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DE ANIVERSARIO

Formación docente:
¿Qué conocimiento distingue a los
buenos maestros de química?
Vicente Talanquer*

Abstract tido por tanto resolver las tensiones esenciales que


This article describes and discusses some of the han caracterizado a la formación de profesores en
distinctive features of the pedagogical content los últimos cien años: las tensiones generadas por la
knowledge (PCK) of an expert chemistry teacher and búsqueda de balance entre conocimiento disciplina-
the influence of this type of knowledge on the rio y conocimiento pedagógico, y entre conocimien-
teacher’s thinking, decisions and actions in the class- tos teóricos y práctica en el aula.
room. The role of teacher preparatio programs in the La distinción tradicional entre conocimiento de
development of a teacher’s PCK is also analyzed. la disciplina y conocimiento pedagógico ha sido una
de las características distintivas de los programas de
formación docente de la última centuria (Galluzzo,
Introducción 1990; Ball, 2000.) La mayoría de los maestros de
Los resultados de la investigación educativa desarro- ciencia han adquirido los conocimientos básicos
llada en los últimos treinta años han transformado de su materia en cursos con contenido meramente
nuestras concepciones más elementales sobre el pro- disciplinario, y su preparación pedagógica es resul-
ceso de enseñanza-aprendizaje. Las teorías construc- tado de su participación en cursos de educación con
tivistas del aprendizaje, que enfatizan el rol central carácter general. Gran parte del debate en el área de
de los alumnos en la construcción del conocimiento formación docente ha estado marcado por la clara
en el aula, se han convertido en el paradigma domi- distinción entre estos dos mundos aparentemente
nante ( Jenkins, 2000; Gil-Pérez et al., 2002), y su desconectados (Shulman, 1986.) Así, por un lado,
influencia se ha extendido al proceso mismo de hay quienes enfatizan la necesidad de fortalecer la
formación del profesorado. Los planteamientos formación científica del profesorado a través de cur-
constructivistas no sólo han puesto en la mesa del sos que mejoren su comprensión de los conceptos y
debate el qué deben saber y saber hacer los profeso- teorías científicas y de la filosofía e historia de las
res de ciencia (Brooks, 1999), sino también el cómo ciencias. Por otro, hay quienes abogan por una mejor
crear las condiciones para preparar buenos docentes preparación pedagógica que incluya conocimientos
(Richardson, 1997.) sobre métodos adecuados de diseño curricular, en-
Sin embargo, el debate sobre la estructura y señanza y evaluación. Por supuesto, hay los que sostie-
metodología de los programas de formación docente nen que lo que se requiere es fortalecer ambas áreas.
carece de una base de investigación sólida que per- Sin embargo, los resultados de la investigación
mita guiar la discusión. Es decir, no hay muchos reciente sobre aprendizaje de las ciencias han co-
resultados confiables que nos permitan identificar las menzado a borrar la frontera entre el conocimiento
variables que determinan la formación de un buen disciplinario y el conocimiento pedagógico que ca-
docente. Aunque gran variedad de autores ha iden- racteriza al buen docente (Gabel, 1994.) Por ejemplo,
tificado características deseables en la formación del hoy día contamos con información específica sobre
profesorado (Gil-Pérez, 1991; Furió, 1994), poco se las ideas previas, teorías intuitivas y dificultades con-
sabe sobre el impacto que una u otra característica ceptuales de los alumnos en una gran variedad de
tiene en la eficacia de la actividad docente. Las áreas la ciencia, y tenemos una idea más clara de su
investigaciones realizadas no son sólo escasas, sino influencia sobre el aprendizaje (Wandersee, 1994;
sus conclusiones son muchas veces limitadas o con- Carretero, 1998; Pozo, 1998). Resultados como estos
tradictorias (Anderson, 1994; Wilson, 2001; Allen, hacen pensar que la habilidad de un docente para
2003.) La investigación en este campo no ha permi- crear condiciones que faciliten el aprendizaje no sólo
depende de sus conocimientos sobre el tema o sobre
variados métodos de enseñanza. Su éxito parece
*Department of Chemistry, University of Arizona. depender de su habilidad para transformar el cono-
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cimiento disciplinario que posee en formas que re- aula, resulta interesante tratar de identificar de qué
sulten significativas para sus estudiantes. Esta trans- manera el CPC determina la forma de pensar del
formación pedagógica del conocimiento científico docente, las decisiones que toma, y las acciones que
requiere que el docente domine la materia, pero con emprende en el salón de clases. ¿Qué significa tener
propósitos de enseñarla. Esta ‘‘recreación’’ del con- CPC en química, por ejemplo? ¿Cómo se manifiesta
tenido demanda, entre otras cosas, que el docente: en el pensar y actuar del docente? ¿Cómo podemos
identifique las ideas, conceptos y preguntas centrales reconocer el nivel de CPC de un maestro de quími-
asociados con un tema; reconozca las probables ca? ¿Cómo podemos ayudar a docentes en forma-
dificultades conceptuales que enfrentarán sus alum- ción a desarrollarlo? Éstas son las preguntas que
nos y su impacto en el aprendizaje; identifique pre- guían el análisis y la discusión en el presente artículo.
