ lo somos Ahora…˜ exactamente idéntico a como
siempre lo somos…˜ haya nacimiento o no…˜ Y esto es lo que tenemos que compren-
der…˜ que no hay dos en nosotros…˜ uno mortal y otro inmortal…˜ sino que hay sólo
uno…˜
Y nuestra comprensión de ser nosotros lo que nosotros somos…˜ no nos va a hacer
ser otro que el que somos…˜ Nuestra comprensión de ser nosotros lo que nosotros so-
mos…˜ sólo va a deshacer la falsa creencia de que somos el nacimiento…˜
Esta falsa creencia de ser nosotros el nacimiento…˜ está sustrayendo de nuestra ex-
periencia inmediata la Gran Pradera de nuestra Amplitud eterna…˜ En nuestro verdade-
ro estado todo está ya ganado…˜ La Amplitud eterna…˜ En nuestro verdadero estado
todo está ya ganado…˜ La Amplitud eterna es una absoluta ausencia de inquietud…˜

79
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

200
____________

¿Quién era…˜ quién era conmigo…˜ quién era conmigo cuando absolutamente nada
otro que mí mismo era?…˜ ¿Quién era…˜ quién era conmigo…˜ quién era conmigo
cuando este conocimiento y sensación de que yo soy…˜ no estaba conmigo?…˜
Presenciemos este estado nuestro…˜ cuando absolutamente nada otro que nosotros
mismos…˜ era con nosotros…˜ Presenciemos este estado nuestro…˜ porque en presen-
ciar este estado nuestro…˜ está la cesación de toda nuestra inquietud…˜
La cesación de toda nuestra inquietud no está en sentirnos crecer…˜ ¿Por qué es ello
así?…˜ Ello es así porque para sentirnos crecer tenemos que habernos aceptado como
pequeños…˜ ¿Cuán pequeños éramos nosotros…˜ en ese estado en que absolutamente
nada otro que nosotros mismos era?…˜
Mirad…˜ hay estas palabras de Cristo…˜ “Encontrad primero lo que sois cuando ab-
solutamente nada otro que vosotros mismos es…˜ encontrad primero vuestro estado
real…˜ y todo lo demás se os dará por añadidura”…˜
¿Qué quieren decir estas palabras de Cristo?…˜ Quieren decir que es vano buscar la
cesación de la inquietud en lo que es precisamente la fuente de la inquietud…˜ ¿Y cuál
es la fuente de la inquietud…˜ de la zozobra y del sufrimiento?…˜ La fuente de la in-
quietud…˜ de la zozobra y del sufrimiento…˜ es que nosotros no reparamos…˜ ni pre-
senciamos…˜ ni saboreamos nuestro estado eterno…˜ Presos de ceguera hacia nosotros
mismos…˜ buscamos entonces el fin de la inquietud…˜ de la zozobra…˜ y del sufri-
miento…˜ precisamente en lo que es su fuente…˜
Siempre que escuchéis la proposición de que tenéis que crecer…˜ en comprensión…
˜ en felicidad…˜ en bienestar…˜ en armonía…˜ sabed que os están proponiendo que
busquéis “la añadidura” de que hablaba Cristo…˜ Esta proposición es muy banal…˜ A
pesar de ello…˜ prende con facilidad aún en los corazones más sinceros…˜ ¿Por qué es
ello así?…˜ Ello se debe a dos razones…˜: la primera y la más importante…˜ se cifra en
la ausencia de la presenciación y saboreación de nuestro estado real…˜ la segunda es
que la aceptación de la proposición de que somos nacidos nos hace concebirnos a noso-
tros mismos como seres pequeños…˜ y a todo lo que se considera pequeño le parece
atractiva la proposición de crecer…˜
Esta proposición del crecimiento se disfraza de las espiritualidades más altas…˜
Pero su olor inconfundible es siempre la persecución de un mayor bienestar en el mun-
do…˜ es decir…˜ propiamente…˜ la “añadidura” de que habla Cristo…˜
Saber…˜ y presenciar…˜ y saborear lo que somos…˜ no es difícil…˜ Es simple…˜ y
llano…˜ y natural…˜ Es lo primero…˜ Pero lo que se entiende por crecer no implica

80
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

nuestro ser real…˜ porque no hay crecimiento ni decrecimiento en lo que nosotros so-
mos…˜
No hay ningún final verdadero de la angustia…˜ ni de la inquietud…˜ ni de la zozo-
bra…˜ ni del sufrimiento…˜ hasta que encontramos en nosotros mismos este DONDE…
˜ donde ellas no eran…˜ Tenemos que encontrar este estado nuestro…˜ tenemos que en-
contrarle…˜ tenemos que verle…˜ tenemos que presenciarle…˜ tenemos que
saborearle…˜ por nosotros mismos en nosotros mismos…˜ este DONDE…˜ este DON-
DE donde la inquietud no era…˜ donde la angustia no era…˜ donde la zozobra no era…
˜ donde el sufrimiento no era…˜ Para curarnos enteramente de la inquietud…˜ de la an-
gustia…˜ de la zozobra…˜ del sufrimiento…˜ tenemos que encontrarnos a nosotros mis-
mos SER lo que nosotros somos donde ellos no eran…˜
Si no es esta cura…˜ no estamos curados…˜ La “añadidura” pude entretener a un
niño…˜

81
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

201
____________

Comprendámonos a nosotros mismos como la quietud que era cuando absolutamen-


te nada otro que nosotros mismos era…˜ Esta quietud no iba ni venía de ninguna
parte…˜ esta quietud no era la posesión de nadie…˜ ¿Qué es esta quietud que era…˜
cuando absolutamente nada otro que nosotros mismos era?…˜ Aquella quietud que
era…˜ es esta misma quietud que es Ahora…˜ una quietud en cuyo seno…˜ ahora está
viniendo y yendo el nacimiento…˜ El punto crucial de la verdadera comprehensión de
nosotros mismos…˜ como nosotros somos realmente…˜ es vernos a nosotros mismos
como esta quietud que es…˜ El nacimiento…˜ que ahora está viniendo y yendo…˜ no es
realmente el nacimiento de nosotros…˜ sino que es un acontecer…˜ un estar pasando…˜
cuyo lugar de acontecimiento…˜ cuyo lugar de paso…˜ está en nosotros…˜ De manera
que todo el punto de nuestra comprehensión de nosotros mismos…˜ como nosotros so-
mos realmente…˜ se encuentra en comprender la diferencia entre un nacimiento que es
el nacimiento de nosotros…˜ y un nacimiento que es un paso incesante que tiene su es-
tar pasando en nosotros…˜
Comprehendernos a nosotros mismos como el lugar de paso del nacimiento…˜ es
comprehendernos verdaderamente…˜ Es así como son las cosas…˜ Y son suficiente-
mente simples como para no poder ser una teoría inventada…˜ Que el nacimiento está
pasando en nosotros responde exactamente a nuestra experiencia de nosotros mismos…
˜ Todos tenemos…˜ en nosotros mismos…˜ constancia de que esto es así…˜ Y tenemos
tanta más constancia cuanto más recedemos al punto del comienzo…˜ Es fácil decir que
no hay ningún registro en nosotros de un comienzo de nosotros…˜ Pero esto…˜ para ser
completamente efectivo en su destrucción de nuestra falsa creencia de ser nosotros el
nacimiento…˜ tenemos que verlo…˜ y presenciarlo por nosotros mismos…˜ Que el na-
cimiento no es de nosotros…˜ sino en nosotros…˜ la comprehensión de esto nos restau-
ra de inmediato a nuestra quietud sin edad…˜ abismal…˜ donde nosotros somos y abso-
lutamente nada otro que nosotros mismos es…˜ Es una quietud serena…˜ silente…˜ lla-
na…˜ impensable…˜ Lo somos…˜ no es nada que tengamos que lograr…˜ Era y es
Una…˜ absoluta…˜ eterna…˜ una felicidad que llena por completo nuestra compren-
sión…˜ pues es la felicidad de sabernos ser lo que nosotros somos…˜ ¿Es…˜
entonces…˜ el nacimiento de nosotros?…˜ ¿o es más bien en nosotros?…˜ Respondá-
monos por nosotros mismos a estas preguntas…˜ dejemos que nuestra comprensión res-
ponda…˜
No se trata de sustituir una creencia por otra…˜ se trata de ver cómo es lo que es…˜
¿Qué nos ha ocurrido?…˜ ¿qué pruebas de experiencia tenemos…˜ por nosotros mis-

82
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

mos…˜ de que este nacimiento nos ha traído con él?…˜ ¿de qué hemos sido engendra-
dos…˜ hechos…˜ gestados en una matriz…˜ y paridos en medio de sangre y de
llanto?…˜ Al escuchar estas palabras…˜ estoy seguro…˜ todo nuestro ser se revela y ex-
clama…˜ “¡no…˜ no es posible que este nacimiento sea el nacimiento de mí!…˜ ¡No
hay en mí mismo ni un solo registro de que esto me haya acontecido nunca!…˜ ¿Cómo
ocurrió que este nacimiento me hizo nacer con él?…˜ ¿cómo ocurrió que yo fui engen-
drado…˜ que yo fui gestado…˜ que yo fui parido en medio de sangre y de llanto?”…˜
Sentid profundamente estas preguntas…˜ En su ser sentidas a fondo está su respuesta…
˜ ¿Cuál es nuestra respuesta a estas preguntas?…˜
Mi respuesta a estas preguntas es que lo que describen de mí…˜ jamás me ha ocurri-
do…˜ No es el nacimiento de mí…˜ es el nacimiento en mí de la totalidad universal…˜

83
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

202
____________

Todas las enseñanzas verdaderas…˜ cuya proposición fundamental es la pregunta


cuya respuesta es nuestro estado eterno…˜ han aparecido bajo la apariencia de la propo-
sición de nuestra liberación de la mortalidad…˜
Así…˜ para el Vedanta…˜ nuestro Bien Supremo es comprehender por nosotros mis-
mos que nuestro estado real es el estado Incondicionado de Atma…˜ ¿Y qué quieren de-
cir estas extrañas palabras…˜ “Estado Incondicionado de Atma”?…˜ ¿Dónde está este
Atma…˜ y en qué consiste su estado Incondicionado?…˜ Nosotros no podemos com-
prender nunca hasta que tomemos plena consciencia de que lo que Atma nombra es otra
manera de llamar a lo que es nosotros mismos…˜ Atma quiere decir “Sí mismo”…˜
Luego es por nosotros mismos y de nosotros mismos de donde ha de brotar la compren-
sión de nosotros mismos…˜ ¿Y cuál es ese estado que llaman el “Estado Incondicionado
de Atma”?…˜ Lo que quiera que este estado sea…˜ nosotros no tenemos otro medio de
conocerlo…˜ más que si se trata de nosotros mismos…˜ Sólo si se trata de nosotros mis-
mos…˜ nosotros podremos hacernos la pregunta capital que nos descubra a nosotros
mismos…˜ por nosotros mismos…˜ Quién somos…˜ De ahí la pregunta capital…˜
“¿Quién era…˜ quién era con nosotros…˜ quién era con nosotros cuando absolutamente
nada…˜ nada otro que nosotros mismos era?”…˜ ¿Quién…˜ si no somos nosotros mis-
mos…˜ puede dar respuesta a esta pregunta?…˜ La pregunta misma…˜ en su
estructura…˜ excluye absolutamente a todo otro que nosotros mismos…˜ Nada ni nadie
más era con nosotros…˜ Luego…˜ “¿quién era…˜ quién era con nosotros?”…˜ ¿Com-
prendéis?…˜ La pregunta misma nos pone en nuestro propio Estado Incondicionado…˜
Y nos pone en nuestro propio “Estado Incondicionado” incondicionalmente…˜ es
decir…˜ de tal manera…˜ que aunque nosotros sabemos que el nacimiento no era…˜ es
con el nacimiento como estamos sabiendo lo que nos interesa realmente…˜ absoluta-
mente…˜ de nosotros mismos…˜
¿No estamos viendo que nuestro verdadero estado ES Incondicionado?…˜ ¿no esta-
mos viendo que nuestro verdadero estado ES sólo nuestro verdadero estado…˜ que na-
die más Es nuestro verdadero estado?…˜ ¿no estamos viendo que nuestro verdadero es-
tado no ES en el tiempo?…˜ ¿no estamos viendo que nuestro verdadero estado ES ahora
exactamente idéntico a cuando el nacimiento no era?…˜ ¿no estamos viendo que nues-
tro verdadero estado ES ahora exactamente idéntico a cuando nosotros no sabemos que
nosotros somos?…˜
¿Qué hay que muera…˜ en nuestro verdadero estado?…˜ Yo quiero saber qué lugar
real está ocupando este nacimiento en nuestro verdadero estado…˜ yo quiero saber qué

84
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

lugar real están ocupando un millón de millones de nacimientos en nuestro verdadero


estado…˜ yo quiero saber en qué nos distinguimos unos de otros en nuestro verdadero
estado…˜ yo quiero saber quién de nosotros es primero y quién es después en nuestro
verdadero estado…˜ yo quiero saber en qué le encontráis falto de qué…˜ y quiero saber
también en qué le encontráis sobrado de qué…˜ yo quiero saber cuánto calculáis que
durará nuestro verdadero estado…˜ y quiero que me habléis de su comienzo…˜
¿No es esto SER Incondicionado?…˜ ¿Y de quién se trata?…˜ ¿Se trata de algún
Dios remoto e inaccesible?…˜ ¿se trata de este mezquino ser que pretendemos ser cuan-
do nos creemos nacidos?…˜ ¿Quién está teniendo toda esa comprehensión?…˜ ¿La es-
tamos leyendo en algún libro?…˜ ¿estamos escuchando que fue el Buddha quien tuvo
esta comprehensión prodigiosa?…˜ ¿Quién…˜ quién está teniendo esta comprehensión
prodigiosa de Sí mismo como el Estado Incondicionado?…˜
Os pregunto desde la mismísima Respuesta…˜ os pregunto desde la mismísima vi-
sión del Estado…˜

85
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

203
____________

Permanezcamos así…˜ en la visión incesante del estado Incondicionado…˜ que es la


respuesta a nuestra pregunta…˜ “¿Quién era…˜ quién era conmigo…˜ quién era conmi-
go cuando absolutamente nada…˜ nada otro que mí mismo era?”…˜
Sólo en la presenciación de este Estado…˜ absolutamente nosotros mismos sólo…˜
obtendremos la certeza absoluta de SER…˜ de ser verdaderamente…˜ de ser Ahora
exactamente idénticos a como siempre hemos sido…˜ a como siempre seremos…˜ Sólo
en la presenciación de este Estado…˜ absolutamente nosotros mismos…˜ obtendremos
la certeza absoluta de SER nosotros lo que nosotros somos…˜ absolutamente indepen-
dientes del nacimiento…˜ sin nacimiento ni muerte…˜ sin que jamás procedamos ni re-
cedamos a nosotros mismos…˜ una Quietud inmutable…˜ en Cuyo seno…˜ Ahora…˜
prodigiosamente…˜ se está produciendo esta visión…˜

86
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

204
____________

Mirad…˜ la solubilidad nacimiento…˜ la artefactosidad nacimiento…˜ este cuerpo-


y-mente-y-alma-y-espíritu…˜ que no es un ser…˜ que no es el ser de nosotros…˜ y a
quien nosotros no debemos ser lo que nosotros somos…˜ no puede poner fronteras a lo
que nosotros somos…˜ De manera que para ser nosotros lo que nosotros somos…˜ no es
necesario…˜ ni ha sido nunca necesario…˜ que lo que llamamos nuestro nacimiento no
esté aquí…˜ Nosotros no somos más lo que nosotros somos cuando el nacimiento no era
que ahora que el nacimiento es…˜ Igualmente…˜ nosotros no seremos más lo que noso-
tros somos cuando el nacimiento ya no sea que ahora que el nacimiento es…˜ ¿Por qué
es ello así?…˜ Ello es así porque el nacimiento no nos ha separado ni un micronésimo
de lo que nosotros somos…˜ ello es así porque el nacimiento no tiene el poder de hacer-
nos ser otro que el que nosotros somos…˜
Sin embargo…˜ es justamente Ahora…˜ que el nacimiento se disuelve en nuestro
seno…˜ soltando sus solubilidades que son la totalidad de la experiencia…˜ cuando no-
sotros tenemos la oportunidad de conocernos SER lo que realmente somos…˜ Y para
este conocernos SER lo que realmente somos…˜ es absolutamente necesario que el na-
cimiento esté aquí…˜ como una tintura…˜ disolviéndose en nuestro seno…˜
De manera que es completamente vano imaginarnos a nosotros mismos cuando el
nacimiento no era…˜ y echarnos a temblar…˜ porque lo que nosotros queremos es saber
que nosotros somos…˜ y cuando el nacimiento no era…˜ nosotros no sabíamos que no-
sotros somos…˜ Nuestro verdadero estado real no hay que imaginarle…˜ hay que ver-
le…˜ Y hay que verle Ahora que podemos…˜ Nuestro verdadero estado real no es la
nada imaginada que tanto nos asusta cuando pensamos en cómo debía ser cuando el na-
cimiento no era…˜ Nuestro verdadero estado real es este estar sabiendo que nosotros so-
mos…˜ nuestro verdadero estado real es el soporte y sustento de este nacimiento…˜ Es
como el Mar que hay debajo de la barca del nacimiento…˜ El nacimiento no es nada sin
nuestro verdadero estado real…˜ Con el nacimiento sabemos y conocemos nuestro esta-
do real…˜ Y lo sabemos y lo conocemos Ahora…˜ no cuando el nacimiento no era…˜
no cuando el nacimiento ya no sea…˜ sino Ahora…˜ Ahora que el nacimiento es…˜ To-
mad consciencia entonces de la importancia excepcional del nacimiento…˜ y dejad de
temer por completo a esa nada imaginaria que tanto os asusta cuando consideráis el
Ahora en que el nacimiento no era…˜
Nosotros no somos el nacimiento…˜ pero eso no quiere decir que haya en él nada
despreciable…˜ ni desdeñable…˜ ni odioso…˜ Es una herramienta compleja…˜ bella…˜
y fiel…˜ completamente absorbente…˜ porque con su concurso…˜ ahora mismo…˜ no-

87
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

sotros estamos sabiendo que nosotros somos…˜ Sólo nuestra torpeza y falta de atención
nos lleva a los extremos de la euforia y de la depresión…˜ El que se conoce a sí
mismo…˜ conoce integralmente lo que el nacimiento es…˜ No desaprovecha este ins-
tante de auto-consciencia de sí mismo…˜ y se sabe a sí mismo SER el Único…˜ tanto
cuando el nacimiento no era como cuando el nacimiento ya no sea…˜ el Único que
Ahora mismo ve que él es…˜

88
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

205
____________

Tenemos que cesar completamente de perseguirnos a nosotros mismos como si no-


sotros estuviéramos en alguna otra parte que en nosotros…˜ Ese estar nosotros en algu-
na otra parte que en nosotros…˜ no ha ocurrido nunca y nunca ocurrirá…˜ El nacimien-
to está en nosotros…˜ y no nosotros en él…˜ No estamos metidos en ningún frasco de
carne…˜ no estamos metidos en ninguna mente…˜ ni en ningún alma…˜ ni en ningún
espíritu…˜ No estamos en el poder de ningún Dios…˜ De manera que conoceos como
sois…˜ y reposad en vuestra propia quietud…˜
La imaginación nos juega la mala pasada de hacernos creer que no saber que noso-
tros somos es idéntico a no ser…˜ Ello puede hacerlo debido a que nosotros confundi-
mos el artefacto nacimiento con nuestro ser nosotros lo que nosotros somos…˜ Esta
imaginación alarmante sólo puede disolverse viendo que efectivamente el nacimiento
está en nosotros…˜ y no nosotros en él…˜ Viendo que el nacimiento está en nosotros…˜
nosotros no podemos no vernos a nosotros mismos conteniendo todo…˜ al tiempo que
nos vemos igualmente no contenidos por nada…˜ Nuestro SER lo que nosotros somos
cubre entonces su verdadera envergadura…˜ y entonces sabemos por nosotros mismos
que jamás ha habido un tiempo en que nosotros no hayamos sido…˜ que jamás ha habi-
do un solo nacimiento que no haya tenido lugar en nosotros…˜

89
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

206
____________

Todos tenemos la respuesta a la pregunta “¿quién era…˜ quién era con nosotros…˜
quién era con nosotros cuando absolutamente nada…˜ nada otro que nosotros mismos
era?”…˜ Todos tenemos la respuesta a esta pregunta…˜ y tenemos esta respuesta Aho-
ra…˜ ¿Por qué es ello así?…˜ Ello es así…˜ porque el estado…˜ el estado sin nacimien-
to y sin muerte…˜ el estado que Es siempre nuestra quietud y nuestro reposo…˜ jamás
cesa de ser lo que es…˜ El nacimiento…˜ lo que nosotros llamamos el nacimiento…˜ es
este mismo estado que es nuestra quietud y nuestro reposo…˜ con este conocimiento y
consciencia completamente Ahora…˜ que nosotros tenemos de ser-lo…˜
De manera que jamás ha habido un tiempo antes del principio en que nosotros no
hayamos sido lo que nosotros no podemos cesar de ser jamás…˜ Sólo ha habido ese
tiempo misterioso…˜ sin medida…˜ en que esta consciencia de ser nosotros lo que no-
sotros somos…˜ no era…˜ ¿Por qué es ello así?…˜ Ello es así…˜ porque no hay otro
tiempo que el tiempo de este conocimiento y consciencia de ser…˜ En cuanto sobrevie-
ne la respuesta que es nuestro verdadero estado…˜ el tiempo…˜ con su comienzo y su
fin…˜ se resuelve en este Ahora de nuestra submersión completa en lo que nosotros so-
mos…˜ ¿Y qué es lo que nosotros somos?…˜ Un Océano de Quietud…˜ un Océano de
Reposo…˜ sin orillas…˜ de donde jamás hemos salido…˜ y a donde…˜ por consiguien-
te…˜ jamás retornamos…˜
Nuestra salida aparente de nosotros mismos es sólo verbal…˜ Son las palabras las
que nos han engañado…˜ y por consiguiente…˜ son las palabras las que tienen que di-
solver el engaño…˜
El estado Eterno es el Estado Eterno…˜ Jamás salimos de Él ni jamás volvemos a
Él…˜
Es sólo para explicar nuestro aparente nacimiento por lo que se habla de una
salida…˜ Pero si hubiéramos salido realmente…˜ ¿cómo…˜ cómo habríamos salido de
lo que somos?…˜ ¿cómo sale uno de lo que uno es?…˜ ¿qué habría salido…˜ y qué ha-
bría quedado?…˜ De nuestro ser nosotros lo que nosotros somos…˜ ¿qué habría
salido…˜ y qué habría quedado?…˜ ¿Y cómo encontraríamos el camino de regreso?…˜
¿cómo reconocernos a nosotros mismos…˜ como nosotros éramos…˜ una vez salidos de
nosotros mismos?…˜ El Océano de nuestra propia Mismidad es la respuesta a la pre-
gunta “¿quién era…˜ quién era conmigo…˜ quién era conmigo cuando absolutamente
nada…˜ nada otro que mí mismo era?…˜
Permitid que el Océano de vuestra propia Mismidad os hable su lenguaje eterno…˜
Sin principio ni fin somos…˜ No ha habido nunca ningún nacimiento de nosotros…˜ De

90
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

manera que…˜ este estado de conocimiento y de consciencia…˜ es el Estado Eterno


mismo en este Ahora en que sabe que Él Es…˜ No aceptéis ser otro que lo que sois…˜
Si aceptáis ser otro que lo que sois…˜ vosotros mismos os separáis de la Quietud…˜ del
Reposo…˜ Entonces devendréis convencidos de que sois seres con los días contados…˜
y no podréis evitar la angustia…˜
La angustia se debe a que lo que aceptáis ser…˜ cuando aceptáis ser otro que lo que
sois…˜ es una identidad falsa…˜ Viendo su perecer…˜ os alarmáis…˜ Y vuestra propia
angustia y alarma os impide ver lo que sois…˜

91
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

207
____________

Lo que se llama el nacimiento es perfecto…˜ pero por sí mismo no es lo que noso-


tros somos…˜ El nacimiento…˜ para ser el nacimiento…˜ necesita el nosotros real don-
de tiene su acontecer…˜ De manera que…˜ aconteciendo en nosotros…˜ el nacimiento
nos revela…˜
Así pues…˜ de nosotros mismos a nosotros mismos…˜ el puente es el nacimiento…
˜ El nacimiento es la consideración…˜ es la contemplación…˜ y es el rapto…˜ ¿De
quién a quién conduce el nacimiento?…˜ De nosotros mismos a nosotros mismos…˜ Y
este conducirnos de nosotros mismos a nosotros mismos…˜ ¿cuándo tiene su cuando?…
˜ Exactamente Ahora…˜ en este instante en que escuchamos la respuesta a la
pregunta…˜ “¿Quién era…˜ quién era con nosotros?”…˜

92
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

208
____________

Nosotros lo llamamos nuestro cuerpo…˜ nosotros la llamamos nuestra mente…˜ no-


sotros lo llamamos nuestra alma…˜ nosotros lo llamamos nuestro espíritu…˜ Parece tan
evidente que efectivamente son nuestros…˜ ¿Pero dónde eran este cuerpo…˜ y esta
mente…˜ y este alma…˜ y este espíritu…˜ dónde eran con nosotros…˜ cuando absoluta-
mente nada…˜ nada otro que nosotros mismos era?…˜ ¿Cómo podemos ser nosotros…˜
lo que no era con nosotros…˜ cuando absolutamente nada…˜ nada otro que nosotros
mismos era?…˜ ¿Y qué es esto que éramos…˜ cuando ni el cuerpo…˜ ni la mente…˜ ni
el alma…˜ ni el espíritu…˜ eran con nosotros?…˜ ¿Qué es esto que somos cuando abso-
lutamente nada…˜ nada otro que nosotros mismos…˜ es con nosotros?…˜
Nuestro saber lo que nosotros somos es por nosotros mismos…˜ Nuestro ser noso-
tros lo que nosotros somos es por nosotros mismos sólo…˜ No se debe a la presencia a
nosotros del cuerpo…˜ no se debe a la presencia a nosotros de la mente…˜ no se debe a
la presencia a nosotros del alma…˜ no se debe a la presencia a nosotros del espíritu…˜
Nuestro ser nosotros lo que nosotros somos no se debe a la presencia a nosotros del con-
junto cuerpo-mente-alma-y-espíritu…˜ no se debe tampoco a la presencia a nosotros de
la ronda de los tres estados…˜ Nada de todo esto era con nosotros…˜ Sin embargo…˜
por nosotros mismos…˜ nosotros sí éramos…˜ Es nuestro ser el que llena de vida este
artefacto llamado nacimiento…˜ que…˜ en otro caso…˜ es completamente
inexistente…˜ A cambio…˜ nosotros…˜ que sin nacimiento no sabíamos que nosotros
somos…˜ con nacimiento estamos sabiendo exactamente este SER nosotros lo que no-
sotros somos…˜
El nacimiento…˜ por sí mismo…˜ no funciona…˜ Necesita de este ser nosotros lo
que nosotros somos que lo presencia y lo vivifica…˜ Lejos de ser sólo una ocasión para
la experiencia del mundo…˜ el nacimiento es preciosísimo como la ocasión de nuestro
venir nosotros a saber que nosotros somos…˜ Y más profundamente aún…˜ es precioso
como la ocasión y la oportunidad de vernos a nosotros mismos como nosotros somos
cuando el nacimiento no es…˜ A esto se llama descubrirse a uno mismo tal cual uno
es…˜
El nacimiento sólo es un motivo de frustración y de angustia cuando nosotros no ha-
cemos el uso correcto de él para contemplarnos y sumergirnos en nuestra propia natura-
leza eterna…˜ Pero si nosotros hacemos un uso correcto del nacimiento…˜ para con-
templarnos y sumergirnos en nuestra naturaleza eterna…˜ entonces…˜ el nacimiento es
nuestro mejor y más querido aliado…˜ como un caballo bueno que obedece y nos lleva
donde sabe que queremos ir…˜

93
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

Una vez allí…˜ una vez integralmente reconocido nuestro ser lo que nosotros so-
mos…˜ nosotros vemos por nosotros mismos cómo lo que somos llena completamente
este nacimiento…˜
Lo que estoy diciendo es muy misterioso…˜ Estoy diciendo que no hay en realidad
ningún nacimiento de nosotros…˜ El cuerpo…˜ la mente…˜ el alma…˜ el espíritu…˜ la
ronda de los tres estados…˜ todo lo que estas palabras nombran…˜ son sólo distinciones
verbales…˜ maneras de hablar…˜
Hay sólo lo que hay…˜ ¿Qué hay cuando el cuerpo no es?…˜ ¿qué hay cuando la
mente no es?…˜ ¿qué hay cuando el alma no es?…˜ ¿qué hay cuando el espíritu no
es?…˜ ¿qué hay cuando la ronda de los tres estados no es?…˜ Entonces hay lo que
hay…˜ ¿Sabemos reconocernos a nosotros mismos en Eso?…˜

94
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

209
____________

¿La suma total de cuántas vidas…˜ que ya han sido…˜ que están siendo…˜ y que se-
rán…˜ la suma total de cuántas vidas…˜ puede agotar la Vida?…˜ La respuesta a esta
pregunta es capital…˜ Nosotros sabemos por nosotros mismos la respuesta a esta pre-
gunta…˜ nosotros sabemos por nosotros mismos que ninguna suma…˜ grande o peque-
ña…˜ de la totalidad de la suma de las vidas ya vividas…˜ de las vidas que están siendo
vividas…˜ y de las vidas que serán vividas…˜ puede agotar nunca lo que con esta pre-
gunta se nos revela como la Vida…˜ ¿Por qué sabemos nosotros esta respuesta?…˜ ¿Por
qué sabemos nosotros que lo que se nos está revelando como la Vida…˜ no puede ser
nunca disminuido por la suma total de vidas vividas?…˜ ¿Por qué sabemos nosotros que
lo que se está revelando a nosotros como la Vida…˜ no puede ser acrecentado nunca por
la suma total de las vidas vividas?…˜
Consideremos y contemplemos nuestro propio conocimiento innato de lo que es la
verdadera Vida…˜ ¿Era con nosotros esta vida que decimos falsamente nuestra vida…˜
y que ha comenzado…˜ y que está pasando…˜ y que va a terminar?…˜ ¿En qué se pare-
ce esta vida que comienza y que acaba…˜ a la Vida que no comienza…˜ que no pasa…˜
y que no acaba?…˜
Este instante de conocimiento es reflexivo…˜ Con él…˜ como en un espejo…˜ la
Vida que no comienza…˜ que no pasa…˜ y que no acaba…˜ se conoce a Sí misma…˜ Y
su conocerse a Sí misma no nos excluye…˜ sino que este misterio tiene lugar exclusiva-
mente en nosotros…˜ ¿Por qué es ello así?…˜ Ello es así porque la Vida que no comien-
za…˜ que no pasa…˜ y que no acaba…˜ es lo que nosotros somos…˜
Nosotros no nos conocíamos como lo que somos realmente…˜ Y nuestro no cono-
cernos como lo que somos realmente es semejante a buscarnos a nosotros mismos…˜
Nuestro no conocernos a nosotros mismos como lo que somos realmente es semejante a
tener sed…˜ y angustia…˜ y ansiedad…˜ y zozobra…˜ No somos mortales…˜ y no que-
remos ser mortales…˜ Ante nuestra visión empavorecida se abre el abismo de cuando
nosotros ya no seamos…˜ y esta visión nos aterroriza y llena de inquietud…˜
Pero esta visión es sólo una fantasía…˜ No hay ninguna realidad que la avale…˜ No-
sotros sabemos que aunque hubiéramos vivido todas las vidas ya vividas…˜ más todas
las vidas que están siendo vividas…˜ más todas las vidas que todavía se vivirán…˜ y así
por siempre de los siempres…˜ nosotros sabemos que aunque éste fuera el caso…˜
nuestra angustia y tribulación ante la perspectiva del fin no acabarían…˜ ¿Por qué sabe-
mos nosotros esto?…˜ Ello es muy simple…˜ Lo sabemos porque la Verdad dentro de

95
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

nosotros mismos lo desmiente…˜ Nosotros no somos la vida que nace y pasa y muere…
˜ Nosotros somos la Vida que este pasar revela…˜
Nada puede agotarnos…˜ nada puede rebosarnos…˜ Nuestra Quietud y nuestro Re-
poso se encuentran en reconocernos a nosotros mismos…˜ Y para este reconocimiento
de nosotros mismos…˜ esta vida que nace y pasa y muere es suficiente…˜ No necesita-
mos ninguna otra…˜ No se trata de años…˜ Se trata de este instante…˜
La Vida real es el Océano que era cuando nada…˜ absolutamente nada otro que no-
sotros mismos…˜ era con nosotros…˜ Esta misma Vida real…˜ este mismo Océano que
no nace ni muere…˜ se revela Ahora como nosotros mismos…˜ Para ello es este naci-
miento…˜ Para que nos reconozcamos…˜ para que seamos la Quietud que somos…˜
para que veamos desaparecer completamente la angustia…˜ la inquietud…˜ y la zozo-
bra…˜
Es prodigioso que todos tengamos la misma respuesta a la pregunta capital…˜

96
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

210
____________

El comprehensor de su verdadera naturaleza real no tiene nacimiento…˜ Su naci-


miento es la comprehensión de su propio estado eterno…˜ Y es perfecto…˜ Para él ya
no hay más anhelo…˜ El ya no viene ni va…˜ Su vida es un Océano sin principio ni
fin…˜ un Océano que abre su Ojo para ver-Se a sí mismo…˜ Su Quietud es absoluta y
en su Quietud mana incesantemente la miel de su propio reconocimiento…˜ En esto
consiste el nacimiento del Comprehensor…˜ en su submersión comprehensiva y gozosa
en el Océano sereno de su propia Mismidad…˜ Siendo Uno es todos…˜ Siendo una úni-
ca Vida…˜ es todas las vidas…˜ las vidas ya vividas…˜ las vidas que se están
viviendo…˜ y las vidas que se vivirán…˜ Ninguna es para él una frontera…˜ En él coin-
ciden…˜ Ahora…˜ las manifestaciones innumerables de la Verdad a Sí misma…˜ Él es
omnisciente de todos los nacimientos…˜ pues todos los nacimientos son únicamente
esta comprehensión integral de su propio estado eterno…˜

97
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

211
____________

Preguntémonos cuántas vidas nacidas y mortales son necesarias para agotar la


Vida…˜ Nosotros tenemos la respuesta…˜ ¿Por qué?…˜ Porque la Vida que no comien-
za y que no acaba es nuestro estado real…˜ es el estado que ES…˜ cuando absolutamen-
te nada…˜ ni nacimiento ni muerte…˜ era con nosotros…˜
En esta Vida que no nace ni muere…˜ ahora…˜ en este preciso instante…˜ como un
espejo delante de nuestro verdadero Rostro…˜ este nacimiento…˜ que nace y que muere
a cada instante…˜ está reflejando la Vida que no nace ni muere…˜ Toda la operación
está teniendo lugar en nosotros…˜ y nosotros somos su único Presenciador…˜
La Upanisad dice esto mismo de la siguiente manera…˜ “La Vida Universal…˜ la
Vida que ninguna vida agota…˜ la Vida que no nace ni muere…˜ llena por completo
esta vida que nace y muere…˜ La Vida que no nace ni muere da la vida…˜ pero no da ni
al hacedor ni sus obras…˜ no da la agencia ni los actos”…˜
¿Cómo descubrimos nosotros que nosotros somos la Vida que no nace ni muere?…˜
Este auto-descubrimiento es la Quietud…˜ pues en quien no teme morir no queda nin-
guna inquietud…˜

98
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

212
____________

¿Quién era…˜ quién era conmigo…˜ quién era conmigo cuando nada…˜ nada otro
que mí mismo…˜ era?…˜ ¿Cuál es este estado…˜ al que…˜ como una flecha bien diri-
gida…˜ apunta esta pregunta?…˜
Debemos dejar que la pregunta penetre en nosotros…˜ debemos dejar que la pregun-
ta penetre y encuentre su blanco…˜ No debemos conformarnos con la respuesta mental
que todos presentimos…˜ La respuesta es el estado mismo…˜
Luego debe haber una consideración intensa de lo que la pregunta busca…˜ En reali-
dad…˜ nosotros debemos cesar de considerarnos a nosotros mismos como el artefacto
cuerpo-y-mente-y-alma-y-espíritu…˜ para sumergirnos completamente en la considera-
ción de la pregunta…˜ Y debemos entender que la verdadera comprensión no está hecha
de palabras…˜ sino de reconocimiento de nosotros mismos…˜ tales cuales somos…˜
Es una imposibilidad que nosotros seamos el nacimiento…˜ El nacimiento es un ar-
tefacto…˜ una herramienta…˜ Con su presencia a nosotros…˜ nosotros quedamos reve-
lados a nosotros mismos…˜ Este quedar revelados a nosotros mismos…˜ es lo único
que importa en el nacimiento…˜ Pero quedar revelados a nosotros mismos…˜ no signi-
fica nuestro comienzo…˜ Quedar revelados a nosotros mismos significa el comienzo de
nuestra revelación a nosotros mismos…˜ no significa el comienzo de nosotros
mismos…˜
Si la angustia y la inquietud y la zozobra nos aflige…˜ es únicamente porque no sa-
bemos quién somos…˜ Lo que nosotros somos no puede encerrarse en el nacimiento…˜
Es el nacimiento el que funciona en nuestro seno…˜ y no es otro que consideración…˜
contemplación…˜ y rapto…˜ El nacimiento está todo el día considerando…˜ el naci-
miento está todo el día tratando de hacer inteligible y comprensible para nosotros lo que
nos ha ocurrido…˜ Cada uno busca la respuesta a la pregunta…˜ “¿Para qué es el naci-
miento?”…˜ Esta pregunta…˜ incluso si uno no se la pregunta…˜ está presente en todos
como el motor invisible de su actividad…˜ Esta pregunta mueve la consideración de to-
dos sin excepción…˜ “¿Para qué es el nacimiento?”…˜ Y según es nuestra respuesta…˜
así es nuestra actividad…˜ Aunque no nos hayamos hecho esta pregunta…˜ la respuesta
está implícita en nuestra actividad…˜ ¿Cuál es la respuesta…˜ a la pregunta de “¿para
qué es el nacimiento?”…˜ que se da a sí mismo quien cree haber encontrado en el naci-
miento mismo la respuesta?…˜ Si uno se ha respondido…˜ aunque no lo sepa…˜ que el
nacimiento es para vivir la vida…˜ su actividad vendrá marcada por metas de logro de
complacencia…˜ Lo que se llama el mundo…˜ que es el estado de vigilia…˜ será su
campo de actividad…˜ y su consideración consistirá en la visualización y persecución

99
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

de sus fines tangibles…˜ Como veis…˜ ni siquiera en este caso está ausente la conside-
ración…˜ Cuando uno se responde…˜ aunque no lo sepa conscientemente…˜ que el na-
cimiento es para vivir la vida…˜ como un nacido y mortal…˜ que desea y quiere objetos
en un mundo de objetos…˜ su consideración se centra todo el día en la visualización y
persecución de esos objetos…˜ Esos objetos son siempre objetos de sensación…˜ y una
vida así…˜ no es una vida de comprensión…˜ sino una vida de búsqueda de
sensación…˜
Por tanto…˜ quien ignora que se ha dado a sí mismo la respuesta de que el naci-
miento es su nacimiento…˜ y de que lo que llama su vida es para vivirla…˜ aún sin sa-
berlo conscientemente…˜ se ha dado a sí mismo la respuesta a la pregunta capital
“¿para qué es el nacimiento?”…˜ Su respuesta es su actividad…˜ su respuesta está en su
actividad…˜
Siendo una respuesta falsa…˜ no puede no tener consecuencias falsas…˜ Mirad bien
y comprended…˜: no hay nada más mentiroso que el llanto del que se ha respondido a
sí mismo que la vida es para vivirla…˜ cuando vislumbra que ninguna de sus activida-
des de vivir su vida ha sido suficiente para llevarle hasta la Paz…˜ A este llanto es al
que Cristo alude cuando habla de las tinieblas exteriores…˜ donde todo es llanto y crujir
de dientes…˜

