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APARTES DE ECCLESIA DE EUCHARISTIA DE JUAN PABLO II

El sacrificio eucarístico es fuente y cima de toda la vida cristiana. Contiene


todo bien espiritual de La Iglesia, es decir, Cristo mismo, nuestra Pascua y
Pan de Vida que da la vida por los hombres por medio del Espíritu Santo
(#1). Por La Eucaristía se hace presente Cristo, Dios hombre, entero e ínte-
gro (#15).Las primeras imágenes de La Iglesia que nos ofrecen los Hechos
de los Apóstoles (2,42) : Acudían asiduamente a la enseñanza de los apósto-
les, a la comunión, a la fracción del pan y a las oraciones.(#3). En La Euca-
ristía está inscrito el acontecimiento de la pasión y muerte del Señor, no solo
lo evoca, lo hace sacramento presente (#10). El Triduum está anticipado, y
concentrado en el don eucarístico, con él instituyó una misteriosa contempo-
raneidad entre aquel Triduum y el transcurrir de los siglos. (#5). Cristo ha
querido hacer suyo el sacrificio espiritual de La Iglesia, llamada a ofrecerse a
sí misma unida al sacrificio de Cristo (#13) La Eucaristía es la fuente, y al
mismo tiempo, la cumbre de toda la evangelización, puesto que su objetivo
es la comunión de todos los hombres con Cristo (#22). En efecto, pan es uno
MEDITEMOS
solo, por más que esté compuesto de muchos granos de trigo, su diversidad
desaparece en virtud de su perfecta fusión (#23).Contemplar a Cristo implica
saber reconocerle donde quiera que Él se manifieste, en sus multiformes pre-
sencias (#6).
La adoración del Santísimo Sacramento tiene una importancia diaria desta-
EL ROSARIO CON LOS
cada y se convierte en fuente inagotable de santidad (#10). ¿Cómo no sentir
una renovada necesidad de estar largos ratos en conversación espiritual, en
adoración silenciosa, ante Cristo en el Santísimo Sacramento (#25).
SALMOS
Se nota a veces una comprensión limitada del Misterio eucarístico.. se vive
como si no tuviera otro significado que el de un encuentro convival fraterno,
se reduce a la eficacia del anuncio y se transigen con prácticas eucarísticas
MODO DE REZAR ESTE ROSARIO
contrarias a la disciplina con la cual La Iglesia expresa su fe (#10). No se Este rosario tiende a la actividad mental y personal, o sea a la meditación. No conserva la
puede reemplazar la Misa con celebraciones ecuménicas de la palabra o con parte repetitiva y pedagógica popular del Rosario tradicional. Para no romper totalmente con
encuentros de oración (#30). Los evangelistas precisan que fueron los após- la forma tradicional tan arraigada en el pueblo, se aconseja que sólo se rece un misterio
toles, los que se reunieron con Jesús en la Última Cena detalle importante con el nuevo esquema para ir así acostumbrando la mente popular a la nueva forma de
porque fueron la semilla del nuevo Israel, a la vez que el origen de la je- orarlo. De hecho fue así cómo nació en nuestra Parroquia de San Juan Bautista de la
Salle. Posteriormente en procesiones se iba alargando el rezo del rosario con partes de los
rarquía sagrada (#21).Respetando las convicciones de estos hermanos sepa- salmos con aprobación tácita de los párrocos. Ahora presentamos una manera como se
rados, deben abstenerse de participar en la comunión distribuída en sus cele- podría rezar con grupos acostumbrados a la meditación, para que se rece de vez en cuan-
braciones (#30). El sacerdote debe celebrarla cotidiamente aunque no pue- do, al menos en un misterio, y para que el pueblo de Dios al oírlo rezar, perciban por la pa-
dan estar presentes los fieles (#31). Para santificar el domingo, participar en labra a El Espíritu presente en los misterios del rosario integrados a la Liturgia de las Horas
y actualizados constantemente en nuestras vidas. El Espíritu de Jesús en La Iglesia, predi-
la misa es una obligación a menos que tengan impedimento grave (#41) cado en el Texto Sagrado y real en La Eucaristía y en nosotros.

Para mantener la forma activa comunitaria tradicional del rosario entonado en voz alta, su-
gerimos que en los misterios haya una rotación constante de LECTORES. Así se siente
más la actividad comunitaria. Es necesario por lo tanto que se distribuyan varios folletos y
se vuelvan a recoger como se hace con El Oficio de la Horas en las parroquias cuando
estos se celebran con la comunidad. Si se quiere, las partes salmodiadas se pueden ento-
nar comunitariamente (como se hace en El Oficio de las Horas), y el Lector sólo entona la
parte intencional. El ORGANIZADOR es el que debe cuidar estos detalles para que el Ro-
sario sea tan dinámico como el tradicional.