guntas, problemas o actividades que obliguen al Más que presentar respuestas definitivas, el objetivo
estudiante a reconocer y cuestionar sus ideas previas; central es motivar la reflexión sobre la naturaleza del
seleccione experimentos, problemas o proyectos conocimiento que caracteriza al buen docente de
que permitan que los estudiantes exploren conceptos química.
e ideas centrales en la disciplina; construya explica-
ciones, analogías o metáforas que faciliten la com- Conocimiento pedagógico de la química
prensión de conceptos abstractos; diseñe actividades Asumamos por un momento que el CPC de un buen
de evaluación que permitan la aplicación de lo docente de química es conocimiento que lo distingue
aprendido en la resolución de problemas en contex- de los docentes de otras disciplinas y de otros profe-
tos realistas y variados. sionales de la química. ¿Qué conocimiento y habili-
Más allá de saber su ciencia y contar con sólidas dades lo caracterizan en contraste, por ejemplo, con
bases en pedagogía, el buen docente parece poseer un maestro de historia o un investigador en química?
un tipo de conocimiento que le permite transformar La respuesta es una amalgama entre conocimiento
pedagógicamente el contenido en actividades de disciplinario, didáctica y pedagogía. Es el resultado
aprendizaje significativas para el estudiante. Este tipo de ‘‘pensar en química’’ con el propósito de motivar,
de conocimiento ha recibido el nombre de ‘‘conoci- sorprender, despertar la curiosidad, generar inte-
miento pedagógico del contenido’’ (CPC) en la lite- rés y dar sentido; es la consecuencia de la reflexión
ratura educativa anglosajona (Shulman, 1986; 1987.) constante sobre la naturaleza de los temas, ejemplos,
Su caracterización, sin embargo, no ha resultado fácil explicaciones, analogías, metáforas, representaciones,
y no es del todo claro cómo enseñarlo (Gess-Newso- actividades, experiencias, preguntas, problemas, que
me, 1999.) Hay quienes consideran que el CPC no son apropiadas para diversos tipos de estudiantes y
es un tipo especial de conocimiento, sino el resultado pueden favorecer aprendizajes más significativos. Des-
de la aplicación de conocimiento didáctico y peda- de esta perspectiva, el CPC determina, entre otras
gógico de carácter general a la enseñanza de una cosas, qué ideas y conceptos de química el docente
disciplina en particular. Para otros, el CPC puede ser considera importante enseñar, o qué tipos de pre-
caracterizado como una forma independiente de guntas, problemas o experiencias elige para introdu-
conocimiento, pero su desarrollo ocurre principal- cir un tema, identificar las ideas previas de sus estu-
mente a través de la experiencia y la práctica en el diantes, o ayudarlos a construir nuevos conceptos.