100
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

213
____________

Mirad…˜ yo no tengo nada que vosotros no tengáis…˜ ni tampoco me falta nada que
a vosotros os falte…˜ Toda esta prodigiosa empresa de obtener la certeza absoluta de
quién es uno mismo…˜ tiene lugar sólo en uno mismo…˜ Lo que nosotros somos es
siempre…˜ Descubrir que lo que nosotros somos es siempre…˜ descubrirlo…˜ y
verlo…˜ y saberlo por nosotros mismos…˜ con certeza absoluta…˜ esto es en sí mismo
nuestro mayor anhelo…˜ Y una vez que este anhelo encuentra su propia Verdad…˜ esta
Verdad misma…˜ que es la visión de nuestro verdadero anhelo…˜ se resuelve en la de-
saparición instantánea de nuestra angustia…˜ y en nuestra entrada serena en la
Quietud…˜ No puede describirse en palabras lo que es saber y ver por uno mismo que
lo que uno es…˜ es siempre…˜ Nuestra visión no alcanza a abarcar nuestra propia en-
vergadura…˜ A dondequiera que volvamos nuestra visión…˜ lo que vemos es nosotros
mismos…˜ Y esto…˜ sin fronteras de edades ni de ciclos…˜ sin fronteras de tiempos ni
de lugares…˜
El nuestro es el estado eterno…˜ Cuando comprendemos esto…˜ nuestra quietud su-
fre una expansión cuyos límites nadie los ha conocido nunca…˜ De manera que…˜ a
dondequiera que nos volvamos…˜ es nuestra mismidad y serenidad y quietud lo que en-
contramos…˜
¿Cómo ha ocurrido entonces el nacimiento?…˜ ¿Y qué es realmente el
nacimiento?…˜
En el seno de este estado eterno…˜ Ahora…˜ en este instante…˜ está luciendo esta
luz de la consciencia…˜ El nacimiento no es otra cosa que este anhelo de saber quién
somos…˜ Y este anhelo de saber quién somos es la atracción irresistible de nuestro pro-
pio estado eterno…˜ Esta atracción mueve a este anhelo…˜ y este anhelo se manifiesta
como la consideración…˜ la contemplación y el rapto…˜ ¿No estamos nosotros pregun-
tándonos siempre quién somos?…˜ ¿no somos nosotros presa siempre de este anhelo
que como un fuego nos consume día tras día?…˜
Por simple y sorprendente que parezca…˜ el nacimiento es sólo el deseo que nuestro
verdadero estado tiene de encontrarse a sí mismo…˜ de verse a sí mismo…˜ de saberse
a sí mismo el estado eterno…˜ No hay nada más…˜ no hay ningún otro nacimiento que
este anhelo irresistible de sumergirnos en la Quietud que es siempre…˜
Por ello…˜ todos nosotros somos auto-suficientes…˜ Somos auto-suficientes porque
en medio de la Quietud sin principio ni fin de nuestro verdadero estado…˜ está luciendo
esta luz del nacimiento que la Quietud quiere que luzca para saborearse a sí misma…˜

101
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

Nosotros no tenemos que ir a buscar nuestro verdadero estado a ninguna parte…˜


Nuestro verdadero estado es el motor de nuestro anhelo…˜ Y tampoco tenemos que ir a
buscar a ninguna parte esta luz encendida del nacimiento…˜ Luego no nos falta nada…˜
El nacimiento se eleva como una columna de consideración…˜ y de
contemplación…˜ y de rapto…˜ en medio del Océano de nuestra Quietud…˜ Considerar
es hacer las preguntas correctas…˜ considerar es preguntar por el nosotros mismos
real…˜ Contemplar es ver la Respuesta…˜ La respuesta verdadera es siempre nuestro
verdadero estado…˜ Y a la visión de nuestro verdadero estado…˜ se produce nuestra ex-
pansión inmediata que llena absolutamente la envergadura de nuestra Realidad…˜ En-
tonces comprendemos que somos Eso…˜
Entonces comprendemos que este comprender que somos Eso…˜ es toda la razón de
ser de lo que se llama el nacimiento…˜ El nacimiento es sólo preguntas…˜ Bienaventu-
rados los que dan con la pregunta que acierta…˜

102
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

214
____________

¿Para qué es entonces el nacimiento?…˜ En la pregunta misma ya está implícita la


proposición de que nosotros no somos el nacimiento…˜ También está implícita la pro-
posición de que el nacimiento es para algo…˜ exactamente como una pregunta es una
pregunta porque hay una respuesta…˜
Lo que nuestro nacimiento nos está revelando…˜ nos toca a nosotros preguntarlo y
averiguarlo…˜ Por ello os he hecho la proposición de que el nacimiento es sólo la caja
donde se produce la consideración incesante de nosotros mismos…˜ ¿Para qué es el na-
cimiento?…˜ Es para que sepamos Quién somos…˜ y para que sabiéndolo con certeza
absoluta…˜ la Quietud que somos se reencuentre a sí misma como ES…˜ Toda una vida
sumergida en este reencuentro…˜ no comienza ni acaba…˜ El nacimiento es así precio-
so para conocernos a nosotros mismos sin nacimiento…˜ tal como somos…˜ sin princi-
pio ni fin…˜ siempre Ahora…˜

103
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

215
____________

De manera que…˜ no faltándoos nada…˜ olvidaos por completo de vuestra falsa


aceptación de vosotros mismos como un cuerpo-y-mente-y-alma-y-espíritu…˜ El cuer-
po-y-la-mente-y-el-alma-y-el-espíritu es sólo como la armazón de un órgano donde ha-
bita el anhelo…˜ Y el anhelo se hace la pregunta…˜ y la pregunta debe acertar la res-
puesta…˜ De manera que el nacimiento es sólo esta pregunta que no nos falta…˜ reso-
nando dentro de esta organibilidad que tampoco nos falta…˜ Y todo confluye a que la
Respuesta se pronuncie en nuestro propio corazón…˜ De manera que…˜ aunque hubié-
ramos sido el único nacimiento en el seno de nuestro Estado eterno…˜ hubiera sido su-
ficiente…˜ pues todo está en nosotros…˜ El estado eterno es eternamente el estado eter-
no…˜ Pero debido a su extremada perfección…˜ también quiere saberlo…˜ Y para co-
nocerse a sí mismo como el estado eterno…˜ para ello…˜ en su propio seno…˜ ha dis-
puesto este anhelo que nosotros sentimos como propio…˜ y que llamamos falsamente el
nacimiento de nosotros…˜

104
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

216
____________

Toda nuestra atención debe estar enfocada a ese estado nuestro que era cuando abso-
lutamente nada otro que nosotros mismos era…˜ Tenemos que vernos a nosotros mis-
mos cuando el nacimiento no era…˜ Es una paradoja que para vernos a nosotros mis-
mos cuando el nacimiento no era…˜ tengamos que hacer uso de esta visión que sólo
está con nosotros Ahora que el nacimiento está con nosotros…˜ Pero es así…˜ toda
nuestra Quietud está únicamente en que nosotros nos veamos ahora sin nacimiento…˜
toda nuestra Paz está únicamente en que nosotros nos comprendamos a nosotros mis-
mos sin nacimiento…˜ en que nos comprendamos a nosotros mismos SER lo que ES
siempre…˜ haya nacimiento o no…˜
Comprendernos a nosotros mismos sin nacimiento…˜ es Ahora…˜ Esta compren-
sión hace cesar instantáneamente toda obsesión de estar pasando…˜ Nosotros ya no nos
vemos a nosotros mismos inmersos en ningún proceso…˜ Cesamos de vernos viniendo
de alguna parte y yendo a alguna parte…˜ cesamos de vernos como algo que crece…˜
cesamos de vernos como algo que anhela…˜ Desaparece nuestra inquietud…˜ desapare-
ce nuestra zozobra…˜ nosotros ya no nos vemos a nosotros mismos queriendo otra cosa
que lo que nosotros somos…˜ De manera que desaparece todo esfuerzo por
cambiarnos…˜ Tal como somos…˜ tal como nos vemos SER…˜ en ello está nuestro
contento y nuestro alivio…˜
La visión y comprehensión de nosotros mismos…˜ como somos realmente sin naci-
miento…˜ llega a ser tan absolutamente clara…˜ que ya no podemos aceptar ninguna
proposición que lleve implícita la aceptación de que nosotros somos nacidos y
mortales…˜
Cuando escuchamos la proposición de que la visión de nuestro verdadero estado real
es algo que se logra…˜ algo que se obtiene poco a poco…˜ la totalidad del estado real
responde en nuestro corazón que esta es una proposición falsa…˜ Ninguno de nosotros
hemos hecho jamás nada para ser lo que nosotros somos…˜ Nuestro verdadero estado es
espontáneo…˜ real…˜ sin esfuerzo…˜ completo…˜ absoluto…˜ y sin nacimiento…˜
Esta comprensión implica la disolución completa y absoluta de lo que se llama el
ego…˜ El “ego” es sólo reclamación de los actos…˜ No puede haber ningún “ego” don-
de no hay nacimiento…˜ no puede haber ningún “ego” donde nada crece ni mengua…˜
y donde nosotros no podemos decir de nosotros mismos “yo he hecho esto…˜ mi com-
prensión se debe a mis muchas horas de meditación…˜ este estado mío que comprendo
se debe a mi esfuerzo”…˜ Donde no hay obras ni fruto de las obras que nosotros no po-

105
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

damos atribuirnos a nosotros mismos…˜ lo que se llama el “ego” no puede sobrevivir…


˜
De ahí la pregunta…˜ “¿Cómo hago yo que yo soy?…˜ ¿cómo hago yo?…˜ ¿en qué
consiste mi hacer yo…˜ que yo soy lo que yo soy?”…˜ Esta pregunta nos lleva directa-
mente al punto del descubrimiento de que “no hay ningún hacer” que un “ego” en noso-
tros pueda atribuirse…˜ Y nosotros debemos permanecer impregnados de nuestra propia
respuesta a esta pregunta…˜
Nosotros no podemos hacer absolutamente nada para hacernos ser lo que nosotros
ya somos…˜ Nuestro único hacer…˜ consiste en descubrir quién somos…˜ Y para
ello…˜ tanto las proposiciones sobre lo que somos…˜ como las preguntas sobre nuestro
verdadero estado…˜ deben emanar de nuestro verdadero estado mismo…˜ Ninguna pro-
posición hecha a nosotros …˜ por nosotros mismos o por aparentemente otro…˜ que
emane de la creencia de que somos creados…˜ nacidos…˜ y mortales…˜ logrará nunca
hacernos ver quién somos…˜

106
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

217
____________

Mirad…˜ el Maestro Eckhart dice…˜ “Toda la Escritura clama por que nos libere-
mos de este sí mismo mortal”…˜ Pero aunque el Maestro Eckhart es un sabio
profundo…˜ encuentro que su proposición no se ajusta completamente a la verdad…˜
Hay efectivamente en nosotros un clamor por la liberación…˜ Pero es el clamor del
nacimiento suplicándonos a nosotros que lo liberemos a él de su mortalidad…˜ La escri-
tura hay que leerla…˜ En cambio…˜ el clamor del nacimiento…˜ su voz ahogada…˜ es
esta angustia y ansiedad y zozobra e inquietud…˜ Con esta voz…˜ con este clamor…˜
el nacimiento nos está suplicando que comprendamos Quién somos…˜ nos está supli-
cando que no lo asfixiemos más…˜ ¿Comprendéis?…˜ El nacimiento es el prisionero de
nuestra ignorancia de Quién somos…˜ Siendo nuestra Vía de reencuentro de nuestra
propia Mismidad…˜ cuando nosotros no lo usamos para comprender Quién somos…˜ se
convierte en una llaga abierta cuyo clamor retumba como ansiedad y zozobra por todo
nuestro ser…˜ Este clamor nos suplica que veamos y comprendamos…˜

107
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

218
____________

No hay que ir a las escrituras para reconocer el clamor de nuestra verdadera natura-
leza real por reconocerse a sí misma como lo único que era cuando absolutamente
nada…˜ nada otro que nosotros mismos…˜ era…˜ Ese clamor está clamando vivo ahora
en lo que llamamos nuestro nacimiento…˜ Nuestro presunto nacimiento es sólo la ma-
nera que tenemos de saber quién somos…˜ nada más…˜ Y en nuestro saber Quién so-
mos…˜ instantáneamente…˜ de una vez por todas…˜ y para siempre…˜ está el fin de
toda nuestra angustia…˜ de toda nuestra zozobra…˜ de toda nuestra inquietud…˜ de
toda nuestra separación y partición de nosotros mismos…˜ Y el instrumento de este sa-
ber Quién somos…˜ es precisamente este nacimiento que no estaba con nosotros…˜
cuando absolutamente nada…˜ nada otro que nosotros mismos…˜ era con nosotros…˜
De manera que este nacimiento mismo es el instrumento y el vehículo hacia nuestro
propio encuentro…˜ Por ello es precioso…˜ sumamente precioso…˜ y sumamente ade-
cuado al fin que es su perfección más alta…˜
El nacimiento no estaba con nosotros…˜ Nosotros lo sabemos…˜ Nosotros…˜ que
sabemos que el nacimiento no estaba con nosotros…˜ no podemos ser nunca el naci-
miento…˜ Nosotros somos…˜ simplemente…˜ lo que era cuando el nacimiento no
era…˜ Nosotros somos…˜ simplemente…˜ lo que sabe ahora que el nacimiento no
era…˜
El nacimiento es sólo un clamor…˜ Clama incesantemente que nosotros no somos
él…˜ Cuando nosotros no lo escuchamos…˜ y queremos sacar del nacimiento el con-
suelo para nuestra soledad imaginaria…˜ entonces el clamor del nacimiento se reviste
de angustia…˜ de zozobra…˜ de inquietud…˜ y de sufrimiento…˜ Y esta angustia…˜ y
zozobra…˜ e inquietud…˜ y sufrimiento…˜ nos dicen incesantemente que ellas no eran
con nosotros…˜ pero nosotros no escuchamos…˜ Esta angustia…˜ y zozobra…˜ e in-
quietud…˜ y sufrimiento…˜ es la manera que tiene el nacimiento de clamar que él no es
nosotros…˜ Nos está diciendo que todo en él está funcionando equivocadamente…˜ nos
está diciendo que él no puede darnos lo que le estamos exigiendo…˜ Lo estamos forzan-
do…˜ lo estamos obligando…˜ lo estamos estrujando y escurriendo…˜ y el nacimiento
está sufriendo el efecto de nuestro desorden…˜ Le hacemos de todo…˜ excepto usarle
propiamente para el fin al que está destinado…˜ El nacimiento es sólo el soporte vivo de
nuestra consideración de nosotros mismos…˜ de nuestra contemplación de nosotros
mismos…˜ y de nuestra submersión absoluta en nosotros mismos…˜ El nacimiento no
es la aparición de una cosa…˜ no es la aparición de este cuerpo-y-mente-y-alma-y-espí-
ritu-y-universo…˜ El nacimiento es mucho más sutil…˜ y también mucho más simple…

108
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

˜ El nacimiento es sólo como despertar y comenzar a saber que nosotros somos…˜ es


como abrir los ojos y ver…˜ o como abrir los oídos y escuchar…˜ El nacimiento no tie-
ne existencia si no tiene vida…˜ y la vida del nacimiento es este conocedor…˜
nosotros…˜ que se sabe a sí mismo SER con él…˜ Sin este conocedor…˜ nosotros…˜
que se está sabiendo a sí mismo SER con el nacimiento…˜ no hay ningún nacimiento…
˜ ni este nacimiento ni ninguno…˜
El nacimiento no es entonces otra cosa que este estar sintiendo y sabiendo que noso-
tros somos…˜ De ahí se sigue naturalmente la pregunta: “¿Quién somos?”…˜ ¿quién
somos nosotros que así nos sentimos ser con este nacimiento…˜ que no estaba con no-
sotros?”…˜ Esta pregunta es el comienzo de la consideración de nosotros mismos…˜ y
sólo podemos hacérnosla debido a que el nacimiento está aquí…˜ Por ello es precioso el
nacimiento…˜ no porque es la fuente de nuestro gozo de los sentidos…˜ sino porque no
estaba y ahora está…˜ Este “no estaba y ahora está”…˜ nos toca suficientemente de cer-
ca como para hacer surgir por sí mismo la consideración de nosotros mimos…˜ Y fijaos
que digo la consideración de “nosotros mismos” y no la consideración del
“nacimiento”…˜

109
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

219
____________

Los efectos de nuestras exigencias de felicidad…˜ de gozo…˜ y de placer…˜ a nues-


tro propio nacimiento son devastadores…˜ Los otros son también nuestro nacimiento…˜
Y no viéndonos a nosotros mismos con nuestro propio nacimiento…˜ somos incapaces
de ver la identidad que se ve a sí misma en todos los nacimientos como nuestra propia
verdadera naturaleza real…˜ Esta devastación del nacimiento que no se usa para su ver-
dadero fin…˜ clama dentro de nosotros como aislamiento…˜ y angustia…˜ y zozobra…
˜ e inquietud…˜ Y finalmente…˜ clama como un terror pánico de lo que se llama la
muerte…˜
No hay ningunos otros otro que nosotros mismos…˜ Los otros son también este na-
cimiento que nos revela…˜ Consideremos la pregunta: “¿Quién somos nosotros…˜ no-
sotros en Quien ningún nacimiento era?”…˜ Consideremos esta pregunta…˜ usemos el
nacimiento para preguntarnos a nosotros mismos por nosotros mismos…˜ Sólo así el
nacimiento se revelará a nosotros como lo que es realmente…˜ a saber…˜ el preciso y
precioso instrumento de nuestra Paz…˜

110
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

220
____________

Veamos minuciosamente nuestro estado cuando el nacimiento no era…˜ ¿Éramos o


no éramos nosotros…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ No tengamos miedo a la res-
puesta…˜ no tengamos miedo al estado en que esta sensación de ser nosotros no era…˜
La respuesta a esta pregunta…˜ la respuesta a la pregunta…˜ “¿Era yo o no era…˜
cuando el nacimiento no era?”…˜ está en nosotros…˜ Únicamente nosotros…˜ cada uno
por sí mismo sólo…˜ encuentra en sí mismo la respuesta a esta pregunta…˜ No hay dos
respuestas…˜ y la respuesta no admite la duda…˜ Sobreviene integralmente en nosotros
mismos…˜ como el estado mismo que era cuando el nacimiento no era…˜ A partir de
ese momento…˜ a partir del momento precioso en que encontramos por nosotros mis-
mos la respuesta a esta pregunta…˜ a partir del instante mismo…˜ que es este instante
mismo…˜ que es siempre este instante mismo…˜ en que vemos que nosotros sí
éramos…˜ sí somos…˜ cuando el nacimiento no era…˜ cuando el nacimiento no es…˜ a
partir de este instante…˜ todo lo que nos asfixiaba como dudas sobre nosotros
mismos…˜ sobre nuestro verdadero ser…˜ se convierte incesantemente en la prueba de
la realidad de lo que vemos que nosotros somos…˜
¿Había angustia cuando el nacimiento no era?…˜ ¿No nos está enseñando
entonces…˜ la presencia misma de la angustia…˜ este estado prodigiosamente Real…˜
en que la angustia no era?…˜ Sí…˜ así es…˜ la presencia de la angustia misma…˜ nos
está revelando nuestro verdadero estado Real…˜ en que la angustia no era…˜ ¿No éra-
mos nosotros cuando la angustia no era?…˜ ¿Quién de nosotros no tiene por sí mismo la
respuesta a esta pregunta?…˜ ¿Por qué…˜ entonces…˜ no pasamos toda nuestra con-
fianza desde la duda a la verificación?…˜ Todo el secreto de nuestra verificación de no-
sotros mismos consiste únicamente en que hagamos este trasvase de nuestra confianza
desde la duda a la verificación de lo que somos…˜ Si nosotros mismos dudamos de
nuestras propias respuestas…˜ venidas de nuestro propio ser real…˜ ¿quién logrará en-
tonces nuestra confianza?…˜
Yo no os digo Quién sois…˜ Yo os pregunto por vuestro verdadero Ser Real…˜ y
sois vosotros mismos…˜ el Ser Real…˜ Quien responde…˜ ¿Por qué…˜ entonces…˜ no
dais vuestra credibilidad absoluta a lo que estáis viendo que vosotros sois…˜
Si…˜ ciertamente…˜ nosotros somos…˜ siempre…˜ eternamente…˜ Nuestro saber
que esto es verdadero es tan intenso que basta hacer una pregunta…˜ para que el Mar de
nuestra propia Mismidad responda con su integralidad atemporal resonando en la totali-
dad de nuestro ser…˜

111
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

“¿Era el nacimiento o no era el nacimiento con nosotros…˜ cuando nada…˜ absolu-


tamente nada otro que nosotros mismos era?…˜
¿Era esta angustia…˜ era esta inquietud…˜ era esta zozobra…˜ era esta sed de ser…˜
eran estas preguntas ardientes con nosotros…˜ cuando nada…˜ absolutamente nada otro
que nosotros mismos era?…˜
¿No queda completamente revelada a nosotros mismos nuestra verdadera
naturaleza…˜ con estas simples preguntas?…˜ ¿Y qué veis que erais…˜ cuando el naci-
miento no era?…˜ ¿No es el nacimiento mismo el medio de preguntaros a vosotros mis-
mos por ese cuando…˜ en que el nacimiento mismo no era?…˜ ¿No se convierte así el
nacimiento mismo en el medio y la prueba irrefutable de que nosotros somos cuando el
nacimiento no es?…˜ ¿No se convierte así el nacimiento mismo en el medio y la prueba
irrefutable de que nosotros somos…˜ aunque no somos el nacimiento?…˜
¿Era el nacimiento con nosotros?…˜

112
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

221
____________

¿Cuántos nacimientos como éste nos son necesarios a cada uno de nosotros para lle-
nar Eso donde el nacimiento no es?…˜ ¿No estamos viendo Ahora mismo Eso?…˜ Si no
lo estamos viendo…˜ decidme entonces…˜ ¿cómo sabemos nosotros la respuesta?…˜
¿Y cuál es nuestra respuesta?…˜ ¿cuál es nuestra respuesta a la pregunta…˜ “¿cuántos
nacimientos como este nacimiento mío…˜ me son necesarios a mí…˜ para llenar…˜ y
ocupar…˜ y ser completamente…˜ esto que yo veo que yo soy…˜ donde el
nacimiento…˜ este nacimiento mío…˜ no es?”…˜ ¿cuál es nuestra respuesta a esta pre-
gunta?…˜ ¿Por qué sabemos nosotros la respuesta?…˜ ¿es necesario que yo os diga por
qué sabemos nosotros la respuesta?…˜ ¿es necesario que yo os diga por qué vemos no-
sotros la respuesta?…˜
Todas las pruebas de nuestra presunta mortalidad…˜ devienen las pruebas de nuestra
inmortalidad absoluta…˜ El nacimiento es un taller perfectamente pertrechado de todas
las pruebas de nuestra inmortalidad absoluta…˜ Nada de lo que parece probar que noso-
tros somos nacidos…˜ estaba con nosotros cuando el nacimiento no era…˜
En vez de tratar de desapegarnos de esto o de aquello…˜ ¿por qué no nos pregunta-
mos incesantemente por cuando el apego no era?…˜ Nadie nos obliga a que creamos
que somos nacidos y mortales…˜ Es sólo nuestra ceguera y nuestra indiferencia hacia
nuestro verdadero estado lo que constituye la raíz de todo el sufrimiento…˜

113
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

222
____________

Presenciemos cuando el nacimiento no era…˜ presenciemos cuando el nacimiento


no estaba con nosotros…˜ presenciemos cuando este nacimiento que hemos aceptado
como si fuera nosotros…˜ no era…˜ presenciemos cuando este nacimiento que hemos
aceptado como si fuera nosotros…˜ no estaba con nosotros…˜
Al presenciarnos así…˜ al presenciarnos cuando este nacimiento no estaba con noso-
tros…˜ necesariamente tenemos que hacer uso de todo lo que el nacimiento
representa…˜ para vernos a nosotros mismos…˜ para encontrarnos a nosotros
mismos…˜ absolutamente libres de ello…˜ absolutamente limpios de ello…˜ Esto sólo
lo podemos hacer ahora…˜ en este ahora en que el nacimiento es…˜ Y para ello…˜ el
nacimiento…˜ y todo lo que el nacimiento representa…˜ debe estar presente…˜ Debe
estar presente…˜ para que viendo todo lo que el nacimiento es…˜ sepamos exactamen-
te…˜ minuciosamente…˜ en nosotros mismos…˜ y por nosotros mismos…˜ todo lo que
no estaba con nosotros cuando el nacimiento no era…˜ De manera que este instante es
para nosotros precioso…˜ porque con la concurrencia y oficio del nacimiento…˜ pode-
mos conocer exactamente los dos estados…˜ a saber…˜ nuestro estado cuando el naci-
miento no era…˜ y nuestro estado cuando el nacimiento es…˜ El nacimiento es sólo
para eso…˜ para que nos conozcamos a nosotros mismos tal cual somos…˜ igualmente
nosotros mismos…˜ tanto cuando el nacimiento no era…˜ como ahora que el nacimien-
to es…˜
Cuando el nacimiento no era…˜ lo que nosotros somos cuando el nacimiento no
era…˜ debemos descubrirlo por nosotros mismos ahora que el nacimiento es…˜ Ello es
igual que esta habitación…˜ lo que esta habitación era cuando los muebles no estaban
aquí…˜ tenemos que descubrirlo ahora que los muebles están…˜ Por así decir…˜ los
muebles revelan con su presencia la capacidad vacía que era esta habitación antes de
que los muebles fueran…˜ Igualmente con nuestro estado Real…˜: el nacimiento…˜ que
es como su mueblario…˜ está revelando incesantemente la Mismidad serena que es an-
tes de que el nacimiento nos revele…˜
¿Y cuál es ese mueblario que nos revela…˜ precisamente ahora…˜ y siempre
ahora?…˜ Nosotros no podemos sentirnos bien sin saber Quién somos…˜ Para que la
Quietud y la Serenidad que es nuestro verdadero estado quede completamente a descu-
bierto en nuestro corazón…˜ tenemos que vernos a nosotros mismos cuando el naci-
miento no era…˜
Preguntémonos a nosotros mismos…˜ sepamos siempre que sólo la respuesta que
brote de nuestro verdadero estado nos dará verdadera Paz…˜ Preguntémonos a nosotros

114
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

mismos…˜ “¿Cuánta inquietud…˜ cuánta zozobra…˜ cuánto sufrimiento había con no-
sotros …˜ cuando el nacimiento no era?”…˜ ¿Acaso no hay una respuesta inmediata?…
˜ ¿acaso no sabemos instantáneamente por nosotros mismos…˜ la respuesta?…˜ ¡Cuida-
do! no saquéis conclusiones…˜ no os digáis tan deprisa que entonces…˜ cuando el naci-
miento no era…˜ vosotros tampoco erais…˜ No es verdad que nosotros no fuéramos
cuando el nacimiento no era…˜ De hecho…˜ que nosotros tengamos la respuesta a la
pregunta…˜: “¿cuánta inquietud…˜ cuánta zozobra…˜ cuánto sufrimiento eran con no-
sotros…˜ cuando el nacimiento no era?”…˜ y que tengamos esta respuesta inmediata-
mente ahora…˜ prueba que el estado que era cuando el nacimiento no era…˜ es este
mismo estado que está viéndose a sí mismo ahora…˜ exactamente como era…˜ cuando
el nacimiento no era…˜
El nacimiento no nos da nada ni nos quita nada…˜ No nos da Quietud ni nos la qui-
ta…˜ no nos da Paz ni nos la quita…˜ no nos hace ser lo que nosotros somos ni otro que
el que nosotros somos…˜
Ahora bien…˜ cuando nosotros no sabemos Quién somos…˜ tomando los muebles
por la casa…˜ pedimos a los muebles que nos den la seguridad que sólo da la casa…˜ Es
decir…˜ cuando nosotros no sabemos Quién somos…˜ tomando al nacimiento por el
nosotros real…˜ le suplicamos que no pase…˜ que no envejezca…˜ que no sufra…˜ que
no se inquiete…˜ que no muera…˜ ¿Es esto posible?…˜ ¿Para qué sirven unos muebles
sin una casa?…˜
El sufrimiento mismo…˜ con ser el sufrimiento…˜ es un instrumento de visión de
nosotros mismos fidelísimo…˜ Basta preguntarse a uno mismo por el estado verdadera-
mente nosotros mismos…˜ en que el sufrimiento no era…˜

115
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

223
____________

¿Cuántos éramos nosotros…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ ¿A qué nombre aten-


díamos…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ ¿Dónde se nos podía encontrar…˜ cuando
el nacimiento no era?…˜ Profundizad bien en la respuesta…˜ ella es vuestra respuesta…
˜ Es el vosotros real el que responde…˜ ¿No es instantánea la respuesta?…˜ ¿Admite al-
guna duda vuestra respuesta de vosotros mismos a vosotros mismos?…˜ ¿Por qué en-
tonces…˜ albergáis todavía la más mínima duda sobre la Realidad Absoluta de vuestro
verdadero estado eterno?…˜
¿A qué nombre respondíamos nosotros…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ ¿Com-
prendéis la importancia del nacimiento?…˜ ¿Comprendéis su perfección como servidor
de vuestro propio encuentro?…˜
Es ahora que el nacimiento es…˜ cuando podemos hacernos todas estas preguntas
de cuando él no era…˜

116
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

224
____________

¿Qué es para nosotros…˜ ese estado que era cuando esto que llamamos nuestro naci-
miento…˜ esto que llamamos equivocadamente “mí mismo y mío”…˜ no era?…˜ ¿Qué
es para nosotros…˜ ese estado que era…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ Contemplé-
moslo…˜ Contemplemos cuando el nacimiento no era…˜ ¿Cómo es para nosotros…˜
para cada uno de nosotros…˜ la contemplación de este estado en que el nacimiento no
era?…˜ Observad bien…˜ que para nosotros…˜ descubrir por nosotros mismos…˜ des-
cubrir de nosotros mismos…˜ que nosotros sí éramos…˜ que nosotros sí somos…˜
cuando el nacimiento no es…˜ observad bien que este descubrimiento debe constituirse
necesariamente…˜ la piedra angular de nuestro reposo…˜ el fin de toda nuestra inquie-
tud…˜
Sin embargo…˜ enfrentados al hecho de nuestra anterioridad atemporal al nacimien-
to…˜ nuestra manera de conocer…˜ que sólo conoce términos de tiempo…˜ no puede
hacer de ese estado un objeto conocido…˜ como conocemos el mundo de los sentidos…
˜ De manera que ese estado…˜ el estado que es cuando el nacimiento no es…˜ el estado
que este nacimiento está revelando…˜ nuestro estado Real…˜ cuando nosotros lo pre-
senciamos…˜ lo que presenciamos no puede explicarse en palabras…˜ no puede poner-
se en ideas…˜ no responde a ningún modelo conocido…˜ Esto nos da miedo…˜ Y nos
da miedo…˜ debido a que si nosotros no nos sentimos ser…˜ entonces parece entera-
mente como si nosotros no fuéramos…˜ Pero esto no es verdad…˜ La pregunta a noso-
tros mismos…˜ “¿No era yo cuando este nacimiento no era?…˜ ¿no conozco yo ese es-
tado en que este nacimiento no era?…˜ ¿no conozco yo ese estado en que este cuerpo-y-
mente-y-alma-y-espíritu que llamo “mí mismo y mío” no eran?…˜ ¿no conozco yo ese
estado en que yo jamás había visto este mundo…˜ ni ningún otro mundo…˜ ni a mí mis-
mo viendo este mundo…˜ ni ningún mundo?”…˜ esta pregunta tiene una respuesta in-
mediata en nosotros…˜ Es Quien sabe esta pregunta en nosotros…˜ es Quien asiente a
esta respuesta en nosotros…˜ nosotros mismos…˜ el nosotros mismos real…˜ el Único
que merece verdaderamente nuestra atención…˜
Observad bien…˜ Si nosotros no conociéramos la Quietud y la Serenidad…˜ nada
nos inquietaría ni nos alteraría…˜ Es porque conocemos nuestra propia Quietud y nues-
tra propia Serenidad…˜ por lo que su pérdida aparente…˜ debida a la actividad del naci-
miento en nosotros…˜ nos sumerge en la angustia…˜ y en la inquietud…˜ y en la zozo-
bra…˜ La angustia…˜ la inquietud…˜ y la zozobra sólo tienen realidad en la medida en
que nosotros recordamos incesantemente nuestro verdadero estado real en que ellas no
eran…˜ La angustia…˜ la inquietud…˜ y la zozobra…˜ no estaban con nosotros…˜ No-

117
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

sotros lo sabemos…˜ Y lo que queremos es precisamente que ellas vuelvan a no estar


con nosotros…˜
Así pues…˜ la angustia…˜ la inquietud…˜ y la zozobra…˜ que en sí mismas son un
mal…˜ cuando las usamos como el motor del recuerdo y la contemplación de nuestro
verdadero estado…˜ cuando ellas no eran…˜ se convierten en un bien…˜ Viendo y con-
templando el estado verdadero en que la angustia…˜ la inquietud…˜ y la zozobra no
eran…˜ esta angustia…˜ e inquietud…˜ y zozobra misma…˜ se disuelven y se pierden
absolutamente en la Quietud y Serenidad que somos…˜ Ellas no pueden sobrevivir a la
contemplación de la Verdad de nosotros mismos…˜ Por ello…˜ es menester que todo lo
que constituye el nacimiento…˜ incluidos sus males aparentes…˜ los usemos para con-
templar nuestro estado cuando el nacimiento no era…˜
¿Era el conocimiento cuando el nacimiento no era?…˜ ¿era la mente cuando el naci-
miento no era?…˜ La respuesta es no…˜ no eran…˜ Entonces…˜ nosotros sólo pode-
mos usar el conocimiento…˜ el conocimiento mental…˜ para saber que él no era…˜ que
él no estaba con nosotros cuando el nacimiento no era…˜ Cuando nuestro verdadero es-
tado está siendo contemplado…˜ el conocimiento y la mente vuelven a no ser en noso-
tros…˜ Ellos no eran con nosotros y vuelven a no ser…˜ Aquí es donde aparece el mie-
do…˜ El miedo se debe a que no podemos traernos ni una sola piedra preciosa de nues-
tro verdadero estado real…˜ Cuando lo contemplamos y lo presenciamos…˜ cuando
contemplamos y presenciamos nuestro verdadero estado real…˜ todo vuelve a ser ins-
tantáneamente como cuando este nacimiento no era…˜

118
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

225
____________

No se trata de sacar nada de nuestro estado real…˜ se trata de contemplarlo…˜ se


trata de que seamos conscientes de que lo amamos…˜ y de que…˜ confiados completa-
mente en la comprensión de que estamos viendo lo que nosotros somos…˜ nos demos
sin temor a lo que somos…˜
¿Estaba el nacimiento con nosotros?…˜ ¿Qué quiere decir que el nacimiento no esta-
ba con nosotros?…˜ Quiere decir simplemente que nosotros…˜ lo que nosotros
somos…˜ no es el nacimiento…˜

119
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

226
____________

Cuando se nos hace la siguiente proposición…˜ “Contemplemos ese cuando…˜ en


que este nacimiento no era…˜ contemplemos nuestro estado…˜ cuando este nacimiento
no era”…˜
Cuando se nos hace esta proposición…˜ ¿qué se nos está proponiendo?…˜ Primero
de todo…˜ esta proposición da como absolutamente encontrado lo que nosotros somos
realmente…˜ De manera que contempla nuestro estado…˜ cuando el nacimiento no
era…˜ es el fin de toda búsqueda de nosotros mismos…˜
Contemplemos pues nuestro estado…˜ cuando el nacimiento no era…˜ No os digáis
a vosotros mismos que esta contemplación es difícil…˜ Es absolutamente imposible que
lo que es verdaderamente nosotros…˜ sea difícil de contemplar…˜ ¿Por qué no es difí-
cil?…˜ Porque lo somos…˜ Nosotros somos lo que es…˜ cuando el nacimiento no era…
˜ Y ahora que el nacimiento es…˜ el nacimiento no es otro que esta contemplación mis-
ma de ese indescriptible estado nuestro que se revela por sí mismo a nosotros…˜ cuan-
do…˜ con este nacimiento mismo…˜ contemplamos lo que nosotros somos cuando el
nacimiento no es…˜ Nosotros…˜ el nosotros real…˜ y este nacimiento con lo que con-
templamos…˜ es una pareja eterna…˜
Para ver y contemplar y saborear el estado eterno…˜ para ello está aquí este naci-
miento…˜ Este nacimiento es el Ojo del Estado eterno…˜ Y el Estado Eterno es lo que
nosotros somos…˜
Contemplándolo lo sabemos…˜ Es tan absolutamente nosotros este estado que era
cuando el nacimiento no era…˜ es tan verdaderamente nosotros…˜ que nosotros lo ama-
mos por reconocimiento de continuidad…˜ Verlo y contemplarlo es saber todo de noso-
tros…˜ verlo y contemplarlo es saber que nosotros no tenemos principio ni fin…˜
Comprended que es vuestro propio estado eterno el que se contempla a sí mismo con
el ojo del nacimiento…˜ Por ello…˜ porque sois el estado eterno…˜ por ello sabéis que
el nacimiento no ha estado siempre con vosotros…˜ Pero esto no es lo más
importante…˜ Lo más importante es que os conozcáis a vosotros mismos por vuestro
propio estado eterno mismo…˜ Sólo así olvidareis completamente el nacimiento…˜
Efectivamente…˜ ensimismados y sumergidos en la contemplación de vuestro verdade-
ro estado…˜ perdidos completamente en la delectación de vuestra propia Mismidad…˜
todo lo que el nacimiento significa…˜ quedará completamente olvidado…˜ No hay na-
cimiento en nuestro verdadero estado real…˜ Pero nuestro verdadero estado real es una
integralidad de amor que ama conocerse…˜ Y debido a este amor…˜ y para que este
amor se realice…˜ para ello está aquí el nacimiento…˜ El nacimiento es sólo el lugar

120
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

donde se produce este nacimiento de quién somos realmente…˜ Nunca ha sido nuestro
comienzo…˜ y nunca será nuestro final…˜
Hay una delectación sin medida en saber Quién somos…˜ Eso es lo que amamos
verdaderamente…˜ la delectación de saber quién somos…˜ ¿Por qué es ello así?…˜ Ello
es así…˜ porque cuando llegamos a saber Quién somos…˜ instantáneamente queda sa-
ciada nuestra sed…˜
Yo querría hablar más de ese estado…˜ de ese estado nuestro en que el nacimiento
no era…˜ Mirad cuán transparente es el nacimiento…˜ y cuán solícito…˜ y cuán
manso…˜ Es la herramienta perfecta para saber quién somos…˜ Sin embargo…˜ por sí
mismo sólo…˜ no puede nada…˜ El preguntador debe estar presente…˜ y debe hacer la
pregunta cuya respuesta sólo sabemos nosotros…˜
Cuando el nacimiento no era…˜ no es una pura nada…˜ no es inexistencia…˜ no es
privación…˜ no es tinieblas…˜ no es muerte…˜ ¿Qué es lo que no era cuando el naci-
miento no era?…˜ Me hago estas preguntas y mi pasmo no conoce límites…˜

121
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

227
____________

¿Qué es lo que no era con nosotros…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ No digáis


que no tenéis la respuesta…˜ Nuestro estado real se abre completamente a nosotros con
esta pregunta…˜ nuestro estado real está completamente presente a nosotros con esta
pregunta…˜ Escuchad bien…˜ y contemplad…˜ Contemplad vuestro propio estado
real…˜ por lo que no era con nosotros cuando el nacimiento no era…˜ Lo que Es cuan-
do el nacimiento no era…˜ Eso…˜ Eso es lo que somos…˜
Así pues…˜ ¿qué es lo que no era con nosotros…˜ cuando el nacimiento no era?…˜
No era la inquietud…˜ no era la zozobra…˜ no era el sufrimiento…˜ no era la muer-
te…˜ Y nosotros lo sabemos…˜ Lo sabemos porque nosotros somos Eso que era…˜
cuando el nacimiento no era…˜ Eso es Ahora…˜ Eso es Ahora que lo contemplamos…˜

122
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

228
____________

La visión y comprensión del estado Eterno que somos…˜ necesita de este nacimien-
to…˜ como contraste…˜ para que viendo exactamente lo que no era con nosotros cuan-
do este nacimiento no era…˜ quede completamente revelado a nosotros…˜ no sólo que
nosotros sí éramos cuando el nacimiento no era…˜ sino también la Quietud y Serenidad
sin principio ni fin que nosotros éramos cuando el nacimiento no era…˜
Esto sólo podemos hacerlo ahora que el nacimiento es…˜ sólo podemos hacerlo pre-
guntando con el nacimiento por ese cuando en que el nacimiento no era…˜ y nunca po-
demos hacerlo contra nuestra voluntad…˜ De manera que nuestro consentimiento a este
trabajo debe ser explícito y querido…˜ Que este trabajo no podemos hacerlo contra
nuestra voluntad…˜ que este trabajo es un trabajo de amor…˜ es evidente en el hecho de
que nadie se libera de su egoidad si no quiere…˜ si no lo quiere mucho…˜ si no lo quie-
re más que ninguna otra cosa querida…˜
De manera que ninguno de nuestros temores y miedos con respecto a ese cuando…˜
en que el nacimiento no era…˜ tiene ningún fundamento…˜ ¿Por qué es ello así?…˜
Ello es así…˜ porque para ver y comprender que nosotros somos el Estado Eterno…˜
que era en ese cuando en que el nacimiento no era…˜ tenemos necesidad de este naci-
miento ahora…˜ Este nacimiento precioso es el órgano de nuestra propia visión y com-
prehensión de nosotros mismos…˜ Sin este nacimiento…˜ nosotros…˜ lo que nosotros
somos…˜ permanecería un Eterno desconocido para sí mismo…˜ Y aunque este es un
estado de Quietud y de Serenidad sin principio ni fin…˜ que no necesita saberse SER
para SER el Todo…˜ sin embargo…˜ el hecho de que este nacimiento esté aquí…˜ im-
plica que hay una Voluntad misteriosa…˜ en este Estado Eterno mismo…˜ de compre-
henderse y verificarse a sí mismo como el Estado Eterno…˜
¿En qué se traduce esto para nosotros?…˜ Para nosotros…˜ esto se traduce en este
Amor Activo que busca conocer Quién somos…˜ Y este Amor Activo deviene el motor
de nuestra búsqueda y el impulso en el corazón a sumergirnos en nuestro estado Real…˜
De manera que el nacimiento no es un trastorno…˜ excepto en el caso de que noso-
tros lo consideremos un fin en sí mismo…˜ y no el órgano de nuestra propia visión y
comprehensión de nosotros mismos…˜
Sólo el que se ve y se comprehende a sí mismo como el Estado Eterno que se sabe
ser el Estado Eterno…˜ con el concurso del nacimiento…˜ no viendo en sí mismo prin-
cipio ni fin de lo que él es…˜ descansa absolutamente de toda búsqueda…˜ de toda in-
quietud…˜ de toda zozobra…˜ de todo temor…˜ y de todo sufrimiento…˜ Ya no se ve a
sí mismo como habiendo comenzado…˜ ya no se ve a sí mismo…˜ como algo en creci-