Parroquia de San Juan Bautista de la Salle LOS MISTERIOS DEL ROSARIO Y SALMOS QUE NOS AYUDAN
A PROFUNDIZARLOS
Kra. 11 sur N° 28A 30 tel. 2723938 Barrio Country Sur
En seguida enunciamos los misterios y le invitamos a que los combine
con algunas partes de los salmos que por las palabras que contienen los
ligan a los sentimientos y a lo que dijeron los personajes del misterio
meditado. Son los salmos una guía certera para expresar los sentimien-
tos que se generan al contemplar los misterios del Rosario. No es nece-
sario que lea todo el salmo o toda la parte sugerida, basta que elija
MEDITEMOS EL ROSARIO CON LOS SALMOS aquella frase del Divino Espíritu que más le conmueva, pues de eso se
trata, de mover el corazón a la piedad. Sugerimos a veces frases pro-
Los pueblos antiguos, en su mayoría de gentes analfabetas, conserva- pias que incitan el corazón al sentimiento y es muy importante que in-
ban las tradiciones por medio de leyendas, dichos y cantos. voque con frecuencia al Divino Espíritu como compañero para que le
El Espíritu Santo condensó para su pueblo elegido, en 150 hermosos explique las palabras de La Divina Escritura que Él mismo inspiró y en
himnos, toda la revelación hecha vida en el pueblo, en cada persona y los cuales puede ver la vida de Jesús, de María y su propia vida.
de un modo pleno en Cristo y la Madre. En ellos cuenta que Dios es Si usted ora solo o tiene la responsabilidad y el don de dirigir el santo
origen de todas las cosas, que todo lo conoce y nada le es oculto, da rosario, le damos un listado al inicio de salmos con los que puede
normas sabias, y nos enseña a expresarnos en momentos dolor, fatigas, acompañar y hacer las variaciones que el Espíritu le dicte como perti-
horas de angustia por los que debemos pasar junto a su Cristo y la Ma- nentes para profundizar la meditación de los misterios que correspon-
dre para después entonar himnos victoriosos prefigurados en algunos den a ese día. En cada misterio rezaremos de dos a cinco avemarías y
salmos. La Virgen Madre en el templo meditaba en el libro Sagrado, y las avemarías faltantes las reemplazaremos con trozos de salmos y pe-
conocía bien estos hermosos cantos a medida que en ellos leía su diario queñas sugerencias que nos ayuden a profundizar en el misterio medita-
acontecer. Nos dice Lucas: ella meditaba y guardaba todas estas co- do. Así evitamos que el rosario se prolongue más allá del tiempo que
sas en su corazón (Lc 2,19). Se dio cuenta que en Ella y en su Hijo se lleva el rezo de un rosario tradicional. Recuerde: Jesús y María conocí-
repetía toda la historia que había estudiado: la fe que se le exigió a an los salmos que fueron apoyo firme de su oración y luz para dirigir
Abraham para ofrecer a su hijo en sacrificio, el batallar de David, el
sus sentimientos hacia Dios Padre en el acontecer de sus vidas.
peregrinar de Moisés, el dolor de Job, la plegaria de Ester y Judith en
momentos de grande angustia y los hermosos himnos de Isaías que pre-
figuraban la vida que a Ella, a su Hijo y a nosotros nos toca vivir.
Nosotros, al rezar el Rosario, vamos junto con ella meditando lo que
ya está escrito, lo que ya conocemos, la historia del Cristo que se repite
en nosotros. Y con ella nos reconfortamos con la palabra del Divino Es-
píritu, escrita en el Libro Sagrado y condensada hermosamente en los
salmos.
En este misterio La Virgen Madre como toda mujer a la cual se le enco-
MISTERIOS GOZOSOS mienda la misión de tener un hijo, como a todo hombre al que se le enco-
Se celebran los lunes y los sábados mienda la vida y una misión en ella, siente ansiedades o alegría ante la
nueva perspectiva, siente miedo de la nueva empresa o seguridad y gozo
Para meditar estos misterios le recomendamos los siguientes salmos: el 40 (39), el 103 (102), el ante el nuevo camino que se abre. En los salmos encontramos estos senti-
113(112), el 119(118), el 131(132), el 139(138), el 146(145), el 55(54), el 8. Nota importante:
colocamos entre paréntesis la enumeración litúrgica de los salmos que aparece en los misales
mientos: Alegría y júbilo o angustia.
y en algunas Biblias
.
Introducción (Al Organizador le corresponde leer u omitir la introducción según vea con- • 1° lector
veniente).
Padre con La Virgen Madre que ansiaba tener una misión en la vida
Se llaman gozosos porque celebran el momento en que Dios viene hasta exultamos de gozo con el salmo 34, (2-11) que nos recuerdan su Magníficat
el hombre en manera la más cariñosa de todas las posibles. Contrarres- expresión de alegría de la elegida como Madre del Mesías: Bendeciré a
tando la Soberbia del Maligno que tentó al primer hombre: Seréis como Yahvé en todo tiempo, en mi boca su alabanza, en Yahvé se gloría mi
Dios, ahora es Dios en su segunda Persona que se entrega Niño en bra- alma, óiganlos los humildes y alégrense. Engrandeced a Yahvé con-
zos de una mujer. Todavía hay espíritus rebeldes que no aceptan esta migo. El pobre ha gritado y Yahvé lo ha oído y le salva de todas sus
suprema muestra de amor y de ternura pero Jesús lo dirá: Yo soy la angustias. Acampa el ángel de Yahvé en torno a los que le temen.
Puerta y si no os hacéis como niños, no entraréis al Reino (Jn 10,9 y Gustad y ved qué bueno es el Señor, dichoso el hombre que se cobi-
Mt 18,3). Los niños junto con los cuidados que sus madres les brindan, ja en Él. Los ricos quedan pobres y hambrientos mas los que buscan
son uno de los rostros de la vida de Dios. Es María, la primera que en a Dios de ningún bien carecen.
suprema pureza y sencillez, con fe profunda, es capaz de aceptar y vi- El lector reza un padrenuestro y el avemaría:
vir, con plenitud, este rostro tierno y delicado de Dios. Meditemos
cómo sucedió esto, ayudados de los salmos 8, 40 y 131 donde se palpa
que no todo es gozo sino un batallar en la pobreza del destierro.
• 2° lector
Virgen madre, junto contigo nos entregamos a los designios de
• Organizador Dios, de Quien recibimos la vida, y decimos con el salmo 40:
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Los Miste- Dichoso el hombre que pone su confianza en Dios y no es rebelde, ni
rios que vamos a meditar son los gozosos. Pero primero profesemos anda tras la mentira. Oh Dios! Cuántas maravillas en tus designios
nuestra fe : Creo en Dios Padre Todopoderoso, Creador del cielo y con nosotros. No quieres sacrificios, no pides dádivas y por eso digo:
de la tierra....etc. Aquí estoy para hacer tu voluntad. Yo te divulgo Dios y proclamo
públicamente mi fe en ti. No me avergüenzo de mi fe. Tú no contengas
• Organizador o el encargado de anunciar este misterio tus ternuras para mí y que tu verdad y tu amor constantes me guarden
1° misterio gozoso: LA ANUNCIACIÓN . Ella se turbó y el El lector reza un avemaría
ángel le dijo : Serénate María, Dios se ha complacido en ti y te va a
dar el don de un Hijo (Lucas 1,27 y siguientes)
• 3° lector
Por el temor natural de su misión de madres y ante la angustia que sen- tranjeros me adulan. Viva Yahvé, bendita mi roca, el Dios de mi sal-
timos frente a la vida, oremos junto con todas las mujeres actualmente vación sea ensalzado. Tú me liberas de mis enemigos, me libras del
embarazadas diciendo las palabras del salmo 40, 13 y ss. hombre violento.
Dios mío, ven en mi ayuda, pues me envuelven desdichas y mis culpas E lector o encargado reza el padrenuestro y el avemaría
me dan caza, no puedo ver claro y el corazón se me oprime pues me
siento culpable. Yo pobre y desdichado, oh Señor, piensa en mí, Tú mi • 1° lector
socorro y libertador Al eco de tu canto de alegría Virgen presurosa por las montañas de Ga-
El lector reza un avemaría lilea exultamos de gozo contigo diciendo con el salmo (salmo 18,34-49):
Gritad justos en honor a Yahvé, dad gracias con la cítara, cantadle
• otro lector un cántico nuevo: por su palabra fueron hechos los cielos. Él reúne
(salmo18, 31-33) Yahvé mi luz y salvación, ¿a quién he de temer? Yahvé las aguas del mar como en un odre. Ante Él todos tiemblan, pues ha-
mi refugio, ¿por qué he de temblar? Cuando todos los malhechores bló, mandó y se hizo. Yahvé mira de lo alto y ve a todos los hijos de
me quieren devorar, aunque estalle una guerra contra mí, estoy segu- Adán, Él forma el corazón de cada uno y repara en todas sus accio-
ro en mi Dios. Una cosa he pedido a Dios, una cosa estoy buscando, nes. Los ojos de Yahvé están sobre quienes le temen, sobre aquellos
morar en la casa de Yahvé todos los días de mi vida para gustar su que esperan su amor para librar su alma de la muerte y sostener su
dulzura y cuidar su Templo. Él me dará cobijo en su cabaña, me es- vida en la penuria. Nuestra alma en Yahvé espera, Él es nuestro soco-
conderá en lo oculto de su tienda, sobre una roca me colocará. rro y escudo. En Él se alegra nuestro corazón, y en su santo nombre
Para que todas las niñas embarazadas sientan esta fe de Dios con confiamos.
ellas recemos: El lector reza el avemaría y Gloria al Padre. El lector reza un avemaría