aula. En otro extremo hay quienes sostienen que Consideremos, por ejemplo, la tarea docente de
el desarrollo del CPC debía ser el eje central en el determinar qué temas, ideas y conceptos enseñar en
diseño curricular de los futuros programas de forma- un curso típico de química general. Para el maestro
ción docente, organizados alrededor de cursos inte- novato, este trabajo resulta relativamente sencillo.
gradores que promuevan el análisis, la discusión y la Basta con seguir el programa oficial de estudios o
reflexión del contenido científico desde las perspec- seleccionar un libro de texto y seguir la secuencia
tivas didáctica y pedagógica (Cochran, 1993.) indicada en el índice. Para el maestro experimenta-
Independientemente de la posición que uno do, la misma tarea se convierte en un verdadero reto
tome con respecto a la naturaleza del CPC, la suge- intelectual pues entiende que sus decisiones determi-
rencia de que los buenos docentes en una cierta área narán el éxito del curso. Como consecuencia, su
poseen un tipo de conocimiento que los distingue es análisis del libro de texto será completamente distinto.
digna de reflexión. Si este tipo de conocimiento tiene Por ejemplo podrá preguntarse: si el trabajo científi-
una clara influencia en la eficacia del docente en el co consiste en gran medida en buscar la respuesta a
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preguntas fundamentales sobre el comportamiento identificar diferentes categorías de sustancias. Este


de la naturaleza, ¿cuáles son las preguntas esenciales docente reconoce los diferentes niveles de análisis y
a las que da respuesta este libro? ¿De qué manera representación de conceptos e ideas en química, y se
estas preguntas deben guiar el trabajo en el aula? preocupa por crear condiciones que faciliten la iden-
Identificar las preguntas esenciales o las ideas cen- tificación y comprensión de las descripciones ma-
trales contenidas en libros tradicionalmente plaga- croscópicas de los sistemas y procesos químicos, los
dos de información química no es una tarea trivial. modelos microscópicos desarrollados para estudiar-
Transformarlas de manera que tengan significado los, y la simbología utilizada para representarlos
para los estudiantes puede ser aún más difícil. La ( Johnstone, 1993).
tarea demanda que el docente reflexione sobre Enseñar química también demanda que el do-
las metas, propósitos y filosofía del quehacer de la cente reflexione sobre la naturaleza de las ideas,
química en el contexto del nivel de desarrollo inte- modelos y procesos que caracterizan el quehacer en
lectual, conocimiento previo, intereses y motivacio- la disciplina en el contexto de lo que sabemos sobre
nes de sus estudiantes. aprendizaje de la química (Gilbert, 2003). Su CPC en
Existe una diferencia fundamental entre un cur- esta área determinará la selección de preguntas,
so organizado según la secuencia: Propiedades de la problemas y actividades utilizados para introducir y
Materia, Estructura Atómica, Reacciones Químicas desarrollar un tema, explorar las ideas de sus alum-
y Estequiometría, en el que las preguntas que guían nos o cuestionar sus explicaciones. Varios autores
el trabajo docente son del tipo: ¿Cuáles son las reglas han enfatizado la necesidad de que los docentes se
básicas de nomenclatura? ¿Cómo se balancea una familiaricen con los resultados de las investigaciones
ecuación química? ¿Cómo se construye una configu- sobre ideas previas y preconcepciones de los alum-
ración electrónica? O ¿Qué tipos de enlaces quími- nos en la materia que enseñan (Carretero, 1998;
cos existen? a un curso en que quizá se aborden los Pozo, 1998). Sin embargo, el buen docente requiere
mismos temas pero el interés se centre en la búsque- más que mero reconocimiento o familiaridad con
da de respuestas a preguntas como: ¿Cómo se deter- preconcepciones específicas sobre un concepto o
mina la identidad de una sustancia desconocida? idea dados. De poco sirve saber que una gran pro-
¿Cuál es la relación entre estructura molecular y porción de los estudiantes piensa que un átomo de
reactividad química? ¿De qué manera la estructura cobre tiene el mismo color y la misma densidad que
molecular de una sustancia determina sus propieda- un alambre de ese metal (Nakhleh, 1992; Garnett,