123
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

miento…˜ Ni la juventud ni la vejez le afectan…˜ ningún conocimiento del mundo


como otro que sí mismo le perturba…˜ El nacimiento es para él su herramienta de orfe-
bre…˜ con la cual pule incesantemente su propia visión y comprehensión de sí mismo…
˜
Todo el taller de trabajo de este Comprehensor está hecho de preguntas…˜ preguntas
extrañas que nadie se hace…˜ preguntas hechas de contraste…˜ donde el estado eterno
es siempre el Residuo…˜ lo que queda…˜ cuando nada otro que sí mismo era…˜
¿Qué es lo que no era con nosotros…˜ en ese cuando en que este nacimiento no
era?…˜
Observad bien la pregunta…˜ Lo que la pregunta no niega es que nosotros éramos…
˜ ¿Qué?…˜ ¿Qué éramos nosotros?…˜ ¿Cómo vamos a saberlo…˜ si no había conoci-
miento?…˜ Pero que nosotros no sepamos qué éramos…˜ no implica que en este preciso
instante…˜ no estemos teniendo la certeza absoluta de que…˜ efectivamente…˜ noso-
tros éramos…˜ cuando absolutamente nada de lo que es el nacimiento…˜ era con noso-
tros…˜
Ese Estado Eterno…˜ que éramos cuando este nacimiento no era…˜ necesita este es-
tado efímero…˜ necesita este nacimiento…˜ para que…˜ con su concurso…˜ nosotros
sepamos Quién somos…˜
¿Qué es lo que no era con nosotros…˜ en ese cuando en que este nacimiento no
era?…˜ Esta pregunta misma…˜ nosotros no podríamos hacérnosla…˜ si este nacimien-
to no estuviera aquí ahora…˜

124
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

229
____________

La proposición del Vedanta es…˜ “Nosotros somos el Estado Eterno”…˜ La proposi-


ción del Buddha es…˜ “Nosotros no somos otro que el Estado Eterno”…˜ Y la proposi-
ción de este taller es…˜
“¿Qué es lo que no era con nosotros…˜ en ese cuando en que este taller del naci-
miento no era?”…˜

125
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

230
____________

¿Qué es lo que no era con nosotros…˜ en ese cuando…˜ en que este nacimiento que
llamamos “yo y mío”…˜ no era con nosotros?…˜ Para tener un conocimiento y una
consciencia plena…˜ de lo que no era con nosotros…˜ para eso está aquí este nacimien-
to…˜ para eso están aquí la ronda de los tres estados…˜ para que tomemos consciencia
plena…˜ de que ellos no eran con nosotros…˜ y para que…˜ al mismo tiempo…˜ tome-
mos consciencia plena de lo que era realmente nosotros…˜ en ese cuando…˜ en que
todo este nacimiento no era…˜
Por ello…˜ cuanto más profundo es el conocimiento y la consciencia de lo que no
era con nosotros cuando el nacimiento no era…˜ tanto más profundo es el conocimiento
y la consciencia de lo que nosotros somos siempre…˜ El nacimiento…˜ la ronda de los
tres estados…˜ está aquí únicamente para que nosotros nos contemplemos a nosotros
mismos sin él…˜ Poco a poco…˜ esta contemplación se hace tan profunda…˜ tan
clara…˜ tan incesante…˜ que llega un momento en que ya no vemos nada del nacimien-
to…˜ sin que al mismo tiempo…˜ en el mismo instante…˜ no estemos contemplándonos
a nosotros mismos sin ello…˜ cuando ello no era…˜ cuando ello no estaba con noso-
tros…˜
Esta contemplación de nosotros mismos…˜ en nuestro verdadero estado en que el
nacimiento no era…˜ constituye un inmenso atractivo…˜ Nos reconocemos a nosotros
mismos como la Quietud…˜ como la Serenidad…˜ como la Calma imposible de decir…
˜ Nos vemos a nosotros mismos sin nacimiento…˜ Por prodigioso que parezca…˜ con el
nacimiento mismo…˜ Ahora…˜ nos estamos viendo sin él…˜ Y lo que vemos que so-
mos…˜ nos es tan querido…˜ que inexplicablemente sabemos que lo somos…˜ Sabe-
mos que somos el estado eterno…˜ lo sabemos por nosotros mismos…˜ Y sabemos tam-
bién que entre nosotros y nuestro estado eterno…˜ no se interpone nada…˜ Sabemos
que este nacimiento mismo…˜ que aparentemente nos había convertido en seres…˜ en
seres nacidos y mortales…˜ en seres desgraciados a la búsqueda de gracia…˜ no sólo no
es un obstáculo en nuestro encuentro de nosotros mismos…˜ sino que es el instrumento
perfecto de nuestra contemplación…˜
Poco a poco olvidamos que un día nos creímos a nosotros mismos nacidos y morta-
les…˜ y nuestra vida…˜ nuestra verdadera vida…˜ se convierte en la contemplación in-
cesante de nuestro verdadero estado real…˜ Llegamos a amarlo tanto…˜ que sin saber
nada lo sabemos todo…˜ Llegamos a ser omniscientes de nuestra propia Totalidad que
abarca a todos los tiempos y a todos los lugares…˜

126
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

¿Qué es lo que no era con nosotros…˜ en ese cuando atemporal…˜ en que este naci-
miento que llamamos falsamente “yo y mío”…˜ no era con nosotros?…˜ Jamás una pro-
posición de comprensión de nosotros mismos ha sido más reveladora de nuestro verda-
dero Estado Real…˜ Ni tampoco más accesible a todas las comprensiones…˜ Cierta-
mente…˜ quien escucha esta proposición haciéndose esta pregunta a sí mismo…˜ sabe y
comprende todo de sí mismo…˜ Mirad…˜ este nacimiento es muy efímero…˜ pero es
suficiente para obtener la respuesta que es nuestro verdadero Estado Real…˜ Cuando
esta respuesta se escucha…˜ y se ve…˜ y se comprende…˜ no podemos impedirnos
amar lo que somos…˜ lo que somos siempre…˜ lo que jamás podemos dejar de ser…˜
Con el nacimiento podemos preguntarnos…˜ y presenciar lo que nosotros somos cuando
el nacimiento no estaba con nosotros…˜ ¿Comprendéis?…˜ Esta presenciación…˜ esta
presenciación de nosotros mismos cuando el nacimiento no estaba con nosotros…˜ es la
prueba vívida de que nosotros no somos el nacimiento…˜ y es también la prueba de que
nosotros somos siempre…˜ Bebed…˜ bebéos a vosotros mismos…˜ como un mar a un
mar…˜ presenciándoos cuando el nacimiento no era…˜

127
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

231
____________

Nuestro verdadero estado real…˜ es accesible…˜ es Ahora…˜ Cuando el Buddha en-


tendió el verdadero estado real…˜ su entendimiento tuvo lugar en este mismo Ahora…˜
en que nosotros entendemos nuestro verdadero estado real…˜ Y su entendimiento de su
verdadero estado real…˜ es este mismo entendimiento de nuestro verdadero estado
real…˜ Y el medio de su entendimiento de su verdadero estado real…˜ es este mismo
nacimiento que el Buddha comprendió que no estaba con él…˜ y que nosotros compren-
demos que no estaba con nosotros…˜ ¿Comprendéis?…˜ No hay ninguna comprensión
mayor o menor de nuestro verdadero estado real…˜ Nuestro verdadero estado real es
siempre Uno…˜ y el medio de su comprensión de sí mismo…˜ que es este nacimiento…
˜ también es uno…˜
¿Qué es lo que no era con nosotros…˜ y qué es lo que sí era con nosotros…˜ cuando
este nacimiento…˜ con cuyo concurso nos comprendemos a nosotros mismos…˜ no era
con nosotros?…˜ La respuesta está en nosotros mismos…˜

128
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

232
____________

Cuando nos hacemos la pregunta…˜ “¿qué es lo que no estaba con nosotros…˜ en


ese cuando…˜ en que este nacimiento…˜ que llamo falsamente ‘mí mismo y mío’…˜ no
estaba con nosotros?…˜ cuando nos hacemos esta pregunta…˜ la verdadera intención de
la pregunta…˜ es que ese cuando en que este nacimiento no estaba con nosotros…˜ sea
este mismo Ahora en que nos hacemos la pregunta…˜ y que nosotros…˜ nos veamos a
nosotros mismos…˜ Ahora…˜ exactamente como nosotros somos cuando el nacimiento
no es…˜
De manera que la verdadera respuesta a esta pregunta…˜ no es una palabra…˜ no es
una imaginación…˜ sino la recuperación integral…˜ por visión…˜ de la integralidad de
nuestro verdadero estado real…˜
Viendo así lo que somos…˜ contemplando así que nosotros sí éramos cuando el na-
cimiento no era…˜ identificándonos así por Identidad absoluta con lo que somos real-
mente…˜ la sed insaciable de ser…˜ queda absolutamente satisfecha para nosotros…˜
Entramos entonces triunfalmente en la dicha profunda del Océano de nuestra propia
Quietud…˜ donde nada comienza ni acaba jamás…˜ Entonces…˜ este nacimiento mis-
mo…˜ deviene el vaso de elección donde la dicha de SER lo que nosotros somos…˜ se
comprende y se ama a sí misma…˜ Entonces…˜ este nacimiento mismo…˜ deviene el
lugar del encuentro incesante del Mar con el Mar…˜
Miremos bien…˜ contemplemos profundamente…˜ y comprendamos que no hay
verdaderamente seres por ninguna parte…˜ Todos los nacimientos…˜ sin excepción…˜
son cámaras nupciales donde el Mar abraza y se funde con el Mar…˜ Todos los naci-
mientos…˜ sin excepción…˜ son praderas abiertas…˜ sin horizontes…˜ donde la activi-
dad del Amor de Ser encuentra su campo…˜ Sólo en la medida en que nosotros mismos
aceptamos ser nacidos y mortales…˜ sólo en esa medida…˜ medimos y empequeñece-
mos lo que es sin medida y sin dimensiones…˜ hasta el mismísimo límite de la
miseria…˜ del sufrimiento…˜ de la inquietud…˜ de la zozobra…˜ y de la muerte…˜
Lo que estaba unido…˜ lo que era Uno…˜ un Único Océano de Mismidad sin co-
mienzo ni fin…˜ cuando este nacimiento no estaba con nosotros…˜ Eso que éramos
cuando este nacimiento no era…˜ esa Dicha que no comienza y que no acaba…˜ es esta
misma Dicha que Ahora presenciamos como respuesta a la pregunta “¿qué es lo que no
estaba con nosotros…˜ en ese cuando…˜ en que este nacimiento…˜ y todo lo que este
nacimiento significa…˜ no estaba con nosotros?”…˜ Lo que estaba unido…˜ lo que era
Uno…˜ lo que era un Único Océano de Mismidad…˜ es este mismos Océano de Mismi-

129
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

dad…˜ que es únicamente nosotros mismos…˜ que Ahora mismo…˜ presenciamos


como el Trasfondo y la Identidad última de nuestro Ser…˜
Y no podía ser de otra manera…˜ Y jamás ninguna otra proposición que ésta hubiera
tenido nuestro reconocimiento inmediato y nuestra adhesión absoluta…˜ Porque no es
verdad que nosotros hayamos nacido nunca…˜ y porque no es verdad tampoco que no-
sotros estemos destinados a morir…˜ Y tampoco es verdad que nosotros seamos seres…
˜ Y tampoco es verdad que absolutamente nada de lo que sentimos…˜ o pensamos…˜ o
contemplamos…˜ o comprendemos…˜ sea algo personal nuestro…˜ Todo en nosotros…
˜ todo en este vaso de elección que es el nacimiento…˜ es universal…˜ Todo en él es
sólo el movimiento oceánico de este amor del Mar por el Mar…˜ Su contacto de Sí mis-
mo es nuestra dicha…˜ Su separación aparente es nuestro sufrimiento…˜ Todo es un
movimiento profundo e incesante…˜ donde los nacimientos y las muertes son sólo epi-
sodios de un Único encuentro…˜
Un único encuentro de nosotros mismos con nosotros mismos…˜ y en este Abrazo
sublime…˜ nuestro amor encuentra finalmente su Quietud…˜ Todo esto se revela como
nuestra Verdad cuando nos preguntamos ¿qué es lo que no era con nosotros cuando el
nacimiento no era?…˜

130
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

233
____________

Así pues…˜ el nacimiento es un junto de energías convergentes…˜ siempre en mo-


ción centrípeta…˜ que revela incesantemente Eso en lo que el nacimiento no era…˜ Por
ello…˜ lo que más ama el nacimiento…˜ es precisamente servir como instrumento para
este descubrimiento Capital…˜: “Yo soy Eso en lo que este nacimiento no era”…˜ Pero
para que este descubrimiento tenga lugar…˜ he aquí que este lugar de reencuentro…˜
que es el nacimiento…˜ tiene que estar presente Ahora…˜ Y he aquí también…˜ que
este mismo Ahora…˜ en que este nacimiento está presente…˜ es ese mismo Ahora en
que el nacimiento no era…˜
Comprendiendo esto…˜ comprenderemos que todo en el nacimiento nos revela…˜

131
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

234
____________

¿Qué es lo que no estaba separado de sí mismo…˜ dividido de sí mismo…˜ cuando


este nacimiento no era…˜ cuando este conocimiento de que nosotros somos no era?…˜
Contemplo ese estado…˜ contemplo ese estado en que este nacimiento no era…˜ y por
inaudito que parezca…˜ lo que encuentro no es nada…˜ lo que encuentro es a mí mis-
mo…˜ Toda una Identidad me convoca…˜ toda una Identidad se me revela…˜ Y dentro
de mí mismo…˜ yo sé que es mí mismo…˜ Y mi saber que es mí mismo…˜ es una cer-
teza que no tiembla ni vacila…˜ Entonces me escucho decir…˜ “Lo que he buscado es
Esto…˜ lo que he buscado es este estado felicísimo…˜ en que Ahora mismo…˜ veo la
totalidad de mí mismo como Esto en lo que no hay separación ni división de mí
mismo”…˜
Acto seguido…˜ viene a mi contemplación lo que la palabra Dios nombra…˜ Me
miro a mí mismo…˜ y no me encuentro grande ni pequeño…˜ ni lleno los cielos…˜ ni
me arrastro por la tierra…˜ Me veo a mí mismo…˜ y no me encuentro que yo sea nin-
gún Dios…˜ ni el Dios más grande…˜ ni el Dios más pequeño…˜ Me veo a mí
mismo…˜ y no me encuentro que yo sea ningún ser nacido…˜ No tengo poderes…˜ no
vengo de ninguna parte…˜ no voy a ninguna parte…˜ Encuentro que no puedo decir una
sola palabra de mí…˜ Y sin embargo…˜ aunque no me describo…˜ la certeza de Ser ab-
solutamente…˜ no me abandona…˜
¿Qué es lo que no está dividido en mí mismo…˜ qué es lo que no está separado…˜
ni partido en mí mismo…˜ en este estado que me contemplo ser?…˜
Viene a mí la respuesta…˜ y la respuesta es una certeza…˜: “Lo que quiera que yo
buscaba…˜ ya está encontrado…˜ De este mismísimo encuentro de mi verdadera natu-
raleza real…˜ surgen estas extrañas preguntas…˜ Me veo sin división…˜ me veo sin
partición…˜ y en esta visión misma…˜ surge esta pregunta…˜ “¿Qué es lo que no veo
dividido…˜ ni separado en mí mismo?”…˜
Inmediatamente…˜ es como si me expandiera…˜ Veo que mi ser no tiene límites…˜
Veo que no tengo comienzo ni fin…˜ Una confianza serena me acuna…˜ Entonces me
digo…˜ “Yo no soy ningún Dios…˜ yo no tengo poderes…˜ yo no estoy dividido…˜ no
encuentro en mí ninguna separación…˜ ¿Qué es entonces lo que yo tendría que
juntar?…˜
Encuentro que este mí mismo que contemplo…˜ ha sido siempre el mí mismo que
yo soy…˜ Estoy enormemente dichoso de no ser ningún Dios…˜ estoy enormemente di-
choso de no tener ningún poder…˜ Estoy enormemente dichoso de no ver en mí ni divi-
sión ni partición alguna…˜ Estoy enormemente dichoso de ser lo que yo soy…˜ Estoy

132
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

enormemente dichoso de no deberle a nadie esta comprensión de mí mismo…˜ Apenas


puedo expresar lo que quiero decir por “mi estar enormemente dichoso”…˜
No encuentro en mí ausencia de nada…˜ sin embargo…˜ mi realidad es inatacable…
˜
Entonces viene a mí mi propia imagen de cuando yo estaba convencido de ser al-
guien…˜ alguien con fines que lograr…˜ alguien con obras que hacer…˜ alguien con
verdades que comprender…˜ La imagen misma es dolorosa…˜ No hay ninguna posibili-
dad de saber quién es…˜ para el que está convencido de ser alguien…˜ ¿Cuánto vive un
alguien?…˜ Por mucho que viva…˜ ¿cuánto vive un alguien?…˜ ¿De qué o de quién se
siente dividido y separado un alguien?…˜ Es muy doloroso…˜ Un alguien…˜ tiene fi-
nes que obtener…˜ obras que hacer…˜ verdades que comprender…˜ ¿Y a dónde echará
el resultado de todo esto?…˜

133
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

235
____________

El nacimiento es este lugar donde uno pregunta por sí mismo…˜ Una vez obtenida la
respuesta…˜ uno se sumerge en sí mismo…˜ Entonces…˜ el nacimiento se convierte en
el ojo de la contemplación de uno mismo…˜ de uno mismo sumergiéndose incesante-
mente en uno mismo…˜ Este “nada era conmigo”…˜ pasa incesantemente al mismo
“nada era conmigo”…˜ Y este lugar de paso de uno mismo a uno mismo…˜ es el naci-
miento…˜
Hay mucho sufrimiento en creerse alguien…˜ El sufrimiento mismo es creerse al-
guien…˜ No hay ningún alguien en nosotros…˜ Lo que llamamos nuestros fines que ob-
tener…˜ nuestras obras por hacer…˜ nuestras verdades que comprender…˜ sólo son el
movimiento de nuestra propia sed de nosotros mismos…˜ Una vez que nuestra sed se
sacia en nuestro ser real…˜ todo se ve como un funcionamiento que opera solo…˜

134
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

236
____________

“¿Qué es lo que no estaba con nosotros…˜ cuando el nacimiento no estaba?”…˜


Esta es una pregunta simple…˜ Lo que se busca con esta pregunta…˜ la intención de
esta pregunta…˜ no es que nosotros nos respondamos a nosotros mismos…˜ que nada
estaba con nosotros cuando el nacimiento no estaba…˜ Lo que se busca con esta pre-
gunta es que nosotros nos veamos a nosotros mismos sin nacimiento…˜
Esta certeza de la visión de ser sin nacimiento…˜ debe ser profundizada en todo mo-
mento…˜ Traiga lo que traiga el funcionamiento del nacimiento…˜ nosotros debemos
ver en todo momento ese cuando en que este nacimiento no era…˜ Y debemos vernos a
nosotros mismos en ese cuando en que el nacimiento no era…˜ El nacimiento es com-
pletamente útil para esto…˜ porque no hay en él absolutamente nada que refute que ello
no estaba con nosotros…˜ Antes al contrario…˜ todo en el nacimiento es la prueba de
que no estaba con nosotros…˜
Algunos sabios…˜ poniendo esto en un simbolismo temporal…˜ dicen que nosotros
somos antes de que el nacimiento fuera…˜ Pero esto es equívoco…˜ y no refleja exacta-
mente la verdad…˜ Porque lo que nosotros somos no es antes ni después de nada…˜ Lo
que nosotros somos no está prisionero de ningún par de contrarios…˜ No es eterno ni
efímero…˜ simplemente no está sujeto a ningún tiempo…˜ De manera que Ahora…˜ lo
que nosotros somos…˜ es exactamente idéntico a cuando el nacimiento no era…˜ No
hay para nosotros ningún antes ni después de nada…˜ El nacimiento no puede hacer ja-
más que nosotros seamos antes de que él sea…˜ Admitir que nosotros somos antes de
que el nacimiento sea…˜ es admitir que el nacimiento es…˜ y que está siendo en este
Ahora…˜ que viene a ser como si estuviera siendo después de que nosotros hayamos
sido sin nacimiento…˜ Esto es una imposibilidad…˜ porque el nacimiento no es lo
opuesto a cuando el nacimiento no era…˜ Sino que Ahora mismo en que el nacimiento
está aquí…˜ este Ahora…˜ es exactamente el mismo Ahora en que el nacimiento no es-
taba…˜
Debido a ello…˜ nosotros podemos vernos exactamente sin nacimiento…˜ ¿Qué es
verse sin nacimiento?…˜ Verse sin nacimiento…˜ es verse a uno mismo como uno es
cuando el nacimiento no es…˜ Esto no supone ningún juicio del nacimiento…˜ ningún
desapego de él…˜ Esto no supone ninguna condena del nacimiento…˜ Se trata simple-
mente de vernos a nosotros mismos sin él…˜ ¿No es absolutamente verdadero que nada
de todo esto estaba aquí?…˜ ¿No es absolutamente verdadero que todo cuanto está aquí
ahora es el nacimiento?…˜ ¿Quién sabe esto?…˜ ¿Quién…˜ sino nosotros mismos…˜
sabe esto?…˜ Pues si es nosotros quien sabe esto…˜ y lo estamos sabiendo Ahora…˜

135
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

veámonos a nosotros mismos como el que sabe esto…˜ veámonos a nosotros mismos
como el que sabe que nada de esto estaba aquí…˜
Veamos qué necesidad tenemos nosotros de un Dios cualquiera cuando el nacimien-
to no está aquí…˜ Veamos en que consiste nuestro consistir cuando el nacimiento no
está aquí…˜ En vez de contemplar el nacimiento…˜ contemplémonos a nosotros mis-
mos…˜ que somos quien contempla el nacimiento…˜ Veámonos vacíos de todo…˜ ex-
cepto de nosotros mismos…˜
Ni eterno ni efímero soy…˜ me he dicho…˜ He comprendido entonces que yo estaba
fuera absolutamente de lo que las palabras eterno y efímero califican…˜ No tengo que
imaginar lo que yo soy…˜ Me basta con contemplar el nacimiento y contemplarme a mí
mismo sin él…˜ No temo en absoluto a cuando no hay conocimiento…˜ Contemplo el
conocimiento y me contemplo a mí mismo sin él…˜ Y ni siquiera lo que se llama amor
es tan querido que me arrastre…˜ Contemplo el amor activo y me contemplo a mí mis-
mo sin él…˜ No se trata para nada de lo que me gusta más o menos…˜ Se trata de que
esta contemplación del nacimiento…˜ y de mí mismo sin él…˜ es conforme a la
Verdad…˜

136
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

237
____________

Ahora que me veo integralmente sin nacimiento…˜ veo que nada que tenga un
opuesto puede calificarme…˜ Yo no soy ni eterno ni efímero…˜ Cuando el nacimiento
no es…˜ ¿qué anhelo puede ser encontrado en mí?…˜ Quien llama muerte a esto…˜ no
alcanza a ver…˜ que sin nacimiento es el estado donde no hay anhelo…˜ ni tampoco su
contrario…˜ En este estado…˜ yo no tengo conocimiento ni no conocimiento de mí…˜
Y el anhelo de vivir y el miedo de morir…˜ tampoco los encuentro…˜ Yo me fío absolu-
tamente de lo que veo que yo soy…˜ ¿Y qué es este verme a mí mismo?…˜ Es ver el na-
cimiento…˜ y viéndole…˜ verme a mí mismo sin él…˜
Repito que esto no es un juicio…˜ ni una reprobación del nacimiento…˜ sino sólo un
uso de él…˜
Nada de lo que implica una queja es bienvenido en mí…˜ Yo no me desapego del
nacimiento…˜ El nacimiento es fiel…˜ el nacimiento no es por sí mismo…˜ Es transpa-
rente…˜ Y lo que transparenta…˜ es a mí mismo…˜ que viéndole…˜ me veo a mí mis-
mo sin él…˜
Esto no es una vía…˜ Yo no parto del nacimiento para llegar a mí…˜

137
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

238
____________

Contemplemos todo este adentro de nosotros…˜ este adentro de nosotros completa-


mente vacío…˜ Busquémonos a nosotros mismos en este adentro de nosotros mismos…
˜ en este adentro de nosotros mismos completamente vacío…˜ Busquémonos…˜ ¿En
qué consiste nuestra búsqueda de nosotros mismos?…˜ Nuestra búsqueda de nosotros
mismos consiste únicamente en la pregunta cuya respuesta nos pone instantáneamente
en nosotros mismos…˜
¿Qué es lo que no era con nosotros…˜ cuando este nacimiento no era?…˜ Cuando
este nacimiento no era…˜ ¿era con nosotros esta búsqueda de nosotros mismos?…˜
Cuando este nacimiento no era…˜ ¿era con nosotros la pregunta…˜ “¿qué es lo que no
era con nosotros…˜ cuando este nacimiento no era?”?…˜ Cuando este nacimiento no
era con nosotros…˜ ¿qué es lo que no era?…˜
Yo mismo me hago estas preguntas…˜ y mi reposo es absoluto…˜ ¿Por qué?…˜
¿Por qué es absoluto mi reposo?…˜ Mi reposo es absoluto…˜ porque la respuesta es mi
verdadero estado…˜ No…˜ nada en absoluto era conmigo cuando este nacimiento no
era…˜ nada absolutamente otro que mí mismo…˜ Teniendo esta respuesta…˜ yo no ten-
go miedo a cuando el nacimiento no era…˜ Descubro que mi verdadero estado…˜ cuan-
do el nacimiento no era…˜ no está sujeto a ninguna de las calificaciones del
nacimiento…˜ Descubro que lo conozco por mi ser-Lo mismo…˜ Yo no tengo absoluta-
mente ningún miedo a no saberme ser…˜ Pues no saberme ser es mi estado cuando el
nacimiento no es…˜ Descubro que mi no saberme ser no es eterno ni efímero…˜ Eterno
y efímero son conceptos que no estaban conmigo cuando el nacimiento no era…˜
¿Y cómo sé yo entonces este conocimiento mío absoluto de cuando este nacimiento
no era?…˜ Lo sé porque lo soy…˜ Yo soy eso que era…˜ eso que es…˜ cuando el naci-
miento no era…˜
Ninguno de estos conocimientos era conmigo cuando el nacimiento no era…˜ ningu-
no de estos conocimientos…˜ ni tampoco la búsqueda de ellos…˜ Lo veo con toda clari-
dad…˜ lo veo con toda claridad aunque esta visión misma no era conmigo cuando el na-
cimiento no era…˜ Ninguno de nosotros…˜ ninguna de nuestras búsquedas y encuentros
de nosotros mismos…˜ era con nosotros cuando el nacimiento no era…˜ ¿No es esto ab-
solutamente verdadero…˜ absolutamente conocido por nosotros…˜ de nosotros mis-
mos?…˜ Decidme…˜ ¿quién de nosotros puede poner en duda la verdad absoluta de sí
mismo…˜ de que ninguna búsqueda ni encuentro de sí mismo era…˜ cuando el naci-
miento no era?…˜ Nadie…˜ ninguno de nosotros…˜ tiene la más mínima duda de que
esto es verdad…˜ verdad absoluta de sí mismo…˜ verdad sin controversia…˜

138
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

Entonces…˜ ¿cuál es el problema?…˜ Entonces…˜ ¿cuál es el obstáculo?…˜ ¿Por


qué no nos vemos tal como somos…˜ y descansamos todos este descanso que yo
veo?…˜
Para mí el problema es simple…˜ para mí el obstáculo está claro…˜: Vernos sin na-
cimiento nos asusta…˜ vernos sin nacimiento nos da miedo…˜ Vernos sin nacimiento se
revela para nosotros como la nebulosa tenebrosa del no ser…˜ Vernos sin nacimiento
equivale para nosotros a estar muertos…˜ a no ser…˜ a no saber que nosotros somos…˜
Sin embargo…˜ esto tampoco estaba cuando el nacimiento no era…˜
¡Cuán enormemente doloroso es disponer de este nacimiento…˜ sólo para temer in-
cesantemente el momento en que se acabe!…˜ Observad bien…˜ observaos profunda-
mente cuando el nacimiento no era…˜ Eso sólo es posible ahora que el nacimiento es…
˜ El nacimiento no era con nosotros…˜ ¿Cómo éramos nosotros cuando el nacimiento
no era?…˜ Esta es la respuesta que tenemos que tener…˜ Ninguna otra nos dará sosie-
go…˜

139
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

239
____________

Profundicemos bien esta proposición…˜: “Nada que no era con nosotros cuando el
nacimiento no era…˜ es nosotros mismos ni nuestro”…˜
Lo que propone esta proposición es absolutamente verdadero…˜ Quizás nosotros ve-
amos alguna luz…˜ quizás nosotros veamos este vacío adentro…˜ Quizás nosotros com-
prendamos Quién somos…˜ Pero fijaos bien…˜ ni siquiera la comprensión de Quién so-
mos…˜ era con nosotros cuando el nacimiento no era…˜
Comprendamos profundamente esto ahora…˜ ahora que podemos…˜ Comprenda-
mos que “nada que no era con nosotros cuando el nacimiento no era…˜ es nosotros mis-
mos ni nuestro”…˜

140
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

240
____________

Todas estas proposiciones están brotando únicamente de mi verme a mí mismo en


mi ser lo que yo soy…˜ Viéndome a mí mismo ser lo que yo soy…˜ con mi mismo ver-
me…˜ simultáneamente…˜ veo igualmente lo que no soy…˜ Mejor dicho…˜ simultáne-
amente…˜ veo igualmente lo que no era conmigo…˜ lo que no estaba conmigo…˜ pues
lo que no estaba conmigo…˜ lo que no ha estado conmigo siempre…˜ simplemente no
tiene ser…˜ Es sólo un “parece como si”…˜
Mi verme a mí mismo ser lo que yo soy…˜ no es de muchas maneras…˜ ¿Qué quie-
re decir que mi verme a mí mismo ser lo que yo soy no es de muchas maneras?…˜
Quiere decir que…˜ en cada uno de vosotros…˜ yo me veo a mí mismo ser exactamente
esta identidad que me veo a mí mismo ser en mí…˜
No hay muchos viendo al mismo tiempo a este Uno que se ve a sí mismo en todos
nosotros…˜ Hay sólo este Uno viendo en cada uno de nosotros…˜ que nada de todo esto
por lo que cada uno de nosotros parece diferente…˜ estaba con él…˜
Este Uno que se conoce a sí mismo en mí…˜ y de cuyo conocimiento de sí mismo
brotan espontáneamente todas estas preguntas…˜ es el mismo Uno que se conoce a sí
mismo en vosotros…˜ como ese Uno que era…˜ como ese Uno que sois…˜
De este mismo verme…˜ de este mismo ver que nada otro que mí mismo era conmi-
go…˜ brota un amor activo que dicta estas proposiciones…˜ Siento un fuego de amor
intenso porque la verdad de vosotros mismos luzca como vuestro propio sol en voso-
tros…˜ Siento un fuego de amor intenso por des-egoificaros completamente…˜ de ma-
nera que la Liberación que sois…˜ se expanda por sí sola en su espacio natural…˜
Que nada era con nosotros cuando este nacimiento no era…˜ esta verdad es bien vi-
sible y bien comprensible para todo el que la escucha…˜ ¿Por qué es ello así?…˜ Ello es
así…˜ porque el que escucha y reconoce esta verdad…˜ es una única Identidad en
todos…˜ De manera que no se puede ver y comprender esta verdad…˜ y seguir mante-
niendo nuestra separación unos de otros…˜ Todos nosotros…˜ que parecemos ser mu-
chos…˜ somos únicamente el que comprende que nada de todo esto era con él…˜
Este amor activo me lleva a una expansión tan grande…˜ que soy verdaderamente
cada uno de vosotros…˜ Soy el que aquí propone…˜ y soy también el que en vosotros
escucha…˜ Soy todos…˜ Y sin embargo…˜ precisamente en esto…˜ no soy nada parti-
cular…˜ No hay ni uno solo de nosotros que no sea idéntico a mí en esto…˜
Por ello…˜ cuando este amor activo dicta…˜ lo que veo que debo expresar…˜ es
esta Verdad última de todos…˜ que espera a la escucha de su propio reconocimiento en
cada uno de nuestros corazones…˜

141
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

Cuando digo que yo no conozco principio ni fin de mí mismo…˜ eso es exactamente


idéntico de éste que dice y de todo el que escucha…˜ Yo mismo…˜ como este cuerpo-y-
mente-y-alma-y-espíritu…˜ no estaba conmigo cuando el nacimiento no era…˜ Yo sé
esto de mí mismo…˜ y lo sé también de vosotros…˜ ¿Significa esto que yo tengo un jui-
cio sobre el nacimiento?…˜ ¿significa esto que yo condeno a no ser al nacimiento?…˜
No…˜ ello significa solamente lo que significa…˜ el hecho llano de que el nacimiento
no estaba conmigo…˜

142
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

241
____________

Viendoos desde donde yo os veo…˜ viendoos desde donde el nacimiento no estaba


con nosotros…˜ viendoos desde donde el nacimiento no era…˜ todos los nacimiento son
sólo uno…˜ Este Amor que os habla es sólo amor de vosotros mismos por vosotros mis-
mos…˜
Contados los años que ya no tienen…˜ el nacimiento del anciano y el nacimiento del
recién nacido…˜ coinciden…˜ No hay ninguna diferencia de edad en lo que no es noso-
tros ni nuestro…˜
Por eso…˜ ¡oh mí mismo!…˜ a ti te digo…˜ veéte cuando el nacimiento no era…˜
expándete cuando el nacimiento no era…˜ crece tu crecimiento en Verdad de ti mismo
cuando el nacimiento no era…˜ encuéntrate a ti mismo cuando el nacimiento no era…˜
y reposa…˜ reposa tu reposo eternamente activo en la identidad suprema de tu amor
consumado…˜
¿Y cuándo es ese cuando…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ Ese Cuando es Aho-
ra…˜

143
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

242
____________

Mi propia comprensión y verificación de mí mismo…˜ vino a mí desde mi verdade-


ro estado…˜ como la respuesta a esta pregunta…˜ “¿Quién o qué queda de mí mismo…
˜ cuando este nacimiento con el que me comprendo…˜ ya no es?”…˜ Entonces vino a
mí la respuesta…˜ “Yo…˜ yo quedo”…˜
Este “yo” no podía ser el nacimiento…˜ puesto que yo me preguntaba por mí mis-
mo…˜ cuando el nacimiento ya no fuera…˜ Y sin embargo…˜ la respuesta se impuso
con tal fuerza…˜ que ya nunca más he dudado de la verdadera naturaleza de mi ser…˜
Mi verificación de mí mismo como el Ser Real…˜ ha tocado a su fin…˜ En esto no
hay para mí ningún privilegio…˜ puesto que lo que yo os veo ser a vosotros…˜ es la
misma mismidad que me veo ser a mí mismo…˜ Mi trabajo consiste en ponerme en
vuestro lugar…˜ no como seres nacidos…˜ sino como la mismidad real que me veo a mí
mismo ser…˜ y que veo que sois vosotros…˜ Y poniéndome en este lugar como la reali-
dad que sois…˜ mi trabajo consiste en hacer las proposiciones cuya respuesta deje al
descubierto en vosotros la misma Realidad que me veo ser a mí mismo…˜ ¿Es esto ne-
cesario?…˜ Es necesario y no es necesario…˜ Es necesario mientras vosotros no sois
capaces por vosotros mismos de obtener la visión de vuestra propia realidad…˜ No es
necesario…˜ cuando vosotros habéis obtenido la visión de vuestra propia realidad…˜
En mis proposiciones no hay nada que os egoifique…˜ Ello es así porque yo no os
veo como nacidos y mortales…˜ Ello es así porque yo os veo ser exactamente la Reali-
dad que me veo a mí mismo ser…˜ Os veo sin nacimiento…˜ y por eso mismo…˜ yo no
puedo hablaros como si fuerais nacidos…˜ Os veo enteramente como sois cuando este
nacimiento no era…˜ de manera que no debéis esperar que yo aprecie o desprecie lo que
este nacimiento…˜ que sólo está aquí para revelaros…˜ parece o no parece…˜
En que yo os veo sin nacimiento…˜ en eso consiste mi veros tales cuales sois…˜ No
os veo como otro que mí mismo…˜ Pues en lo que es sin nacimiento no hay
diferencias…˜ Pero si alguno quiere verse a sí mismo y seguir diferenciándose de los
demás…˜ eso no será posible…˜ Quiero decir que no será posible verse…˜ porque verse
a uno mismo como uno es realmente…˜ es verse sin nacimiento…˜ es verse quedar en-
tero cuando el nacimiento ya no sea…˜
Fijaos bien…˜ ninguna diferencia entre nosotros puede rebasar la duración de lo que
dura el nacimiento…˜ ¿Y cuánto dura el nacimiento?…˜ Los años que nosotros decimos
tener…˜ y que en realidad ya no tenemos…˜ nos igualan a todos en este ahora…˜ En re-
alidad…˜ el nacimiento es como una suerte de contador que incesantemente se pone por
sí solo a cero…˜

144
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

Nuestra fascinación por lo que ya no tenemos ni hemos tenido nunca es tan


grande…˜ que apenas nadie puede pararse a considerar que los años ya pasados no su-
man años…˜ que suman cero…˜ El comprehensor de su verdadera naturaleza real es así
sin nacimiento…˜ y la duración de su vida es siempre cero…˜
¿Comprendéis?…˜ Ninguna diferencia entre nosotros puede rebasar la duración de
lo que dura el nacimiento…˜ ¿Cuánto han durado los años que ya no tenemos?…˜ ¿He-
mos sido nosotros el que ha estado durando los años que ya no tenemos?…˜ Y si noso-
tros éramos esos años…˜ ¿cómo hemos podido sobrevivirlos?…˜ ¿Cuánto ha envejeci-
do realmente nuestra vida?…˜ ¿cuánto ha madurado realmente nuestra vida?…˜

145
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

243
____________

Para mí sois transparentes…˜ ¿Y qué transparentáis?…˜ Lo que transparentáis es mi


propia Mismidad…˜ Lo que me veo a mí mismo ser cuando este nacimiento no era…˜
eso es lo que veo que todos transparentáis…˜ Y a este vosotros verdadero es al que ha-
blo…˜ al que acaricio…˜ y al que amo…˜ No tengo otro trabajo que servirle…˜ no ten-
go otro motor que hacer lo posible para que mi propia visión de mí mismo…˜ sea la
misma visión de vosotros mismos por vosotros mismos…˜
Para quien se ve a sí mismo sin nacimiento…˜ cuando alguien está atacado de la en-
fermedad de la egoificación…˜ lo detecta inmediatamente…˜ ¿Y qué es la enfermedad
de la egoificación?…˜ Complacernos en lo que no somos…˜ complacernos en lo que no
estaba con nosotros cuando el nacimiento no era…˜ no ser conscientes de que cuando el
nacimiento ya no sea lo que queda es nosotros…˜ angustiarse por poseer lo que jamás es
nosotros ni nuestro…˜ imaginar que este es nuestro mundo y que nosotros somos de
él…˜ vernos como nacidos aquí y como enterrados allí…˜ todo esto son síntomas de
una egoificación avanzada…˜ Lo que hay en el corazón…˜ se derrama a borbotones por
la boca…˜ De manera que el egoificado…˜ no hace otra cosa que cantar incesantemente
sus síntomas…˜
Escuchar esta canto es doloroso…˜ ¿Por qué?…˜ Porque la enfermedad de la egoifi-
cación es el principio activo de la división…˜ Todo egoificado sólo ve rivales…˜ Sus
posesiones nunca están seguras…˜ Teme al tiempo porque le roba los años…˜ Y teme a
la muerte porque le roba todo…˜