• Organizador o el encargado de anunciar este misterio


2° misterio gozoso: LA VISITA A LA PRIMA ISABEL. Ma-
• 2° lector
Virgen Madre, tú la humilde y sencilla, contigo la amada, expresamos la
ría se encaminó con presteza a la región montañosa entró en casa de alegría de tu Magníficat, con el hermoso salmo 131:
Zacarías y saludó. Apenas oyó Isabel el saludo, el niño saltó en su
seno y ella gritó llena de júbilo: bendita tú porque has creído y bendi- No está inflado mi corazón, Dios mío, ni mis ojos son altaneros. No
to el fruto de tu vientre. (Lucas 1,39) he tomado un camino de grandezas, ni de prodigios que me vienen
anchos. Guardo lisa y silenciosa mi alma, y mi alma está como niño
Exultemos de alegría con estas dos mujeres y su fe profunda en destetado en el regazo de la madre. Mi pueblo espera en Dios ahora y
Dios: siempre.
Virgen madre, que vas presurosa por los montes, te acompañamos en la Cantar llenos de alegría el Avemaría y decir Gloria al Padre, y al
alegría que participas a tu prima Isabel con el salmo (18,34-49) : Yahvé Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en un principio…
hace mis pies ligeros como de cierva y en las alturas me sostiene de
pie, persigo a mis enemigos, los quebranto, sucumben bajo mis pies,
me ciñes para el combate, exterminas a los que me odian, los macha- • Organizador o el encargado de anunciar este misterio
co como polvo, como al barro los piso, me pones a la cabeza de las
gentes, los pueblos que no conocía me sirven, los hijos de los ex-
3° misterio gozoso: EL NACIMIENTO DE JESÚS. Y dio a Dios Niño entre nosotros te alabamos, te bendecimos por tu sencillez,
luz a su primogénito, lo envolvió en pañales y lo reclinó en un pese- por tu pureza por tu entrega tan cariñosa, tan hermosa a la criatura
bre porque no tuvieron sitio en la posada (Lucas 2,6) El lector reza un avemaría

Virgen madre te acompañamos en tu angustia, pues después del viaje


de tres días en estado de preñez, nadie te quiere recibir y al ver la dure- • 3° lector
za de los hombres ante tu estado oramos con fervor con el Salmo 4: En el paraíso la soberbia del maligno tentó al hombre diciéndole: Seréis
Cuando clamo, respóndeme Dios mío, mi justiciero. En la angustia como Dios (Génesis 3,4), pero Dios ha derribado toda soberbia con la
Tú me abres las salidas. Vosotros hombres duros de corazón, amantes presencia de un Niño, por eso el Salmo 8 dice: Por boca de los niños,
de la mentira, que se rigen por apariencia y vanidad. Sabed que Dios aún de los que maman, has sacado una alabanza contra tus enemi-
me cuida en mi aparente pobreza. El me ha dado más alegría que gos, para reprimir al adversario y al rebelde.
cuanto vosotros abundáis en bienes. Repitamos el hermoso salmo 131: No está inflado mi corazón, Dios
Pidiendo por las mujeres embarazadas para que tengan fe que Dios mío, ni mis ojos son altaneros. No he tomado un camino de grande-
las acompañará en su misión aunque a veces parezcan grandes las zas, ni de prodigios que me vienen anchos. Guardo lisa y silenciosa
dificultades recemos el padrenuestro y el avemaría. mi alma, y mi alma está como niño destetado en el regazo de la ma-
dre. Mi pueblo espera en Dios ahora y siempre. Pidamos la sencillez
• 1° lector y humildad de La Virgen Madre que lo tiene entre brazos para que po-
Oh virgen tranquila al lograr tener a tu Hijo en la pobreza del pesebre: damos contemplar a Dios en los niños.
Ahora que oyes el canto de paz de los ángeles decimos con el mismo El lector reza el avemaría y Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu
salmo 4: Me acuesto en paz y en seguida me duermo, pues Tú Yahvé Santo.
eres mi refugio.
El lector reza un avemaría