des, o sus usos y efectos? ¿Cómo se crean nuevas 1995), si no podemos reconocer el patrón de razona-
sustancias? La capacidad para identificar preguntas miento que se esconde detrás de sus ideas. Para el
o ideas centrales en la disciplina, que sean relevantes y docente novato esta preconcepción es un problema
resulten de interés para los estudiantes, es una caracte- aislado y sin clara relación con otras preconcepcio-
rística distintiva del buen docente de química. Es un nes tales como la idea de que los átomos de un
ejemplo típico de CPC, pues se trata de una habilidad líquido se expanden durante la ebullición o los elec-
que va más allá de su preparación profesional en el área trones en un átomo se desplazan en órbitas como en
o de sus conocimientos de didáctica y pedagogía. un pequeño sistema solar. Su conocimiento lo guiará
El docente con un alto grado de CPC analiza el a atacar cada problema de manera puntual una vez
contenido a enseñar desde una perspectiva comple- que se presente. Un docente con más CPC recono-
tamente distinta a la del maestro novato o un inves- cerá que estas dificultades conceptuales son inheren-
tigador experto en la disciplina. Sus intereses y mo- tes a la manera de pensar de los alumnos y a la
tivaciones lo llevan a reflexionar constantemente naturaleza de la disciplina, y podrá enfrentarlas de
sobre la naturaleza y estructura del conocimiento manera más global y hasta predecir dificultades si-
químico ( Jensen, 1998), y a tratar de identificar milares por anticipado.
grandes ideas y conceptos integradores. Puede reco- Una pieza fundamental del CPC del docente de
nocer, por ejemplo, el importante rol que los siste- química se desarrolla al reconocer que una enorme
mas de clasificación juegan en la organización del proporción de las preconcepciones de los estudian-
conocimiento químico y en la predicción de propie- tes resulta de la aplicación de razonamientos basados
dades de la materia (Schummer, 1998.) Este conoci- en el sentido común (Driver, 1985; Pozo, 1998;
miento lo llevará a diseñar experiencias que desarro- Viennot, 2001). En el caso de la química, disciplina
llen la habilidad de los estudiantes para clasificar e en la que el estudiante se enfrenta con conceptos y
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modelos abstractos y lenguaje y formas de repre- un proceso químico, y seleccionará ejemplos que
sentación simbólica especiales, esta forma de pensar pongan en conflicto las ideas de sus estudiantes.
se manifiesta en estrategias de razonamiento particu- Adicionalmente, podrá introducir analogías que per-
lares (Talanquer, 2002). Por ejemplo, el estudiante de mitan comprender el proceso de balanceo con base
química tiene la tendencia a trasladar las propie- en experiencias concretas que resulten más comunes
dades del mundo macroscópico a los modelos mi- o cercanas para los estudiantes.
croscópicos (los átomos se expanden de la misma Basta analizar con cuidado algunas de las deci-
manera que un sólido se expande al calentarlo), y a siones que un docente de química toma cada día para
dar realidad concreta a estos modelos (los enlaces reconocer la naturaleza y complejidad del CPC que
químicos son pequeños tubos conectores que pue- su trabajo demanda (Ball, 2000). Tomemos el caso
den romperse). También es común que el alumno de un maestro que se prepara para introducir el tema
posea una visión estática del mundo microscópico de ‘‘propiedades de los gases’’ utilizando el siguiente
(toda transformación química cesa al alcanzar el problema: Estima el volumen total de aire que exhalas en
equilibrio), considere que todo proceso tiene una un día. Al planear la clase, el buen docente se cues-
causa cuyo efecto es directamente proporcional a tionará: ¿Es éste un buen ejercicio para iniciar el
ella (la temperatura de un gas siempre se incrementa tema? ¿Qué conocimientos previos y qué tipo de
al calentarlo), reduzca el número de variables a habilidades deben poseer los alumnos para enfrentar
considerar en un fenómeno (la polaridad de una el problema? ¿Qué dificultades tendrán para resol-
molécula sólo depende de su estructura molecular), verlo? ¿Qué aprenderán sobre gases al resolverlo?