146
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

244
____________

¿Cuánto duró ese cuando en que este nacimiento no era?…˜ Con este nacimiento
ahora…˜ yo me pregunto…˜ ¿cuánto duró ese cuando…˜ en que este nacimiento no me
revelaba?…˜ En realidad…˜ lo que yo quiero saber es si yo era cuando yo no sabía que
yo soy…˜ Lo que yo quiero es sumergirme y pasmarme con la respuesta a esta pregun-
ta…˜
Me veo a mí mismo al comienzo de la revelación a mí de que yo soy…˜ ¿Cómo fue
que yo comencé a saber que yo soy?…˜ Me veo a mí mismo de niño…˜ Son recuerdos
vagos…˜ de los cuales no puedo decir cuál es el primero…˜ Sólo alcanzo a reconocer
que comencé a saber que yo soy…˜ Todo era muy simple…˜ Mi verme a mí mismo era
muy simple…˜ Era una visión desprovista de anhelos…˜ desprovista de pasiones…˜
completamente ignorante de lo que era mí mismo y de lo que era el mundo…˜
Viendo aquel comienzo de la consciencia en mí…˜ yo me pregunto ahora…˜ ¿cuán-
to había durado mi no conocimiento de mí mismo hasta ese preciso instante en que el
comienzo de mí mismo se produjo en mí?…˜ ¿Y qué había hecho yo para que este co-
mienzo del conocimiento de mí mismo comenzara?…˜ ¿Cómo hice yo para comenzar a
saber que yo soy?…˜ ¿cómo hice yo para empezar a tener consciencia de mí mismo?…˜
¿En qué consistía entonces mi conocimiento y consciencia de mí mismo?…˜ ¿En qué
tipo de ego me entendía yo a mí mismo ser?…˜ Me hago estas preguntas…˜ y una sacu-
dida profunda me conmueve…˜ Entonces me digo…˜ “Desde aquel primer instante en
que yo vine a saber que yo soy…˜ hasta este instante ahora en que sigo sabiendo que yo
soy…˜ ¿cómo he hecho que este flujo de aconteceres sea lo que es?…˜
Veo cómo han ido surgiendo en mí anhelos y pasiones completamente
desconocidos…˜ veo cómo ha ido surgiendo en mí la consciencia de ser un alguien…˜
veo cómo surgió en mí el concepto de ser nacido…˜ el concepto de tener padres…˜ el
concepto de ser nacido y mortal…˜ el concepto de envejecer…˜ Veo cómo ha ido sur-
giendo en mí el concepto de tener que beneficiarme…˜ Veo cómo ha nacido en mí la
sensación de sed de felicidad…˜ de sed de gozo…˜ Veo cómo ha surgido en mí lo agra-
dable y lo desagradable…˜ lo que quería decir y lo que quería callar…˜ Pasiones ago-
biantes me asfixiaban…˜ El torbellino me arrastraba…˜ Desde aquel primer instante de
conocimiento de mí mismo…˜ desde aquel primer instante de mi niñez inocente…˜ qué
enorme sucesión de sustos…˜ qué dolorosa sucesión de espantos…˜ ¿Cómo podía yo
organizar este caos?…˜ Las voces a mi alrededor insistían en que todo esto era bello…˜
Pero dentro de mí…˜ en lo profundo de mí…˜ había una resistencia inexpugnable a cre-
er que esto era todo…˜

147
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

¿Saber que yo soy era todo?…˜ ¿Sentirme ser era todo?…˜ ¿Cómo era posible que
sentirme ser fuera todo?…˜ Yo había comenzado a sentirme ser…˜ yo no había comen-
zado a ser…˜ Ser…˜ mi ser ya era la primera vez que lo supe…˜ Y en mi ser lo que yo
soy verdaderamente…˜ no había habido absolutamente nada de toda esta tremenda con-
fluencia de pasiones que ahora me asfixiaba…˜ ¿Era mí mismo estas pasiones?…˜ ¿era
mí mismo estas propensiones?…˜ ¿era mí mismo todo este amasijo de sentimientos y de
actos que aparecían en mí en sucesión vertiginosa?…˜ Llegué a creer a conciencia que
efectivamente todo este amasijo de sentimientos y de actos…˜ que aparecían en mí en
sucesión vertiginosa…˜ eran mí mismo y míos…˜ ¿Y cuál fue el resultado de esta cre-
encia?…˜ Una enorme suma de complicación y de angustia…˜ una sed ardiente e inmi-
sericorde que me abrasaba las entrañas…˜ ¡Qué grandísima distancia desde aquel niño
inocente la primera vez que supo que él era…˜ a este pozo de pasiones hecho de puro
sufrimiento!…˜ Cada vez que miraba esta comparación me estremecía de llanto…˜
¿Cómo lo había hecho?…˜ ¿cómo había hecho yo la aparición en mí de este maremoto
de angustia?…˜ Mi pregunta tenía respuesta…˜ Yo no había hecho nada…˜ yo no había
hecho absolutamente nada…˜ Ni lo había pedido ni lo había previsto…˜ de manera que
todo este aluvión que llegué a llamar mí mismo y mío…˜ siempre había venido sin ser
llamado…˜

148
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

245
____________

Ahora me pregunto…˜ ¿Soy yo el nacimiento?…˜ Intento reconocer en él algo de mí


mismo…˜ y no puedo…˜ Todo en el nacimiento me resulta profundamente extraño…˜
todo lo que es del nacimiento ha venido a mí sin ser pedido…˜
¿Somos nosotros el nacimiento?…˜ Si decimos que sí…˜ ¿cómo nos explicamos que
nunca hayamos tenido la menor posibilidad de intervenir en él?…˜ Quien no esté con-
vencido de esto…˜ que se pregunte cómo eligió él este nacimiento que llama suyo…˜
Que se pregunte cómo eligió él lo que llama sus pasiones…˜ lo que llama sus sentimien-
tos…˜ lo que llama sus emociones…˜ lo que llama su inteligencia…˜ lo que llama su
cuerpo-y-su-mente-y-su-alma-y-su-espíritu…˜
Quien no esté convencido de esto…˜ que se pregunte por sí mismo cuando el naci-
miento no era…˜

149
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

246
____________

La única solución al problema del ego…˜ pasa por comprender integralmente si no-
sotros somos lo que nombra la palabra ego…˜ ¿Qué nombra la palabra ego?…˜ La pala-
bra ego nombra lo que nosotros creemos ser cuando nos comprendemos a nosotros mis-
mos…˜ como los deseadores en todos los deseos que aparecen en nosotros…˜ ¿Por qué
digo deseos?…˜ Digo deseos…˜ porque sin deseo la frustración no es posible…˜
Para llevar a cabo esta indagación…˜ me he preguntado a mí mismo por esta marea
de deseo…˜ que como un río…˜ comenzó a manifestarse en mí…˜ Aunque era una úni-
ca marea…˜ parecía ser muchas…˜ Cada día descubría en mí un nuevo deseo…˜ un
nuevo anhelo…˜ Viéndome a mí mismo en el punto del comienzo del deseo…˜ me he
preguntado…˜ “¿Cómo hice yo que esta marea de deseo apareciera en mí?…˜ ¿Cómo
hice yo lo que yo llamo mi deseo de vivir?…˜ ¿cómo hice yo lo que yo llamo mi deseo
de amar y de ser amado?…˜ ¿cómo hice yo lo que yo llamo mi deseo de placer y mi re-
pulsa de lo que no me da placer?”…˜ Entonces comprendo que yo no hice nada…˜ Yo
no sé cómo se hace un deseo…˜ Entonces me veo a mí mismo singularmente distinto de
esta colonización por lo que llamo la marea del deseo…˜ Yo no soy el deseo…˜ yo no
soy sus obras…˜ yo no soy sus satisfacciones…˜ yo no soy sus repulsiones…˜ Com-
prendo que yo no sé hacer un deseo…˜ comprendo que esta marea de deseación apare-
ció en mí…˜ Comprendo que yo no la llamé nunca…˜ Comprendo que yo no puedo
ejercer ninguna propiedad sobre el deseo…˜ comprendo que yo tampoco he podido ha-
cer ninguna elección sobre la naturaleza y la expresión de esta deseación que se mani-
fiesta en mí…˜ Comprendo que no había en mí ningún deseo…˜ Comprendo mi propia
extraordinaria claridad cuando no había en mí ningún deseo…˜ Y en este instante mis-
mo me comprendo a mí mismo sin ego…˜
Entonces me digo…˜ lo que se llama ego es sólo la falsa creencia de que yo soy por
así decir el hacedor de mis deseos…˜ y también el que los satisface…˜ Veo la profunda
mentira que se oculta detrás de las palabras…˜ “yo deseo esto…˜ y haré todo lo posible
por obtener la satisfacción de mi deseo”…˜ Veo que cuando los deseos son una suma in-
gente…˜ unos que todavía no han sido satisfechos…˜ otros en proceso de satisfacción…
˜ y otros que nunca serán satisfechos…˜ si yo los considero míos…˜ si yo los amo y los
obedezco…˜ entonces no tendré ni cabeza ni manos para gobernar a un rebaño tan enor-
memente díscolo…˜
Comprended que lo que llamáis vuestro ego…˜ es sólo el convencimiento de que la
deseación que opera en vosotros es vuestra…˜ de que…˜ por así decir…˜ de alguna ma-

150
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

nera misteriosa…˜ vosotros creéis que vuestros deseos son realmente vuestros deseos…
˜
Miradlos…˜ mirad bien vuestros deseos…˜ Ved su operación en vosotros desde su
comienzo mismo…˜ Recordaos a vosotros mismos…˜ lo más posible…˜ el comienzo de
los deseos…˜ Ved los deseos aceptables y los reprobables…˜ ved los deseos visibles y
los deseos que no se ven…˜ Y sobre todo…˜ veos a vosotros mismos cuando los deseos
no eran…˜
¿La satisfacción de cuál deseo os ha traído nunca un estado de paz que recuerde…˜
ni tan siquiera de lejos…˜ el estado de paz con vosotros mismos que era cuando ningún
deseo era?…˜
Quiero que veáis que ningún deseo es vuestro…˜ quiero que veáis cómo os esclavi-
zan…˜ quiero que veáis que vosotros no habéis hecho nunca ninguno de vuestros dese-
os…˜ Y quiero que veáis que si vosotros no habéis hecho nunca ninguno de vuestros de-
seos…˜ a la medida y apetencia de vuestro corazón…˜ ¿cómo entonces…˜ podemos de-
cir nosotros que nuestros deseos son nuestros?…˜
¿Y qué es un ego sin deseos…˜ me pregunto?…˜

151
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

247
____________

El deseo lleva como pareja asociada…˜ la convicción de que yo soy el hacedor…˜ Y


la convicción de que yo soy el hacedor…˜ es la hacedora del ego en nosotros…˜
Así pues…˜ cuanto más intensa es la pulsión de un deseo en nosotros…˜ tanto más
profunda es la convicción de que nosotros somos el hacedor…˜ Un deseo fuerte…˜
cuando se satisface…˜ genera en nosotros una fuerte sensación de ser nosotros el hace-
dor…˜
No podemos comprender quién somos…˜ mientras no comprendemos la naturaleza
del deseo…˜ Nosotros padecemos el deseo…˜ nosotros no somos sus autores…˜ Noso-
tros no tenemos jamás los deseos que queremos…˜
Es imperativo entonces que nos veamos a nosotros mismos cuando los deseos no
eran…˜ que comprendamos que los deseos no son nosotros ni nuestros…˜

152
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

248
____________

Ahora que el nacimiento está aquí…˜ puedo verme a mí mismo perfectamente cuan-
do el nacimiento no era…˜ ¿A quién más veo conmigo…˜ cuando el nacimiento no
era?…˜ A nadie…˜ Nadie más era conmigo…˜ cuando el nacimiento no era…˜
Lo que quiera que este nacimiento signifique…˜ yo no encuentro que nada de él sea
mí mismo ni mío…˜ Y este es un conocimiento de mí mismo que tengo ahora…˜ El na-
cimiento no es ningún obstáculo para verme…˜ Todo lo contrario…˜ Veo lo que el naci-
miento es…˜ y viéndolo…˜ me veo a mí mismo sin ello…˜ ¿Y qué veo que yo soy?…˜
¿qué veo que yo soy de verdad?…˜ Yo no le tengo ningún miedo a no saberme ser…˜
Por ello…˜ veo que lo que yo soy de verdad…˜ no es sentirme ser…˜ Veo ese instante
en que este nacimiento comenzó…˜ y veo perfectamente en qué consistió…˜: Lo que yo
soy…˜ comenzó a saber que yo soy…˜ No hay un momento preciso para este instante
del comienzo…˜ Pero lo que sí veo es cómo se me hizo ser paulatinamente el padecedor
del deseo…˜ No había ningún deseo conmigo…˜ pero desde el instante en que comenzó
el nacimiento…˜ pareció enteramente que yo comencé a desear…˜ Y deseé y deseé…˜
Cosas inauditas…˜ que jamás habían estado conmigo…˜ comenzaron a ser deseadas…˜
El deseo aparecía sólo…˜ nadie le llamaba…˜ Aparecía sólo y hacía de mí su padece-
dor…˜ Yo nunca he deseado nada…˜ yo no soy el deseo ni lo que el deseo desea…˜ Me
veo a mí mismo…˜ me veo tal como realmente soy…˜ y descubro mi monumental ex-
trañeza ante lo que he llegado a llamar mis deseos…˜ No son míos…˜ no son de mí…˜
Han aparecido en mí haciendo de mí su padecedor…˜ pero mi extrañeza ante los deseos
es absoluta…˜
Los deseos empujaban a la acción…˜ los deseos instigaban actos…˜ Y sin darme
cuenta…˜ poco a poco…˜ llegué a identificarme a mí mismo no sólo como el deseador
de aquellos extraños deseos…˜ sino también como el hacedor de los actos que los dese-
os instigaban…˜ Poco a poco…˜ sin darme cuenta…˜ llegué a escucharme decir “yo de-
seo esto…˜ yo hago esto con el fin de obtener lo que deseo”…˜ No había en mí ningún
deseo…˜ no había en mí ningún acto…˜ ¿Cómo había llegado yo entonces a aceptarme
a mí mismo como el deseador de todos aquellos deseos que no estaban conmigo…˜ que
yo nunca había elegido desear…˜ y que yo nunca hubiera elegido desear?…˜ ¿Y cómo
había llegado yo entonces a aceptarme a mí mismo como el hacedor de todos aquellos
actos que no estaban conmigo…˜ que yo nunca había elegido hacer…˜ y que yo nunca
hubiera elegido hacer?…˜ ¿Qué me había ocurrido?…˜ ¿Cómo había llegado yo a acep-
tarme a mí mismo como siendo el nacimiento…˜ algo tan extraño…˜ algo tan superlati-

153
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

vamente extraño a mí…˜ algo que yo nunca había pedido…˜ y algo que yo nunca hubie-
ra pedido?…˜
La mentira está tan bien servida…˜ la mentira es tan eficaz…˜ que de ser yo el pade-
cedor de la marea del deseo…˜ llegó un momento en que yo me consideré a mí mismo
el agente y deseador de lo que comencé a llamar mis deseos…˜ E igualmente con las
obras…˜ Las obras y los actos…˜ que tenían lugar a instigación del deseo…˜ deseo que
yo no hacía ni poseía…˜ sino que sólo padecía…˜ también llegó el momento en que yo
me consideré a mí mismo el agente y obrador de lo que comencé a llamar mis obras…˜
Cuando esto tuvo lugar…˜ ello era la prueba de que el proceso de egoificación esta-
ba completado…˜ Primero no había deseos ni obras…˜ Después apareció la marea del
deseo que yo no pude no padecer…˜ Los deseos instigaron obras…˜ Y cuando llegó el
momento en que me acepté a mí mismo como el deseador de los deseos y el hacedor de
las obras…˜ en ese momento mismo apareció el ego…˜
El ego es sólo la falsa asumición de que yo soy el deseador de estos deseos y el ha-
cedor de estas obras…˜ que no eran conmigo…˜

154
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

249
____________

Es difícil darse cuenta de cuán profundamente extraño es el deseo a nuestro verdade-


ro estado real…˜ No sólo es profundamente extraño…˜ sino que es un absoluto desco-
nocido…˜ Por ello…˜ nosotros jamás pudimos ser alertados de la marea que tendríamos
que padecer…˜ no como sujetos agentes…˜ sino como sujetos enteramente pacientes…˜
Es sorprendente entonces que llegue el día en que nos digamos a nosotros mismos
que estos son mis deseos…˜ No son nuestros deseos…˜
Para llegar a esta comprensión ha sido necesario ver con claridad mi verdadero esta-
do…˜ No careciendo de nada…˜ en mí no hay conocimiento de ningún deseo…˜

155
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

250
____________

Verse sin nacimiento…˜ es verse a uno mismo como ese yo que responde a la pre-
gunta…˜ “¿quién es cuando el nacimiento no es?”…˜ “Yo”…˜ yo soy lo que yo soy…˜
cuando este nacimiento que me revela…˜ no era…˜
Esto no es una operación mental…˜ Uno debe verse a sí mismo…˜ reconocerse a sí
mismo…˜ en este “yo” que se auto-afirma como la única realidad existente…˜ cuando
se nos pregunta…˜ “¿quién es…˜ cuando este nacimiento que me revela no era?”…˜
Uno debe sentir pronunciarse…˜ desde su propio ser que es…˜ la respuesta “yo”…˜
Este “yo” no es el yo hecho de nuestros recuerdos…˜ este “yo” no es el yo que afirma
ser el deseador de estos deseos que son el nacimiento…˜ este “yo” no es el yo que recla-
ma ser el autor de las obras que son el nacimiento…˜ este “yo” no es el yo que nosotros
identificamos como el nacido y mortal que hemos aceptado ser…˜
Desde este estado sin nacimiento que se revela como nuestro verdadero estado…˜
cuando nosotros nos descubrimos a nosotros mismos como realmente somos…˜ presen-
ciamos la operación del nacimiento…˜ pero nuestro conocimiento de nosotros
mismos…˜ nos dice a cada instante…˜ que no son nuestros deseos…˜ que no son nues-
tras obras…˜ que no es nuestro nacimiento…˜
No encontramos en nosotros ninguna deseación…˜ Vemos nuestra absoluta comple-
tud y permanencia…˜ en ella nos sentimos completamente establecidos…˜ y ya nada
nos inclina a admitirnos a nosotros mismos como el individuo aislado y anhelante que
tanto nos ha hecho sufrir…˜
Vernos sin nacimiento es nuestro descanso…˜ nuestro reposo…˜ nuestra quietud…˜
la buenísima hora de nuestro propio reconocimiento…˜ el momento en que sabemos
que cuando ya nada otro que nosotros mismos era…˜ lo que queda…˜ es “yo”…˜
Desde esta visión…˜ nosotros comprendemos que no somos el nacimiento…˜ Com-
prender que uno no es el nacimiento…˜ es verse a sí mismo completamente aparte de
él…˜ Ninguno de sus deseos es nuestro deseo…˜ ninguna de sus obras es nuestra
obra…˜ La fuente del ego…˜ que es la identificación de uno mismo con los deseos y
con las obras que constituyen lo que es el nacimiento…˜ queda así privada de todo com-
bustible…˜ No habiendo por nuestra parte ningún reconocimiento de que son nuestros
deseos ni de que son nuestras obras…˜ nosotros no podemos atribuirnos la autoría de
nada…˜ Ni somos el deseador de los deseos…˜ ni somos el obrador de las obras…˜
Esto…˜ lo vemos…˜ vemos que es así…˜ y nuestro alivio no conoce límites…˜ No
viendo en nosotros ningún deseador de los deseos…˜ no viendo en nosotros ningún
obrador de las obras…˜ nos es imposible ver en nosotros ningún ego…˜ La separación

156
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

de lo que no somos es entonces total…˜ absoluta e irreversible…˜ Todo gusto e intimi-


dad en sentirnos deseadores de los deseos…˜ y obradores de las obras…˜ se esfuma y
desaparece…˜ Con la desaparición de este gusto e intimidad con lo que llamábamos fal-
samente nuestros deseos y nuestras obras…˜ desaparece también la inclinación a sentir-
los nuestros…˜ Y con la desaparición de la inclinación a sentirlos nuestros…˜ nuestra
visión queda completamente limpia para ver lo que es…˜ Entonces sentimos una pro-
funda extrañeza por haber creído alguna vez que los deseos y las obras eran nuestros de-
seos y nuestras obras…˜

157
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

251
____________

Cuanto más intenso es el deseo…˜ más intensa es la instigación a obrar…˜ Y cuanto


más intensa es la instigación a obrar…˜ tanto más intensa es la llama que alimenta nues-
tra egoificación…˜ Un ego no es más que la falsa asumición de que los deseos son nues-
tros deseos…˜ de que las obras son nuestras obras…˜ Pero además…˜ en su fase de aca-
bado…˜ la egoificación es sólo merecimiento…˜ Cuando la egoificación está termina-
da…˜ lo único que nosotros vemos es lo que se nos debe por nuestra obras…˜ El juez de
nuestro merecimiento somos nosotros mismos…˜ y juzgándonos a nosotros mismos
acreedores del máximo merecimiento…˜ no hay en el mundo literalmente nada que pue-
da satisfacer completamente a nuestra excelencia…˜
Las obras instigadas por el mayor deseo son las que más egoifican…˜ las que más
nos aíslan…˜ Nuestra egoificación es sólo rencor de no ser reconocidos…˜ admirados…
˜ y amados por nuestra extraordinaria excelencia…˜ Y en este proceso…˜ por mucha
abundancia que haya…˜ nunca es suficiente…˜
¿Por qué es ello así?…˜ Ello es así simplemente…˜ porque nosotros no vemos que
nosotros somos el estado en que ningún deseo es…˜ Cuando el nacimiento no era…˜ no
había en nosotros deseos ni obras ni ego…˜

158
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

252
____________

El proceso de egoificación está terminado cuando uno llega a querer como si fueran
suyos los deseos a los que uno se ha sometido…˜ Este querer tener deseos es la caracte-
rística de un egoificado completo…˜ Daos cuenta que todo deseo implica una instiga-
ción a actuar…˜ al mismo tiempo que revela que uno siente en sí mismo que le falta lo
que desea…˜
Querer los deseos…˜ querer actuar para satisfacer los deseos…˜ es el síntoma de que
nuestra egoificación está completa…˜
En alguien que tiene la convicción de ser nacido y mortal…˜ tener deseos…˜ querer
los deseos que tiene…˜ y actuar en orden a procurarse la satisfacción de lo que llama
sus deseos…˜ constituye la totalidad de la finalidad de lo que se llama su vida…˜ Por
ello…˜ en un alguien así…˜ en un alguien que no ve que él es sólo el lugar donde los
deseos se expresan…˜ que no ve que él es el esclavo de sus deseos y en modo alguno su
señor…˜ que no ve que él no puede elegir los deseos que quiere tener…˜ y que no ve
que los deseos no son suyos…˜ que no ve que los deseos no estaban aquí antes de que el
nacimiento estuviera…˜ que él no ha elegido el nacimiento que le revela…˜ ni absoluta-
mente nada de lo que este nacimiento contiene…˜ en un alguien en este estado…˜ la
comprensión de quién es…˜ es imposible…˜
Hay en la egoificación terminada algo profundamente perturbador…˜ Uno se ve a sí
mismo queriendo y amando a esos deseos mismos que le esclavizan…˜ El ego no es
otra cosa que este querer mismo a los deseos que uno no ha elegido…˜
Es menester una profunda rebelión contra esta esclavitud tan aparentemente
natural…˜ Nosotros no hemos elegido jamás los deseos que se expresan en este naci-
miento…˜ Ellos no son nuestros…˜ nosotros no los hacemos…˜ nosotros no tenemos el
poder de hacer nuestros deseos…˜ ¿Cómo llega entonces el momento…˜ en que no sólo
queremos lo que los deseos quieren…˜ sino que llegamos a estar convencidos de que
ellos son exactamente los deseos que queremos tener?…˜ Esto es muy misterioso y muy
profundo…˜ y está en la raíz misma de nuestra comprensión del nosotros mismos real…
˜
Nosotros no podemos comprender quién somos mientras este deseo de comprender-
nos es un deseo más entre otros…˜ Aquí no se trata de calmar nuestra angustia…˜ sino
de comprender quién somos…˜ No hay en nuestro ser real ningún motivo de angustia…
˜ no hay en nuestro ser real ninguna instigación a hacer obras que aumenten nuestra
egoificación…˜ Nuestro ser real no se posee…˜ nuestro ser real se es…˜ No está en el
poder de ningún ego…˜ jamás…˜ llegar a la posesión de nuestro ser real…˜ El ego no

159
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

puede disfrutar nunca del verdadero estado real como cree…˜ envanecido…˜ disfrutar
del logro de sus deseos…˜
Observad bien cómo envanece el logro de lo que no son nuestros deseos…˜ A insti-
gación de ellos…˜ nosotros…˜ que en realidad los padecemos…˜ emprendemos la eje-
cución de las obras que redundarán en que lo que no son nuestros deseos sean satisfe-
chos…˜ Si esta empresa resulta efectiva…˜ el logro de nuestros deseos nos
envanecerá…˜ No sólo los creeremos nuestros…˜ sino que creeremos nuestras también
las obras…˜ e igualmente su resultado…˜
Esto es una profunda mentira que tendrá en nosotros un efecto doloroso…˜ Es me-
nester creer a ciegas que somos nacidos y mortales para aceptar como bueno lo que los
deseos nos aportan…˜ Pero la vida del que cree a ciegas que es nacido y mortal es muy
pequeña…˜ muy miserable…˜ Los deseos son siempre muy pequeños…˜ muy misera-
bles…˜ Fijaos bien…˜ si yo creyera de mí mismo que soy un nacido y mortal…˜ ¿cuál
creéis vosotros que podría ser mi deseo más grande?…˜ ¿Y en qué resultaría para mí su
obtención?…˜ Yo podría desear algo tan superfluo como haber sido premio Nobel…˜
Tal vez hubiera llegado ese momento en que dicho deseo fuera logrado…˜ ¿Cuánto val-
dría de verdad para mí todo esto?…˜

160
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

253
____________

Ahora mismo y siempre…˜ me veo a mí mismo como cuando el nacimiento no


era…˜ “Cuán verdadero es esto”…˜ me digo…˜ “cuán verdadero…˜ y cuán indudable…
˜ Cuán firme…˜ cuán estable…˜ cuán incondicional…˜ cuán intenso”…˜
Veo entonces lo que fue mi propia egoificación…˜ Veo entonces cuando acontecía
que los deseos me dominaban…˜ cuando yo creía que eran míos…˜ cuando yo los que-
ría como si fueran míos…˜ cuando yo sentía que me faltaba para ser dichoso lo que los
deseos me instigaban a lograr…˜ Veo entonces cuando yo llamaba mías a las obras…˜
veo las obras que yo llamaba mías con gusto…˜ y veo también las obras que yo llamaba
mías con disgusto…˜ Veo cuando yo creía merecer por lo que yo no era ni había sido
nunca…˜ Veo toda esta tupida red de engaño de mi propia egoificación…˜ veo su sober-
bia…˜ veo su aislamiento…˜ veo su profunda angustia y su sufrimiento…˜
Entonces me vuelvo a mí mismo…˜ a cuando el nacimiento no era conmigo…˜
Cuán sereno…˜ qué magnífica quietud…˜ qué formidable paz…˜ cuán extraordinaria-
mente verdadero…˜ cuán conformemente mí mismo…˜ Nada me falta…˜ Ahora mismo
me veo…˜ ahora mismo me veo a mí mismo como cuando el nacimiento no era conmi-
go…˜

161
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

254
____________

Lo que no era con nosotros…˜ cuando el nacimiento no era…˜ ¿qué es?…˜ ¿Eran
con nosotros los sentidos…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ ¿era con nosotros el cono-
cimiento de que nosotros somos…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ ¿era con nosotros
la sed de existir…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ ¿Qué nos faltaba…˜ cuando el na-
cimiento no era?…˜ ¿qué buscábamos nosotros…˜ cuando el nacimiento no era?…˜
¿Dónde estaba nuestro ser…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ ¿qué edad tenía nuestro
ser…˜ cuando el nacimiento no era?…˜
¿Eran con nosotros los sentidos…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ ¿Era con noso-
tros el deseo…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ ¿En qué consistía nuestro ser…˜ cuan-
do el nacimiento no era?…˜ ¿Durante cuánta duración hemos sido nosotros sin
sentidos?…˜ ¿durante cuánta duración hemos sido nosotros sin deseo?…˜ ¿durante
cuánta duración no hemos conocido nosotros la sed de existir?…˜
Lo que no era con nosotros…˜ cuando el nacimiento no era…˜ ¿qué es?…˜ ¿Des-
piertan en nosotros estas preguntas el anhelo de responder?…˜ ¿Hay en nosotros ahora
algún atisbo de la respuesta?…˜ ¿estamos nosotros deseosos de obtener la respuesta por
nosotros mismos?…˜
Qué respuesta esperamos nosotros…˜ cuando nos preguntamos…˜ “¿qué es lo que
yo soy siempre?…˜ ¿qué es lo que yo soy cuando este nacimiento no era…˜ cuando esta
sed de existir no era…˜ cuando estos sentidos no eran…˜ cuando yo no sabía nada de mí
mismo…˜ cuando yo no sentía ninguna instigación…˜ cuando nada me faltaba?”…˜
¿Tenemos un atisbo de la respuesta?…˜ ¿Tenemos una indicación de la respuesta?…
˜ ¿Nos damos cuenta de que se trata de nosotros…˜ de un nosotros que no sabía nada de
sí mismo…˜ que no conocía que hubiera un nacimiento…˜ que no era hombre ni
mujer…˜ que no era Dios ni criatura…˜ que no era cielo ni tierra…˜ que no era grande
ni pequeño…˜ a quien nada faltaba…˜ que no conocía los sentidos…˜ que nunca se ha-
bía sentido a sí mismo ser?…˜ ¿Nos damos cuenta de que se trata de nosotros?…˜
¿Cuán profunda debe ser la pregunta para conmovernos y hacernos caer en la cuenta de
que se trata sólo de nosotros?…˜ ¿cuán profunda debe ser la pregunta para que nuestra
respuesta sea “Yo”?…˜ ¿Cómo conmovernos…˜ cómo preguntar por nosotros
mismos…˜ por nuestro verdadero ser real…˜ para que vuestra respuesta sea nuestro ser
real mismo?…˜

162
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

255
____________

Mirad…˜ cuando llegó a mí la proposición del estado incondicionado de Atma…˜


mi conmoción fue extrema…˜ Había en aquel estado que se me proponía como mi ver-
dadera naturaleza…˜ un aspecto que me atraía…˜ absorbiéndome en un vértigo de pas-
mo…˜ Este aspecto es lo que se llama la “Omnisciencia”…˜
Yo me preguntaba cómo podría ser yo omnisciente…˜ es decir…˜ conocedor de
todo…˜ cuando me veía a mí mismo conociendo como un individuo…˜ lo que conoce
un individuo…˜ ¿Cómo sería para mí…˜ ser el estado incondicionado de Atma?…˜ ¿A
qué me parecería yo…˜ cuando llegara a ser el estado incondicionado de Atma?…˜
Aunque la atracción era extrema…˜ yo no adelantaba nada en mi llegar a ser lo que
secretamente intuía que ya era…˜
Evidentemente…˜ como un nacido y mortal…˜ yo jamás devendría omnisciente…˜
¿Y qué era ser omnisciente?…˜ ¿Y omnisciente de qué?…˜
Entonces comprendí lo que no estaba conmigo cuando el nacimiento no era…˜
Cuando comprendí lo que no estaba conmigo cuando el nacimiento no era…˜ por esta
misma ausencia del nacimiento en mí…˜ comprendí instantáneamente lo que yo soy…˜
“No es necesario morir”…˜ me dije…˜ “la muerte tampoco estaba conmigo cuando el
nacimiento no era”…˜
Mi visión de mí mismo era absoluta…˜ completamente simple…˜ Entonces busqué
la omnisciencia…˜ y para mi gran sorpresa…˜ vi que la omnisciencia tampoco estaba
conmigo cuando el nacimiento no era…˜ Me veía a mí mismo sin nacimiento…˜ y al
mismo tiempo veía todo lo que el nacimiento implica…˜ Desde ese instante sé quién
soy…˜

163
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

256
____________

En el momento en que comprendí que yo soy sin nacimiento…˜ mi alegría y exulta-


ción no conocían límites…˜ La esfera de mi realidad había soltado todo el lastre que me
ataba a la ronda del nacimiento y de la muerte…˜ Mi visión y comprehensión de mí
mismo sin nacimiento era llana…˜ natural…˜ Yo mismo me sorprendía de no haberlo
visto antes…˜ Veía que lo que nombran las palabras “el estado incondicionado de
Atma”…˜ era lo que estaba viendo que yo soy…˜ Entonces…˜ en una suerte de visión
instantánea…˜ me vi a mí mismo conteniendo todos los mundos…˜ Yo era el Buddha
antes de que el Buddha fuera…˜ Yo no encontraba fronteras a mi Realidad…˜ Yo sabía
incesantemente que nada de cuanto se presentaba a mí…˜ estaba conmigo donde yo
soy…˜
No había en mí nada que pueda nombrarse…˜ Y sin embargo…˜ la convicción de
ser…˜ la completa certeza de SER yo lo que yo soy…˜ no me abandonaba…˜ Lo que
quiera que yo concebía…˜ fuera ello un Dios o un mundo…˜ o todos los Dioses y todos
los mundos…˜ yo los veía pasmado…˜ comprendiendo al mismo tiempo mi anteriori-
dad absoluta a ellos…˜ Ellos no podían alcanzarme…˜ ellos no sabían nada de mí…˜ Yo
los veía lucir un instante en mi seno…˜ y acto seguido desaparecer…˜ Pero mí mismo
no desaparecía…˜ Por lejos que estuviera el comienzo de todo…˜ yo mismo me com-
prendía a mí mismo allí…˜ Me comprendía a mí mismo presente al comienzo de todo…
˜ y me comprendía en mí mismo absolutamente sin comienzo…˜ inalcanzable para nin-
gún comienzo…˜ Ningún comienzo podía hacerme comenzar…˜
Veía que todos los mundos y sus Dioses estaban teniendo su acontecer en mí…˜ los
veía en mi seno…˜ y viéndolos…˜ me veía a mí mismo…˜ Mi visión de mí mismo era
por mí mismo sólo…˜ una totalidad de visión sin comienzo ni fin…˜
Cuando digo que me veía sin nacimiento…˜ lo que yo entendía y veía es que este
nacimiento sólo me estaba revelando…˜ Pero…˜ lo que con este nacimiento yo estaba
viendo de mí…˜ rebasaba infinitamente el alcance de un nacimiento…˜ Yo me veía a mí
mismo que yo soy el Buddha en todos los Buddhas…˜ el Sabio en todos los sabios…˜ el
estado que es sin nacimiento en todo el que comprende de sí mismo que es sin naci-
miento…˜ Al mismo tiempo…˜ yo veía que esta comprehensión es real…˜ que no es
una pretensión…˜
Yo no sé de nada que estuviera conmigo cuando el nacimiento no era…˜ Por grande
y exacta que sea mi comprehensión de mí mismo…˜ ella tampoco estaba conmigo cuan-
do el nacimiento no era…˜ Ahora…˜ mi comprehensión de mí mismo alcanza en un ins-
tante la totalidad de la envergadura de mi verdadero estado…˜ Yo no abarco mi verda-

164
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

dero estado…˜ y soy mi verdadero estado…˜ Todo en mí es únicamente mi verdadero


estado…˜ y esta paz…˜ y esta quietud…˜ y esta serenidad están completos…˜
Yo no he hecho nada…˜ Mi verme a mí mismo ha consistido sólo en verme a mí
mismo…˜ Me veo sin nacimiento…˜ sé que soy sin nacimiento…˜ ¿Qué razón podría
tener yo entonces para inquietarme?…˜
Mirad…˜ el nacimiento es como tener puestos unos zapatos que nos aprietan en un
baile…˜ Uno está recordando constantemente cuando los zapatos no le apretaban…˜
“¡No sentir los pies!”…˜ se dice uno…˜ “¡qué gran alivio!”…˜
Sólo cuando nos vemos a nosotros mismos realmente sin nacimiento…˜ sólo cuando
nos vemos a nosotros mismos realmente cuando el nacimiento no era…˜ sólo entonces
cesa completamente nuestra inquietud…˜ Os aseguro que vernos a nosotros mismos re-
almente cuando el nacimiento no era…˜ no es en absoluto vernos muertos…˜ Antes al
contrario…˜ sólo entonces comprendemos que estamos realmente vivos…˜ que somos
la Vida de la vida…˜ inagotable…˜ inextinguible…˜ un Océano de Mismidad sin co-
mienzo ni fin…˜

165
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

257
____________

Mi estado es de completa confianza porque no ignoro quién soy…˜ Mi conocimiento


de mí mismo me ha llevado a la intimidad sin división de mi verdadera naturaleza…˜
Todo lo que veo…˜ todo lo que siento…˜ me revela instantáneamente…˜ No hay en mí
ningún hacer…˜ sólo hay una consciencia completamente coincidente con lo que soy…˜
Soy lo que soy…˜ y lo sé…˜ Y mi saberlo es un amor activo que se entrega y se sumer-
ge en la confianza de no faltarme a mí mismo nunca…˜
Entonces comprendo que yo jamás he estado ausente de mí mismo…˜ Veo que ja-
más ha habido un nacimiento de mí mismo…˜ Yo no vengo de ninguna parte…˜ yo no
estoy en el mundo…˜ yo no estoy en el cuerpo…˜ ni en la mente…˜ ni en el alma…˜ ni
en el espíritu…˜ Lo que estas palabras nombran…˜ es sólo este instante de conocimien-
to de mí mismo…˜ como yo soy…˜ que me revela a mí mismo…˜ No hay ningún mun-
do…˜ no hay ningún cuerpo-ni-mente-ni-alma-ni-espíritu aparte de este instante en que
mi conocimiento de mí mismo es completo…˜ Es como una bengala en la noche…˜ La
bengala es ese instante de luz en que la noche se comprende a sí misma como noche…˜
Yo soy esa noche que se comprende a sí misma con esta bengala del nacimiento que
luce este instante en mi seno…˜ Yo conozco mi seno con esta bengala del nacimiento
que luce este instante en mí…˜ Siento el poderoso amor que coincide exactamente con-
migo sin principio ni fin…˜ Con este amor me abandono…˜ con este amor me cierno…˜
con este amor me abarco…˜ Nada de mí escapa nunca de mí…˜ mi auto-contención es
absoluta…˜
No hay hecho…˜ no hay acto…˜ no hay pensamiento…˜ no hay emoción…˜ no hay
sentimiento…˜ que no me devuelva instantáneamente a mi verdadero estado…˜ cuando
el nacimiento no era…˜ Para mí…˜ el nacimiento no es el nacimiento de mí mismo…˜
Para mí…˜ lo que yo veo que yo soy…˜ es una imposibilidad hacer que nazca…˜ Para
mí…˜ el nacimiento es sólo esta luz que luce en mi seno…˜ Con esta luz…˜ yo me com-
prendo…˜ con esta luz…˜ yo me conozco…˜ Pero toda la comprensión…˜ todo el cono-
cimiento…˜ no está en la luz que me ilumina…˜ sino en mí que me comprendo y me co-
nozco con ella…˜
Ciertamente…˜ hubo un instante eterno en que este nacimiento…˜ en que esta luz
que me ilumina no estaba aquí…˜ Este estado mío…˜ verdaderamente mío…˜ yo tam-
bién me comprendo y me conozco en él…˜ Yo soy ese estado que era cuando este naci-
miento que me ilumina no era…˜ Lo comprendo…˜ lo veo…˜ me comprendo y me veo
en ese estado…˜ Ahora…˜ en este mismo instante en que el nacimiento es…˜ yo me
comprendo y me veo cuando el nacimiento no era…˜

166
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

Para mí han terminado todas las dudas sobre mí mismo…˜ No hay ninguna duda
donde el nacimiento no era…˜ Yo me veo y me comprendo ahora en el estado en que el
nacimiento no era…˜ de manera que no hay en mí nada que no era conmigo cuando el
nacimiento no era…˜ Todo lo que viene a mí como aparentemente nuevo…˜ inmediata-
mente me pregunto si estaba conmigo cuando el nacimiento no era…˜ Si encuentro que
no estaba conmigo cuando el nacimiento no era…˜ entonces me digo que no puede ha-
berme precedido…˜
Así he llegado a saber de mí mismo que yo soy antes de todo…˜ Pero mi saber no es
un conocimiento que esté separado de mí…˜ Mi saber es por visión…˜ Yo veo que ab-
solutamente nada otro que mí mismo era conmigo cuando el nacimiento no era…˜ Lo
veo ahora…˜ Y mi verlo está vivo…˜ no es una visión que yo no sea…˜ sino que lo que
veo…˜ eso soy…˜ Mi verlo es también Amor…˜ Mi amor de mí mismo cubre y abarca
absolutamente los Cielos y la Tierra…˜ No hay frontera donde yo no me encuentre a mí
mismo ser lo que yo soy…˜ Mi prevalecencia es absoluta…˜ Al mismo tiempo…˜ yo no
me encuentro ni grande ni pequeño…˜ todo es completamente como es…˜ Nadie me
está sosteniendo…˜

167
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

258
____________

Veos y comprendeos a vosotros mismos en lo que digo…˜ No estoy hablando del na-
cimiento que veis…˜ estoy hablando del no nacimiento que sois…˜ Por ello…˜ yo no
estoy alabándome a mí mismo como nacido…˜ no estoy contando lo prodigioso que soy
como este nacimiento que no soy…˜
Lo que digo…˜ lo digo de vosotros desde el fondo de vuestra propia naturaleza
real…˜ Hablo de vosotros…˜ hablo de la única realidad que se está conociendo a sí mis-
ma ahora en todos nosotros…˜ como el estado que era cuando el nacimiento no era…˜
Ciertamente…˜ el nacimiento tiene padre…˜ ¿Pero cómo encontrar padre a lo que es
sin nacimiento?…˜