• Organizador o el encargado de anunciar este misterio


• 2° lector 4° misterio gozoso: PRESENTACIÓN EN EL TEMPLO. Vi-
Al nacer el Niño, al ver el hermoso regalo de un niño entre nosotros, vía entonces en Jerusalén, Simeón, hombre justo, y el Espíritu Santo
participamos jubilosos con La Virgen Madre que lo tiene entre sus bra- le había revelado que antes de morir contemplaría al Mesías. Impul-
zos, brillantes sus ojos de pureza y admiración. Decimos con el Salmo sado por el Espíritu fue al templo y al entrar los padres con el Niño,
8: Padre, quiero cantar tu nombre que se alza por encima de los cie- Simeón lo tomó y dijo: Deja Señor que este siervo muera en paz pues
los. Por boca de los niños, aún de los que maman, has sacado una ya mis ojos contemplaron a tu Salvador. (Lucas 2,25)
alabanza contra tus enemigos, para reprimir al adversario y al rebel-
de. Veo la luna, las estrellas y los cielos y me pregunto: ¿qué es el Para meditar este misterio cuando La Virgen subía a la ciudad bulliciosa de Je-
hombre para que lo ames, lo cuides y lo hagas dueño de tus obras? rusalén, es muy hermoso el salmo 55(54). Sus frases nos muestran la ciudad que
Hermoso es tu nombre por toda la tierra. no quiere recibir a Dios, ni le importa La Virgen madre que lo lleva y se siente
aislada sin que nadie conozca el don que lleva en sus manos. Cuántas madres
sienten la inmensidad de Dios en sus hijos pero las rodea el cerco estrecho de Señora que buscas angustiada a tu Hijo, junto a ti Señora los que bus-
un mundo lleno de indiferencia ante el don que Dios les ha encomendado. camos el rostro de Dios oramos
Salmo 55: Escucha, Padre mi oración, pues estoy agitada, y quisiera Salmo 42: Como jadea la cierva buscando el agua, así jadea mi alma
huír, tener alas de paloma para alejarme al desierto. Veo discordia y en pos de Ti, Señor. Tiene mi alma sed de Dios. ¿Cuándo podré ver su
altercado en la ciudad, rondan día y noche por sus murallas, y den- rostro? Son mis lágrimas mi pan, de día y de noche, y me dicen:
tro de ella veo iniquidad y malicia, y aún el que era mi conocido y ¿Dónde está tu Dios?
amigo me es extraño. Está el mal entre ellos y van a la muerte, pero El lector reza el padre nuestro y el avemaría
yo te invoco, y a la tarde, al amanecer y al mediodía, a todo momento
me quejo y gimo para que me oigas. Y Tú me escuchas, reinas siem-
pre y humillas a los que no quieren enmendarse, a los que andan sin
temor de Dios, a los que violan sus promesas y mienten con palabras • 1° lector
dulces, los hundes en la fosa pero yo confío en Ti. Acompañemos a La Virgen que no sabe qué rumbo tomar para bus-
El lector reza el padre nuestro y el avemaría car a su Hijo diciendo con el salmo 25: Muéstrame tus caminos, Yah-
vé enséñame tus sendas, guíame en tu verdad. Tú eres mi salvación y
estoy esperando todo el día. Acuérdate de tu ternura y de tu amor que
son de siempre. Tú eres bueno pues muestras a los pecadores el cami-
• 1° lector
no, conduces a los humildes, y a los pobres enseñas tus senderos. To-
Pidamos a Dios que abra nuestros ojos como a Simeón para poderlo dos tus caminos son amor y verdad para quien los guarda. Mis ojos
contemplar ya en este mundo y que su percepción nos dé la paz para están fijos en Ti que sacarás mis pies del cepo. Mírame y tenme pie-
morir tranquilos. Salmo 146: dad que estoy solo y desdichado, alivia los ahogos de mi corazón, y
Yahvé abre los ojos a los ciegos, endereza a los encorvados, protege hazme salir de mis angustias. Inocencia y rectitud me amparen que
al forastero y sostiene a la viuda y al huérfano. Yahvé ama a los jus- en Ti espero.
tos y tuerce el camino de los impíos. Yahvé reina por siempre, tu Dios El lector reza el avemaría
de edad en edad.
El lector reza 3 avemarías y Gloria

• Organizador o el encargado de anunciar este misterio


5° misterio gozoso: LA PÉRDIDA Y HALLAZGO DEL
NIÑO. Su madre se le quejó: - Hijo, ¿por qué te has portado así con • 2° lector
nosotros? Tu padre y yo, angustiados, te hemos estado buscando. Je- Todos los que buscamos a Dios decimos contigo María y con el sal-
sús les contestó: Pero ¿por qué me buscabais? ¿No sabíais que yo mo 63: Dios, tú mi Dios, yo te busco, sed de ti tiene mi alma, en pos
debo estar en la Casa de mi Padre? Pero ellos no comprendieron el de ti languidece mi alma. Como cuando en el santuario te veía, al
alcance de su respuesta. Con ellos regresó a Nazaret y les estaba su- contemplarte, pues tu amor es mejor que la vida, así quiero en mi
jeto. Su Madre conservaba todas estas cosas en su corazón y Jesús vida bendecirte. Yo exulto a la sombra de tus alas. Mi alma se aprieta
crecía en edad, en sabiduría y en gracia delante de Dios y de los contra ti.
hombres. (Lucas 2,46 y siguientes) El lector reza un avemaría y canta otra con alegría de la madre que
estrecha su hijo hallado y dice Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espí-
ritu Santo. Como era en un principio... Oremos con aquellos que es-
tén angustiados: Oh Jesús, perdona nuestros pecados, líbranos del fue-
go del infierno y lleva al cielo a las almas ante todo a las más necesita-
das de tu divina misericordia
MISTERIOS LUMINOSOS
Se rezan el día jueves
Ofrezcamos la Salve por el Papa y por todos los peregrinos: Dios te
Salve Reina y Madre etc. Proclamados por el papa Juan Pablo II, celebran a Jesús como Mesías
y Rey, el anunciado por las Sagradas Escrituras. Por eso para meditar
estos misterios se pueden rezar salmos de triunfo, donde se revele la
plena potestad de Dios sobre lo creado, potestad entregada a JESÚS,
entre ellos el 121 (120), 91 (90) 145 (144), 66 (65), 68 (67), 72 (71),
73 (74) y ante todo el solemne salmo 89 (88) en donde se anuncia todo
el plan salvífico y lo que iba a pasar con el MESÍAS y sus seguidores.

Introducción (Al Organizador le corresponde leer u omitir la introducción según vea con-
veniente).
No sabemos desde cuándo Jesús tuvo plena conciencia de ser el HIJO
DE DIOS. Es una conciencia, que como en todo cristiano, se va madu-
rando con el acontecer de la vida. En Jesús está vivencia tiene un matiz
más profundo porque por naturaleza y no por adopción, es Hijo. Ya
desde los doce años llamó : Mi Padre a Dios (Lc3,49), y dio muestras de
conocer muy bien las Sagradas Escrituras donde El Espíritu Divino ha-
bía escrito sobre el Hijo de Dios que iba a venir y que Él sabía por lo
que le contaba su Madre, que se estaban cumpliendo. Ratos muy subli-
mes debió pasar la Sagrada Familia cuando juntos leían el Libro Sagra-
do, y a medida que la Madre comentaba lo que había acontecido en Be-
lén y en el Templo, misterios gozosos que ya meditamos, el Niño les
mostraba lo que al respecto se había escrito. Por eso se lee en Prover-
bios (8,30) tal como lo traduce la liturgia cuando celebra las fiestas de
La Virgen: Yo (La Sabiduría) era su encanto cotidiano, todo el tiempo
jugaba en su presencia con la bola de la tierra, y gozaba con los hi-
jos de los hombres. Y en otro lado: Ni una jota de lo escrito dejará de
cumplirse (Mt5, 18). Pobre Madre, gozosa de la Sabiduría: Su Hijo, que
no sospecha la tragedia del Calvario. Esa LUZ hogareña que no pudo
ser apagada por la persecución de Herodes, ni por el destierro a Egipto,
ni por las incidencias de la vida cotidiana como la pérdida del Niño en
el templo, llegó a plena madurez y dejó el hogar para entregarse a los dré su mano sobre el mar, sobre los ríos sus derecha. Él me invocará:
hombres. Es Juan, el Bautista, el primer hombre que oficialmente de- Tú, mi Padre y yo haré de Él mi primogénito.
clara a Jesús como el Mesías. Tal vez ya María lo sabía. Esta manifes- El lector reza el padrenuestro y el avemaría
tación pública de Jesús como Mesías, Dios con nosotros, iba a ser
puesta a prueba por la incredulidad de los hombres como lo afirma el • 1° lector
texto sagrado (Sabiduría 2,12ss): Tendamos lazos al justo que nos fasti-
Pidamos que Jesús rija nuestra vida diciendo con el Salmista:
dia y se enfrenta a nuestro modo de obrar, al que se ufana de ser
Salmo 72(71) Señor: Confía tu juicio a tu Ungido para que rija a tu
Hijo de Dios y lleva una vida distinta. Veamos si sus palabras son
pueblo con justicia, a tus humildes con rectitud. Que Él defienda a los
verdaderas, sometámosle al ultraje y al tormento para conocer su
humildes de tu pueblo, socorra a los hijos del pobre. Que se postren
temple, condenémosle a una muerte afrentosa pues según Él, Dios le
ante Él los jefes de las naciones, que todos los pueblos le sirvan y le
asistirá. Pero antes de ser puesto a prueba por los hombres el Espíritu
obedezcan, porque Él librará al pobre que clamaba, al afligido que
lo lleva al desierto para que los espíritus malignos lo tienten y sean tes-
no tenía protector.
tigos de su poder sobre ellos. Meditemos cómo Jesús es Dios con noso-
El lector reza tres avemarías y Gloria al Padre, y al Hijo,....
tros.