y generalice todo principio aprendido sin prestar El maestro deberá pensar en diferentes métodos de
atención a las condiciones en que se aplica (la masa resolución del problema e identificar materiales sen-
siempre se conserva; la entropía siempre aumenta). cillos que los estudiantes pueden usar para hacer la
Si la famosa máxima ausubeliana es cierta: ‘‘El factor estimación. Será también conveniente que reflexio-
más importante en el aprendizaje es lo que el alumno ne sobre las partes del proceso de resolución que
ya sabe. Identifique esto y actúe en consecuencia’’ pueden causar más problemas a los estudiantes, y
(Ausubel, 1968), la capacidad de reconocer e incluso piense en la mejor manera de guiar sus ideas y deci-
predecir tales preconcepciones con base en el análi- siones. Quizá después de analizar el ejercicio, el
sis de la naturaleza del contenido y la forma de docente se dé cuenta de que es muy complicado o
razonar de los alumnos debe considerarse una pieza muy sencillo para sus alumnos, o que necesita pensar
clave del CPC del docente de química. en formas de resaltar el interés en este tipo de
El conocimiento pedagógico del contenido cálculos. ¿Cómo puede modificar el problema para
(CPC) se manifiesta de múltiples maneras durante la simplificarlo o incrementar el nivel de dificultad?
planeación de una clase. Es una guía, muchas veces ¿En qué situaciones realistas se realizan estimaciones
inconsciente, que el docente utiliza para identificar como ésta?
y seleccionar experiencias específicas para analizar Este tipo de análisis y preparación de un simple
un concepto o desarrollar una habilidad. Considere- ejercicio revela a qué nivel el trabajo del docente
mos el problema típico de cómo enseñar a los alum- requiere pensar y razonar sobre química con el
nos a balancear una ecuación química. El docente propósito de enseñarla. Y esto tan sólo representa
novato en principio prestará poca atención al tipo una pequeña fracción del quehacer docente. En el
de problemas que emplea para ilustrar un método de salón de clases, el maestro formulará y responderá
balanceo determinado. El maestro experimentado, preguntas, guiará y evaluará el trabajo de sus estu-
por su parte, seleccionará cuidadosamente la secuen- diantes, generará explicaciones, con base en su co-
cia de ejemplos a discutir; su reflexión lo llevará a nocimiento pedagógico de la química. En general,
discriminar entre distintos casos: problemas que in- ya sea a través del análisis y la discusión de una
volucran combinación de elementos químicos que analogía para entender la diferencia entre los con-
existen en forma atómica o en forma molecular, ceptos de energía, calor y temperatura, el diseño de
problemas en los hay intercambio de iones poliató- una actividad que obligue a los estudiantes a pensar en
micos, problemas que involucran balance de masa y la diferencia entre ácido débil/diluido o fuerte/con-
carga, etcétera. Reconocerá la dificultad que los centrado, o la presentación de una demostración de
estudiantes tienen para entender por qué el número cátedra que contradiga nociones intuitivas sobre el
de átomos pero no de moléculas se conserva durante equilibrio químico, el buen docente de química apli-
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ca constantemente una elaborada amalgama de co- más allá del contenido de la materia a enseñar
nocimiento disciplinario, didáctica y pedagogía. (Gil-Pérez, 1991; Furió, 1994). Sin embargo, el tiem-
Para muchos maestros este tipo de conocimiento es po y los recursos que las sociedades modernas pue-
el resultado de años de experiencia, trabajo en soli- den o están dispuestas a invertir en el proceso de
tario, reflexión y estudio autodidactas. Desgraciada- formación docente hacen de tal perfil un ente ima-
mente, una gran proporción de maestros jamás llega ginario. Desgraciadamente, somos herederos de una
a desarrollarlo. Los programas de formación y actua- ideología social caracterizada por exageradas expec-
lización docente tienden a concentrar su atención en tativas, exigencias y demandas sobre el profesorado,
la presentación y análisis de modelos y estrategias pero en la que el trabajo docente se valora poco y,
genéricas de planeación, manejo de grupo, enseñan- de forma contradictoria, se asume que enseñar es
za y evaluación, y dedican poco tiempo a la reflexión una tarea fácil que requiere de mínima preparación
del contenido desde las perspectivas pedagógica y y recursos.