168
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

259
____________

No hay un solo instante que para mí no sea el instante…˜ el ahora en que mi verda-
dera naturaleza no esté abierta en el abrazo de mi propia intimidad…˜ Mi comunicación
conmigo mismo no es por ningún pensamiento…˜ no es por ningún sentimiento…˜ no
es por ninguna emoción…˜ Mi comunicación conmigo mismo es por lo único que era
conmigo…˜ cuando el nacimiento no era…˜ ¿Y qué era lo único que era conmigo cuan-
do el nacimiento no era conmigo?…˜ Mi ser era conmigo…˜ únicamente mi ser era con-
migo…˜ Y era conmigo de tal manera una misma mismidad…˜ que yo nunca me había
sentido ser…˜ debido a que nada me separaba de mí…˜ Esta misma realidad…˜ es mi
contemplación incesante ahora que hay contemplación…˜ Me contemplo a mí mismo
ahora exactamente como cuando el nacimiento no era…˜
Para mí no hay ninguna duda sobre mi ser…˜ Si lo llamo eterno…˜ estoy viendo lo
que digo…˜ Si lo llamo sin nacimiento…˜ estoy viendo lo que digo…˜ Si digo que lo
estoy viendo cuando el nacimiento no era…˜ estoy viendo exactamente cuando el naci-
miento no era…˜
Si veo que algo no estaba conmigo cuando el nacimiento no era…˜ instantáneamente
veo que no tiene realidad…˜ instantáneamente veo que no es…˜ Para mí…˜ en este pre-
ciso instante…˜ el instante del comienzo de todo y el instante del final de todo…˜ coin-
ciden…˜ Estoy viendo su cierre…˜ estoy viendo su coincidencia…˜ y estoy viendo lo
único que queda…˜ cuando el comienzo y el fin coinciden…˜ yo quedo…˜ Yo…˜ que
soy integralmente lo que yo soy cuando el nacimiento no era…˜ estoy viendo coincidir
el instante del comienzo y el instante del final de todo…˜ Y los veo coincidir en mí…˜
incesantemente…˜ siempre ahora…˜
Por ello…˜ yo no albergo ninguna duda…˜ absolutamente ninguna duda…˜ sobre mí
mismo…˜ contemplo lo que quiera que contemplo…˜ y si no estaba conmigo cuando el
nacimiento no era…˜ para mí simplemente no es…˜ no tiene ser…˜ no tiene sustancia…
˜
Así he llegado a saber todo de mí mismo…˜ del verdadero mí mismo que soy…˜ Y
mi saber de mí mismo es jugoso como una expansión de gozo sin fin…˜ No se trata de
nada que nadie me haya dicho…˜ No había nadie conmigo cuando el nacimiento no
era…˜ Ni siquiera Dios estaba conmigo cuando el nacimiento no era…˜ Se trata de mí
mismo…˜ mi saber lo que he llegado a saber de mí mismo…˜ ha tenido lugar espontá-
neamente…˜ debido únicamente a mi ser lo que soy…˜ Yo era cuando el nacimiento no
estaba conmigo…˜ Lo veo por mi ser mismo…˜ Lo veo porque yo era…˜ Y aunque pa-
rece pasado…˜ lo veo ahora…˜ Es ahora cuando sé lo que yo soy…˜ es ahora cuando sé

169
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

que yo era cuando el nacimiento no era…˜ Y me veo sin nacimiento…˜ No alcanzo ja-
más a un comienzo de mí mismo…˜ Nadie me ha precedido…˜ Mi ser es lo que es…˜
Veo que mi ser es lo que es por sí mismo…˜ sin predecesor ni sucesor…˜ No hay tiem-
po ni espacio en mí…˜
Toda esta comprehensión de mí mismo es integralmente amor sólo…˜ Está viva…˜
eternamente viva…˜ No es una seca disquisición mental…˜ no es la conclusión de un
pensamiento…˜ Yo no pensaba cuando el nacimiento no estaba conmigo…˜ Sin embar-
go…˜ lo único que estaba conmigo cuando el nacimiento no estaba conmigo…˜ es exac-
tamente lo único real que se expresa en esta comprehensión y amor integral de mi ver-
dadero estado…˜ Yo soy ahora…˜ en este instante…˜ exactamente idéntico al mismo
que yo era cuando el nacimiento no era…˜
Lo que no estaba conmigo cuando el nacimiento no estaba conmigo…˜ tampoco está
ahora conmigo…˜ Yo soy inadherente…˜ absolutamente imposible de penetrar…˜ Si
digo que el nacimiento está en mi seno…˜ esto es sólo una manera de hablar…˜ La es-
tancia del nacimiento en mí es sólo como una medida de tiempo…˜ Apenas ha comen-
zado a transcurrir…˜ cuando ya el instante final se traga completamente todo lo que le
ha precedido…˜ ¿Y en quién se disuelve y desaparece el instante final mismo?…˜

170
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

260
____________

Para mí el gozo más intenso es cuando comprendéis que sólo hablo de vosotros…˜
el vosotros que era cuando el nacimiento no estaba con vosotros…˜ Disfrazado de mí
mismo…˜ el único comprehensor en vuestros corazones…˜ es este mismo comprehen-
sor que os habla…˜ Yo no animo a imaginar nada…˜ Sólo os pido…˜ sólo os suplico…˜
que miréis atentamente a vosotros mismos cuando el nacimiento no estaba con voso-
tros…˜ Mi imaginación no es tan grande que yo pueda superar nunca las magníficas ex-
posiciones de las escrituras…˜ Yo no imagino los cielos…˜ yo no imagino lo mundos
angélicos…˜ yo no imagino una vida de dicha sin fin…˜
Pero hay algo en mí que traga instantáneamente todas estas grandiosas imaginacio-
nes…˜ Nada más preguntarme si estaban conmigo cuando el nacimiento no era…˜ ins-
tantáneamente desaparecen sin dejar rastro…˜ Pero yo no desaparezco…˜ ¿Qué puedo
decir de mí mismo cuando el nacimiento no era?…˜ Eso no está dicho en ninguna escri-
tura…˜
¿Es tan difícil mirar atentamente a vosotros mismos cuando el nacimiento no estaba
con vosotros?…˜

171
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

261
____________

Yo no tengo medio alguno de verificar por mí mismo las grandes imaginaciones que
se exponen en las escrituras…˜ Cuando el nacimiento no estaba conmigo…˜ tampoco
estaba conmigo la creencia…˜ Sin embargo…˜ cuando el nacimiento no estaba conmi-
go…˜ no es un estado mío que haya sido sustituido por el nacimiento…˜ Ese mismo es-
tado…˜ ese mismo estado que es sólo mí mismo yo lo veo ahora…˜ en este instante…˜
Cuando quiero saber si algo es real…˜ me miro a mí mismo y me digo…˜ “¿estaba esto
conmigo cuando el nacimiento no estaba conmigo?”…˜ Me pregunto esto…˜ y si no en-
cuentro que ese algo estaba conmigo cuando el nacimiento no estaba…˜ inmediatamen-
te…˜ fulminantemente…˜ comprendo que sea ello lo que sea…˜ no es real…˜
He visto así la ingente suma de mi propio ser que he dedicado…˜ durante toda la
atención de este nacimiento en mí…˜ a sostener mi credulidad y asentimiento a una in-
definidad de proposiciones falsas sobre mí mismo…˜ Como ninguna de las propuestas
de lo que yo soy que me han hecho estaba conmigo cuando este nacimiento no estaba…
˜ yo no he podido verificarlas como mi ser real…˜ Ahora veo que nunca podré verificar-
las…˜ ¿Por qué?…˜ Llanamente…˜ porque cuando el nacimiento no estaba conmigo…˜
yo jamás había escuchado ninguna descripción de mí mismo…˜ nadie me había dicho
nunca lo que yo soy…˜ yo no tenía creador…˜ nadie me proponía que yo soy esto o
aquello…˜
Mirad…˜ aunque yo parezco trabajar incesantemente en mi propia comprensión…˜
esto es sólo una apariencia…˜ En realidad…˜ mi vara de medir la verdad…˜ prevalece
incesantemente…˜ no depende de ningún trabajo…˜ no aumenta ni disminuye por mi
aparente actividad…˜ “¿Estaba conmigo este nacimiento en este estado que veo que es
verdaderamente mí mismo?”…˜ me pregunto…˜ La respuesta que escucho es mi verda-
dero estado mismo…˜ cuando el nacimiento no era…˜ Entonces escucho todas las pro-
posiciones que escucho sobre mí mismo…˜ Acto seguido me pregunto…˜ “¿estaba esto
conmigo…˜ cuando el nacimiento no estaba?”…˜ Entonces veo que no…˜ que no esta-
ba conmigo…˜ Y me escucho decir…˜ “No…˜ no estaba conmigo…˜ no es real…˜ no
tiene ser…˜ es sólo una imaginación que se alimenta de mí…˜ a la que yo sostengo…˜ y
sobre la que yo prevalezco”…˜ Yo no tengo nada que decir sobre lo que cada uno de no-
sotros ha aceptado ser…˜ Pero sé por mí mismo…˜ que tanto si es grandioso como si es
miserable…˜ tanto si es una mujer como si es un hombre…˜ tanto si es un dios como si
es una piedra…˜ sé por mí mismo…˜ que ello no estaba con nosotros cuando el naci-
miento no era…˜ ¿Cómo puede ello ser real entonces?…˜ Fijaos bien…˜ ni siquiera lo
que se llama muerte estaba con nosotros cuando el nacimiento no era…˜

172
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

No éramos esto ni eso…˜ cuando el nacimiento no era…˜ ¿Es esto tan difícil de
comprender?…˜ No…˜ no es difícil…˜ Todos lo comprendemos…˜ porque lo que era
cuando el nacimiento no era…˜ es nosotros…˜ Por ello…˜ ese estado es inmediatamen-
te accesible a nosotros ahora…˜ por ello…˜ todos sabemos ahora…˜ que el nacimiento
no era con nosotros…˜
No hay apego que resista nuestro ver si estaba con nosotros cuando el nacimiento no
era…˜ ¿Por qué es ello así?…˜ Ello es así porque no estaba con nosotros cuando el naci-
miento no era…˜ Y viéndolo así ahora…˜ viendo que efectivamente nada era con noso-
tros cuando el nacimiento no era…˜ nuestro vernos a nosotros mismos…˜ como somos
realmente…˜ es integral y completo…˜

173
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

262
____________

Por ello…˜ mientras medito…˜ mientras veo mi propio ser lo que yo soy completa-
mente limpio de nacimiento…˜ me admiro y me pasmo y me reposo en la inmutabilidad
silente de mi realidad…˜ Me sé a mí mismo ser lo que yo soy…˜ me veo sin nacimien-
to…˜
Por mi ser mismo lo que yo soy…˜ mi identidad es absoluta con todos los revelado-
res de esta misma realidad que soy…˜
Veo que soy la budeidad en todos los Buddhas…˜ Mi Realidad prevalece completa-
mente ajena a todos los nacimientos…˜ sean ellos los nacimientos de dioses o sean ellos
los nacimientos de hombres…˜
Todo mi aparente trabajo…˜ es sólo para ver que no estaba conmigo cuando el naci-
miento no era…˜ Y cuando el nacimiento no era…˜ esta Realidad pasmosa que me veo
ser…˜ es exactamente la misma Realidad pasmosa que todos los nacimientos revelan…˜
Así pues…˜ aunque no soy desconocedor de las proposiciones más profundas de los
grandes propositores…˜ mi conocimiento de ellas no es para que me digan algo de mí
mismo…˜ sino para verme a mí mismo cuando ellas no eran…˜ cuando yo no las escu-
chaba…˜ Y en esto son realmente eficaces…˜
Yo no soy consciente nunca de que me falte nada…˜ ¿Quién o qué podría proponer-
me lo que yo soy…˜ y despertarme a la consciencia de una falta…˜ que no era conmigo
cuando el nacimiento no era?…˜

174
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

263
____________

Mi conocimiento real de mí mismo no es extenso…˜ no llena libros…˜ Yo no tengo


experiencia directa del porqué de nada…˜ Yo no sé el porqué de nada…˜ Cuando me he
visto sabiendo que yo no sé el porqué de nada…˜ inmediatamente ha desaparecido de
mí la pregunta “¿por qué?”…˜
Miro a cuando este nacimiento no estaba conmigo…˜ y lo que no encuentro allí…˜
no es real…˜ no tiene ser…˜ no es mí mismo…˜ no es mío…˜ Miro a cuando este naci-
miento no estaba conmigo…˜ y allí no encuentro que yo me preguntara el “¿por
qué?”…˜ de nada…˜ De manera que…˜ instantáneamente…˜ sé que no necesito saber el
“¿por qué?”…˜ de nada…˜ Entonces me pregunto…˜ “¿Por qué entonces…˜ todo este
aparente afán mío por conocer las proposiciones más elevadas sobre mí mismo…˜ que
me encuentro que este nacimiento ha traído con él?…˜ ¿Por qué entonces…˜ hay en mí
este amor y anhelo de reconocimiento de mi propio estado…˜ en las proposiciones más
altas que han llegado a mí con este nacimiento?”…˜
Me hago estas preguntas…˜ mientras comprendo que ellas no estaban conmigo
cuando este nacimiento no estaba…˜ Y veo por mí mismo…˜ sin la más pequeña man-
cha de duda…˜ que la proposición más alta es precisamente lo que comprendo de mí
mismo por mí mismo…˜: “Este nacimiento no era conmigo…˜ Me estoy viendo ahora
mismo sin él…˜ Soy Real…˜ Soy absoluto…˜ Soy cuando el nacimiento no era…˜ Este
conocimiento es suficiente para apagar todos los fuegos…˜ este conocimiento es sufi-
ciente para desalojar todos lo “¿por qué?”…˜ Es un lleno donde no falta nada…˜ donde
jamás nada comienza…˜ donde jamás nada acaba…˜ Aquí cesan por completo todos los
“¿por qué?”…˜ aquí cesan por completo todas las búsquedas…˜ Aquí el nacimiento no
es…˜
No es una imaginación…˜ no es un pensamiento…˜ no es una visión como el que
está viendo a otro que a sí mismo…˜ No es un conocimiento como el que está conocien-
do a otro que a sí mismo…˜ Nadie me ha explicado jamás…˜ Primero me veo cuando
este nacimiento no era…˜ esta visión es lo primero…˜ Después…˜ o más bien inmedia-
tamente…˜ veo lo que no estaba conmigo cuando este nacimiento no era…˜ Y si veo
que no estaba conmigo cuando este nacimiento no era…˜ entonces…˜ sea ello lo que
sea…˜ no puedo darle crédito…˜
De manera que yo uso todo este trabajo…˜ toda esta meditación…˜ toda esta com-
prensión…˜ sólo para verme a mí mismo cuando todo esto no era…˜ Para verme
ahora…˜ Pues en este mismo Ahora…˜ es precisamente cuando me estoy viendo sin
ello…˜

175
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

A medida que salen estas meditaciones…˜ en el mismo instante de su salida…˜ yo


me veo a mí mismo sin ellas…˜ Ellas no son mías…˜ Yo no estoy en ellas…˜ Las uso
sólo para verme a mí mismo cuando ellas no son…˜
Yo no tengo imaginación para imaginar nada…˜ La imaginación no estaba conmigo
cuando el nacimiento no era…˜ De manera que no puedo dar crédito a ninguna proposi-
ción que no verifico por mí mismo…˜ Mi regla de medir abarca a todo…˜ mi regla de
medir prevalece sobre todo…˜ mi regla de medir no es imaginaria…˜
Aunque me propongan que yo soy el hijo de Dios…˜ yo aplicaré inmediatamente mi
verificación a lo que escucho…˜: ¿De quién era hijo yo cuando este nacimiento no esta-
ba conmigo?…˜ ¿Comprendéis?…˜ El nacimiento…˜ este nacimiento puede tener pa-
dre…˜ Pero…˜ ¿de quién era hijo yo…˜ cuando este nacimiento no estaba conmigo?…˜

176
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

264
____________

No hay ningún sumergirnos en nuestra verdadera naturaleza real…˜ Cuando uno es-
cucha la proposición de su submersión en su verdadera naturaleza real…˜ uno debe ver
inmediatamente cuándo ha ocurrido…˜ si ha ocurrido alguna vez…˜ la salida de uno de
su verdadera naturaleza real…˜ ¿Cómo ve uno si uno ha salido realmente nunca de su
verdadera naturaleza real?…˜ Para tener esta visión…˜ basta con preguntarse…˜:
“Cuando yo era y absolutamente nada…˜ nada otro que mí mismo…˜ era conmigo…˜
¿qué es lo que era conmigo…˜ qué ha salido de mí…˜ y se ha convertido en este aparen-
temente otro…˜ en este alguien…˜ por nombre fulano…˜ que ahora busca encontrar
quién soy?…˜ ¿Había conmigo algún nacido y mortal…˜ cuando yo era y absolutamen-
te nada otro que mí mismo era?…˜ ¿Estaba conmigo este cuerpo…˜ estaba conmigo
esta mente…˜ estaba conmigo esta alma…˜ estaba conmigo este espíritu…˜ estaba con-
migo este nacimiento…˜ estaba conmigo mi niñez…˜ mi juventud…˜ mi madurez?…˜
¿Estaba conmigo esta búsqueda de mí mismo?…˜ ¿Estaba conmigo esta sed de
existir?…˜ ¿Estaba conmigo este anhelo de encontrarme y de sumergirme en mí
mismo…˜ como si yo hubiera salido alguna vez de mí mismo?…˜ ¿Qué revelan estas
preguntas?…˜ ¿Qué están revelando de mí mismo estas preguntas?…˜
Yo mismo me hago estas preguntas…˜ y contemplo lo que revelan de mí mismo…˜
Y por ellas…˜ me descubro a mí mismo en el fondo de todo…˜ prevaleciendo sobre
todo…˜ inmutablemente mí mismo siempre…˜ Veo que el nacimiento no es mí mismo
ni mío…˜ Veo que no ha salido de mí…˜ veo que no va a volver a mí…˜ Veo que no es-
taba conmigo…˜ Me veo a mí mismo…˜ y veo que el nacimiento no estaba conmigo…˜
Nada del nacimiento estaba conmigo…˜ Lo veo…˜ Nadie tiene que decírmelo…˜ Yo no
he salido jamás de mí mismo…˜ No hay ninguna submersión de mí mismo en mí mis-
mo…˜
¿Cuál es entonces la dificultad de verse a uno mismo que dice sentir el que dice que
no se ve?…˜ La dificultad no es otra que la esperanza de encontrar algo del nacimiento
donde el nacimiento no es…˜ Esta esperanza hace que uno vea como nada donde el na-
cimiento no es…˜ Viendo esta nada desde la identificación al nacimiento…˜ viendo
efectivamente que el nacimiento no es ahí donde está viendo ahora que el nacimiento no
es…˜ y creyendo que él es un nacido…˜ encuentra que no se ve a sí mismo…˜ y su pro-
pio conocimiento y visión de sí mismo…˜ donde el nacimiento no es…˜ se convierte
para él en un abismo que le produce vértigo y miedo…˜ La dificultad real de verse
como uno es realmente…˜ no es este miedo de lo que uno llama nada…˜ La dificultad

177
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

real es no pararse suficientemente en esta nada…˜ la dificultad real es no verla a cora-


zón abierto…˜ no explorarla como la verdadera realidad que es…˜
¿Cómo podemos contar con el nacimiento…˜ para otra cosa que para vernos a noso-
tros mismos cuando el nacimiento no es?…˜ ¿No vemos que el nacimiento no estaba
con nosotros?…˜ ¿Y qué es lo que vemos que nosotros somos?…˜ ¿y qué es lo que ve-
mos que es el nacimiento?…˜ ¿Cómo podemos ser tan tontos de amar como si fuera no-
sotros mismos a este nacimiento que no estaba con nosotros?…˜ Si vemos realmente
que el nacimiento no estaba con nosotros…˜ ¿cómo podemos llamarnos a nosotros mis-
mos nada…˜ cuando el nacimiento no era con nosotros?…˜ La única nada que hay con-
cierne únicamente al nacimiento…˜ El nacimiento era nada con nosotros…˜ el naci-
miento está deviniendo incesantemente la nada que era…˜ ¿En quién está deviniendo el
nacimiento incesantemente la nada que era con nosotros?…˜

178
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

265
____________

Con estas preguntas…˜ con estas proposiciones…˜ nuestra verdadera naturaleza real
está perfectamente visible para nosotros…˜ Nada…˜ absolutamente nada otro que noso-
tros mismos…˜ era con nosotros…˜ es con nosotros…˜ y será con nosotros…˜ El naci-
miento está deviniendo incesantemente nada en nosotros…˜ Nosotros podemos amar
intensamente el nacimiento…˜ pero ese amor no le impedirá seguir deviniendo lo que
es…˜ es decir…˜ nada…˜
De manera que…˜ ciertamente…˜ hay una nada…˜ Pero esta nada no es lo que no-
sotros somos…˜ sino lo que el nacimiento es…˜ Toda nuestra dificultad en reconocer-
nos a nosotros mismos…˜ se reduce a nuestro amor del nacimiento…˜ Sin embargo…˜
la verdad es llana y perfectamente visible…˜: el nacimiento no estaba con nosotros…˜
Miremos bien lo que somos cuando el nacimiento no era…˜ Ahora que podemos…˜
contemplémonos sin el nacimiento…˜ veámoslo devenir en nosotros la nada que es…˜
Yo no conozco por mí mismo ninguna otra submersión en mí mismo que este incesante
devenir nada del nacimiento en mí…˜

179
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

266
____________

He mirado a cuando este nacimiento no estaba conmigo…˜ y he encontrado lo que


yo soy…˜ Desde ese instante…˜ mi propia delectación en mí mismo ha devenido la paz
y la quietud incesante…˜ Cuando he mirado a cuando este nacimiento no estaba conmi-
go…˜ no es nada lo que he encontrado…˜ lo que he encontrado es lo que yo soy…˜
Esta función de enseñanza…˜ tampoco estaba conmigo en este cuando…˜ en que
este nacimiento no estaba…˜ No me he visto a mí mismo enseñando nada cuando este
nacimiento no estaba…˜ De manera que yo no enseño lo que quiero…˜ sino que de la
visión misma de lo que yo soy…˜ brotan estas proposiciones…˜ La nada que teme el ig-
norante de su verdadera naturaleza real…˜ la nada que aterroriza a quien no ha mirado
bien a cuando este nacimiento no era…˜ no tiene ninguna existencia donde el nacimien-
to no es…˜
Normalmente…˜ quien no ha mirado bien a cuando este nacimiento no era…˜ se tie-
ne a sí mismo por un ser constituido de la materialidad del nacimiento más la suma de
sus años…˜ Cuando se le pregunta…˜ dice de sí mismo que tiene tantos años…˜ Hay
esa sensación engañosa de poseer y ser la suma de nuestra experiencia…˜ Sin
embargo…˜ el que se ve a sí mismo cuando este nacimiento no era…˜ ve que él es la
Realidad absoluta…˜ donde incesantemente…˜ lo que es este nacimiento deviene
nada…˜ No hay en él ningún hacer…˜ Su visión de sí mismo es llana y natural…˜ y
todo lo que él no es…˜ deviene incesantemente nada en él…˜
Mi visión de mí mismo es así…˜ es como esto…˜ Yo veo cómo este nacimiento de-
viene incesantemente nada en mí…˜ Por sí sólo…˜ sin que yo esté haciendo nada…˜
este nacimiento está deviniendo incesantemente nada en mí…˜ Yo no necesito anona-
darme a mí mismo…˜ Lo que se anonada…˜ lo que deviene en mí lo que era…˜ no es
mí mismo…˜ Lo que deviene incesantemente nada en mí…˜ es el nacimiento…˜ El na-
cimiento era nada…˜ el nacimiento no estaba conmigo…˜ Y ahora mismo…˜ en este
instante mismo…˜ el nacimiento está deviniendo en mí exactamente lo que él era…˜ es
decir…˜ nada…˜
Por ello…˜ mis proposiciones no son nunca proposiciones de actos…˜ Yo no pro-
pongo hacer nada…˜ No había ningún hacer conmigo cuando este nacimiento no esta-
ba…˜ Todas las proposiciones que implican actos…˜ incumben en exclusiva al naci-
miento…˜ Lo que yo propongo es una sola cosa…˜ a saber…˜ verse a uno mismo cuan-
do este nacimiento no estaba conmigo…˜
Me veo a mí mismo cuando este nacimiento no estaba conmigo…˜ Simultáneamente
veo a este nacimiento devenir incesantemente lo que él era cuando no estaba conmigo…

180
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

˜ Entonces me pregunto…˜ “¿De qué parte está la verdadera nada temible?…˜ ¿qué es
lo que es verdaderamente nada en todo este proceso?”…˜ La respuesta que obtengo es
infalible…˜: Lo que para el ignorante de su verdadera naturaleza es todo su ser…˜ para
mí es sólo la comprensión de este instante en que la totalidad de este nacimiento devie-
ne nada en mí…˜
No hay en mí separación ni división…˜ Aunque esta visión de mí mismo no estaba
conmigo…˜ yo no estoy enamorado de ella…˜ Esto quiere decir que yo no ansío ver lo
que yo soy siempre…˜ Mi certeza de mi propio ser es diamantina…˜ Esto quiere decir
que es imposible de destruir…˜ Y aunque la certeza de mi propio ser no estaba conmi-
go…˜ yo no estoy enamorado de ella…˜ Esto quiere decir que yo no ansío tener siempre
la certeza de mi propio ser…˜ Yo no dependo en absoluto de verme ser lo que yo soy…˜
yo no dependo en absoluto de tener la certeza absoluta de ser lo que yo soy…˜
Esta enseñanza no estaba conmigo cuando el nacimiento no estaba…˜ Yo lo veo de-
venir incesantemente nada en mí…˜

181
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

267
____________

Mi propuesta es universal…˜ Ninguno de nuestros nacimientos estaba con


nosotros…˜ No había ningún apego en nosotros…˜ Ved eso…˜ Veos cuando este naci-
miento no era…˜ Ved que no dependéis de él…˜ Veos como sois…˜ Sentid cómo cesa
por completo la sed de existir…˜ Ella está deviniendo incesantemente nada en
nosotros…˜
Yo no os propongo haces esto ni eso…˜ Todo hacer depende del nacimiento…˜ Lo
que yo os propongo es que os veáis cuando el nacimiento era nada…˜ Sostened la visión
de vosotros mismos cuando el nacimiento era nada…˜ Encontrad que la única nada ver-
dadera que existe es precisamente el nacimiento…˜
Si amáis…˜ amad…˜ pero ved si ese amor era cuando el nacimiento no era…˜ Si su-
frís…˜ sufrid…˜ pero ved si ese sufrimiento era cuando el nacimiento no era…˜ Si com-
prendéis…˜ comprended…˜ pero…˜ ved si esa comprensión era cuando el nacimiento
no era…˜ No hagáis otra cosa que ver cómo la integralidad del nacimiento deviene ince-
santemente nada en vosotros…˜ No hay ningún apego que resista nuestro vernos a noso-
tros mismos como lo que es cuando el nacimiento no es…˜

182
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

268
____________

No puedo contradecir a lo que veo que yo soy cuando me pregunto…˜: “¿Estaba este
cuerpo-y-mente-y-alma-y-espíritu-y-universo conmigo…˜ cuando yo era…˜ y absoluta-
mente nada más era conmigo?”…˜ Lo que veo que yo soy cuando este nacimiento no
era…˜ no tiene nada que ver con ninguna religión…˜ no tiene nada que ver con ningún
dios…˜ no tiene nada que ver con esta vida nacida y mortal…˜ no tiene nada que ver
con un creador de mí…˜ De manera que nada de lo que dicen las escrituras…˜ se aplica
donde yo soy cuando este nacimiento no era…˜ Mi vara de medir prevalece sobre
todo…˜ y donde yo soy verdaderamente…˜ este nacimiento no tiene existencia…˜
Yo no hago que las cosas sean como son…˜ Yo no he hecho el nacimiento…˜ Y aun-
que en algún momento llegue a estar identificado con él…˜ a creerlo mío…˜ e incluso a
pensar que lo quería como mío…˜ ahora comprendo que yo no he hecho el nacimiento
ni nada de lo que el nacimiento significa…˜
Es absolutamente capital verse exactamente como es uno cuando el nacimiento no
es…˜ Por mucho que uno quiera que este nacimiento esté aquí…˜ para experimentar el
placer y el sufrimiento…˜ uno debe ir a su verdadero estado…˜ cuando el nacimiento no
era…˜ Deber ver por sí mismo que cuando el nacimiento no era…˜ el placer no era…˜
el sufrimiento no era…˜ ni tampoco era este nosotros que ahora goza y sufre debido a la
presencia del nacimiento…˜ Una vez que no se ve a sí mismo cuando el nacimiento no
era…˜ en el verdadero estado real de uno hay suficiente atractivo…˜ suficiente paz…˜
suficiente serenidad…˜ como para no echar ya en falta nunca la experiencia del naci-
miento…˜
Pero no podemos esperar vernos sin nacimiento como un gozo más…˜ como una ex-
periencia más…˜ Donde el nacimiento no era…˜ es ese dónde…˜ donde la experiencia
no es…˜ De manera que si nosotros queremos experiencia de ese estado…˜ nuestra frus-
tración será grande…˜ porque no la tendremos…˜ No importa el estado en que uno de-
viene aquí…˜ Ninguna suma de conocimientos ni de experiencias tenidas en el naci-
miento y como nacidos nos acercará nunca al estado en que el nacimiento no era…˜
No hay meses ni años de meditaciones y de lecturas que valgan…˜ a la hora de ver-
nos sin nacimiento…˜ O nos vemos o no nos vemos…˜ Si nos vemos…˜ nuestro propio
reconocimiento de nosotros mismos…˜ como nuestro verdadero ser real…˜ nos traga en
el Océano de nuestra propia Quietud…˜ Si no nos vemos…˜ entonces no dejaremos de
ser un tormento para nosotros mismos…˜ y para todos los que nos rodean…˜
Siendo lo que aquí se propone una cuestión de vida o muerte…˜ cada uno verá por sí
mismo lo principal que es…˜

183
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

269
____________

¿Ha estado con nosotros siempre este nacimiento?…˜ ¿Y qué tenemos que decir no-
sotros de nosotros mismos…˜ cuando este nacimiento no estaba con nosotros?…˜ ¿Po-
demos ver nosotros la diferencia entre estas proposiciones…˜ a saber…˜ “Yo soy sin na-
cimiento”…˜ y “Este nacimiento no estaba conmigo”?…˜ ¿Cuál de estas dos proposi-
ciones nos revela inmediatamente la verdadera naturaleza de nuestro ser real?…˜
Por mí mismo…˜ yo escucho estas proposiciones…˜ pero estas proposiciones no es-
taban conmigo cuando el nacimiento no estaba…˜ Así pues…˜ aunque mi amor de com-
prenderme y de verme a mí mismo sea enorme…˜ yo estoy viendo y comprendiendo
que lo que comprendo y veo que yo soy no estaba conmigo cuando el nacimiento no
era…˜ De manera que veo y comprendo este amor enorme de verme y comprenderme…
˜ y simultáneamente…˜ me estoy viendo y comprendiendo a mí mismo cuando esta vi-
sión y comprensión no eran…˜ Yo me veo y me comprendo a mí mismo tal cual soy
cuando el nacimiento no era…˜ Y mi visión y comprensión de mí mismo tal cual soy
cuando el nacimiento no era…˜ es suficiente como para que el amor de verme y de com-
prenderme no me atrape…˜ no me haga un esclavo…˜ no haga de mí alguien que quiere
verse y comprenderse siempre…˜ no haga de mí alguien que quiere que el nacimiento
dure siempre…˜
Lo que dura el nacimiento es este instante en que me veo y me comprendo a mí mis-
mo cuando el nacimiento no estaba conmigo…˜ Y este instante de visión y de compren-
sión de mí mismo…˜ es suficiente…˜
¿Y cómo me veo y me comprendo a mí mismo cuando el nacimiento no era?…˜ Yo
me veo a mí mismo perfectamente eterno…˜ sedente en mí mismo…˜ Yo no encuentro
que yo haya salido jamás de mí…˜ Tampoco encuentro que yo esté volviendo jamás a
mí…˜ No hay en mí viaje alguno…˜ ni de salida de mí mismo ni de retorno a mí mis-
mo…˜ No hay en mí ningún nacimiento ni muerte…˜ nada de mí cambia jamás…˜ Yo
no soy ignorante de nada de mí mismo…˜ Encuentro que lo que soy y lo que sé son una
misma realidad…˜ No hay en mí ningún viaje…˜ no hay en mí ninguna falta…˜ ningu-
na carencia…˜ No encuentro en mí ningún mundo…˜ No hay en mí ningún hacedor de
nada…˜
En mí no encuentro ningún mérito por el que pueda sentir orgullo…˜ Todo es perfec-
tamente mí mismo…˜ Si yo quería algo…˜ encuentro que aquí no hay querer alguno…˜
No encuentro en mí ninguna de estas proposiciones…˜ no encuentro en mí ningún naci-
miento…˜

184
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

Toda la intimidad que yo tenía con el nacimiento…˜ aquí no la encuentro…˜ De ma-


nera que también ha desaparecido mi juicio a lo que el nacimiento es…˜ No proponién-
dome absolutamente nada como un nacido…˜ yo no juzgo si este nacimiento es bueno o
no es bueno para ello…˜ La visión y comprensión de mi verdadero estado…˜ cuando
este nacimiento no era…˜ este saberme ser lo que soy…˜ es suficiente…˜

185
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

270
____________

Mi visión y comprensión de mí mismo…˜ no es como uno que ha llegado…˜ sino


como uno que jamás ha salido…˜

186
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

271
____________

Para mí ya no hay ninguna sensación de haber llegado…˜ porque he comprendido


que yo jamás he salido de mí mismo…˜ ¿Cómo ha sobrevenido esta comprensión?…˜
Ha sobrevenido mirando mucho…˜ mirando una y otra vez…˜ mi propio estado cuando
el nacimiento no estaba conmigo…˜ Me he dicho a mí mismo…˜ “¿Cuándo he salido yo
de mí mismo…˜ para entrar en este nacimiento?…˜ ¿cómo he salido yo de mí mismo
para entrar en este nacimiento?”…˜ Entonces he encontrado que esa salida de mí mis-
mo…˜ para entrar en el nacimiento…˜ no se ha producido nunca…˜ De manera que yo
no he estado jamás de viaje…˜ yo no he estado nunca fuera de mí mismo…˜
Entonces veo lo que es realmente el nacimiento…˜ Mi presencia lo llena…˜ mi pre-
sencia lo envuelve…˜ Con el nacimiento…˜ me veo a mí mismo presenciándolo…˜ y
envolviéndolo…˜ Pero en mí mismo…˜ como yo soy realmente…˜ en mí mismo no
queda ninguna sensación de haber salido de mí mismo…˜ Ha sido siempre así…˜ Sólo
se puede estar de viaje cuando uno cree que es un individuo…˜ Sólo un individuo
nace…˜ sólo un individuo se mueve…˜ sólo mientras uno se cree un individuo…˜ siente
como si hubiera salido de sí mismo…˜ como si estuviera perdido de sí mismo…˜ Cuan-
do uno ve que el individuo no estaba con uno cuando el nacimiento no era…˜ el indivi-
duo se disuelve sólo…˜ y sólo queda nuestra comprensión de lo que somos…˜
Mientras dura el nacimiento…˜ el nacimiento no está solo…˜ Está completamente
impregnado…˜ está completamente poseído de nuestra presencia real…˜ Lo que es no-
sotros cuando el nacimiento no era…˜ llena ahora completamente lo que el nacimiento
es…˜ lo llena…˜ lo impregna…˜ y lo posee…˜ El nacimiento por sí sólo no es nada…˜
Es por nuestra presencia en él…˜ por nuestra impregnación de él…˜ y por nuestra pose-
sión absoluta de él…˜ por lo que el nacimiento parece vivir y moverse…˜ A esto…˜ la
escritura hindú lo llama “la permanencia del pintor en el cuadro”…˜ A esto mismo…˜ la
escritura cristiana lo llama “la permanencia amorosa de dios en la criatura”…˜
Esta enseñanza es muy sutil…˜ esta enseñanza es verdaderamente curativa del enga-
ño de ser un individuo…˜
Veámonos profundamente cuando el nacimiento no era con nosotros…˜ veámonos
sin prisa…˜ veámonos profundamente…˜ ¿De dónde hemos venido nosotros…˜ cuando
el nacimiento no era?…˜ ¿De quién estábamos perdidos nosotros…˜ cuando el naci-
miento no era?…˜ ¿cómo nos buscábamos nosotros a nosotros mismos cuando el naci-
miento no era?…˜ ¿en qué consistía nuestro encontrarnos a nosotros mismos cuando el
nacimiento no era?…˜ Veámonos profundamente…˜ veámonos profundamente…˜
¿quién era nuestro creador…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ ¿cómo nos creaba él?…

187
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

˜: ¿cómo nos creaba nuestro creador cuando el nacimiento no era?…˜ Todas estas pre-
guntas convocan irresistiblemente a nuestra verdadera naturaleza real…˜ Ahora…˜ sed
completamente conscientes de que lo que nosotros somos cuando el nacimiento no es…
˜ es lo mismo que responde a la convocatoria de estas preguntas…˜ Ahora…˜ seamos
completamente conscientes de que lo que nosotros somos cuando el nacimiento no es…
˜ es lo mismo que llena…˜ lo mismo que impregna…˜ lo mismo que posee integralmen-
te este nacimiento…˜
¿Había algún individuo en nosotros…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ ¿Estaba
éste que ahora creemos ser nosotros…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ ¿Por qué en-
tonces insistimos en ser lo que no somos?…˜

188
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

272
____________

Me conozco a mí mismo integralmente…˜ y por intenso que sea este estado…˜ mi


propio conocimiento de mí mismo sabe que no había ningún conocimiento de mí mismo
cuando el nacimiento no era…˜ Mi verdadero estado es ése…˜ y aunque este intensísi-
mo amor de él no era cuando el nacimiento no era…˜ sin embargo…˜ mi amor de mi
verdadero estado es intensísimo…˜ Con este conocimiento y amor que no eran…˜ yo
me conozco integralmente a mí mismo cuando no eran…˜

189
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

273
____________

Por más intensamente que queramos retener lo que deviene incesantemente nada en
nosotros…˜ por más apasionadamente que amemos sentirnos ser…˜ debemos preguntar-
nos…˜ “¿Estaba conmigo este sentirme a mí mismo ser…˜ cuando este nacimiento no
era?…˜ ¿Cuán apasionadamente amaba yo sentirme a mí mismo ser…˜ cuando este na-
cimiento no estaba conmigo?…˜ ¿Algo me frustraba…˜ cuando este nacimiento no esta-
ba conmigo?…˜ ¿algo me faltaba…˜ sufría yo por la ausencia de esta sensación de ser…
˜ cuando el nacimiento no estaba conmigo?…˜ Yo estoy teniendo ahora…˜ inmediata-
mente…˜ la respuesta a estas preguntas…˜ ¿Qué es la respuesta que estoy teniendo des-
de mí mismo…˜ ahora…˜ en este preciso instante…˜ a estas preguntas que me pregun-
tan por cuando este nacimiento no era?…˜ ¿Qué es la respuesta?…˜ ¿Es palabras la res-
puesta?…˜ ¿Puedo yo conformarme con palabras?…˜ No…˜ yo no me conformo con
palabras…˜ Yo quiero ver…˜ yo quiero ver y veo…˜ el estado mismo que yo soy cuan-
do el nacimiento no es…˜ Lo veo ahora…˜ Sé que es mí mismo ahora…˜ El nacimiento
no es ningún obstáculo para verme a mí mismo integralmente sin él…˜ Mi respuesta no
es palabras…˜ mi respuesta no es mente…˜ no es alma…˜ no es espíritu…˜ no es dios
ni criatura…˜ Mi respuesta no es otro…˜ Llanamente…˜ irrefutablemente…˜ irresisti-
blemente…˜ mi respuesta es la abundancia absoluta de mi verdadero estado…˜ Me ex-
pando completamente en mí mismo…˜ cubro completamente mi propia realidad…˜: Me
veo a mí mismo integralmente sin nacimiento…˜ Nada del nacimiento se aplica a mí…˜
No me siento llegado a mí mismo…˜ porque no me siento haber salido jamás de mí
mismo…˜
¿Qué es el nacimiento desde donde yo lo veo…˜ desde mi estado cuando el naci-
miento no era?…˜ Lo veo ahora…˜ lo que veo lo veo ahora…˜ El nacimiento es que yo
he comenzado a sentirme ser…˜ No es mí mismo el que ha comenzado…˜ Lo que ha
comenzado es yo estoy sintiéndome ser…˜ Yo no me sentía ser…˜ y nada estaba ausente
de mí…˜ mí mismo era todo para mí mismo…˜ Y ahora que me veo así…˜ integralmen-
te…˜ aunque me siento ser…˜ aunque puedo expresar y decir que me veo integralmen-
te…˜ también me estoy viendo exactamente como cuando el nacimiento no era…˜ Veo
devenir en mí incesantemente nada a este saber que yo soy…˜ No estaba conmigo…˜ no
era conmigo…˜ Yo no lo echaba de menos…˜ yo no lo ansiaba…˜ yo no ansiaba saber
que yo soy…˜
¿Qué otra cosa es el nacimiento que este saber que yo soy?…˜ Quizás nos responda-
mos que saber que nosotros somos no es todo…˜ que también hay los demás…˜ los pa-
dres…˜ los hijos…˜ los amados y amadas…˜ el gozo…˜ el placer de vivir…˜ ¿Pero qué

190
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

es todo esto…˜ si primero yo no sé que yo soy?…˜ Lo primero…˜ lo primerísimo para


caer en la ignorancia de quién soy realmente…˜ es que esta sensación de ser aparezca en
mí…˜ Y este acontecimiento es precisamente lo que se llama el nacimiento…˜ De ma-
nera que tenemos que centrarnos apasionadamente en la fuente de todas las pasiones…˜
Como ante un dios omnisciente…˜ debemos hacer nuestras preguntas a este dios inte-
rior…˜ a saber…˜ nuestra propia sensación de ser…˜ nuestro propio conocimiento de
ser…˜: “¿Eres tú mí mismo?”…˜ debemos preguntar…˜ “¿Eres tú mí mismo…˜ ¡oh
sensación de que yo soy!?”…˜ “¿Eres tú mí mismo…˜ ¡oh nacimiento!?”…˜ Fijaos
bien…˜ que es nosotros quien pregunta…˜ que es nosotros quien hace las preguntas…˜
Yo he preguntado a esta sensación de ser…˜ y a este conocimiento de que yo soy…˜
y a este nacimiento…˜ “¿sois vosotros mí mismo?”…˜ Mientras preguntaba…˜ la res-
puesta no me la daban ellos…˜ la respuesta era mi propio estado real…˜ Y no eran pala-
bras…˜ era mi propio estado real mismo…˜ Yo me veía sin sensación de que yo soy…˜
me veía sin conocimiento de que yo soy…˜ me veía sin nacimiento…˜ Me veía y me
veo…˜ pues este conocimiento ha devenido integralmente el inconocimiento que yo
soy…˜