• Organizador
• Organizador o el encargado de anunciar este misterio
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Los Miste- 2° misterio luminoso: LAS BODAS DE CANÁ: Y como falta-
rios que vamos a meditar son los luminosos. Pero primero profese- ra el vino , le dice su Madre : No tienen vino. Jesús le responde: Qué
mos nuestra fe : Creo en Dios Padre Todopoderoso, Creador del tengo que ver contigo. Mi hora no ha llegado. La Madre indicó a los
cielo y de la tierra....etc. que servían: Haced lo que Él os diga. (Jn 2,5)

Este pasaje nos manifiesta que aunque todo está escrito y Ni una jota
• Organizador o el encargado de anunciar este misterio de lo escrito dejará de cumplirse (Mt5, 18), podemos precipitar la lle-
1° misterio luminoso: BAUTISMO DE JESÚS. Y desde el cie- gada del Reino a nosotros, así como María precipitó la hora de Jesús, y
lo resonó esta voz: Este es mi Hijo, muy Amado. Escuchadle. (Lucas como lo dice Pedro en su segunda carta: Esperad y apresurad el día de
3,20) la Venida del Señor, viviendo en paz y siendo inmaculados e irrepro-
chables (2P3, 12,14).
A medida que rezamos el padrenuestro y el avemaría, reconozcamos a Reconozcamos a Jesús de tal forma que en nosotros se precipite su ple-
Jesús como el anunciado por las Escrituras prefigurado por David se- na manifestación.
gún estas palabras del Salmo 89. El lector reza el padrenuestro y el avemaría

Salmo 89 (88), 21 y siguientes: He ungido con óleo santo a mi siervo David.


Mi mano será firme para él, también mi brazo le hará fuerte. No le • 1° lector
ha de sorprender el enemigo, el hijo de iniquidad no le oprimirá. Yo
Refiriéndonos a Jesús Nuestro intermediario para llegar al Padre diga-
aplastaré sus adversarios ante él. Heriré a los que le odian. Mi leal-
mos con el salmo:
tad y mi amor irán con él, por mi nombre se exultará su cuerno, pon-
Salmo 73(74) Yo siempre estaré contigo. Tú tomas mi mano derecha,
me guías según tus planes y me llevas a un destino glorioso. ¿No te
tengo a ti en el cielo ? y contigo ¿ qué me importa la tierra ? Se con- • Organizador o el encargado de anunciar este misterio
sumen mi corazón y mi carne por Jesús, mi herencia perpetua. Para
mí lo bueno es estar junto a Jesús, hacer del Señor mi refugio y con- 4° misterio luminoso: TRANSFIGURACIÓN EN EL TA-
tar todas sus acciones BOR: Jesús se transfiguró y vieron a Elías y a Moisés que conversa -
El lector reza tres avemarías pidiendo que se haga la voluntad del ban con Jesús. Los cubrió una nube y resonó una voz: Este es mi Hijo
Padre, así en la tierra como en el cielo, y dice Gloria al Padre, y al muy Amado. Escuchadle (Marcos 9,2 y siguientes)
Hijo,....
Jesús en este episodio demuestra que Él domina la esfera terrena y la
esfera sobrenatural. Habla con Moisés que había muerto y con Elías
arrebatado a los cielos en carro de fuego. Con sus milagros se muestra
• Organizador o el encargado de anunciar este misterio Rey y Señor de este mundo y de los espíritus rebeldes que expulsa.
3° misterio luminoso: PREDICACIÓN DEL REINO Y les dio Pero su poder va más allá al comunicarse con los que lo habían anun-
poder sobre los espíritus malos y les mandó que no llevasen nada ciado y habían sido su figura en el Antiguo Testamento. Por eso deci-
para el viaje, fuera del bastón. Ni pan, ni provisiones, ni dinero (Mar- mos jubilosos con el salmo 66:
cos 6,8 y siguientes)

Jesús es cada vez más consciente de su pleno poder y reprocha con fre- • 1° lector
cuencia la falta de fe de sus seguidores. Recordemos que con la presen-
Salmo 66 (65) Que se postre ante ti la tierra entera. Venid a ver las
cia de Dios entre nosotros la angustia, la enfermedad, las necesidades
obras de Dios sus temibles proezas. Alegrémonos con Dios que con
materiales, y la misma muerte pueden ser asumidas en el poder de
poder gobierna eternamente Sus ojos vigilan a las naciones. Él nos
Aquel que tántas veces dijo a sus discípulos: No tengáis miedo (Lc5,
ha conservado la vida y no dejó que cayéramos en el peligro.
10; 12, 4 ,7). Estad alegres (Jn 16,20-24, 15,11)
El lector reza el padrenuestro y tres avemarías pidiendo que nues-
tra fe en Jesús sea cada vez más fuerte.
Salmo 121: Levanto mis ojos a los montes. El auxilio me viene del Se-
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
ñor que hizo el cielo y la tierra. Tu guardián no duerme, no permitirá
que tu pie resbale. El señor guarda tus entradas y tus salidas.
El lector reza el padrenuestro y el avemaría