didáctica. En gran medida se asume que la fusión No cabe duda que un buen programa de forma-
entre contenido y pedagogía se dará naturalmen- ción docente debe proporcionar una preparación
te en el aula. La amalgama, sin embargo, se concreta disciplinaria y pedagógica sólida. Debe también
en casos contados. crear las condiciones para cuestionar las creencias y
el pensamiento docente espontáneo de los futuros
Nuevos espacios de reflexión maestros (Furió, 1995), y ofrecer múltiples oportuni-
De la misma manera que el conocimiento de muchos dades de práctica en el aula y reflexión crítica sobre
estudiantes de química al terminar un curso está el trabajo desarrollado. Pero en la medida en que
caracterizado por un conjunto de ideas y conceptos estos elementos se presenten como bloques desco-
desconectados, el CPC de una gran cantidad de los nectados, las oportunidades para desarrollar el cono-
docentes tiene poca coherencia y carece de una base cimiento pedagógico de la disciplina, o cualquier
sólida en que apoyarse (Feiman-Nemser, 1990). Con otra forma de conocimiento integrado, ocurrirán de
los años de práctica, muchos maestros acumulan una manera ocasional y serán limitadas. Los programas
gran variedad de ejemplos, anécdotas, analogías, de formación y actualización docente necesitan abrir
ejercicios y experimentos interesantes y atractivos espacios en los que las piezas claves del contenido a
para los alumnos, pero los utilizan sin una justifica- enseñar sean sujeto del análisis y discusión didáctica
ción clara y guiados por la intuición. Pocos son los y pedagógica. Sin menospreciar la importancia de
que tienen la capacidad de integrar sus conocimien- cursos de profundización en una cierta área o sobre
tos de química, historia y filosofía de la disciplina y nuevas propuestas metodológicas, la gran mayoría
de las relaciones química-tecnología-sociedad, con de los actuales y futuros docentes de química se
sus conocimientos de didáctica, pedagogía y sicolo- beneficiarían si se les diesen más oportunidades para
gía del aprendizaje, en una estructura cognitiva co- integrar su conocimiento y repensar y recrear la
herente que guíe sus pensamientos, decisiones y materia que enseñan.
acciones en el aula. Esta integración no se da de Estos nuevos espacios de análisis y discusión
manera natural y requiere de un nivel de reflexión podrían integrarse con docentes en formación y
que los docentes no están preparados o no tienen el maestros experimentados dispuestos a hacer ‘‘visi-
tiempo para desarrollar. ble’’ su forma de pensar en química con propósitos
¿Cómo ayudar al maestro de química a desarro- de enseñarla. Los participantes podrían analizar li-
llar o fortalecer su conocimiento pedagógico del bros de texto en busca de preguntas esenciales,
contenido? ¿Cuál es el rol que los cursos de forma- grandes ideas o conceptos integradores. Podrían pre-
ción y actualización docente deben jugar en esta sentar y discutir diversas representaciones de un
área? La respuesta a estas preguntas no es fácil dadas concepto químico y analizar sus alcances y limitacio-
las condiciones y las demandas sociales actuales en nes. Los futuros docentes necesitan desarrollar habi-
educación. En los últimos 20 años el trabajo en lidades que les permitan reconocer, evaluar y cons-
investigación educativa y formación docente ha truir diferentes representaciones de una misma idea
dado lugar a una lista creciente de características o concepto con el fin de crear oportunidades de
deseables del profesorado. El perfil del docente ideal aprendizaje para todos los estudiantes (McDiarmid,
describe a un profesional crítico, reflexivo y capaci- 1990). Necesitan también aprender a deconstruir lo
tado en diversas y complejas áreas del conocimiento, que saben sobre un tema, idea o concepto y así
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identificar sus elementos fundamentales (Ball, 1990). (p. 3-44). Macmillan and the National Science
Para entender por qué un estudiante de secundaria Teacher Association, New York, 1994.