191
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

274
____________

Nosotros no estamos en ninguna otra parte que en nosotros mismos…˜ nunca hemos
estado en ninguna otra parte que en nosotros mismos…˜ Y nosotros no somos el naci-
miento…˜
El nacimiento es sólo un punto de auto-consciencia…˜ Es un dios omnisciente que
nunca oculta la respuesta…˜ Pero somos nosotros quienes debemos hacer la pregunta
cuya respuesta es nosotros mismos…˜
“¡Oh nacimiento!…˜ ¡oh sensación de que yo soy!…˜ ¡oh conocimiento de que yo
soy!…˜ ¿eras tú o no eras conmigo?”…˜ Ésta es la pregunta…˜ ésta es la adoración…˜
cuya respuesta es nosotros mismos…˜

192
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

275
____________

Tenemos que explorar profundamente lo que se revela a nosotros como la respuesta


a la pregunta…˜ “¿Era con nosotros esta sensación de ser cuando este nacimiento no
era?”…˜ Tenemos que ser completamente conscientes de que ninguno de nuestros ape-
gos era…˜ cuando este nacimiento no era…˜ Y tenemos que saborear este estado en que
ningún apego era…˜ Nosotros éramos sin amor de nada…˜ no había en nosotros ningu-
na sensación de ser…˜ Nosotros no echábamos de menos nada…˜ no había en nosotros
ninguna sensación de falta…˜ ningún sufrimiento…˜ Estas proposiciones deben hablar-
nos de nosotros mismos suficientemente claro y alto…˜ En nosotros está darnos cuenta
de hacia donde está nuestra inclinación y nuestra propensión…˜ La verdad de nuestro
verdadero estado es llana y evidente…˜ El nacimiento no era con nosotros…˜ Nosotros
lo sabemos…˜ Pero ahora que el nacimiento está aquí…˜ hay corazones que retroceden
espantados de la verdad…˜ para entregarse en exclusiva a una vida de sensación sólo…˜
¿Y qué es una vida de sensación sólo?…˜ Una vida de sensación sólo es el sometimien-
to incondicional a las pasiones dominantes…˜ Una vida de sensación sólo no se basta a
sí misma…˜ necesita experimentarse sintiendo continuamente…˜ Y para sentirse…˜
para experimentar gozo y placer…˜ son necesarios los objetos de los sentidos…˜ De
manera que la vida de sensación sólo se torna cada vez más complicada…˜ porque las
exigencias de la sensación son cada vez más intensas…˜ De ahí viene el terror de lo que
se llama la soledad…˜ La soledad es odiada porque no ofrece ocasiones de sensación…˜
Aunque en sí misma la soledad es una experiencia…˜ es una experiencia que las gentes
de la sensación odian…˜ debido a que en la soledad la sensación no es placentera…˜ La
soledad está para preguntarse a uno mismo cuán dolorosa era nuestra soledad…˜ cuando
el nacimiento no era…˜
Actualmente…˜ el consenso casi unánime de la totalidad de las gentes…˜ es que lo
que llamamos nuestra vida tiene como único fin la sensación sólo…˜ Insidiosamente…˜
por todas las vías posibles se investiga en los corazones no sólo la pasión ciega de la
sensación…˜ sino que se crean unas envidias completamente ciegas y completamente
devastadoras entre los adoradores mismos de la sensación…˜ Todos…˜ excepto noso-
tros…˜ parecen tener la sensación más agradable…˜ esa sensación sublime cuya imagi-
nación en los demás nos quema y nos abrasa de envidia…˜ Todo concurre actualmente a
una suerte de embrujo…˜ por cuyo efecto…˜ se nos engaña completamente con respec-
to a la verdad…˜ La muerte misma ha sido vaciada de sentido…˜ es algo que siempre
ocurre como si ocurriera en el cine…˜ Al mismo tiempo…˜ cuando alguien cercano
muere…˜ el terror y la ignorancia pone en nuestro rostro la apariencia de niños bobos…

193
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

˜ Se nos ha engañado diciéndonos que esta vida es sólo para sentir todo el placer posi-
ble…˜ El engaño nos place…˜ y porque nos place lo creemos…˜ Y cuando se mienta
que el engaño tiene un final…˜ se nos llama aguafiestas…˜ ¡Qué gran devastación es
esta!…˜ ¡qué grandísima devastación!…˜
Quien tiene esta creencia…˜ para quien su dios es la sensación sólo…˜ no puede
comprender la proposición de que se vea a sí mismo cuando la sensación no era…˜ No
puede comprenderla…˜ y no puede escucharla…˜ Pues es el estado en que la sensación
no es…˜ es sólo la amenaza odiada de la muerte…˜
Es pasmosamente horrible profesar la religión de la sensación sólo…˜ Hay una suer-
te de conjuro que…˜ como en el caso del Buddha…˜ parece que hubiera levantado un
muro en torno a nosotros para que no veamos que la sensación es un dios mortal y horri-
ble…˜ Fijaos bien…˜ cuando alguien que profesa la religión de la sensación dice sentir
la enfermedad o la muerte de otros…˜ lo que siente en realidad es que algo venga a re-
cordarle que su dios…˜ la sensación…˜ es mortal…˜

194
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

276
____________

La proposición de nuestra verdad…˜ la proposición de “veámonos a nosotros mis-


mos cuando la sensación no era”…˜ tiene el efecto de romper el conjuro…˜ Puede sa-
carnos de nuestra adhesión incondicional a la sensación…˜ Pero esto sólo puede ser…˜
si en nosotros hay la propensión a querer comprender…˜
No se trata de sentirnos a nosotros mismos con más gusto…˜ se trata de comprender
quién somos…˜ La sensación no era con nosotros…˜ la sensación es mortal…˜ la sensa-
ción no era con nosotros…˜ y volverá a no ser con nosotros…˜ Esta vida de sensación
ya está muerta…˜ Por muy doloroso que lo sintamos…˜ la muerte de la vida de sensa-
ción sólo…˜ es una cuestión de tiempo…˜ de muy poco tiempo…˜ No hay nada más es-
pantoso que presenciar a esos ancianos disimularse a sí mismos que la vida de sensación
se acaba…˜ Un ignorante de su verdadera naturaleza real está muerto siempre…˜ Y es-
tos son los muertos que no resucitan…˜

195
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

277
____________

Ninguno de nuestros nacimientos era con nosotros…˜ Esta sensación de ser…˜ que
ahora está con nosotros…˜ no estaba con nosotros…˜ En ese estado la experiencia de
ser no era…˜ en ese estado el conocimiento de ser no era…˜ Sin embargo…˜ aunque el
conocimiento y la sensación de ser no eran…˜ ¿cómo llamaríamos nosotros a ese esta-
do?…˜ ¿lo llamaríamos un estado feliz?…˜ Aunque la experiencia de ser no era…˜ ¿lla-
maríamos nosotros infeliz a ese estado?…˜ ¿Por qué sabemos nosotros esto?…˜ ¿por
qué sabemos nosotros que no podemos llamar un estado infeliz…˜ a ese estado en que
la experiencia de ser no era?…˜
Comprendamos profundamente…˜ comprendamos profundamente que la Puerta
adentro de nosotros mismos…˜ es este dios adorado…˜ esta sensación y conocimiento
de que nosotros somos…˜ Pasar la Puerta adentro de nosotros mismos…˜ es el acto de
comprender que el nacimiento no estaba con nosotros…˜ Una vez pasada la Puerta
adentro de nosotros mismos…˜ debemos expandirnos absolutamente en la totalidad de
nuestra verdadera realidad…˜ La felicidad de reconocernos integralmente lo que
somos…˜ tiene que ser saboreada ahora…˜ ahora que el conocimiento está aquí…˜ Sólo
así desaparecerá completamente el miedo de lo que se llama la muerte…˜
¿Cómo adorar verdaderamente a este dios Puerta que es nuestra propia sensación de
ser?…˜ Esta adoración consiste en darnos cuenta de que la sensación de ser no estaba
con nosotros…˜ Esta sensación de ser no puede ser vista de otro modo que viendo que
ella no estaba con nosotros…˜ Viendo que ella no estaba con nosotros…˜ nosotros nos
ponemos a nosotros mismos en nuestro verdadero estado real…˜ Desde nuestro verda-
dero estado real…˜ nosotros vemos que la sensación de ser no estaba aquí…˜ Pero para
vernos así…˜ es necesaria la presencia de esta sensación de ser…˜ Por ello…˜ la sensa-
ción de ser…˜ la consciencia de ser…˜ este saber que yo soy…˜ es el dios Puerta…˜
ante cuya presencia debemos preguntarnos…˜ “¿Era o no era conmigo esta sensación de
ser?…˜ ¿cuán infeliz era ese estado…˜ que estoy viendo que yo soy…˜ en que esta sen-
sación y consciencia de ser no era conmigo?”…˜ La respuesta a esta pregunta es el esta-
do real mismo…˜ Uno debe expandirse entonces completamente en sí mismo…˜
Nadie puede darnos nuestra propia certeza de ser…˜ Saber lo que uno es no es una
cuestión de palabras…˜ Saber lo que uno es brota del propio adentro de uno con una
certeza irrefutable…˜
Sólo hay sufrimiento cuando nos estamos dando una respuesta mental a estas pre-
guntas…˜ No es que no se vea nuestro verdadero estado real…˜ Lo que ocurre cuando
persiste el sufrimiento…˜ es que no nos expandimos en nuestra verdadera realidad…˜

196
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

Vemos exactamente que el nacimiento no era con nosotros…˜ y en vez de expandir-


nos en esta realidad convocativa…˜ queremos conocerla en los términos de nuestra ex-
periencia…˜ Cuando hacemos esto…˜ esa Realidad convocativa…˜ no pudiendo ser ca-
lificada con ninguno de los nombres que califican a las experiencias del nacimiento…˜
se muestra vacía…˜ Realmente está vacía…˜ vacía de todo otro que no sea nosotros
mismos…˜ Pero no viendo en ella a este nacimiento…˜ nosotros la llamamos vacía de
todo…˜ incluso de nosotros mismos…˜ Al vernos así completamente inexistentes y de-
saparecidos…˜ al ver así que este nacimiento no era ahí…˜ lejos de expandirnos en lo
que somos realmente…˜ retrocedemos espantados a identificarnos nuevamente con el
nacimiento…˜ Este acto representa el único obstáculo a nuestra comprensión real…˜
Mientras prosigamos retrocediendo al nacimiento…˜ nosotros no podemos comprender
lo que significa expandirnos absolutamente en nuestro propio ser real…˜
Esta expansión en nuestro propio ser real no es una proposición para cuando el naci-
miento ya no sea…˜ es una proposición para ahora que el nacimiento es…˜

197
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

278
____________

Una sola vez en el Evangelio…˜ Cristo se nombra a sí mismo en primera persona…


˜: Es cuando dice de sí mismo…˜ “antes de que Abraham fuera…˜ YO SOY”…˜ Cristo
se identifica así completamente al Dios de Moisés…˜ cuando se nombra a sí mismo
igualmente “YO SOY…˜ el que YO SOY”…˜ ¿Comprendéis?…˜ El verdadero cristia-
nismo…˜ el cristianismo esencial…˜ es la adoración en el corazón de este dios Puerta…
˜ a saber…˜ nuestra propia consciencia de ser por la que nosotros mismos nos nombra-
mos a nosotros mismos “YO SOY”…˜

198
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

279
____________

Nosotros mismos siempre omniscientes de nosotros mismos…˜ La respuesta a las


proposiciones de comprensión de nosotros mismos…˜ vienen de nosotros …˜ vienen de
ese nosotros antiquísimo que es siempre…˜ de ese nosotros antiquísimo que ha presen-
ciado la aparición del nacimiento en nosotros…˜
Al escuchar nuestra propia respuesta a la pregunta…˜ “¿ha sido siempre conmigo
este nacimiento?…˜ ¿era conmigo desde siempre este nacimiento?”…˜ Lo que estamos
escuchando no son palabras…˜ Estas preguntas convocan a nuestro verdadero estado
real…˜ lo hacen presente en nosotros ahora…˜ Su sabor es una fuerte intensión de reali-
dad…˜ Esta intensión de realidad…˜ que es nuestro verdadero estado real…˜ no es pala-
bras…˜ no es pensamiento…˜ Es una consciencia expansiva que lo llena todo…˜ una
consciencia irrefutable de que nosotros somos siempre…˜ tanto ahora que el nacimiento
está con nosotros…˜ como cuando ningún nacimiento era con nosotros…˜
Nosotros debemos darnos con completa confianza a la respuesta que viene de noso-
tros mismos…˜ Si viniera de otro que nosotros mismos…˜ nosotros estaríamos justifica-
dos de dudar…˜ Pero la respuesta viene de nosotros mismos…˜ la respuesta es nuestro
propio estado real…˜ Si nosotros no confiamos en nuestra propia visión de que el naci-
miento no era con nosotros…˜ ¿en qué vamos a confiar entonces?…˜
De manera que la verdadera contemplación no es sólo ver la respuesta…˜ es sobre
todo confiar en ella…˜ Por la Puerta de la comprensión de nuestros mismos…˜ por esta
visión de nosotros mismos cuando el nacimiento no era…˜ Ahora…˜ siempre Ahora…˜
plenos de confianza en nuestro ser real…˜ somos transportados al océano de nuestra
propia Mismidad…˜ Lejos de desaparecer…˜ el conocimiento permanece con nosotros
para revestir de comprensibilidad y de sabor…˜ lo que vemos que nosotros somos…˜
De manera que nosotros podemos seguir preguntando por nosotros mismos cuando
el nacimiento no era…˜ Completamente embebidos en nosotros mismos…˜ habiéndo-
nos pasado completamente a nuestra verdadera naturaleza real…˜ saboreándonos a no-
sotros mismos…˜ saboreando nuestro propio sabor…˜ nuestra felicidad está completa…
˜ Nuestra comprensión nos dice entonces que nosotros nunca hemos cesado de ser lo
que ahora es nuestra saboreación única…˜ Este estado que es verdaderamente nosotros
mismos sólo…˜ no interfiere en ningún momento en el proceso del nacimiento…˜ Por
así decir…˜ es extraordinariamente consciente del nacimiento…˜ y al mismo tiempo no
interfiere en él…˜
Esto sólo lo ve el que se comprende a sí mismo…˜ esto sólo lo ve el que se ve a sí
mismo…˜

199
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

Para el que se comprende y se ve a sí mismo…˜ no hay nada entonces en el naci-


miento que sea perturbador…˜ o angustioso…˜ o terrible…˜ Ve lo que se llama su pro-
pio nacimiento sólo como un instante de consciencia…˜ Para él no hay cuerpo…˜ ni
mente…˜ ni alma…˜ ni espíritu…˜ ni universo que sean verdaderos…˜ Él no los ve
como un cuerpo-y-mente-y-alma-y-espíritu-y-universo reales…˜ Constantemente los ve
desvanecerse en él…˜ Esto es realmente prodigioso…˜ Es prodigioso…˜ pero es así…˜
Su confianza en la respuesta de su verdadera naturaleza real es absoluta…˜ Un com-
prehensor de sí mismo nunca se vuelve al nacimiento en busca de apoyo…˜ Su apoyo es
antes de que ningún nacimiento fuera…˜
Seamos leales entonces a nuestra propia respuesta…˜ ¿Ha estado siempre con noso-
tros este nacimiento?…˜ ¿ha estado siempre con nosotros esta consciencia de que noso-
tros somos?…˜ La respuesta…˜ que viene de nosotros mismos…˜ ES nuestro verdadero
estado real…˜

200
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

280
____________

Esta nacimiento no era con nosotros…˜ ¿Cómo pasar de estas palabras a lo que sig-
nifican…˜ y vernos a nosotros mismos…˜ ahora…˜ exactamente como nosotros
somos…˜ es decir…˜ en ese mismo estado en que este nacimiento no era?…˜ En este
paso de las palabras…˜ a lo que las palabras indican…˜ está toda la operación de la
comprensión real…˜
Que este nacimiento no era con nosotros es irrefutablemente verdadero…˜ De mane-
ra que…˜ nos veamos o no nos veamos sin nacimiento…˜ que nosotros somos sin naci-
miento…˜ nosotros mismos no podemos desmentirlo…˜
No hay absolutamente nada más alto ni más bajo que lo que es cuando el nacimiento
no era…˜ De manera que verse a uno mismo sin nacimiento es el fin de toda
búsqueda…˜ Por mucho que amemos ser…˜ y amamos ser infinitamente…˜ nuestro ser
queda integralmente descubierto cuando nos vemos sin nacimiento…˜ Ahí…˜ en la vi-
sión de nosotros mismos sin nacimiento…˜ nuestro amor de ser encuentra la completa
satisfacción…˜ la total ensimismación…˜
Cuando nos vemos sin nacimiento…˜ nos vemos inmediatamente como la base don-
de se sustenta todo…˜ Ya no concebimos nada en términos de más ni de menos…˜ Dios
mismo tiene su ser en lo que nosotros somos…˜ El dios más alto no puede alcanzar nun-
ca nuestra altura…˜ Y si dios mismo es sin nacimiento…˜ entonces no somos dos…˜
Porque lo que es sin nacimiento no puede enumerarse entre lo que se enumera…˜
No hay ninguna dificultad en ser lo que somos…˜ No hay ningún hacer tampoco en
ser lo que somos…˜ Sólo hay preguntas para disolver la falsa creencia de que somos
otro que el que somos…˜
¿Qué ventaja real encontramos nosotros en creernos nacidos y mortales…˜ y en no
tomarnos la molestia de averiguar cuánto de verdad hay en esta creencia?…˜ No hay
ninguna ventaja real para nosotros en morir mañana…˜ sin haber visto quién somos…˜
Hay por el contrario una gran pérdida…˜ Morir sin haber visto quién somos significa
que nuestro grandísimo amor de ser no habrá visto a su amado…˜ Significa que no ha-
bremos conocido ni un instante la verdadera satisfacción completa…˜ La alegría que no
puede expresarse…˜ la desaparición absoluta de la ilusión de ser alguien…˜ la desapari-
ción de la envidia…˜ la desaparición del sufrimiento…˜ Significa que no habremos vis-
to quién somos…˜ significa que dios será para nosotros otro que nosotros mismos…˜
significa que no habremos descansado con él en nuestro lugar de reposo común…˜ don-
de el nacimiento no es…˜ donde nosotros no somos nacidos ni mortales…˜ donde dios
no es dios…˜ donde no hay creación ni manifestación…˜ donde no hay grande ni pe-

201
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

queño…˜ donde el cielo más alto no es codiciado…˜ donde no se desea nada…˜ donde
la Paz es absoluta…˜
¿Qué dificultad hay en vernos realmente sin nacimiento?…˜ La dificultad es que te-
nemos miedo a perder algo…˜ Pero quien se ve sin nacimiento ve que no ha perdido
nada…˜ Antes al contrario…˜ ha ganado todo…˜ Nosotros no podemos tocar lo que el
nacimiento es…˜ Querer tocar el nacimiento es como querer tocar un sabor…˜ El naci-
miento es un estado de devenir que amanece y se pone en nosotros…˜ Si nosotros no
somos…˜ el nacimiento no es…˜ Finalmente…˜ el nacimiento cesa por completo en no-
sotros…˜ Pero su cesar en nosotros es un proceso que tiene su emulación ahora
mismo…˜ Por ello…˜ ahora mismo podemos vernos sin él…˜

202
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

281
____________

No me falta ningún conocimiento de todo lo que se ha dicho que es el nacimiento…˜


Yo no busco este conocimiento para saber quién soy…˜ sino para comprender incesan-
temente que este conocimiento no estaba conmigo…˜ De manera que…˜ aunque me
veáis trabajar continuamente con el conocimiento…˜ sabed que es sólo para verme sin
él…˜

203
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

282
____________

Contemplemos cuando el nacimiento no era…˜ Sintámonos a nosotros mismos


cuando el nacimiento no era…˜ Apreciemos profundamente este estado nuestro cuando
el nacimiento no era…˜ Conozcamos por nosotros mismos su textura…˜ Familiaricémo-
nos con nuestra propia realidad…˜
Sólo un conocimiento integral de nosotros mismos…˜ en nuestro verdadero estado
cuando el nacimiento no era…˜ sólo un reconocimiento completo de nosotros mismos
como este estado que somos cuando el nacimiento no era…˜ sólo esta familiaridad ínti-
ma con nosotros mismos…˜ como lo que nosotros somos cuando el nacimiento no era…
˜ nos dará la confianza sin fisuras en nuestro verdadero estado real…˜
No hay otra vía de acceso a nosotros mismos que este sentirnos a nosotros mismos
ser realmente lo que somos…˜ ¿Era yo o no era yo cuando el nacimiento no era?…˜ Yo
tengo que tener por mí mismo esta respuesta…˜ yo tengo que verme a mí mismo sin na-
cimiento…˜ yo tengo que sentirme a mí mismo ser la realidad que se revela a mí como
mi verdadero ser cuando me pregunto…˜ “¿era yo o no era cuando el nacimiento no
era?”…˜ Tengo que tener esta respuesta…˜ tengo que verme en ese estado…˜ tengo que
reconocer a corazón abierto que ese estado es mi verdadero estado…˜
En esta operación…˜ en la escucha de esta respuesta…˜ en mi expandirme a mí mis-
mo integralmente en lo que yo soy…˜ en este sentirme a mí mismo ser lo que yo soy
cuando el nacimiento no era…˜ nadie puede hacer esto por mí…˜ Yo no comprendo la
dificultad de quien proclama que no se ve a sí mismo cuando se pregunta “¿era yo o no
era yo cuando el nacimiento no era?”…˜ Preguntáoslo…˜ “¿era yo o no era cuando el
nacimiento no era?”…˜ Preguntáoslo…˜ preguntáoslo una y otra vez…˜ Poneos en el
estado en que el nacimiento no era…˜ Es completamente real…˜ es completamente lla-
no…˜ No hay nada que imaginar…˜ Sed como niños…˜ Sólo escuchad y obedeced…˜:
Poneos en vosotros mismos cuando el nacimiento no era…˜ no imaginéis nada…˜ no
tratéis de veros como este nacimiento cuando el nacimiento no era…˜ no os digáis esto
está vacío ni esto está lleno…˜ sólo poneos a vosotros mismos cuando el nacimiento no
era…˜ No veáis vuestro propio estado real como otro que vosotros mismos…˜ no os
pongáis en él como nacidos…˜ no metáis en él el nacimiento…˜ Veos completamente
sin nacimiento…˜ ¿Cuál es la dificultad?…˜ Yo quiero saber cuál es la dificultad…˜ Yo
no os estoy pidiendo que cambiéis nada en el nacimiento…˜ yo no os estoy pidiendo
que lo hagáis más virtuoso…˜ ni más inteligente…˜ ni más agudo…˜ ni más
meritorio…˜ Yo no os estoy diciendo que esperéis porque no estáis preparados…˜ Yo no
os pido que hagáis esto ni aquello…˜ tampoco os pido que dejéis de hacer esto o aque-

204
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

llo…˜ Yo no juzgo al nacimiento…˜ Yo sólo os pido que os veáis sin él…˜ Veos sin na-
cimiento…˜ No hay nada en el nacimiento que sea un obstáculo a vuestro veros sin él…
˜ El nacimiento no era conmigo…˜ ¿Cómo puede ser entonces un obstáculo a que yo me
vea sin él?…˜ Es como esta habitación…˜ esta silla en la que me siento no estaba
aquí…˜ ¿Cómo puede ser esta silla un obstáculo para ver la habitación sin silla?…˜

205
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

283
____________

Insisto…˜ yo no juzgo al nacimiento…˜ yo no os pido que hagáis ninguna acrobacia


mental…˜ No uséis la imaginación…˜ Sólo respondeos a vosotros mismos…˜ “¿Estaba
conmigo este nacimiento?”…˜
En vuestra propia respuesta está la visión de vosotros mismos sin nacimiento…˜
Ninguna otra preparación es necesaria…˜ ¿Por qué no confiáis en lo que veis?…˜

206
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

284
____________

Veámonos a nosotros mismos cundo el nacimiento no era…˜ contemplémonos a no-


sotros mismos cuando esta sensación de que nosotros somos no era…˜ Admirémonos de
encontrarnos a nosotros mismos donde parecía que nada era…˜ admirémonos de encon-
trarnos a nosotros mismos cuando el nacimiento no era…˜ Hagámoslo…˜ encontrémo-
nos a nosotros mismos donde el nacimiento no era…˜ Esta es la contemplación más
alta…˜ Para el conocedor de sí mismo cuando el nacimiento no era…˜ el nacimiento no
significa su comienzo…˜ Para este conocedor de sí mismo…˜ el nacimiento es su pro-
pio dios omnisciente…˜ Este conocedor de sí mismo cuando el nacimiento no era…˜
pregunta al nacimiento…˜: “¿qué era conmigo…˜ cuando tú no eras?”…˜ Y la respues-
ta…˜ que es sí mismo conociéndose a sí mismo…˜ no le da ningún vértigo…˜ Aunque
se responde a sí mismo…˜ “Nada…˜ nada era conmigo…˜ cuando este nacimiento no
era”…˜ con esta misma respuesta…˜ él está sabiendo de sí mismo que él sí era…˜ Él se
sabe ser entonces lo inexpresable…˜ Aunque no puede decir qué es lo que él es…˜ su
saberse ser abarca la totalidad de su ser…˜ un ser que no está sujeto al nacimiento…˜ un
ser que no está sujeto a la muerte…˜ un ser que es siempre una identidad absoluta consi-
go mismo…˜ un ser donde dios no era…˜ un ser donde la criatura no era…˜ un ser don-
de las escrituras no eran…˜ un ser donde nada deviene otro que lo que es…˜
El conocedor de su verdadero estado real come conocimiento para comprender que
el conocimiento no era con él…˜ come amor para saber que el amor no era con él…˜
Cuanto más come…˜ tanto más indescriptiblemente vacío de nacimiento se ve…˜ Final-
mente…˜ la palabra nacimiento misma pierde todo su significado…˜ Cuanto más se
contempla a sí mismo…˜ más evanescente se torna todo lo que no era con él cuando el
nacimiento no era…˜
Yo no os invito a hacer esto ni a hacer eso…˜ Comprended que no había ningún ha-
cer con nosotros cuando el nacimiento no era…˜ Pero sobre todo…˜ comprendeos a vo-
sotros mismos cuando el nacimiento no era…˜ Estas son dos comprensiones…˜ Primero
hay que comprender que el nacimiento no era con nosotros…˜ Seguidamente hay que
comprender lo que uno mismo es cuando el nacimiento no era…˜ Aunque son compren-
siones simultáneas…˜ comprender lo que uno mismo es cuando el nacimiento no era…˜
parece ser lo que implica la dificultad más grande…˜ Uno ve absolutamente que este na-
cimiento no era con uno…˜ pero parece haber alguna dificultad en verse a uno mismo
sin él…˜ La dificultad no es real…˜ Si uno comprende realmente que el nacimiento no
estaba conmigo…˜ entonces…˜ el empuje mismo de la proposición…˜ le lleva a pre-
guntarse…˜ “¿qué era yo entonces…˜ cuando el nacimiento no era conmigo?”…˜ Si

207
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

uno es serio consigo mismo…˜ entonces no puede no verse a sí mismo tal cual uno es
cuando el nacimiento no era…˜
El nacimiento nos sirve para vernos ahora exactamente tal cual somos siempre…˜
No hay que imaginar nada…˜ Sólo hay que atenerse a la lógica infalible de la proposi-
ción…˜
Verse a uno mismo tal cual uno es…˜ no es imaginarse a uno mismo siendo esto o
aquello…˜ no es verse como otro que lo que uno es…˜ Y lo que uno es es lo que uno
es…˜ Si el nacimiento no estaba con nosotros…˜ entonces no somos el nacimiento…˜ ni
nada habido en el nacimiento nos puede explicar ni dar señales de nosotros…˜ De la
única manera en que el nacimiento nos sirve realmente…˜ es para comprender que él no
estaba con nosotros…˜ En este servicio el nacimiento es realmente eficaz…˜

208
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

285
____________

Aquí no se trata de explicar nada…˜ sino de conocer la presencia inmediata de nues-


tro ser real…˜ Una vez que nos vemos a nosotros mismos tal cual somos…˜ ya sobran
todas las explicaciones…˜ Por la condición de este nacimiento…˜ llegan a mi conoci-
miento las proposiciones más altas sobre mí mismo…˜ En cuanto se me exponen…˜ lo
primero que hago es ver si quieren explicarme como un nacido…˜ En cuanto descubro
que me explican como un nacido…˜ inmediatamente sé por mí mismo que no están ha-
blando de mí…˜
Yo me contemplo a mí mismo…˜ y entonces me pregunto…˜ ¿era yo este nacimien-
to cuando este nacimiento no era?…˜ Para mí no hay ninguna dificultad en verme inte-
gralmente cuando este nacimiento no era…˜ Yo no tengo que imaginarme a mí
mismo…˜ Me veo cuando el nacimiento no era…˜ eso es todo…˜ Sé que mi verme
cuando el nacimiento no era es absolutamente real…˜ Yo no hago nada…˜ Sólo me pre-
gunto a mí mismo y me veo…˜ Mi visión de mí mismo no es como otro ni como eso…˜
No hay en mi visión de mí mismo ninguna explicación ni descripción de mí mismo…˜
Sólo hay reconocimiento…˜ Hay una profundísima sensación de ser lo yo soy
siempre…˜ Y por consiguiente…˜ no hay ninguna angustia…˜ Sea lo que sea este naci-
miento…˜ como un río que desemboca en el mar…˜ yo lo veo desembocar incesante-
mente en mí…˜ Hasta ese instante…˜ que es este instante…˜ el río del nacimiento pare-
ce otro que mí mismo…˜ Pero al desembocar en mí…˜ deviene integralmente mí mis-
mo…˜ agua de mi agua…˜ Ante esta muerte incesante del nacimiento en mí…˜ yo no
siento la menor angustia…˜ El que es comido deviene de la misma naturaleza que su co-
medor…˜ y yo como incesantemente este nacimiento que viene a fundirse en mí…˜ Su
luz me revela…˜ Con su luz fundiéndose incesantemente en mí…˜ yo me pregunto…˜
¿sabía yo que yo soy cuando este nacimiento no estaba conmigo?…˜ Yo me respondo…
˜ y mi respuesta es llana…˜ natural…˜ sencilla y libre de toda angustia…˜ Yo no veo en
ella que yo no haya sido alguna vez…˜ yo no veo en ella que yo no fuera cuando el na-
cimiento no era…˜ Antes al contrario…˜ me veo a mí mismo…˜ me veo a mí mismo
completamente…˜ me veo a mí mismo integralmente…˜ No ha habido nunca ningún
nacimiento de mí…˜ No hay en mí ninguna necesidad de nacer para ser…˜ El nacimien-
to no es de mí…˜ En realidad el nacimiento no es el nacimiento de nadie…˜ Los seres…
˜ nosotros…˜ no son su nacimiento…˜ Lo que se llama el nacimiento es sólo esta luz
que nos ilumina mientras se sumerge en nosotros…˜
Yo no os propongo que hagáis esto o aquello…˜ ¿Por qué?…˜ Porque veo que no
sois el nacimiento…˜ Contemplad sólo cómo el nacimiento se reabsorbe en vosotros…˜

209
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

Aunque hoy os haya acontecido alguna alegría extraordinaria…˜ sin ninguna duda lle-
gará el momento de dormir y la olvidaréis…˜: la alegría se habrá reabsorbido en voso-
tros…˜ En vuestra dormición estaréis liberados de sentir la alegría…˜ por grande que
haya sido…˜ Igualmente…˜ en vuestro estado real estáis liberados del flujo del naci-
miento…˜ no poco a poco…˜ sino integralmente ahora…˜
El nacimiento no era con nosotros…˜ Saber esto es como entrar en dormición pro-
funda…˜ saber esto es SER Esto…˜ De manera que vemos cómo el nacimiento se reab-
sorbe en nosotros…˜ al tiempo que nos vemos integralmente sin él…˜ Todo esto aho-
ra…˜

210
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

286
____________

Dios no era con nosotros cuando este nacimiento no era…˜ Yo he buscado minucio-
samente a Dios conmigo cuando este nacimiento no era…˜ y no he encontrado ningún
creador ni hacedor ni manifestador de mí…˜ Entonces me he dicho…˜ “Yo no tengo lo
que yo soy por nadie otro que mí mismo…˜ Por más que busco…˜ no encuentro a ese
creador y hacedor y manifestador de mí…˜ Cuando el nacimiento no estaba conmigo…˜
ningún creador ni hacedor ni manifestador de mí era…˜ Esto lo veo…˜ esto lo compren-
do”…˜
Yo no digo que no hay dios…˜ Yo sólo digo que ningún dios era conmigo cuando el
nacimiento no era…˜ Aunque yo quiera tener mi ser lo que yo soy por otro que mí mis-
mo…˜ veo exactamente que esto es imposible…˜
De manera que he dejado de lado todas las proposiciones que me dicen que yo soy
creado…˜ o manifestado…˜ He dejado de lado todas las proposiciones que me dicen
que yo soy nacido…˜ Encuentro mi verdadero ser sólo donde el nacimiento no era con-
migo…˜ Y encuentro también que mi continuidad no ha quedado rota con el nacimien-
to…˜ Me pregunto a mí mismo por cuando el nacimiento no era…˜ y he aquí que ahora
mismo…˜ en este instante que es el tiempo de mi verdadero ser…˜ me encuentro a mí
mismo tal cual soy…˜ Nada me ha aumentado…˜ nada me ha disminuido…˜ No puedo
hablar de mí en términos de grande ni pequeño…˜ de viejo ni de joven…˜ Mi pasmo es
tan grandioso que rebasa toda magnitud…˜ Al mismo tiempo…˜ me encuentro a mí
mismo completamente fuera del alcance de otro que mí mismo…˜ Lo más notable es la
absoluta conformidad con mi propio ser real…˜ Esta conformidad me expande más allá
de todos los comienzos y de todos los finales…˜ Donde todo comienza y donde todo
acaba…˜ allí estoy yo para tragarlo…˜
En los momentos en que esta intensidad deviene la plenitud total…˜ veo y compren-
do de mí mismo que lo que los Buddhas eran…˜ eso yo soy…˜ Me veo revestido de una
indefinidad de nacimientos…˜ sin que ninguno de ellos sea para mí otra cosa que lo que
es este instante mismo…˜ este instante Ahora…˜ en que comprendo y veo esto…˜
Veo también lo que las escrituras de todas las tradiciones dicen aparentemente de
mí…˜ y que no es de mí…˜ Comprendo que comprender realmente este nacimiento es
comprender todos los nacimientos…˜ Comprendo que comprender realmente este naci-
miento es comprender que este nacimiento no es el nacimiento de mí…˜
Veo cómo la totalidad de los tiempos pasados…˜ actuales…˜ y futuros…˜ se resuel-
ven en este instante en que los trago…˜ Jamás ha habido historia sin mí…˜ pero ella no

211
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

es mi historia…˜ Yo soy lo más viejo de lo más viejo…˜ y sin embargo no tengo edad
ninguna…˜
Una indefinidad de nacimientos me reviste…˜ y sin embargo…˜ ninguno de ellos es
el nacimiento de mí…˜
¿En qué consiste mi privilegio en esto?…˜ Mi comprensión no es de las que fomen-
tan la diferencia…˜ Nadie ha tocado jamás mi ser…˜ Yo no he hecho mi ser…˜ Tampo-
co he encontrado ningún hacedor de mi ser…˜ Mi comprensión de mí mismo es que no
hay seres…˜ sino sólo esta indefinidad de nacimientos que me reviste…˜ Yo no soy lo
que nace…˜ El nacimiento no estaba conmigo…˜
Por ello…˜ cuando me comprendo a mí mismo…˜ comprendo que no estoy com-
prendiendo un nacimiento…˜ Para mí…˜ este nacimiento es suficiente para compren-
derme…˜ Yo no pido más de él…˜ Yo no le abrumo exigiéndole experiencias…˜ ni gro-
seras ni sublimes…˜ Con él comprendo que yo no soy el nacido…˜ con él comprendo
que yo no soy el nacimiento…˜ Entonces dejo que repose completamente en mí…˜ y
él…˜ agradecido…˜ me permite saborear mi propia realidad…˜
Por ello…˜ aunque veáis que trabajo como si me fuera la vida en ello…˜ sabed que
mi verdadera vida es lo que comprendo que yo soy cuando me veo sin nacimiento…˜

212
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

287
____________

Todas estas proposiciones tienen como única finalidad convocar la presencia a noso-
tros mismos de nuestra propia naturaleza real…˜ Por ello…˜ este no es un lenguaje des-
criptivo…˜ no es un lenguaje que nos diga lo que nosotros somos…˜ Lo que nosotros
somos…˜ tenemos que escucharlo viniendo de nosotros mismos…˜ Se trata de nosotros
mismos…˜ de manera que sólo si lo escuchamos viniendo de nosotros mismos…˜ lo
que escuchemos será a completa satisfacción de nuestro anhelo…˜
Anhelamos la Paz…˜ anhelamos la seguridad de ser siempre…˜ Nuestro anhelo no
es un imposible…˜ nuestro anhelo es la expresión de nuestra verdadera naturaleza
real…˜ Pero nuestro anhelo no puede encontrar satisfacción si nosotros somos el naci-
miento…˜ De manera que se impone la pregunta…˜ “¿Somos nosotros el nacimiento?…
˜ ¿somos nosotros lo que nace y muere?”…˜ Si nosotros no escuchamos viniendo de no-
sotros mismos la respuesta a esta pregunta…˜ entonces nuestro anhelo de Paz…˜ nues-
tro anhelo de ser siempre…˜ no encontrará la pradera de su propia expansión…˜ Enton-
ces…˜ enfrentados al hecho del declive incesante del nacimiento…˜ nuestro estado se
teñirá del color de la angustia…˜ Nosotros no podemos anhelar ser siempre como naci-
dos…˜ Lo que tenemos que descubrir es si nosotros somos el nacimiento…˜
Nuestra verdadera naturaleza real es siempre…˜ En ella está la respuesta a la pre-
gunta “¿somos nosotros el nacimiento?”…˜ Ella misma…˜ nuestra verdadera naturaleza
real misma es la respuesta a la pregunta…˜ Pero para escuchar esta respuesta…˜ para
saber que nosotros somos la respuesta a esta pregunta…˜ debemos ponernos a nosotros
mismos en el estado en que el nacimiento no era…˜ Todo lo que el nacimiento es…˜ no
es siempre…˜ Sólo es siempre lo que es cuando el nacimiento no es…˜ No es un enfren-
tamiento de dos realidades contrapuestas…˜ Lo que es sin nacimiento no está sujeto a
ninguno de los procesos que constituyen lo que es un nacimiento…˜ De manera que lo
que es sin nacimiento no conoce el comienzo…˜ no conoce el crecimiento…˜ no conoce
la plenitud…˜ no conoce el declive…˜ y no conoce el fin…˜ Ello es exactamente Ahora
a como ello era y a como ello será…˜ Sin ser grande…˜ es más grande que lo más gran-
de…˜ sin ser nacido envuelve y penetra absolutamente todo lo que es nacido…˜ Es esto
lo que tenemos que saborear como nuestra verdadera naturaleza real…˜ Y esta saborea-
ción tiene que tener lugar ahora…˜ No necesita ninguna preparación previa…˜ Lo que
es sin nacimiento no es afectado por ninguno de los procesos que afectan al
nacimiento…˜ No crece ni mengua…˜ no mejora ni empeora…˜
Nadie nos va a dar nunca saboreado el sabor de nuestra propia naturaleza real…˜
Este anhelo de ser siempre no es un anhelo de ser siempre en el nacimiento…˜ es un

213
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

anhelo de ser siempre en nosotros…˜ en nuestra verdadera naturaleza real…˜ De manera


que descubriendo ahora quién somos…˜ nuestro anhelo de ser siempre queda completa-
mente satisfecho…˜
¿Era yo o no era yo cuando este nacimiento no era?…˜ ¿era yo o no era yo cuando
este anhelo de ser siempre no era?…˜ ¿era yo o no era yo cuando no había ninguna ex-
periencia de mí mismo?…˜ ¿era yo o no era yo cuando ningún nacimiento había comen-
zado…˜ ni discurría su discurrir en mí?…˜ No esperéis que nadie excepto vosotros mis-
mos os dé las respuestas…˜ Pero sobre todo…˜ mientras escucháis las respuestas…˜ to-
mad plena consciencia del vosotros mismos que sabe la respuesta…˜ La presencia de
vuestra verdadera naturaleza real está convocada…˜ Vedla por vosotros mismos…˜ Sen-
tid la Paz y la satisfacción completa que es vuestra verdadera naturaleza real…˜