• Organizador o el encargado de anunciar este misterio


• 1° lector 5° misterio luminoso: LA INSTITUCIÓN DE LA EUCARIS-
Salmo 68(67) Se levanta Dios, que se dispersen sus enemigos. Bendi- TÍA: ¿Seréis capaces de beber el cáliz que he de beber ? (Mateo
to el Señor que cada día lleva nuestras cargas. El Señor nos hace es- 20,23)
capar de la muerte. Es quien da fuerza y poder a su pueblo.
El lector entona tres avemarías y Gloria al Padre Jesús llegado a plenitud, en plena identidad con el Padre, todo lo domi-
na. En los evangelios, ante todo en el de San Juan, se nota tenso pero
lleno de júbilo porque va a ser sometido a la máxima prueba. Sabe que
sus discípulos no resistirán: heriré al Pastor y se dispersarán las ove- El lector reza tres avemarías y Gloria al Padre, y pide que sin temor
jas (Mr 14,27). Pero volverán a Él. En una ceremonia sencilla y llena de a ninguna prueba sigamos al Maestro tomando su cáliz con alegría y
significado nos invita a recibir plenamente su misterio: ¿Seréis capaces venciendo la muerte como Él.
de beber el cáliz que he de beber? (Mt20, 23). El sacrificio que va a re- Oremos por los más angustiados: Oh Jesús, perdona nuestros pecados,
alizar se condensa en esta ceremonia tan simple. Como explica Juan líbranos del fuego del infierno y lleva al cielo a las almas ante todo a
Pablo II en la carta encíclica Ecclesia de Eucharistia 3, 5, 10, 11, 30, la cele- las más necesitadas de tu divina misericordia
bración eucarística, no se puede confundir con una mera celebración de Pidiendo por los peregrinos y el Papa, recemos la Salve
la palabra. Sólo se entiende dentro del Triduo Pascual: Cena del jueves,
Crucifixión el viernes y Resurrección al amanecer del sábado, Sacrifi-
cio pleno de Cristo que se repite y está en manos de los sacerdotes y su
Iglesia y en el cual Jesús prolongando su sacrificio presenta continua-
mente al Padre los dolores, angustias de La Iglesia Itinerante o sea de
los que cada día toman su cruz y completan en sí lo que falta a las tri-
bulaciones de Cristo (Col 2,4). Cuando Jesús invita a comulgar con Él,
nos invita a su sacrificio y a la fe profunda que nuestra muerte diaria
está unida a la del que venció la muerte en la Cruz, signo inconfundible
del Cristianismo en el que toma pleno sentido el dolor y la muerte por la
que debemos pasar junto con Jesús. Digamos con el salmista:

• 1° lector
Salmo 30 (29): Yo te ensalzo, Padre, porque me has levantado, tú has
sacado mi alma del seol, me has recobrado de entre los que bajan a
la fosa. No permitiste que los enemigos se burlaran de mí
El lector reza el Padrenuestro y el avemaría

• 2° lector
Recordemos el sacrificio de Jesús descrito en el solemne salmo 89 (88),
39ss. Mas con todo has rechazado y despreciado a tu Ungido, rompiste
la alianza con tu Siervo, has abreviado los días de su juventud y le
has cubierto de ignominia. ¿Hasta cuándo Yahvé te esconderás?
¿Dónde están tus primeros amores que juraste a David por tu fideli-
dad? Llevo en mi seno todos los ultrajes de los pueblos. Bendito sea
Yahvé por siempre. Amén. Amén.
El lector reza el padre nuestro y el avemaría

MISTERIOS DOLOROSOS • 1° lector


Se rezan los martes y viernes
Salmo 69, 4: Estoy agotado de gritar y se me nublan los ojos de tánto
Salmos que recomendamos para meditar los misterios dolorosos: el 28 (27), 38 (37), aguardar a mi Dios
31 (30), 22(21), 69 (68). El lector reza el avemaría.

Los sentimientos que Jesús tuvo en los momentos de su máxima prue- • 2° lector
ba, están expresados en muchos salmos. La Virgen Madre y Jesús co- Pidamos fortaleza para aquellos que están siendo probados y que en
nocían perfectamente los salmos, himnos antiquísimos que El Divino estos momentos estén participando de las angustias de nuestro her-
Espíritu regaló al pueblo para que expresara sus sentimientos delante mano Jesús: decimos con el salmo 69, 6:
de Dios según fueran las vicisitudes diarias. Vamos a meditar los miste-
rios dolorosos apoyados con las palabras de algunos salmos que expre- Dios mío, Tú conoces mi debilidad, no se te ocultan los hechos de mi
san lo que estaba Jesús viviendo en ese momento vida, que por mi causa no queden defraudados los que esperan en Ti.
Yo soy un pobre mal herido, respóndeme con la bondad de tu gracia.
• Organizador El lector reza el avemaría
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Los Miste-
rios que vamos a meditar son los dolorosos. Pero primero profese- • 3° lector
mos nuestra fe : Creo en Dios Padre Todopoderoso, Creador del
Oigamos estas hermosas palabras de triunfo con que acaba el mis-
cielo y de la tierra....etc.
mo salmo 69,31-37 dando gracias a Dios por aquellos que superan sus
pruebas:
• Organizador o el encargado de anunciar este misterio Alabaré el nombre de Dios con cantos pues el Señor escucha a sus
pobres. Alábenlo el cielo y la tierra las aguas y cuanto bulle en ellas.
1° misterio doloroso: LA AGONÍA EN EL HUERTO: Y su-
Cantar el avemaría y al final se dice:
mido en angustia, insistía más en su oración. Su sudor se hizo como
Por la angustia de Jesús y la fuerza con que la superó: Gloria al Pa-
gotas espesas de sangre que caían en tierra. Levantándose de la ora-
dre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era un principio, ahora y
ción vino donde sus discípulos y los encontró dormidos por la triste-
siempre por los siglos de los siglos. Amen.
za. Les dijo: ¿Cómo es que estáis dormidos? Levantaos y orad para
Oremos por los más angustiados: Oh Jesús, perdona nuestros pecados,
que no caigáis en tentación (Lucas 22, 44-47)
líbranos del fuego del infierno y lleva al cielo a las almas ante todo a
las más necesitadas de tu divina misericordia
Jesús junto a tu angustia colocamos, la angustia de los que sufren la
guerra, la drogadicción, el desempleo, la soledad, el sin sentido de la
vida, los encadenados por un vicio, las madres que sufren por sus hijos
y unidos a tu plegaria, decimos con el salmo 69, 2:
Dios mío, sálvame que me llega el agua al cuello y me estoy hundien-
do en un cieno profundo y no puedo hacer pie.
• Organizador o el encargado de anunciar este misterio go del infierno y lleva al cielo a las almas ante todo a las más necesita-
das de tu divina misericordia
2° misterio: LA FLAGELACIÓN :Tomó entonces Pilatos a Je-
sús y mandó a azotarle (Juan 19,1)