confunde los conceptos de mol y masa molar, o calor Ausubel, D. P. Educational Psychology: A Cognitive
y temperatura, no sólo hay que tener una idea clara View. Holt, Rhinehart and Winston, New
de lo que distingue a estos conceptos, sino reconocer York, 1968.
y apreciar la sutileza de estas diferencias. Ball, D. L. Bridging Practices: Intertwining Content
En este tipo de cursos, los docentes expertos por and Pedagogy in Teaching and Learning to
su parte podrían utilizar videos de sus propias clases Teach. Journal of Teacher Education, 51 (3), 241-
para fomentar el análisis crítico de sus decisiones 247, 2000.
sobre presentación del contenido o diseño de expe- Brooks, J. G and Brooks, M. G. In Search for Under-
riencias en el aula y en el laboratorio. También standing; The Case for Constructivist Classrooms.
podrían traer ejemplos reales de ejercicios, proble- ASCD, Alexandria, 1999.
mas, trabajos o exámenes resueltos por sus estudian- Carretero, M. Construir y Enseñar: Las Ciencias Experi-
tes y fomentar el análisis tanto de la estructura y mentales. 3ª edición. AIQUE, Buenos Aires, 1998.
contenido de los materiales como de las respuestas Cochran, K. F. Pedagogical Content Knowing: An
de los alumnos. Parte del trabajo podría entonces Integrative Model for Teacher Preparation. Jour-
consistir en identificar dificultades o errores concep- nal of Teacher Education, 44 (4), 263- 271, 1992.
tuales, contrastar diferentes respuestas o métodos de Driver, R., E. Guesne, and A. Tiberghien (eds.)
resolución de problemas, o diseñar estrategias para Children’s Ideas in Science. Open University Press,
corregir las deficiencias educativas detectadas. Este Buckingham, 1985.
tipo de reflexión no sólo ayudaría a los maestros en Feiman-Nemser, S., and Parker, M. B. Making subject
formación a desarrollar su CPC, sino también la matter part of the conversation in learning to teach.
capacidad crítica y las habilidades analíticas que les Journal of Teacher Education, 41, 32-43, 1990.
permitirían concebir al aula como un espacio de Furió, C. J. Tendencias Actuales en la Formación del
exploración e investigación continua. Profesorado de Ciencias. Enseñanza de las Cien-
La sociedad valora poco el trabajo docente por- cias, 12 [2], 188-199, 1994.
que en gran parte desconoce la complejidad del Furió, C. J. El pensamiento espontáneo docente
proceso de enseñanza-aprendizaje. Los mismos do- sobre la ciencia y su enseñanza. Educación Quí-
centes con múltiples años de experiencia tienen que mica, 6 (2), 112-116, 1995.
hacer un esfuerzo para reconocer el tipo de conoci- Gabel, D. L. (ed.) Handbook of Research on Science
miento y habilidades que los hacen únicos y los Teaching and Learning. NSTA, New York, 1994.
distinguen de otros profesionales en su área. En la Galluzzo, G. R., and Craig, J. R. (1990). Evaluation
medida que podamos mejorar la caracterización del of preservice teacher education programs. In
conocimiento del buen docente en cada disciplina, W. R. Houston (ed.), Handbook of Research on
estaremos en una mejor posición para definir y tEacher Education. (p. 599-616) New York:
defender su indispensable rol social. Contaremos Macmillan.
también con la información que se requiere para Garnett, P. J., Garnett, P.J. and Hackling, M. W.
diseñar e implementar programas de formación y Students’ alternative conceptions in chemistry:
actualización docente más efectivos. Desde este punto A review of research and implications for tea-
de vista, la investigación sobre identificación, desarrollo ching and learning. Studies in Science Education,
y aplicación del conocimiento pedagógico del con- 25, 69-95, 1995.
tenido de los docentes se delinea como un campo Gess-Newsome, J. and Lederman, N. G. Examining
promisorio e intelectualmente muy atractivo. ? Pedagogical Content Knowledge. Kluwer Academic
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