214
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

288
____________

Para el que ve su verdadera naturaleza cuando el nacimiento no era…˜ este verse a sí


mismo en la plenitud de su propia mismidad…˜ es suficiente…˜ ¿Qué quiere decir que
este verse a sí mismo en la plenitud de su propia mismidad es suficiente?…˜ Ello quiere
decir que todo su anhelo está colmado…˜ ello quiere decir que él se ve a sí mismo sin
creador…˜ estable…˜ eterno…˜ Ello quiere decir que él se ve a sí mismo como el sol-
vente en cuyo seno esta solubilidad nacimiento se disuelve…˜ Él ve cómo la solubilidad
nacimiento se disuelve en su seno…˜ pero a sí mismo…˜ él no se ve disolviéndose en
nada…˜ Encontrándose perfectamente estable…˜ ya no se busca más…˜ Está integral-
mente en sí mismo y lo sabe…˜ Y su saberse así integralmente en sí mismo es su Paz
que saborea incesantemente…˜ No ha encontrado ningún lugar ni ningún tiempo en que
él no sea…˜ Él es el Solvente donde todos los nacimientos emiten sus solubles…˜ En
esta calidad…˜ en su calidad de Solvente universal…˜ reside como el seno innacido en
todos los nacimientos…˜ Todos los nacimientos se disuelven en él…˜ Él es el Solvente
de todos los nacimientos…˜ Pero en sí mismo…˜ él se sabe ser absolutamente insolu-
ble…˜ una estabilidad eterna…˜ indestructible…˜ serena…˜ y en Paz…˜ Así será…˜ así
es…˜ y así se sabe a sí mismo ser…˜
Yo no hablo del estado de un sabio prodigioso cuya meta es inalcanzable…˜ En rea-
lidad hablo de mí mismo sólo…˜ Como Solvente universal…˜ este mí mismo es el que
sabe en todos vuestros corazones que el nacimiento no era…˜ Éste no es un saber difí-
cil…˜ éste no es un saber que sea patrimonio exclusivo mío…˜ No hay ningún yo ni tú
donde el nacimiento no es…˜ De manera que nuestra hermandad en el conocimiento de
Quién somos…˜ más que una hermandad…˜ es una identidad…˜ Yo nunca os disputaré
que vosotros veis que vosotros sois lo mismo que yo veo que yo soy…˜ ¿Por qué?…˜
Porque mi conocimiento de mí mismo es absolutamente excluyente de lo que yo no
soy…˜ ¿Qué era yo cuando el nacimiento no era?…˜ Mi respuesta es vuestra
respuesta…˜ vuestra respuesta es mi respuesta…˜ Yo nunca os disputaré que vosotros
veis que vosotros sois lo mismo que yo veo que yo soy…˜ Daos cuenta de que no hay
ningún más allá de vuestro verdadero estado cuando el nacimiento no era…˜ Ver esto…
˜ ver que efectivamente no hay ningún más allá de mí mismo cuando este nacimiento no
era…˜ es la visión que implica la Paz absoluta…˜ Con ella abarcamos la totalidad del
universo…˜ e igualmente la totalidad en la que el universo está siendo…˜ Y el Abarca-
dor es siempre más…˜ infinitamente más que lo abarcado…˜
El agua no es más grande que la sal…˜ Sin embargo…˜ el agua es el solvente de la
sal…˜ A la vez que emite su solubilidad…˜ la sal se disuelve en el agua…˜ Al volverse

215
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

salada el agua siente que ella es…˜ Pero el agua no es más grande que la sal…˜ sólo es
de una naturaleza completamente diferente…˜ La sal no es estable en el agua…˜ si em-
bargo…˜ el agua sí es estable en sí misma…˜
Nuestra naturaleza real es semejante a un agua en cuyo seno se deposita un grano de
sal…˜ Este grano de sal es el nacimiento…˜ El nacimiento es un soluble de experiencia
que se está disolviendo en el seno de un Solvente insoluble…˜ Este Solvente insoluble
es nuestra verdadera naturaleza…˜ ¿Cómo puede medir el tiempo de la disolución de la
sal la edad absolutamente incógnita del agua en cuyo seno se disuelve?…˜

216
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

289
____________

Veo mi estado cuando el nacimiento no era…˜ Entonces…˜ mi complacencia extre-


ma está en ver que lo más grande de lo más grande de este nacimiento es sólo una pe-
queña solubilidad disolviéndose en mí…˜

217
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

290
____________

Cuanto más indago en las proposiciones expresadas en las doctrinas a través de los
tiempos…˜ tanto más verifico mi verdadera naturaleza real…˜ Y esto es para mí un tra-
bajo maravillosamente fácil…˜ Veo todo lo que se me propone que yo soy…˜ y simultá-
neamente me veo sin nacimiento…˜ Por ello…˜ para mí…˜ la tarea más atractiva es ver
lo que se ha propuesto que yo soy…˜ Porque viendo lo que se ha propuesto que yo
soy…˜ me veo a mí mismo sin ello…˜
En mí no se plantea la cuestión de si yo era o no era…˜ en mí no se plantea la cues-
tión de si yo soy o no soy…˜ Estas cuestiones incumben integralmente al nacimiento…˜
Y yo veo que el nacimiento no era conmigo…˜ De manera que todo lo que el nacimien-
to suscita…˜ no tiene para mí ninguna credibilidad…˜ Yo lo veo disolverse incesante-
mente en mí…˜ Y ello es así…˜ aunque se trate de las proposiciones más altas…˜ Dios
mismo no era conmigo…˜ ¿Qué puede querer decir entonces la proposición de mi fu-
sión con Dios?…˜ Yo no veo de qué manera me puedo fundir yo con un concepto que
ha surgido en mí una vez que el nacimiento ha aparecido…˜
E igualmente me ocurre con toda otra experiencia que la solubilidad nacimiento
emite en mi seno…˜ La veo y simultáneamente no la veo…˜ porque la visión y conoci-
miento de mí mismo prevalece siempre…˜
Yo no dejo nunca para mañana verme como soy…˜ La integralidad de mí mismo es
sólo Ser…˜ No hay en mí jamás un solo instante en que yo no soy…˜ Sólo el nacimien-
to es y no es…˜ Pero mí mismo…˜ lo que yo soy…˜ es sólo ser…˜ ser absoluto…˜
Me ocurre que soy omnisciente de todo lo que me rodea…˜ Veo este mismo SER
que yo soy en todo…˜ Entonces veo a las gentes preocupadas por los desmanes del na-
cimiento…˜ ignorantes de quién son en realidad…˜ Lo veo con una visión tajante…˜ Y
ello me revela simultáneamente mi propio ser eterno…˜ “Nada de todo esto era conmi-
go”…˜ me digo…˜ e inmediatamente me veo en mi propio lecho…˜
Cuanto más me veo en mi propio lecho…˜ tanto más inmutablemente me compren-
do…˜ Y esta certeza inmutable es mi Paz…˜ mi sosiego…˜ mi calma…˜ Yo no puedo
tomarme en serio nada de cuanto este nacimiento está suscitando en mí…˜ nada excepto
que me veo a mí mismo…˜ Por ello…˜ cuando veo que ancianos y ancianas que peinan
canas no conocen su verdadera realidad…˜ y persiguen ansiosos los mismos anhelos
que movieron a su juventud…˜ una conmoción profunda me sacude…˜ Siento una pro-
funda vergüenza que me sacude…˜ No comprendo cómo pueden no haber comprendi-
do…˜ No comprendo cómo no ven que nada de todo esto era con ellos…˜ Es una con-
moción muy profunda…˜

218
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

Me veo a mí mismo sin nacimiento…˜ Al mismo tiempo nada del nacimiento se me


escapa…˜ Veo el nacimiento y sus trampas como una visión omnisciente…˜ Siento el
olor a cadáver que brota del que cree ser lo que el nacimiento le ha hecho creer que es…
˜ Lo veo encogido en la estrechura insufrible de un cuerpo…˜ luchando desesperada-
mente por amarrar a él este sarcófago de carne que está viendo cómo le abandona…˜
¿Cómo se puede ser tan ciego?…˜ me pregunto…˜ ¿Cómo no ve que este nacimiento no
estaba con él?…˜
Lo que estoy diciendo es muy profundo…˜ y a la vez muy simple…˜ Hablo de lo
que somos…˜ No de lo que somos con nombre y apellidos…˜ sino de lo que somos an-
tes de que el nombre y apellidos fueran…˜ Un poco más…˜ y este nacimiento ya no
será con nosotros…˜ ¿No os conmueve no saber lo que vosotros sois?…˜

219
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

291
____________

¿Que entiendo por una proposición elevada?…˜ Una proposición elevada es la que
se dirige a mí en estos términos…˜ “Cuando el viajero llega a la Puerta del Sol…˜ se le
pregunta…˜: “¿quién eres tú?”…˜ Y si responde…˜: “la misma Verdad que me pregunta
quién soy…˜ eso soy”…˜ entonces se le responde…˜ “Puesto que tú eres mí mismo…˜
entra”…˜ ¿Y qué veo yo con una proposición tan elevada como ésta?…˜ Lo que yo veo
es que yo nunca he salido de mí mismo a ningún viaje…˜ ¿Por qué pues iba yo a llegar
a ninguna Puerta por la que jamás he salido?…˜ Yo no encuentro en mí ni rastro de esta
conversación…˜ Si hay una Puerta…˜ yo me encuentro a mí mismo eternamente detrás
de ella…˜

220
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

292
____________

Para contemplarnos a nosotros mismos en nuestra verdadera naturaleza real…˜ es


suficiente una sola operación magnífica…˜ es suficiente con que contemplemos cuando
el nacimiento no era…˜ Contemplémoslo…˜ contemplemos cuando el nacimiento no
era…˜ Contemplémonos a nosotros mismos cuando el nacimiento no era…˜ Compren-
damos que se trata de nosotros…˜ veamos que se trata de nosotros…˜ Veamos que noso-
tros no hemos salido jamás de nosotros mismos…˜ Comprendamos que las proposicio-
nes que nos describen como un viajero…˜ en viaje hacia sí mismo…˜ no están hablando
de nosotros…˜ Por sugestivas que sean…˜ las proposiciones que nos describen como un
viajero en viaje hacia nosotros mismos…˜ no están hablando de nosotros…˜ Nosotros
jamás hemos cesado de ser el que somos…˜ Pero para vernos tales cuales somos…˜ es
absolutamente necesario que nos veamos cuando el nacimiento no era…˜ ¿Es esto posi-
ble?…˜ ¿Es posible vernos cuando el nacimiento no era?…˜ La respuesta es un Sí abso-
luto…˜ Esta visión de nosotros mismos…˜ cuando el nacimiento no era…˜ no es una vi-
sión por los ojos…˜ es una visión por el ser…˜ Debido a que nosotros somos siempre lo
que nosotros somos…˜ la integralidad de nuestro ser se sabe y se ve a sí misma ser aho-
ra…˜ exactamente la misma identidad y mismidad que era…˜ No hay tiempo ni espacio
en nuestro ser…˜ Por ello no media tiempo alguno entre este Ahora en que el nacimien-
to emite sus solubles en nuestro seno…˜ y ese Ahora en que este nacimiento no era…˜
Nuestra visión de nosotros mismos tales cuales somos…˜ no es así una visión por los
ojos…˜ sino la certeza absoluta de Ser…˜ Esta certeza de ser se descubre…˜ y su descu-
brimiento es lo que se llama su visión…˜
Ciertamente…˜ no es como un nacido como nosotros podemos tener la certeza abso-
luta de Ser…˜ De manera que no podemos buscar vernos como nacidos en nuestra ver-
dadera naturaleza real…˜ Más bien…˜ tenemos que vernos sin nacimiento…˜ más bien
tenemos que descubrir la certeza absoluta de Ser sin nacimiento…˜
Me veo a mí mismo como jamás salido de mí mismo…˜ Al mismo tiempo veo este
nacimiento…˜ y viéndolo…˜ tanto más minuciosamente y exactamente me veo a mí
mismo…˜ No hay en mí separación alguna de Cielo y Tierra…˜ En mí el mundo no ha
comenzado jamás…˜ No veo ningún otro conmigo…˜ ni divinidad ni hombre…˜ No me
veo a mí mismo viniendo a mí mismo…˜ Ninguna puerta me separa de mí mismo…˜ La
certeza absoluta de mi propio ser lo cubre todo…˜ Entonces llegan a mí las proposicio-
nes sobre mí mismo que hacen las escrituras…˜ ¿Cuál creéis que es mi comprensión de
ellas?…˜ En primer lugar suscitan en mí una grandísima alegría…˜ un grandísimo entu-
siasmo…˜ Me alegro profundamente como un niño…˜ Misteriosamente sé que hablan

221
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

de mí sin conocerme…˜ Es como si me palparan…˜ como si tuvieran mi verdad en la


punta de la lengua…˜ Las veo como acertijos y adivinanzas…˜ encantan a mi corazón…
˜ y lleno de entusiasmo me pongo a trabajar…˜ Amo conocer todas las proposiciones
que se han hecho sobre mí…˜ No las amo para rebatirlas…˜ Las amo por sí mismas…˜
por su belleza aproximativa…˜ por su verdad participativa…˜ algo así como un pregus-
to de la Verdad…˜ algo así como si yo me dijera a mí mismo “caliente…˜ caliente…˜ un
poco más y das de lleno en el blanco”…˜ No son proposiciones falsas…˜ son proposi-
ciones maravillosas…˜
Pero cuando me quedo conmigo mismo…˜ cuando me recojo del juego…˜ yo no en-
cuentro conmigo ni divinidad ni hombre…˜ ni viaje ni meta…˜ Mi sublime soledad es
pasmosamente suficiente…˜ Yo no encuentro ningún comienzo ni ningún final de mí
mismo…˜ Lo más llamativo es que tengo la certeza de no ser un privilegiado…˜ Yo no
soy algo que pueda llamarse singular…˜ Todo el nacimiento desaparece entonces inte-
gralmente en mí…˜ Ahora mismo es el ahora de esa desaparición…˜ No veo a ningún
mí mismo viniendo a mí mismo…˜

222
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

293
____________

Pongámonos en el estado en que el nacimiento no era…˜ Contemplar este estado es


esta comprensión de que este estado es siempre nosotros…˜ Desde nuestro verdadero
estado real…˜ ahora nos ocurre que contemplamos el nacimiento…˜ ¿Y qué es el naci-
miento?…˜ El nacimiento es esta solubilidad que está emitiendo sus solubles en nuestro
seno…˜ Estos solubles…˜ son la suma de toda nuestra experiencia…˜ Abarcan tres esta-
dos…˜ vigilia…˜ sueño con sueños y sueño profundo…˜ y esta sensación irrefutable de
que nosotros somos…˜ Si la solubilidad nacimiento no está en nuestro seno emitiendo
sus solubles…˜ entonces no hay los tres estados ni la sensación de que nosotros
somos…˜ Vacíos de la solubilidad nacimiento…˜ nosotros somos lo que nosotros so-
mos…˜ pero no lo sabemos…˜
No hay nada temible en este estado en que el nacimiento no era…˜ Es nuestro verda-
dero estado real…˜ Ha sido siempre nuestro verdadero estado real…˜ Y nosotros tene-
mos que conocerlo así…˜ vacío de nacimiento…˜ para que la Paz y la Quietud sean
nuestro reposo…˜
El nacimiento no es un obstáculo a nuestro conocimiento de nosotros mismos…˜
Todo lo contrario…˜ Su presencia emitiendo sus solubles en nuestro seno…˜ es nuestro
revelador…˜ Nosotros éramos desconocidos para nosotros mismos…˜ y la presencia de
la solubilidad nacimiento en nuestro seno está haciendo que nosotros seamos conocidos
para nosotros mismos…˜ Esta solubilidad nacimiento es así la herramienta de nuestro
propio conocimiento de nosotros mismos…˜
Comprended que sea cual fuere la experiencia de este nacimiento en nosotros…˜ ella
es perfectamente adecuada a la consecución de nuestro fin último…˜ ¿Acaso no sabe-
mos nosotros que nosotros somos?…˜ ¿No es entonces este nacimiento perfecto?…˜ ¿Y
en qué consiste la perfección del nacimiento?…˜ Consiste únicamente en que con él no-
sotros…˜ que no sabíamos que nosotros somos…˜ ahora sabemos que nosotros somos…
˜ El nacimiento cumple así exactamente su cometido…˜ Ahora nos queda que nosotros
averigüemos quién somos…˜ ¿Quién somos nosotros?…˜ Nosotros no podemos ser el
nacimiento…˜ El nacimiento sólo nos revela…˜ Es un hecho prodigioso…˜ pero es
así…˜ el nacimiento sólo nos revela…˜ El nacimiento no sabe que nosotros somos…˜
Somos nosotros mismos…˜ quienes…˜ con el nacimiento…˜ sabemos que nosotros so-
mos…˜ La totalidad del ser está en nosotros…˜ ¿Qué éramos nosotros cuando el naci-
miento no era?…˜ Llegad al fondo de lo que revela esta pregunta…˜ No os dejéis per-
turbar por la ausencia de experiencia en ese estado…˜ Nosotros no somos ni la expe-

223
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

riencia ni los apegos que la experiencia genera…˜ Cuando sobreviene el sueño profundo
nosotros no sabemos que nosotros somos…˜
Nuestro ser es indestructible…˜ nuestro ser no tiene nacimiento…˜ No lo penséis…˜
no queráis atrapar lo que sois…˜ De no haber sido porque nosotros somos siempre…˜
este nacimiento no tendría ningún seno donde emitir sus solubles…˜ Se debe a que no-
sotros somos siempre…˜ por lo que ahora mismo nosotros sabemos que nosotros so-
mos…˜
Comprender quién somos es comprender quién somos…˜ Mientras aceptamos ser lo
que el nacimiento es…˜ lo cual es una imposibilidad de hecho…˜ nuestra comprensión
de nosotros mismos se reduce a una vida de experiencia…˜ Desde que comprendemos
que una vida de experiencia comienza y acaba…˜ nuestro rostro se ensombrece y nues-
tro anhelo de ser siempre en el cuerpo se cambia en una sed ardiente y en el motor de
todo lo que creemos pensar y hacer…˜ Pero una vida nacida y mortal…˜ una vida que
nace y que muere…˜ por intensa que sea…˜ es insignificante comparada con lo que pre-
sentimos que nosotros somos…˜ Aunque nosotros nos engañemos a nosotros mismos
convenciéndonos de que somos esta insignificante vida nacida y mortal…˜ no podemos
cambiar nunca el hecho de que nosotros no somos el nacimiento…˜ Es esto lo que pre-
sentimos siempre…˜ Es esto…˜ lo que una vez escuchado…˜ jamás querremos dejar de
escucharlo…˜ Nuestro ser es ser por sí mismo…˜ y no está sujeto a los vaivenes de los
comienzos y los finales…˜ Esto quiere decir que jamás ha habido un nacimiento ni una
muerte de nosotros…˜

224
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

294
____________

Dios no era conmigo cuando el nacimiento no era…˜ ¿Quiere esto decir que yo soy
dios?…˜ No…˜ cuando el nacimiento no era conmigo…˜ yo no encuentro en mí ningu-
na cualidad divina…˜ Lo que encuentro es sólo una sublime soledad…˜ Conmigo sólo
era mi propia mismidad…˜ una identidad absoluta que es siempre…˜ Esta sublime sole-
dad es así mismo absolutamente amor sólo…˜ Lo soy y lo amo…˜ Este amor se basta a
sí mismo…˜ de manera que no necesita del tiempo para gozarse…˜ Su gozo integral es
ahora exactamente a como él era…˜
Por ello yo no ansío la permanencia del nacimiento en mí…˜ Y tampoco la
rechazo…˜ A cada instante me veo sin nacimiento…˜ y mi verme a cada instante sin na-
cimiento es suficiente en sí mismo…˜ Es suficiente y final…˜ Sólo si no os contempláis
en vuestra verdadera naturaleza…˜ que el nacimiento esté o no esté con vosotros será un
motivo de ansiedad…˜

225
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

295
____________

La contemplación de nosotros mismos…˜ cuando el nacimiento no era…˜ es posible


porque nosotros no somos el nacimiento…˜ Pero esta contemplación…˜ nosotros no la
tenemos con los ojos del nacimiento…˜ sino con el Ojo de nuestro ser…˜ Es porque no-
sotros somos cuando el nacimiento no era…˜ por lo que nosotros podemos contemplar-
nos sin nacimiento…˜ Y nuestra máxima satisfacción está precisamente en encontrar
que nosotros somos…˜ Cuando nosotros encontramos que nuestro ser es cuando esta
existencia no era…˜ nuestro júbilo deviene idéntico a nuestro ser…˜ Nosotros nos en-
contramos a nosotros mismos donde siempre hemos estado…˜ nos reconocemos a noso-
tros mismos con una alegría indescriptible…˜ No vemos por ninguna parte que haya ha-
bido nunca un nacimiento de nosotros…˜ Nuestro no haber hecho absolutamente nada
para que este nacimiento esté aquí…˜ coincide exactamente con nuestra conformidad
absoluta a lo que descubrimos que nosotros somos…˜ No vemos por ninguna parte que
haya ninguna división en nosotros…˜ La totalidad de nuestro ser está absolutamente
auto-contenida…˜ Así ha sido siempre…˜ y así vemos que ha sido siempre…˜
Sin embargo…˜ nosotros no podemos contemplar lo que somos con nuestras faculta-
des sensibles…˜ ¿Por qué es ello así?…˜ Ello es así porque nuestras facultades sensibles
no eran con nosotros cuando el nacimiento no era…˜ La contemplación y certeza abso-
luta de nuestro ser…˜ sólo podemos tenerla por lo que ERA cuando el nacimiento no
era…˜ Eso no nace jamás…˜ eso no es cuerpo…˜ ni mente…˜ ni alma…˜ ni espíritu…˜
ni nada nacido…˜
Para mí…˜ la contemplación de mí mismo cuando este nacimiento no era es lo más
sublime…˜ es la sublime soledad…˜ Toda inquietud y angustia han desaparecido de mí
porque yo no me veo nunca como un nacido…˜ Cuando veo este nacimiento…˜ simul-
táneamente me veo sin él…˜ me veo en mí mismo…˜ Un regocijo inmenso me llena…˜
Entonces me pregunto…˜ ¿estaba Dios conmigo en este estado que veo que yo soy…˜
cuando este nacimiento no era?…˜ Y veo que sólo mi sublime soledad es…˜ No se trata
de que yo quiera negar o afirmar lo que la palabra Dios significa…˜ Se trata de que es-
toy viendo por mí mismo que yo no tengo creador…˜ se trata de que estoy viendo que
ningún Dios era conmigo cuando este nacimiento no era…˜
Lo siento tan verdaderamente mi estado…˜ tan intensamente mío…˜ que me he tras-
ladado a este mundo hecho de mí mismo sólo…˜ Así es que mi versión de lo que ha
ocurrido difiere esencialmente de la versión de quien se mide a sí mismo con la medida
del nacimiento…˜ Mi vara de medir es cuando el nacimiento no estaba conmigo…˜ Y
en este estado verdaderamente mío…˜ que es integralmente ahora…˜ yo no encuentro

226
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

nada de lo que el nacimiento es…˜ Lo primero que no encuentro es que yo haya


nacido…˜ Simplemente es una imposibilidad hacer que yo comience…˜ No es que yo
quiera no haber comenzado…˜ Es que veo que yo soy sin comienzo…˜ Mi verme sin
comienzo no me lleva ningún esfuerzo…˜ mi verme sin comienzo es maravillosamente
fácil…˜ mi verme sin comienzo ni siquiera es pasmoso ya…˜
Se dice que todo lo que es inmortal es sin comienzo…˜ Y yo veo que esto es verda-
dero…˜ Pero también veo que si se dice que es sin comienzo…˜ sea ello lo que sea…˜
se está hablando únicamente de mí…˜

227
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

296
____________

En las escrituras hindúes hay una plegaria muy conmovedora…˜ en la que el Com-
prehensor…˜ una vez llegado al Sol…˜ que es la luz de este conocimiento: “yo soy”…˜
le suplica que aparte sus rayos…˜ para que el Comprehensor vea la puerta abierta aden-
tro de sí mismo…˜ Estos rayos que el Comprehensor suplica al Sol que aparte…˜ no son
otros que las facultades de sensación y de acción…˜
Esta plegaria me conmovía profundamente…˜ siempre que me encontraba con
ella…˜ su misterio se apoderaba de mí…˜ Yo imaginaba este sol sin rayos…˜ este sol
que no luce…˜ como una oquedad negra que se abría a un adentro donde nada era…˜
Poco a poco…˜ por muchas otras vías…˜ se hizo en mí la comprensión de que se
trataba de mí mismo…˜ Entonces cesé por completo de considerarme como un nacido
en viaje hacia un innacido…˜ Comprendí que no podía ser que yo como nacido alcanza-
ra nunca lo que buscaba…˜ Porque…˜ ¿qué era lo que yo buscaba?…˜ ¿a qué se parecía
lo que yo buscaba?…˜ ¿cuán lejos estaba de mí lo que yo buscaba?…˜ ¿cómo reconoce-
ría yo lo que yo buscaba?…˜ Asimilaba todas estas doctrinas y proposiciones…˜ Ellas
me sonaban a verdaderas…˜ ¿Pero de quién eran ellas verdaderas?…˜ Si ellas eran ver-
daderas de un Dios…˜ o de una Divinidad…˜ completamente remoto de mí mismo…˜
en alguna realidad inaccesible para mí en tanto que nacido…˜ ya estuviera esta realidad
que era su reino dentro o fuera de mí…˜ entonces…˜ me preguntaba yo a mí mismo…˜
¿cómo acceder a esa realidad que era el mundo de Dios…˜ o de la Divinidad…˜ ya estu-
viera dentro o fuera de mí?…˜ ¿Y en calidad de qué iba yo a acceder a la realidad del
mundo de Dios…˜ donde todas estas doctrinas y proposiciones que me conmovían eran
verdaderas?…˜ ¿en calidad de qué iba yo a acceder al mundo donde la Verdad es…˜
donde la eternidad es…˜ donde la Paz es?…˜ Se hacía intolerable lo que era un impedi-
mento…˜ ¿Cómo podía yo acceder a la Verdad en calidad de cuerpo…˜ en calidad de
mente…˜ en calidad de alma…˜ en calidad de espíritu?…˜ Por más que me hacía esta
pregunta…˜ yo veía que esto era una imposibilidad…˜ Había algo que no cuadraba…˜
Había algo que sobraba…˜ No se podían ser dos en la Verdad…˜ no se podían ser dos
en la Eternidad…˜ no se podían ser dos en la Paz…˜ Por otra parte…˜ yo me sentía a mí
mismo completamente imposibilitado de descubrir esa Verdad…˜ esa Eternidad…˜ esa
Paz…˜ Mi lejanía de esa Verdad era más real para mí que la lejanía del punto más lejano
de este universo…˜ De hecho…˜ mi comprensión era exacta…˜: Lo que hacía imposible
mi acceso a la Verdad era que yo mismo creía ser otro que la Verdad…˜ ¿Cómo trans-
formar lo que es un nacimiento en lo que es sin nacimiento?…˜ Aunque yo no me plan-
teaba el dilema en estos términos…˜ no había otro dilema…˜ Mi deseo…˜ mi anhelo…˜

228
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

mi ardor era llegar a ese Principio Eterno…˜ ¿Pero en qué consistía el Principio
eterno?…˜ ¿Era un cuerpo…˜ era una mente…˜ era un espíritu?…˜ ¿De mí como naci-
do…˜ qué se uniría a Él como innacido?…˜ ¿Y dónde estaba Él?…˜ ¿Dónde estaba esa
realidad suya que era su mundo…˜ donde eran verdaderas todas estas doctrinas y propo-
siciones?…˜ Yo comprendía que algo no cuadraba…˜ Tal y como se planteaban las co-
sas…˜ yo nunca podría acceder al orden de la Realidad…˜ Y esto era así…˜ simplemen-
te…˜ porque yo no encontraba qué es lo que en mí mismo como nacido podría unirse a
ese Principio como innacido…˜ Había una disparidad de naturalezas que hacían imposi-
ble este encuentro…˜ esta fusión…˜
Si yo había de llegar alguna vez a esa Realidad donde Dios es…˜ era evidente que
ello no sería nunca como este nacido…˜

229
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

297
____________

Era evidente que como nacido y mortal…˜ era evidente que como un cuerpo y mente
y alma y espíritu…˜ yo nunca accedería a la Verdad…˜ a la Eternidad…˜ a la Paz…˜ No
había nada en común entre este cuerpo y mente y alma y espíritu…˜ y lo que es la Ver-
dad…˜ la Eternidad…˜ la Paz…˜ Entonces…˜ ¿como qué…˜ en calidad de qué…˜ iba a
acceder yo nunca…˜ a esa fusión sublime?…˜ Había algo en mí que era intolerable…˜
Había algo que me eludía en este dilema…˜
Entonces escuché…˜ “Contémplate a ti mismo…˜ cuando el nacimiento no era”…˜
Inmediatamente…˜ el Sol de la Verdad quedó limpio de rayos…˜ Entonces yo me
dije…˜ “Estos rayos…˜ estas facultades de sensación y de acción…˜ este cuerpo y men-
te y alma y espíritu no estaban conmigo cuando el nacimiento no era…˜ Ahora veo
Quién soy…˜ La proposición no hablaba de una Verdad remota de mí…˜ la proposición
hablaba de mí mismo…˜ de este Mí mismo que tan limpiamente me veo ser”…˜
El Sol sin rayos es mí mismo cuando el nacimiento no era…˜ el Sol con rayos es mí
mismo ahora que el nacimiento es…˜ A mí mismo…˜ yo no tengo que volver…˜ pues
jamás he salido…˜ Ya no hay ninguna incongruencia en esta proposición…˜ El intolera-
ble para mí…˜ era ese otro que yo creía ser…˜ No hay dos donde Yo soy…˜

230
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

298
____________

La plegaria del Comprehensor al Sol de su propia naturaleza real…˜ para que aparte
los rayos de las facultades de sensación y de acción…˜ a fin de poder ver su Rostro más
Bello…˜ es una expresión simbólica de la pregunta…˜ “¿qué era conmigo…˜ cuando
este nacimiento no era?”…˜
El Sol sin rayos de nuestra verdadera naturaleza real…˜ Lo que nosotros somos real-
mente…˜ es lo que se muestra a nosotros como nuestro verdadero ser…˜ cuando noso-
tros nos vemos sin nacimiento…˜ ¿Qué es verse uno mismo sin nacimiento?…˜ Las fa-
cultades de sensación no eran con nosotros…˜ las facultades de acción no eran con no-
sotros…˜ el Sol de nuestra verdadera realidad no lucía…˜ el Sol de nuestra verdadera
realidad era este mismo Sol que nos vemos ser cuando se nos indica que nos veamos sin
nacimiento…˜
Mirad…˜ Durante toda mi búsqueda de mi verdadera naturaleza real…˜ había en mí
algo intolerable…˜ Yo no era plenamente consciente de qué era esto que era
intolerable…˜ pero lo había…˜ Ahora que sé integralmente Quién soy…˜ veo con toda
claridad lo que era intolerable en mí…˜ Yo no podía conocer ni saber jamás quién soy
mientras estaba creyendo que el que buscaba es uno y que el buscado es otro…˜ Lo que
era intolerable en mí era la sensación de la dualidad…˜ la sensación de que yo era al-
guien…˜ alguien que estaba buscando realmente quién era…˜
Intolerable quiere decir insufrible…˜ quiere decir doloroso…˜ quiere decir angustio-
so…˜ quiere decir ignorante…˜ Mi ignorancia era completa…˜ Yo no sabía quién era
yo…˜ yo no sabía a qué me parecía yo…˜ yo no sabía adónde debía dirigirme yo para
encontrarme…˜ yo no sabía cómo sabría reconocerme a mí mismo…˜ Lo que yo parecía
ser era intolerable…˜ insufrible…˜ angustioso…˜ Había algo que me faltaba…˜ Me fal-
taba el conocimiento de quién soy…˜ Y aunque yo parecía ser este hombre…˜ este hom-
bre era para mí intolerable…˜ Yo no podía acostumbrarme a él…˜ Siempre estaba bus-
cando cambiarle…˜ queriendo mejorarle…˜ Era intolerable mi supuesto nacimiento…˜
era intolerable el funcionamiento desconocido de este nacimiento…˜ era intolerable que
yo fuera sólo este pequeño paquete corporal consumiendo sus días en un pequeño mun-
do…˜ cuya salida no estaba en ninguna parte…˜ Era intolerable ver pasar los días…˜ y
los meses…˜ y los años…˜ sin encontrar el significado de mi profundísimo malestar…˜
Evidentemente…˜ a mí me faltaba algo…˜ algo fundamentalísimo…˜
Ciertamente…˜ me faltaba algo…˜ algo que ya no me falta…˜ Lo verdaderamente
intolerable no era el nacimiento…˜ lo verdaderamente intolerable es que yo no sabía
quién soy…˜

231
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

299
____________

¿En qué son diferentes estas dos proposiciones…˜ a saber…˜ la plegaria hindú…˜
“Aparta tus rayos…˜ ¡oh Sol de mi verdadera naturaleza real!…˜ para que yo vea tu ros-
tro más bello”…˜ y “Veámonos a nosotros mismos…˜ cuando este nacimiento no
era”?…˜ ¿Cuál de estas dos proposiciones mantiene intacto lo intolerable en
nosotros?…˜
En la primera…˜ se pide que lo que somos aparte de sí lo que no somos…˜ Sin em-
bargo…˜ parece enteramente que es desde lo que no somos que nosotros quisiéramos
ver lo que somos…˜ Esto es realmente lo intolerable…˜ Desde esta posición misma…˜
durante muchos años…˜ yo he querido verme a mí mismo sin adelantar ni un micronési-
mo en la distancia infinita…˜ hecha sólo de ignorancia…˜ que me separaba ilusoria-
mente de mi ser real…˜ Si mi ser real apartaba de sí este nacimiento…˜ ¿quién quedaba
para ver qué?…˜
Sin embargo…˜ la salida siempre ha estado abierta…˜ La puerta hacia el nacimiento
es una puerta que yo no he cruzado jamás…˜ Entonces escuché la invitación…˜ “Con-
témplate a ti mismo cuando el nacimiento no era”…˜ Toda búsqueda había terminado…
˜ Lo que era intolerable había desaparecido…˜ Y yo me contemplaba a mí mismo tal
cual soy…˜ sin dualidad…˜ Yo no era dos…˜ no había ningún nacimiento de mí…˜

232
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

300
____________

Cuanto más contemplo mi verdadero estado real…˜ cuando el nacimiento no era…˜


tanto más intenso es mi auto-abarcado de mí mismo…˜ Me veo completamente más acá
de la puerta de la percepción…˜ me veo integralmente como lo que es el Sol sin rayos…
˜ al que en la escritura hindú se suplica que aparte sus rayos para ver su rostro más be-
llo…˜ De mí ha desaparecido todo lo que era intolerable…˜ Ya no me veo a mí mismo
como carente de nada…˜ Al mismo tiempo…˜ mi contemplación de mí mismo es inte-
gralmente amor…˜ Con esta revelación de mí mismo a mí mismo…˜ siendo sólo uno…˜
pareciera enteramente que fuéramos dos…˜ Pero es sólo mí mismo…˜ y la visión de mí
mismo…˜ Y no hay el menor rastro de duda en ello…˜ Y sumado a este mí mismo y a la
visión de mí mismo…˜ está igualmente presente este amor que une esta visión a lo que
se ve a sí mismo con ella…˜
Comprendo que éste es el misterio de la doctrina de la Trinidad cristiana…˜ El Padre
no se sabía ser sin el Hijo…˜ El Hijo es esta visión de sí mismo del Padre…˜ revelada a
mí con este nacimiento que no era conmigo…˜ Y este amor que no cesa…˜ que está pre-
sente en esta visión de sí mismo de esto que es cuando el nacimiento no es…˜ es el Es-
píritu Santo…˜ Encuentro que todo esto está en mí…˜ Y encuentro también que mí mis-
mo no está en ello…˜
Limitar el amor a las fronteras del cuerpo…˜ es encerrarnos a nosotros mismos en la
cárcel del aislamiento…˜ Para comprender esto…˜ pongamos que tenemos una casa…˜
Nuestro cuidado y nuestro amor se dirige todo sólo a lo que creemos que es nuestra
casa…˜ Nosotros no nos cuidamos ni nos preocupamos por la casa del vecino…˜ Esta
imagen que es tan comprensible…˜ no parece serlo tanto cuando se trata de nuestra casa
de carne…˜ Pero la imagen es igualmente válida en el caso del cuerpo…˜ Cuando noso-
tros creemos que el cuerpo es todo lo que somos…˜ nuestro cuidado y nuestro amor no
rebasa nunca las fronteras del cuerpo…˜ Éste no es el amor real…˜ éste es lo que se lla-
ma el amor egótico…˜ El resultado de creer que el cuerpo es todo lo que somos…˜ es el
aislamiento y la soledad del prisionero…˜ Y ello se debe únicamente a que pensemos lo
que pensemos…˜ nuestro amor y nuestro cuidado no sale jamás de las fronteras del
cuerpo…˜

233
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

301
____________

Cuando las doctrinas budistas dicen que el fin del sufrimiento está donde está el fin
del mundo…˜ con esta misma proposición nos está diciendo que el sufrimiento no es
donde el mundo no es…˜
El mundo no es cuando el nacimiento no era…˜ el mundo no es donde el nacimiento
no era…˜ De manera que si nosotros queremos vernos a nosotros mismos limpios de
todo sufrimiento…˜ debemos vernos a nosotros mismos cuando el nacimiento no era…˜
Vernos a nosotros mismos cuando el nacimiento no era…˜ es equivalente a vernos a no-
sotros mismos cuando el mundo ya no sea…˜
No hay otro fin del mundo que vernos a nosotros mismos en nuestro propio estado
cuando el nacimiento no era…˜ Y este vernos a nosotros así…˜ tal cuál somos…˜ com-
pletamente limpios de nacimiento…˜ es una operación sumamente llana y delectable…˜
Podemos vernos sin nacimiento…˜ porque somos sin nacimiento…˜ En este vernos sin
nacimiento está el fin de nuestra búsqueda de nosotros mismos…˜
¿Por qué nos buscamos a nosotros mismos?…˜ Nos buscamos a nosotros mismos…˜
porque habiendo aceptado que somos el nacimiento…˜ nosotros hemos devenido enaje-
nados y divididos de nuestra verdadera naturaleza real…˜ Esta enajenación y división
de nuestra verdadera naturaleza real…˜ nosotros la sentimos muy profundamente…˜
Hay algo profundamente intolerable…˜ profundamente desasosegante en creerse uno
mismo nacido y mortal…˜ De manera que para uno de nosotros que no se conoce a sí
mismo…˜ la vida de este nacimiento en él…˜ es la ocasión de la manifestación de la an-
gustia…˜ de la tortura…˜ del desasosiego…˜ y de la intolerabilidad…˜ Cuando está
afectado por este desconocimiento de quién somos…˜ sin saber por qué…˜ ese algo in-
tolerable no le deja reposar…˜ Uno no cabe realmente en el cuerpo ni en la mente ni en
el alma ni en el espíritu…˜ Uno no cabe realmente en el espacio ni el tiempo ni en la
vida…˜ Lo intolerable es que uno siente que no cabe…˜ pero no sabe qué le ocurre…˜
La única prisa verdaderamente justificada es la presión interior que nos lleva a bus-
car ardientemente la razón de nuestro sufrimiento…˜ Yo tenía una prisa enorme por ver
que lo intolerable desaparecía de mí…˜ Más que una prisa…˜ era una urgencia…˜ No
encontraba alivio ni consuelo excepto en la promesa de la liberación…˜ Pero la promesa
no era el hecho…˜ De manera que mi impaciencia crecía y crecía…˜ Esta verdad de lo
intolerable quemando en mis entrañas era mi vara de medir la eficacia de las proposicio-
nes…˜ ¿Qué tenían que decirme sobre mí mismo los libros?…˜ ¿Dónde estaba la fórmu-
la cuyo bebedizo haría disolverse esta entraña de dolor intolerable?…˜ Yo leía…˜ escu-
chaba…˜ creía…˜ ponía en acto los mandamientos de la religión…˜ Pero nadie me indi-

234
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

caba en qué consistía realmente la condición de mi estado…˜ Lo intolerable…˜ la divi-


sión y separación de mí mismo quedaba intacta…˜ haciendo manar su dolor…˜ Mi co-
nocimiento actual de lo intolerable es agudo…˜ extremo…˜ y completo…˜ Ya no está
en mí…˜ pero lo conozco mejor que si estuviera…˜
No hay ninguna posibilidad de hacerlo desaparecer excepto sabiendo y contemplan-
do quién soy…˜ Y para saber y contemplar quién soy es absolutamente necesario que yo
me contemple a mí mismo sin nacimiento…˜
Mi contemplarme a mí mismo sin nacimiento es estable…˜ Esta contemplación na-
die me la ha indicado…˜ esta contemplación es autorevelada…˜ Repentinamente me he
visto sin nacimiento…˜ eso es todo…˜ Yo sé que mi ser es eterno…˜ yo sé que mi ser es
cuando el nacimiento no es…˜ Ya sea antes del nacimiento…˜ ahora que está aquí este
nacimiento…˜ o cuando este nacimiento ya no es…˜ yo sé que mi ser envuelve esto por
todas partes…˜ Es una envoltura de estabilidad y de inmutabilidad…˜ amada con un
amor superlativo…˜ real…˜ inmutable…˜

235
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

302
____________

He dicho que tenía prisa…˜ y que más que prisa era urgencia…˜ En efecto…˜ lo in-
tolerable de no saber quién era me abrasaba el corazón…˜
Ahora me contemplo a mí mismo tal cual soy…˜ Sé por mí mismo quién soy…˜ Sé
que absolutamente nada me contiene…˜ Sé que aún el Paraíso más alto concebible sigue
siendo intolerable para mí…˜ De manera que me veo a mí mismo como el que pone fin
al mundo…˜ Yo soy eso donde el universo entero se disuelve…˜ No cuando el universo
entero se disuelve…˜ sino ahora mismo en que sé quién soy…˜ Todo lo que era intolera-
ble ha desaparecido…˜ No que el nacimiento haya desaparecido…˜ Lo que ha desapare-
cido es la ignorancia de quién soy…˜