En el salmo 35,11ss el Divino Espíritu nos enseña a orar en momentos • Organizador o el encargado de anunciar este misterio
como los que Jesús está pasando en su flagelación: 3° misterio doloroso: LA CORONACIÓN : Y desnudándole le
Testigos falsos se levantan. Me hacen preguntas de lo que nada sé. Se cubrieron con un manto de grana. Entretejieron una corona de espi-
me paga mal por bien. Mi alma está desolada. Ellos se ríen, se reú- nas. Se la pusieron sobre la cabeza y una caña por cetro en su mano
nen contra mí, desgarran sin descanso. Burla tras burla, rechinando derecha. Y con la rodilla doblada en tierra, le escarnecían diciendo:
sus dientes contra mí. Oh Señor: ¿hasta cuándo te quedarás miran- Dios te salve Rey de los judíos. (Mateo 27,28)
do? Señor, no te estés mudo, no te estés lejos de mí. Despiértate, le-
vántate a mi juicio.
Al ver al Cristo en esta hermosa figura, tan deplorable, vestido de loco,
Señor: regálanos tu silencio, tu paciencia, tu perdón cuando nos encon- nuestro hermoso Dios humilde, manso, humillado podemos decir con el
tremos burlados como tú. Regálanos esos hermosos sentimientos que salmo 44, 12ss:
dirigías a tu Padre, cuando nos sintamos aporreados por la vida. Como ovejas de matadero nos entregas, nos haces objeto de burla,
El lector reza el padre nuestro y el avemaría gritos de insulto y de blasfemia, odio y venganza. Nos llegó todo esto
sin haberte olvidado, nos cubres con la sombra de la muerte sin ha-
ber traicionado tu alianza. ¿Es que no te das cuenta Padre de nuestra
• 1° lector situación? Por Ti se nos mata cada día, se nos trata como ovejas de
Salmo 59, 2, 3: Líbrame de mis enemigos, Dios mío, de mis agresores matadero. Despierta ya. ¿Por qué duermes? ¿Por qué ocultas tu ros-
protégeme, líbrame de los agentes del mal, de los hombres sanguina- tro? Nuestra alma está hundida en el polvo. Rescátanos por tu amor.
rios sálvame El lector reza el padrenuestro y el avemaría
El lector reza el avemaría

• 2° lector • 1° lector
Salmo 62, 2, 5, 11: En Dios sólo el descanso de mi alma, de él viene mi Padre junto a tu Hijo coronado de espinas y vestido con túnica de burla
salvación. Hasta cuándo atacaréis a un solo hombre. Doblez sólo colocamos a todos los destrozados por la envidia del Maligno: los locos
proyectan. Su placer es seducir. Con mentira en la boca bendicen, y que deambulan por la calle, los limitados, los enfermos, nuestros ancia-
por dentro maldicen. En Dios solo descansa alma mía. No os fiéis de nos, y todos los rostros de los que ansiosos buscamos tu rostro. No de
la opresión, no os ilusionéis con la rapiña, no apeguéis el corazón a mala gana, Padre, recibamos el dolor, sino con el espíritu manso y de
las riquezas cuando aumenten que de Dios es la fuerza y suyo el perdón que tienen en este instante tu Hijo y la Madre para que al vernos
amor. y servirnos podamos alentarnos con las divinas palabras expresadas en
El lector canta el avemaría y reza Gloria al Padre. Oremos por los tu salmo 2,6: Ya tengo consagrado a mi Rey en el monte santo, y le
más angustiados: Oh Jesús, perdona nuestros pecados, líbranos del fue- digo: tú eres mi Hijo, hoy te he engendrado.
Cantar un avemaría y rezar Gloria. Oremos por los más angustiados: guíe y en ti me darás vida, por tu justicia sacarás mi alma de la an-
Oh Jesús, perdona nuestros pecados, líbranos del fuego del infierno y gustia y por tu amor aniquilarás a los enemigos de mi alma. Yo soy tu
lleva al cielo a las almas ante todo a las más necesitadas de tu divina servidor.
misericordia El lector reza el avemaría

• Organizador o el encargado de anunciar este misterio • 3° lector


Vamos a cantar la última avemaría con júbilo por aquellos que
4° misterio doloroso: TOMA LA CRUZ A CUESTAS: Si como Jesús llevan su cruz y animan a los demás a llevarla como lo
quiere seguirme : Tome su cruz cada día y sígame (Lucas 9,23) Y lle- hizo Él : Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí, llorad por vosotras
vando Él mismo su cruz a cuestas fue caminando hacia el sitio llama- pues si así se trata a la leña verde,¿ cómo será con la seca ? (Lc23,28 y
do el Calvario. (Juan 19,17) siguientes)
Cantar el avemaría y rezar Gloria al Padre Oremos por los más an-
En el camino diario de la vida decimos con el salmo 142, 2 ss: A Yahvé gustiados: Oh Jesús, perdona nuestros pecados, líbranos del fuego del
mi clamor imploro, ante Él derramo mi lamento y expongo mi angus- infierno y lleva al cielo a las almas ante todo a las más necesitadas de
tia: Tú conoces mi sendero, el camino por donde voy lleno de lazos. tu divina misericordia
Nadie me conoce, nadie que cuide mi alma. A Ti clamo y te digo: Eres
mi refugio, mi porción entre los vivos. Atiende mi clamor porque estoy
abatido, saca mi alma de la cárcel te daré gracias y todos los justos
se alegrarán por tu favor para conmigo
• Organizador o el encargado de anunciar este misterio
El lector reza el padrenuestro y el avemaría 5° misterio doloroso: LA CRUCIFIXIÓN
Los hermosos salmos 22, 31 y 69 los oró Cristo y su santa Madre en
• 1° lector la cruz de una manera viva, o sea con hechos y sentimientos. En ellos
se manifiesta una profunda angustia, y al mismo tiempo una fe incon-
Digamos con todos los que están siendo probados las palabras del movible, perdón y comprensión plena. Oremos este hermoso salmo 22
salmo 3,2-4: Padre, cuán numerosos son mis adversarios, cuántos los que comienza con las palabras de Cristo: Dios mío, Dios mío, ¿por
que dicen: No hay salvación para Él en Dios. Pero, Tú, mi Dios, me qué me has abandonado? en que se revela la lejanía de Dios del mun-
ciñes, realzas mi cabeza. El lector reza el avemaría do a causa del pecado.
Con Jesús y con todos aquellos que están pasando momentos muy difí-
ciles, decimos estas palabras del salmo 22: Padre, ¿por qué nos has
desamparado? De día clamamos y no nos respondes, y en la noche
• 2° lector solo silencio. Somos como gusanos y no como hombres. Somos burla
y mofa y nos dicen: Confían en Dios, que Dios los salve. Pero noso-
Acompañemos con el salmo 143,7 ss a aquellos cuya cruz se les vuel-
tros acudimos a Ti, pues Tú nos sacaste del vientre materno, nos con-
ve muy pesada: Respóndeme pronto Yahvé que el aliento me falta, no
fiaste a los pechos de nuestras madres. Desde el vientre de nuestras
me escondas tu rostro pues estoy bajando a la fosa. Haz que sienta tu
madres eres nuestro Dios. No andes por lo tanto lejos de nosotros que
amor en la mañana, dame a conocer el camino a seguir, a ti acudo
para que me enseñes porque tú eres mi Dios. Tu divino Espíritu me
la angustia nos cerca. Te alabaremos porque no has desdeñado nues- lleva al cielo a las almas ante todo a las más necesitadas de tu divina
tra miseria, has oído nuestro clamor y nuestra alma vivirá para Ti. misericordia
El lector rezar el padrenuestro y el avemaría
Por el Papa y La Iglesia peregrina recemos la Salve
• 1° lector
Otro salmo hermosísimo y lleno de confianza que Cristo oró en forma
viva en la cruz, es el salmo 31 en donde se encuentran sus palabras:
Padre, en tus manos encomiendo mi Espíritu.
Vamos pues a orar con el salmo 31: En ti Yahvé me cobijo, no sea
confundido jamás, sé para mí roca de refugio. En tus manos enco-
miendo mi espíritu, pues tú me rescatas. Tú que has conocido mi mi-
seria, y has conocido la angustia de mi alma. Tenme piedad pues su-
fro angustia, sucumbe mi vigor y soy espanto para mis familiares
El lector reza el avemaría