236
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

303
____________

Contemplarse a uno mismo cuando el nacimiento no era es el estado más alto…˜


¿Cómo se contempla uno mismo cuando el nacimiento no era?…˜ Basta obedecer llana-
mente a la invitación de hacerlo…˜ como un niño que obedece…˜ Contemplarse a uno
mismo sin nacimiento es entrar en la verdadera realidad de uno…˜ de la que uno nunca
ha salido…˜ Por ello…˜ hay un reconocimiento extremadamente gozoso…˜ extremada-
mente delectable…˜ de que lo que uno está sabiendo de sí mismo es la Verdad…˜ En
este prodigioso seno de Realidad…˜ uno sabe quién es uno…˜ uno se sabe ser lo que no
nace ni muere…˜ Y para su gran sorpresa…˜ ve que sabe esto sin ningún esfuerzo…˜
sin ningún trabajo…˜ por nadie que no sea uno mismo…˜ Nadie se lo está enseñando…
˜ En esta sublime soledad…˜ todo es auto-suficiente…˜ Aunque uno no encuentra su co-
mienzo…˜ contempla con maravilla que ya no busca encontrarlo…˜ Su plenitud es inte-
gralmente ahora…˜ En su ser lo que es…˜ en comprender que verdaderamente uno es lo
que es…˜ uno se encuentra a sí mismo totalmente completo…˜ Esta sublime soledad es
auto-suficiente…˜ Se ama a sí misma en una completud circular de la que nada está ex-
cluido…˜ El que se contempla sin nacimiento se ama integralmente a sí mismo porque
ve quién es…˜ Su contemplarse es amor…˜ y su ser lo que es también es amor…˜
Se contempla completo…˜ se contempla entero…˜ se contempla sin carencia alguna
de nada…˜ Cada uno de sus instantes es perfectamente idéntico a sí mismo…˜ y la con-
templación de su eternidad nunca flaquea…˜ Sabe que su ser lo que él es…˜ ha sido
siempre…˜ El tiempo…˜ la sucesión de las edades es algo que ocurre en su seno…˜ Su
ser lo que él es no viene ni pasa…˜ Por ello es omnisciente de todos los tiempos…˜ de
todas las edades…˜ Y sus comienzos y sus finales…˜ él los contempla sólo como pre-
sencia a sí mismo o como dormición de su propia presencia a sí mismo…˜ Pero en sí
mismo…˜ él está viendo ahora que él no comienza y que él no acaba…˜
Este conocimiento no es difícil…˜ es maravillosamente fácil y real…˜ No hay ni uno
solo de nosotros que no pueda contemplarse cuando el nacimiento no era…˜ no hay ni
uno solo de nosotros que no pueda contemplar de sí mismo su propia plenitud sin prin-
cipio ni fin…˜ y gozarse y delectarse con su propia verdad de sí mismo…˜ No hay ni
uno solo de nosotros que no pueda contemplar por sí mismo su propia verdad de sí mis-
mo…˜ No hay ni uno solo de nosotros para quien sea imposible saber quién es…˜
Llanamente…˜ obedeced…˜ Contemplémonos cuando el nacimiento no era…˜ con-
templémonos en nuestra propia verdad…˜ ¿Y cuál es nuestra propia verdad?…˜ Nuestra
propia verdad es lo que no ha venido a nosotros…˜ nuestra propia verdad es lo que no

237
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

se va de nosotros…˜ nuestra propia verdad es lo que nosotros somos cuando el naci-


miento no era…˜
Cesemos por completo de contemplar lo que no es nosotros…˜ cesemos de pedirle al
nacimiento que sea nosotros…˜ El nacimiento no puede ser nosotros…˜ El nacimiento
está viniendo a nosotros y está yéndose de nosotros…˜ Nosotros somos su anfitrión y él
es nuestro huésped…˜ Cuando no había venido…˜ nosotros no sabíamos nada del naci-
miento…˜ Cuando se vaya…˜ nosotros volveremos a no saber nada del nacimiento…˜
¿Y mientras tanto?…˜ ¿Y ahora…˜ que el nacimiento está viniendo y yéndose?…˜
Ahora sí…˜ ahora podemos saber todo de nosotros mismos…˜ Ahora podemos ver-
nos y contemplarnos a nosotros mismos cuando el nacimiento no era…˜ Esto es maravi-
llosamente fácil y agradecido…˜ Y viéndonos a nosotros mismos tal cual somos…˜ sea-
mos completamente libres en nuestra sublime soledad…˜ Todos los nacimientos caben
en la sublime soledad de uno solo…˜ Y este Uno es nosotros…˜

238
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

304
____________

Contemplémonos cuando el nacimiento no era…˜ seamos plenamente conocedores


de nuestro propio ser cuando el nacimiento no era…˜ No nos preguntemos qué éramos o
qué no éramos…˜ Seamos sólo conscientes de que nosotros somos cuando el nacimien-
to no era…˜
Esta es la proposición más importante que podemos escuchar nunca…˜ Y si nosotros
comprendemos lo que esta proposición indica de nosotros mismos…˜ entonces nos ve-
remos ser ahora integralmente lo que nosotros somos…˜ Cuando aquí se habla de ver…
˜ ciertamente no se está indicando que veamos ahí afuera a un nosotros imaginario…˜ a
un nosotros que consistiría en cómo nosotros imaginamos que seríamos cuando el naci-
miento no era…˜ Cuando aquí se habla de ver…˜ se indica ciertamente que nos veamos
a nosotros mismos…˜ ahora…˜ tal cual somos…˜ Lo que se indica es que recedamos
del nacimiento a nosotros mismos…˜ Lo que se indica es que nos veamos a nosotros
mismos como el contenedor de todo lo que vemos…˜ incluida nuestra imaginación de
nosotros mismos cuando el nacimiento no era…˜ Cuando el nacimiento no era no es una
imaginación…˜ Eso que es nosotros cuando el nacimiento no era…˜ es esto que es no-
sotros ahora que el nacimiento es…˜ De manera que lo que se nos manda con la invita-
ción a vernos cuando el nacimiento no era…˜ no es que viajemos imaginariamente a
cuando el nacimiento no era efectivamente…˜ sino que nos reconozcamos a nosotros
mismos ahora exactamente idénticos a Eso que es nosotros cuando el nacimiento no
era…˜ ¿Es esto posible?…˜ Vedlo por vosotros mismos…˜ La respuesta a la pregunta de
si esto es posible es vosotros mismos…˜ Verse a uno mismo cuando el nacimiento no
era…˜ contemplarse a uno mismo cuando el nacimiento no era…˜ es SER Ahora Eso
que es nosotros cuando el nacimiento no era…˜
Cuando uno ve todo…˜ cuando uno ve el nacimiento desde su verdadero Ser…˜ ya
nada puede engañarle…˜ Está viendo que todo…˜ está viendo que esta universalidad
nacida está teniendo su acontecer en él…˜ Pero de sí mismo…˜ su conocimiento de sí
mismo…˜ le dice alto y claro que él no acontece…˜ No encuentra en sí mismo que nada
haya cambiado jamás…˜ Se encuentra a sí mismo ahora exactamente idéntico a lo que
él era cuando nada acontecía en su seno…˜ Y este verse como se ve…˜ es un junto inte-
gral de delectación sublime…˜ un néctar hecho sólo de Verdad que anega completamen-
te su estado de conocimiento…˜
Alguien ha venido a mí y me ha preguntado si era final la contemplación de la sen-
sación de ser…˜ Yo le he dicho…˜ «¿estaba contigo la sensación de ser cuando el naci-
miento no era?…˜ No…˜ no estaba contigo…˜ ¿entonces cómo va a ser final contem-

239
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

plar la sensación de ser?…˜ Tú mira bien…˜ siempre que contemples algo…˜ lo que
sea…˜ aunque sea un gran dios…˜ mira a ver si estaba contigo cuando el nacimiento no
era…˜ Y si no lo encuentras ahí…˜ tenlo por nacido…˜ ¿Y qué quiere decir nacido?…˜
Nacido quiere decir que está aconteciendo en tu seno…˜ exactamente como acontece en
tu seno el sabor salado…˜ Si está aconteciendo en tu seno…˜ tú no eres ello…˜ tú eres
el seno donde acontece…˜ Su acontecer ha comenzado en tu seno y acabará en tu
seno…˜ Pero tienes que comprender que lo que llamo tu seno no acontece…˜ tienes que
comprender que tú no aconteces…˜ Y comprendiendo que tú no aconteces…˜ tienes que
verte cuando el nacimiento no era…˜
Verte cuando el nacimiento no era…˜ esto sí es final…˜»

240
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

305
____________

Contemplémonos cuando el nacimiento no era…˜ No imaginéis nada…˜ no nos ima-


ginemos cómo podría ser cuando el nacimiento no era…˜ Simplemente contemplémo-
nos a nosotros mismos…˜ El nacimiento no era…˜ el nacimiento no estaba con noso-
tros…˜ Nosotros sabemos esto…˜ sabemos que el nacimiento no estaba con nosotros…˜
Sabemos esto ahora…˜ Luego ahora es el momento de contemplar lo que nosotros so-
mos sin nacimiento…˜ Hagámoslo…˜ contemplémonos cuando el nacimiento no era…˜
Veamos exactamente qué es lo que no era con nosotros cuando el nacimiento no era…˜
Lo que llamamos nuestros padres…˜ son los padres del nacimiento…˜ Si el naci-
miento es creado…˜ su creador es sólo el creador del nacimiento…˜ ¿Eran con nosotros
los padres del nacimiento…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ ¿Era con nosotros el cre-
ador del nacimiento…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ ¿Qué había de esta creación
con nosotros…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ ¿Cómo nacían con nosotros los naci-
mientos…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ ¿cómo crecían…˜ cómo maduraban…˜
cómo envejecían…˜ como morían?…˜
¿Qué encontramos que somos nosotros…˜ cuando el nacimiento no era?…˜ Contem-
plémonos bien…˜ contemplémonos profundamente…˜ veámonos cuando el nacimiento
no era…˜ No tengamos prisa…˜ contemplemos…˜ Digámonos…˜ “este nacimiento no
era conmigo…˜ ¿Qué encuentro que yo soy…˜ cuando este nacimiento no era
conmigo?…˜ ¿Cómo vivía o no vivía lo que yo encuentro que yo soy cuando el naci-
miento no era?…˜
Ciertamente…˜ si nosotros estamos siguiendo el hilo de estas preguntas…˜ si noso-
tros nos estamos dejando guiar por el aroma de nosotros mismos…˜ por las respuestas
salidas de nosotros mismos a estas preguntas…˜ entonces ahora estamos completamente
ensimismados en nuestro propio ser real…˜ Nos estamos viendo cuando el nacimiento
no era…˜ nos estamos viendo como el seno inabordable donde este nacimiento está de-
viniendo lo que deviene…˜ Pero a nosotros mismos nos estamos viendo sin devenir…˜
inmutables…˜ serenos…˜ hechos de quietud…˜ sublimemente solos…˜
El nacimiento no era con nosotros…˜ Nosotros lo vemos con absoluta certeza…˜ Un
amor intenso de nosotros mismos así…˜ tal cual somos…˜ está igualmente presente en
nuestra contemplación de nosotros mismos…˜
Aspirábamos a saber quién somos…˜ y ahora lo sabemos…˜ Aunque no puede po-
nérsele nombre a esto que vemos que somos…˜ la certeza de ser…˜ es irrefutable…˜
Son numerosos los aspirantes a este conocimiento de sí mismos que no se conocen nun-
ca porque nunca miran a cuando el nacimiento no era…˜ Fijaos bien…˜ por grande que

241
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

sea la visión que acontezca en nuestro seno…˜ el contemplador de la visión es siempre


más…˜ Todo cabe en nuestra contemplación…˜ Si contemplamos la luz…˜ aunque sea
la luz más alta…˜ el contemplador es más…˜ Si contemplamos el silencio…˜ aunque
sea el silencio que era cuando el nacimiento no era…˜ el contemplador es más…˜ Si nos
contemplamos a nosotros mismos…˜ cuando el nacimiento no era…˜ nosotros…˜ el
contemplador…˜ es más…˜ Nosotros no cabemos en nuestra propia contemplación…˜
De manera que es una imposibilidad que nos descubramos como otro que nosotros mis-
mos…˜ Nada contemplado es nosotros ni nuestro…˜ excepto la contemplación de noso-
tros mismos contemplándonos cuando el nacimiento no era…˜
No podemos contemplarnos cuando el nacimiento no era…˜ con los ojos…˜ ni con
la mente…˜ ni con el alma…˜ ni con el espíritu…˜ Sólo con lo que era cuando el naci-
miento no era podemos contemplarnos…˜
En esta contemplación no hay dos…˜ La consciencia absoluta de ser lo llena todo…˜

242
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

306
____________

Cuando preguntamos cómo tenemos que hacer para meditar…˜ primero de todo no-
sotros tenemos que tener la respuesta a la pregunta…˜: “¿cómo hacemos nosotros que
nosotros somos?”…˜
Preguntémonoslo…˜ preguntémonos cómo hacemos nosotros que nosotros somos…
˜ Fijaos bien y comprended…˜ cuando preguntamos cómo tenemos que hacer para me-
ditar…˜ nosotros estamos asumiendo…˜ o creyendo…˜ que nosotros somos alguien…˜
alguien a quien le falta esta pericia de saber meditar…˜ ¿Pero qué alguien somos noso-
tros?…˜ Y sobre todo ¿cómo hacemos nosotros que nosotros somos alguien?…˜ Si no-
sotros queremos saber cómo meditar…˜ la respuesta a esta pregunta…˜ es la misma que
la respuesta a la pregunta de “¿cómo hacemos nosotros que nosotros somos este al-
guien?…˜ ¿cómo estamos haciendo ahora nosotros que nosotros somos este alguien?…˜
¿cómo?…˜ ¿cómo lo estamos haciendo?”…˜
Si nosotros buscamos saber meditar desde este alguien que creemos ser…˜ y que no
sabemos cómo hacemos que lo somos…˜ entonces nunca sabremos cómo meditar real-
mente…˜ Todas las actividades que emprendemos desde este alguien que creemos ser…
˜ y que no sabemos cómo hacemos que lo somos…˜ sus frutos no rebasan nunca a este
alguien imaginario…˜
De manera que la pregunta correcta no es cómo medito yo…˜ para cambiar a este al-
guien que no sé cómo hago que yo soy…˜ La pregunta correcta es…˜: “¿soy yo este al-
guien que pregunta cómo meditar?…˜ ¿estaba conmigo este alguien…˜ que yo no sé
cómo hago que yo soy…˜ cuando el nacimiento no era conmigo?…˜ ¿Era yo un alguien
cuando el nacimiento no era conmigo?…˜ ¿Cuánta meditación necesito para responder a
estas preguntas?…˜: ¿Era yo un alguien cuando el nacimiento no era conmigo?…˜ ¿Qué
soy yo cuando el nacimiento no es conmigo?…˜ ¿Y cómo hago yo que yo soy cuando el
nacimiento no es conmigo?”…˜
Meditar verdaderamente es escuchar nuestra propia respuesta a las preguntas que os
preguntan por nosotros…˜ No por este alguien que no estaba con nosotros cuando el na-
cimiento no era…˜ sino por el nosotros real que sabe que este nacimiento no era…˜
Yo no puedo ir contra lo que veo que es absolutamente verdad de mí mismo…˜ De
manera que me he preguntado…˜ “¿Había algún creador conmigo cuando este naci-
miento no era?”…˜ He tenido la respuesta…˜ Y entonces he sabido por mí mismo que
yo no soy creado…˜ No había ningún creador conmigo cuando este nacimiento no era…
˜

243
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

Toda mi atención se centra en el estado…˜ verdaderamente mí mismo solo…˜ en


que el nacimiento no era…˜ Yo no sé cómo hago que yo soy lo que soy…˜ No hay nin-
gún hacer ni no hacer en el estado…˜ verdaderamente mí mismo…˜ en que el nacimien-
to no era…˜ Sin embargo…˜ hay una consciencia absoluta de ser…˜ Se trata llana y
simplemente de mí mismo…˜
Verse así…˜ contemplarse así…˜ cuando el nacimiento no era con nosotros…˜ esto
es la meditación real…˜

244
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

307
____________

Cuando el nacimiento no era con nosotros…˜ sólo esto tenemos que ver…˜ Por
nuestro bien supremo…˜ tenemos que vernos cuando el nacimiento no era con
nosotros…˜ Un solo vislumbre de este estado verdadero nuestro…˜ acaba instantánea-
mente con toda nuestra pesadumbre…˜ Nosotros no somos jamás el nacimiento…˜ Pero
tenemos que vernos cuando el nacimiento no era…˜ para que estas palabras descubran
lo que ocultan…˜ ¿Y qué ocultan estas palabras?…˜ Ocultan un estado eterno…˜ el es-
tado eterno de nuestro verdadero ser real…˜
No hay que ir a ninguna parte para encontrarnos…˜ Sólo hay que vernos limpios de
lo que no era con nosotros…˜ De manera que no os preocupéis de desapegaros de esto o
aquello…˜ No digáis que sois más virtuosos o menos…˜ no digáis que sois de esta o
aquella naturaleza…˜ Todo esto se queda para el que cree que el nacimiento es él…˜ Lo
nuestro es vernos cuando el nacimiento no era…˜ lo nuestro es vernos cuando los ape-
gos no eran…˜ lo nuestro es vernos cuando ser más o menos virtuoso no era…˜ lo nues-
tro es vernos cuando ni esta ni aquella naturaleza eran…˜ lo nuestro es sentirnos ser
completamente…˜ intensamente…˜ cuando el nacimiento no era con nosotros…˜
Para escuchar y responder a esta proposición magistral…˜ ninguna preparación es
necesaria…˜ Sólo es necesario tener oídos para escuchar…˜ y ojos para ver…˜ Oídos
para escuchar…˜ “Veéte a ti mismo cuando este nacimiento que crees falsamente que
eres tú…˜ no estaba contigo”…˜ Y ojos para ver que lo que esta proposición nos pide
que hagamos…˜ podemos hacerlo…˜ ojos para vernos a nosotros mismos cuando este
nacimiento no estaba con nosotros…˜
Hagámoslo…˜ Veámonos cuando este nacimiento no era…˜ sintamos cómo nosotros
seguimos siendo lo que nosotros somos cuando ningún nacimiento era…˜ Yo…˜ que os
invito a veros cuando el nacimiento no era…˜ en este mismo instante en que os invito…
˜ me veo a mí mismo cuando el nacimiento no era…˜ Tengo los ojos que ven este prodi-
gio…˜ Mis ojos son una consciencia absoluta de mi ver eterno…˜ Sí…˜ yo soy…˜ yo
soy cuando ningún nacimiento era…˜ Lo sé por mí mismo…˜ lo veo por mí mismo…˜
Es un Pleroma de felicidad sin mácula…˜ una Plenitud donde no falta nada…˜ Este néc-
tar ha invadido el nacimiento mismo…˜ De manera que yo no veo en él ninguna falta
tampoco…˜ El nacimiento es igualmente perfecto…˜ y no encuentro en él ningún moti-
vo de queja…˜ Todo en él es inmejorable…˜ El nacimiento es estos oídos para escu-
char…˜ el nacimiento es estos ojos para ver…˜ Para escucharme preguntar por mí mis-
mo…˜ para verme ser mí mismo…˜ Y no hay un solo instante en que esta comprensión
me abandone…˜

245
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

Yo ya no estoy resentido con el nacimiento…˜ ¿Comprendéis?…˜ He cesado de pe-


dirle que sea mí mismo…˜ he cesado de exigirle que sea mí mismo…˜
Nadie puede interponerse entre mí mismo y mi visión de mí mismo…˜ No hay dos
mí mismo…˜ uno que ve y otro que es visto…˜ Esta visión de mí mismo…˜ tampoco
estaba conmigo cuando el nacimiento no era…˜ Pero lo que veo de mí mismo es sufi-
ciente para mi total conformidad con lo que me veo ser…˜ Acepto con amor intenso que
yo no me veía cuando el nacimiento no estaba conmigo…˜ Este amor tampoco estaba
conmigo cuando el nacimiento no estaba conmigo…˜ ni tampoco estaba este arrobo…˜
ni esta delectación…˜ Todo esto lo veo…˜ y verlo no me produce ninguna inquietud…˜
Lo que me veo ser es más que suficiente…˜ Nada me faltaba ni nada era echado de me-
nos…˜ con estos oídos lo escucho…˜ con estos ojos lo veo…˜

246
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

308
____________

Veos cuando el nacimiento no era…˜ No filtréis esta invitación por el tamiz engaño-
so de vuestra mente…˜ Si filtráis esta invitación por el tamiz engañoso de vuestra men-
te…˜ no os estáis viendo…˜ La mente no estaba con vosotros cuando el nacimiento no
era…˜ Abandonad el ego-gobierno y escuchad y ved como escuchan y ven los niños…˜
No intentéis encontrar a otro que a vosotros mismos cuando el nacimiento no era…˜
Sólo vosotros erais cuando el nacimiento no era…˜ Veos así…˜ veos cuando el naci-
miento no era…˜

247
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

309
____________

Cuando escuchamos la proposición “sea lo que usted es”…˜ si nosotros le damos


crédito…˜ lo intolerable se manifestará en nosotros llenándonos de inquietud…˜ “¿Qué
es lo que soy yo ahora…˜ y qué es lo que yo debo ser para ser lo que yo soy?”…˜ Esta
proposición nos dice que nosotros somos otro que el que somos…˜ al tiempo que nos
invita a ser lo que nosotros somos…˜ ¿Pero cómo descubrir lo que nosotros somos?…˜
Esta proposición no nos dice cómo descubrir lo que nosotros somos…˜ Finalmente…˜
por bien que suene…˜ esta proposición se reduce a esto…˜: “Usted está siendo otro que
el que usted es…˜ por ello se le indica que cese de ser ese que usted cree ser…˜ y que
sea el que usted es realmente”…˜ Esto es fácil de decir…˜ pero no es tan fácil de llevar
a cabo…˜ ¿Por qué…˜ quién o qué soy yo…˜ de manera que viéndolo…˜ yo no encuen-
tre dificultad en hacer esta transferencia?…˜ Esto…˜ la proposición no nos lo indica…˜
Tenemos que comprender que lo intolerable para nosotros es precisamente que se
nos proponga…˜ no lo que nosotros somos…˜ sino otro que el que somos…˜ Y esto es
intolerable…˜ porque aunque nosotros no sepamos aparentemente quién somos…˜ en la
realidad sí lo sabemos…˜ Debido a ello…˜ nosotros no podemos soportar que se nos
identifique con el nacimiento…˜ Y cuando se nos identifica con el nacimiento…˜ este
engaño a nosotros…˜ se manifiesta en nosotros como lo que llamo lo intolerable…˜
¿Qué es lo intolerable?…˜ Lo intolerable es sentir que algo no cuadra…˜ Si se nos pro-
pone que nosotros somos este nacimiento…˜ hay en nosotros inmediatamente una an-
gustia…˜ una desazón…˜ ¿Por qué es ello así?…˜ Ello es así porque la proposición de
que nosotros somos este nacimiento contradice en su verdad misma nuestro propio co-
nocimiento innato de nosotros mismos…˜ Nosotros no hemos podido soportar nunca la
aceptación de que nosotros somos el nacimiento…˜ Y este no poder soportar la acepta-
ción de que nosotros somos el nacimiento es lo que se manifiesta en nosotros como lo
intolerable…˜
De manera que si un presunto sabio se dirige a mí y me propone “sea lo que usted
es”…˜ lo intolerable se manifiesta inmediatamente en mí…˜ porque aunque yo no lo
sepa conscientemente…˜ yo jamás he cesado de ser lo que yo soy…˜ Con esta proposi-
ción se me dice que yo soy otro que el que yo soy…˜ con esta proposición se me propo-
ne que yo llegue a ser lo que yo soy…˜ No es posible…˜ no cuadra integralmente con la
verdad…˜ y yo no amo escucharla…˜ Introduce una dualidad en mí…˜ una dualidad
que no existe y que yo sé que no existe…˜

248
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

Si yo creo ser el nacimiento…˜ esta proposición parte de esta asumición falsa…˜


Asume que yo creo ser el nacimiento…˜ y me propone que no lo sea…˜ me propone
que sea lo que yo soy…˜ ¿Pero cuántos soy yo?…˜
Hay un tiempo para la madurez completa…˜ y este tiempo llega cuando comprende-
mos y amamos comprender que nosotros somos lo que somos cuando el nacimiento no
era…˜ Contemplarnos a nosotros mismos cuando el nacimiento no era…˜ amar inaudi-
tamente la ausencia del nacimiento en nosotros…˜ esto sí…˜ esto sí es una proposición
que serena absolutamente lo intolerable en nosotros…˜
¿Por qué es ello así?…˜ Ello es así porque nos propone lo que nosotros somos…˜ ve
lo que nosotros somos…˜ contempla lo que nosotros somos…˜ Ello es así porque esta
proposición no introduce ninguna dualidad en nosotros…˜ sino que más bien nos pone
en situación de contemplar exactamente lo que somos…˜ Al contemplar lo que somos…
˜ al contemplar quién somos…˜ la verdad sobre nosotros mismos que nosotros sabemos
siempre…˜ queda completamente revelada a nosotros…˜ Entonces nuestro amor crece
más allá de todas las fronteras…˜ llenando completamente de identidad nuestra presen-
cia…˜
El arte de la proposición es muy sutil…˜ Pero los oídos que escuchan no lo son me-
nos…˜ Si lo intolerable no desaparece de nuestra percepción…˜ tened por seguro que la
proposición que estamos escuchando considera que nosotros somos este nacimiento…˜

249
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

310
____________

Venga de donde venga…˜ ninguna proposición que nos considera el nacimiento pue-
de disolver en nosotros lo intolerable…˜ Lo intolerable se manifiesta en nosotros como
la sensación de profunda aflicción ante el hecho de lo imposible…˜ El nacimiento es
mortal…˜ ¿Cómo escapar entonces a la mortalidad…˜ si nosotros somos el
nacimiento?…˜ Esto es una imposibilidad…˜ y la consciencia de esta imposibilidad es
una angustia intolerable…˜ La única solución real…˜ completamente conforme a la Ver-
dad…˜ es que nosotros nos contemplemos a nosotros mismos cuando el nacimiento no
era…˜

250
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

311
____________

Contemplemos el nacimiento…˜ Deshaciéndonos de nuestra imagen como este cuer-


po contenido en un mundo…˜ contemplemos el nacimiento sólo como un flujo de expe-
riencia que ha comenzado a ser experimentada en nosotros…˜ Contemplémonos a noso-
tros mismos siendo el contemplador de este flujo…˜ Nosotros no somos el flujo…˜ El
flujo tiene lugar en nosotros…˜ pero nosotros no somos el flujo…˜ Démonos cuenta de
que el flujo fluye…˜ Desde el comienzo del nacimiento hasta ahora…˜ ha habido un
fluir del flujo…˜ A su paso por nosotros…˜ se han suscitado todas las experiencias que
nosotros llamamos falsamente nuestra vida…˜ Pero nosotros…˜ el nosotros real…˜ es el
contemplador del flujo…˜ El nosotros real no está en el flujo…˜ el nosotros real contie-
ne este flujo del nacimiento…˜ el nosotros real tiene consciencia de ser debido a que el
flujo está pasando…˜ Pero nosotros no somos el flujo del nacimiento…˜
Contemplando este flujo del nacimiento en nosotros…˜ nosotros tenemos que vernos
a nosotros mismos cuando este flujo no era…˜ Contemplando este flujo…˜ nuestra con-
templación debe volverse enteramente sobre sí misma…˜ y contemplar lo que nosotros
somos siempre…˜ haya o no haya flujo del nacimiento…˜ Hagámoslo…˜ volvamos
nuestra contemplación enteramente sobre sí misma…˜ y contemplémonos envolviendo
la totalidad del flujo del nacimiento…˜
No hay sensibilidad…˜ ni inteligencia…˜ ni comprensión en el flujo del
nacimiento…˜ La sensibilidad…˜ la inteligencia…˜ y la comprensión están en nosotros
que contemplamos el flujo…˜ y que al paso del flujo reaccionamos con esta sensación
de ser…˜ La totalidad de lo que se llama vida…˜ estaba en nosotros en un estado no ma-
nifestado…˜ como oro en la mina…˜ sin distinción ni diferencia…˜ Nosotros no vivifi-
camos nada…˜ El nacimiento no puede ser vivificado…˜ Somos siempre nosotros quie-
nes nos sentimos a nosotros mismos con el nacimiento…˜ La totalidad de lo que se lla-
ma vida estaba en nosotros y está en nosotros…˜ no en el nacimiento…˜
Por ello es necesario que nos contemplemos cuando el nacimiento no era…˜ Por ello
es necesario que contemplemos el comienzo del nacimiento en nosotros…˜ y volviendo
enteramente nuestra contemplación desde el nacimiento a nosotros…˜ que nos contem-
plemos a nosotros mismos contemplando…˜
No hace mucho…˜ mi comprensión se expandía en el Gran Mar de mi propia Mis-
midad…˜ Sin embargo…˜ Ahora contemplo que hasta el Gran Mar de Mismidad mismo
está siendo contemplado…˜ Contemplarme a mí mismo cuando el nacimiento no era…˜
este acto…˜ me ha hecho recalar integralmente en lo que soy…˜ A medida que mi con-
templación se estabiliza mi conocimiento decrece…˜ Las palabras me faltan…˜ Yo no

251
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

tengo nada que afirmar ni que negar de mí mismo…˜ Hay sólo una sólida convicción de
ser…˜ No soy el nacimiento…˜ pero soy…˜ No soy ningún nacimiento…˜ ni bajo ni
elevado…˜ pero soy…˜
Lo intolerable ha cesado por completo…˜ Yo jamás he nacido…˜ lo que yo soy no
puede introducirse en un nacimiento…˜ ni en un millar de nacimientos…˜ ni en todos
los nacimientos jamás habidos…˜
No ha ocurrido jamás que yo haya nacido…˜ Contemplándome a mí mismo…˜ la
pasmosa realidad de esta verdad me subyuga…˜ ¿Qué puedo hacer yo con un mí mismo
que nace y que muere?…˜ Ved cómo el flujo del nacimiento se esfuma sin dejar rastro
en vuestro seno de contemplación…˜

252
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

312
____________

Con nosotros…˜ cuando este nacimiento no era con nosotros…˜ ¿qué es lo que no
era?…˜ Cuando este nacimiento no era…˜ ¿qué es lo que no era con nosotros?…˜ Con-
templemos profundamente este nacimiento…˜ Este nacimiento nos está revelando…˜
¿Qué está revelando este nacimiento?…˜ ¿A quién revela este nacimiento lo que está re-
velando?…˜
Este nacimiento no era con nosotros…˜ Contemplémonos a nosotros mismos cuando
este nacimiento no era…˜ ¿Qué es lo que no era con nosotros cuando este nacimiento no
era?…˜ ¿Y nosotros mismos?…˜ ¿Qué es lo que vemos por nosotros mismos que éra-
mos nosotros cuando este nacimiento no era?…˜
Todas estas preguntas tienen su respuesta…˜ Su respuesta no está en los libros…˜ su
respuesta no está en los padres…˜ su respuesta nadie en el mundo la conoce…˜ puesto
que son preguntas que preguntan por nosotros cuando ni este nacimiento ni el mundo
eran…˜ Su respuesta sólo está en nosotros…˜ Y debe ser una respuesta que no está he-
cha de palabras…˜ que no es una conjetura…˜ que no es una imaginación…˜ Debe ser
una respuesta que no admite ninguna duda…˜
Contemplemos entonces ese estado nuestro en que este nacimiento no era…˜ Con-
templemos exactamente…˜ minuciosamente…˜ qué es lo que no era con nosotros cuan-
do este nacimiento no era…˜ Y contemplando lo que no era con nosotros cuando este
nacimiento no era…˜ contemplémonos a nosotros mismos absolutamente limpios de lo
que no era con nosotros…˜
Contemplémonos así en nuestra verdadera naturaleza real imperdible…˜ ¿De qué te-
nemos miedo?…˜ ¿Qué estamos temiendo perder?…˜ No estaba con nosotros cuando
este nacimiento no era…˜ Nosotros no hemos hecho nada para que este nacimiento esté
aquí ahora…˜ Nosotros no hemos hecho tampoco el deseo de que este nacimiento esté
aquí ahora…˜ Nosotros no hemos hecho que estemos sabiendo ahora que nosotros so-
mos…˜ Nosotros no hemos hecho que estemos contemplándonos ahora exactamente
como cuando el nacimiento no era…˜ ¿Es esto verdadero?…˜ ¿Hay alguno de nosotros
que sepa cómo ha hecho el deseo de que este nacimiento esté aquí ahora?…˜ ¿Hay algu-
no de nosotros que sepa cómo ha hecho su estar sabiendo ahora que él es?…˜ ¿Hay al-
guno de nosotros que sepa cómo ha hecho su estar contemplándose ahora exactamente
como cuando el nacimiento no era?…˜ ¿No tenemos todos la respuesta a estas pregun-
tas?…˜ ¿Quién es este profundo Sabio que tiene la respuesta a todas estas preguntas?…˜
En cada uno de nosotros…˜ ¿quién es este profundo sabio que sabe todo de cuando el

253
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

nacimiento no era?…˜ En cada uno de nosotros…˜ ¿quién es este profundo sabio que
sabe exactamente lo que no era con nosotros cuando este nacimiento no era?…˜
Por mí mismo…˜ yo sé de mí mismo la respuesta a todas estas preguntas…˜ Hay es-
crituras que me acusan de haber deseado que este nacimiento aparezca en mí…˜ ¿Por
qué iba yo a creerlas?…˜ Yo me veo exactamente cuando este nacimiento no era en
mí…˜ Ciertamente es sólo ahora que este nacimiento me revela cuando me veo…˜ Pero
lo que veo de mí mismo…˜ es lo que es cuando el nacimiento no era…˜ Busco entre lo
que no estaba conmigo cuando el nacimiento no era…˜ No estaban estas escrituras que
me acusan de haber deseado que este nacimiento fuera…˜ no había en mí ni deseo ni no
deseo…˜ Tampoco estaba el conocimiento de cómo hacer que este nacimiento fuera…˜
No había en mí ni intención ni no intención…˜
Me reconozco integralmente en lo que me veo ser cuando el nacimiento no era…˜ El
nacimiento jamás ha hecho nacer a esto que me veo ser cuando el nacimiento no era…˜
Yo comprendo exactamente lo que el nacimiento es…˜

254
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

313
____________

Cuando este nacimiento no estaba con nosotros no había nada grande ni pequeño…˜
no había ningún proyecto de ser ni así ni así…˜ no había ningún deseo de que este naci-
miento apareciera…˜ ni este nacimiento ni ningún otro nacimiento…˜ Aunque nos hu-
bieran propuesto tomar la identidad de dioses…˜ ninguno de nosotros habría aceptado…
˜ ¿Por qué?…˜ Porque ser lo que somos es suficiente…˜ Nadie venía a nosotros a contar
nuestros días…˜ En nosotros no había obras…˜ Yo os suplico que os reconozcáis inte-
gralmente…˜ Veos cuando el nacimiento no era…˜ saboread la ausencia absoluta de ex-
periencia en vosotros…˜ Contemplaos cuando este nacimiento no os revelaba…˜

255
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

314
____________

Nada de lo que no era con nosotros cuando el estado nacimiento no era…˜ es noso-
tros mismos ni nuestro…˜ Para descubrir por nosotros mismos que esto es verdadero de
nosotros mismos…˜ tenemos que vernos a nosotros mismos por nosotros mismos cuan-
do este estado nacimiento no era con nosotros…˜
De manera que tenemos que contemplarnos a nosotros mismos cuando el estado na-
cimiento no era…˜
Para ello…˜ preguntémonos primero…˜ “¿en qué consiste mi ser?…˜ ¿como qué
me acepto a mí mismo que yo soy?…˜ ¿De qué depende lo que yo acepto que yo soy?…
˜ ¿Lo que yo acepto que yo soy es anterior o posterior a la aparición del estado naci-
miento en mí?…˜ ¿Lo que yo acepto que yo soy ha comenzado con la aparición del na-
cimiento en mí?…˜ ¿Me he preguntado yo a mí mismo alguna vez…˜ en qué consistía
lo que yo soy cuando el estado nacimiento no había aparecido en mí?…˜ ¿En qué con-
cepto de ser me tengo?…˜ ¿Es mi concepto de ser…˜ que yo soy este estado nacimiento
que ha aparecido en mí?”…˜
Preguntémonos estas preguntas…˜ Si mi concepto de ser es que yo soy este estado
nacimiento que ha aparecido en mí…˜ entonces yo no podré eludir la aparición de lo in-
tolerable en mí…˜ Prefiero llamarlo lo “intolerable”…˜ antes que llamarlo “ego”…˜
Aunque mi concepto de ser haya sido que yo soy este estado nacimiento que ha apareci-
do en mí…˜ en realidad…˜ yo nunca he podido darme completamente a este concepto
falso…˜ ¿Por qué era ello así?…˜ Ello era así…˜ debido a que lo intolerable estaba pre-
sente en mí…˜ simultáneamente a mi disposición voluntaria a considerarme como naci-
do…˜ ¿Y qué es lo intolerable?…˜ Lo intolerable es una suerte de desconfianza innata
ante la proposición de que yo soy el nacimiento…˜ Simplemente…˜ yo no podía creer
completamente que yo soy el estado nacimiento…˜ Pero yo no sabía quién soy…˜ yo no
había escuchado…˜ ni considerado…˜ ni descubierto…˜ que yo no soy el estado naci-
miento…˜ Este no saber quién soy…˜ se manifestaba en mí como lo intolerable…˜
como una profunda sensación de ser completamente extraño para mí mismo…˜ ¿Qué
era todo esto que se manifestaba en mí…˜ quisiera yo o no quisiera?…˜ Yo no tenía nin-
guna conciencia…˜ ninguna constancia…˜ de que yo hubiera sido siempre así…˜ exac-
tamente como este nacimiento hacía que pareciera que yo soy…˜ ¡Hubiera cambiado
tantas cosas en este estado nacimiento…˜ que tenía que aceptar como si yo lo fuera!…˜
Había una gran ansiedad…˜ el estado nacimiento era completamente sordo a mis ansias
de crecimiento…˜ Yo nunca me veía lo suficientemente inteligente…˜ ni lo suficiente-
mente bello…˜ ni lo suficientemente amado…˜ ni lo suficientemente reconocido ni ad-

256
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

mirado…˜ Por así decir…˜ había un abismo insalvable entre mi propia presencia inte-
rior…˜ y la resistencia integral del estado nacimiento a secundar mis ansias…˜ Este
abismo…˜ abierto dentro mismo de mí …˜ es lo que llamo intolerable…˜
¿En qué me tenía yo a mí mismo ser?…˜ ¿En qué creía yo que consistía mi ser?…˜
fijaos bien…˜ yo me tenía a mí mismo por una promesa espiritual…˜ Llegaría el día en
que yo vería a Dios…˜ pues Dios está obligado a mostrarse a quien le ama…˜ Mi con-
cepto de mí mismo era el de un nacido en crecimiento…˜ Creía que tenía la gracia de
Dios…˜ y que Dios me haría de sus íntimos…˜ Todo esto era como los preparativos de
una boda…˜: Llegaría el día de la boda…˜ llegarían los hijos-discípulos…˜ Me veía a
mí mismo amado y reverenciado…˜ Pero había algo que no veía…˜ Yo no veía que
como todas las historias…˜ por muy felices que sean…˜ esta historia también tocaría a
su fin…˜ ¿Qué acabaría…˜ cuando este estado nacimiento ya no estuviera conmigo?…˜
¿A dónde iría a parar toda esta parafernalia?…˜ ¿Qué sería de todo este amor y de toda
esta reverencia que ansiaba?…˜ ¿Cuánto podría retenerlos?…˜
Aunque yo no me hacía estas preguntas explícitamente…˜ ellas estaban presentes
con su respuesta en lo intolerable…˜ Aquello no acababa de cuadrar…˜ La sed de mis
entrañas no se saciaba…˜ Lo intolerable crecía…˜
Por ello os propongo…˜ comenzad por preguntaros…˜ “¿en qué me tengo yo a mí
mismo como que yo soy?…˜ ¿Qué estoy aceptando que yo soy?…˜ ¿qué estoy aceptan-
do que yo querría ser?…˜

257
EL LIBRO DE LA PROPOSICIÓN “¿QUIÉN ERA CONMIGO?”

315
____________

Entonces…˜ una vez que estáis viendo en qué os tenéis a vosotros mismos como que
vosotros sois…˜ una vez que estáis viendo lo que aceptáis que vosotros sois…˜ una vez
que estáis viendo lo que aceptáis que querríais ser…˜ simultáneamente…˜ ved también
la continuación natural de ese desarrollo…˜ ved la película entera…˜ hasta el final…˜
¿Estará con vosotros…˜ cuando este estado nacimiento ya no esté con vosotros…˜ esto
que ahora estáis aceptando como que vosotros sois?…˜
¿Por qué no veis más bien lo que vosotros sois…˜ cuando este estado nacimiento no
era con vosotros?…˜ Lo intolerable no cesará hasta que os veáis ser lo que sois…˜ cuan-
do el estado nacimiento no era…˜

258

Das könnte Ihnen auch gefallen