• 2° lector
En este momento supremo de tu angustia decimos con el salmo 31 (30),
15, 16: Pero yo confío en ti Yahvé y digo: Tú eres mi Dios. Está en tus
manos mi destino. Haz que alumbre tu rostro a tu siervo, sálvame por
tu amor. Qué grande es tu bondad
El lector reza el avemaría

• 3° lector
Vamos a cantar la última avemaría después de leer el triunfo de Je-
sús en su prueba más dolorosa según lo narra el salmo 30 (29), 2-6:
Yo te ensalzo, Padre porque me has levantado, Tú has sacado mi
alma del Seol, me has recobrado de entre los que bajan a la fosa. No
permitiste que los enemigos se burlaran de mí pues clamé a ti y me
sanaste. De un instante es tu cólera, de toda una vida tu favor. Salmo-
diad a Yahvé los que le amáis.
Cantar el avemaría y rezar Gloria Oremos por los más angustiados:
Oh Jesús, perdona nuestros pecados, líbranos del fuego del infierno y
• 1° lector
Con la fe que participaremos de este Cristo que entregamos a La
Iglesia triunfante, repetimos con tu salmo 18 (17), 2-7 lo que vivieron
MISTERIOS GLORIOSOS
Jesús y su madre cuando eran peregrinos como nosotros:
Se rezan los domingos y miércoles
Yo te amo Yahvé mi fortaleza, mi roca, mi baluarte que me has
salvado de la violencia. Mi escudo, mi cuerno de salvación, mi
• Organizador altura inexpugnable, mi refugio. Invoco tu nombre y quedo a
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Los Miste- salvo de mis enemigos. Las olas de la muerte me envolvían, los
rios que vamos a meditar son los gloriosos. Pero primero profese-
lazos del seol me rodeaban, delante de mí había trampas de
mos nuestra fe : Creo en Dios Padre Todopoderoso, Creador del
cielo y de la tierra....etc. muerte. Clamé a Yahvé en mi angustia y escuchó mi voz desde
su templo. La tierra fue sacudida y vaciló. Retemblaron las ba-
ses de los montes
• Organizador o el encargado de anunciar este misterio Cantar exultantes el avemaría y luego decir:
1° misterio glorioso: LA RESURRECCIÓN : Vio a Jesús y no
lo reconoció y creyendo que era el jardinero, le dijo : Señor, si tú te lo
has llevado, dime dónde lo has puesto, y yo iré por él. Jesús la llamó: Por los misterios que acabamos de meditar y las divinas palabras
María. Ella lo reconoció y exclamó en arameo: Rabbuni, esto es: Ma- que lo contienen digamos: Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu
estro. Jesús le indicó: déjame por ahora, ya que aún no he subido al Santo. Como era en un principio ahora y siempre por los siglos de
Padre. Vete mas bien a llevar este mensaje a mis hermanos: Subo a los siglos. Amen
mi Padre y a vuestro Padre, a mi Dios y a vuestro Dios. (Juan 20, 14 y si-
guientes)
• Organizador o el encargado de anunciar este misterio
2° misterio glorioso: LA ASCENSIÓN. Los once discípulos se
Con Cristo triunfante de la muerte y el salmo 30 (29), decimos: Yo te encaminaron a Galilea, a la montaña que Jesús les había señalado, y
ensalzo, Padre, porque me has levantado, tú has sacado mi allí al verlo, lo adoraron. Pero algunos dudaron: Jesús entonces de-
alma del seol, me has recobrado de entre los que bajan a la claró a sus discípulos: Me ha sido dado todo poder en el cielo y en la
fosa. No permitiste que los enemigos se burlaran de mí pues tierra. Id pues a hacer discípulos míos a todos los pueblos. Bautizad-
clamé a ti y me sanaste. Yo en mi paz decía: No vacilaré pero los en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo y enseñad-
retiraste tu rostro y quedé conturbado. De un instante es tu cóle- les a guardar todo lo que os he mandado. Y sabed que Yo estoy con
ra, de toda una vida tu favor. Salmodiad a Yahvé los que le vosotros todos los días hasta el fin del mundo (Mateo 28,16 y siguientes)
amáis.
El lector reza un Padre nuestro y tres avemarías
Para celebrar tu ascensión a los cielos decimos con el salmo 24 (23)
¿Quién subirá al monte de Yahvé? ¿Quién podrá estar en su re-
cinto santo? El de manos inocentes y puro corazón. El que a la
vanidad no lleva su alma, ni con engaño jura. Puertas levantad
vuestros dinteles, alzaos puertas eternas para que entre el Rey la muerte. Pero el pobre no quedará olvidado, nunca perderá la
de la gloria. ¿Quién es el rey de la gloria?, Yahvé, el fuerte, el esperanza, el desdichado.
valiente, Yahvé, valiente en la batalla. Puertas levantad vuestros Cantar exultantes el avemaría y decir Gloria al Padre, y al Hijo, y
dinteles, alzaos puertas eternas. al Espíritu Santo. Como era en un principio...
El lector entona el Padrenuestro y el avemaría

• Organizador o el encargado de anunciar este misterio


• 1° lector 3° misterio glorioso : LA VENIDA DEL ESPÍRITU SANTO :
Como iglesia peregrina que sólo en fe conocemos tu triunfo, exulta- Si me amáis, guardaréis mis mandamientos. Yo pediré al Padre
mos junto a ti con las maravillas que proclama el salmo 19: que os dé otro Abogado para que esté siempre con vosotros, el
Los cielos cuentan la gloria de Dios, el firmamento proclama su Espíritu de la Verdad que el mundo no puede recibir, porque ni
grandeza. El día al día comunica su mensaje, la noche a la no- lo ve, ni lo conoce. Vosotros sí lo conocéis porque se queda con
che transmite su noticia. Por toda la tierra se adivinan sus ras- vosotros y en vosotros morará. No os dejo huérfanos. (Juan 14,
gos. En el mar construyó una tienda para el sol y sale como un 15 y siguientes)
atleta a correr su carrera, jubiloso como esposo recién levanta-
do de su cama. Sean gratos ante ti el susurro de mis palabras y Divino Espíritu, reconocemos que Tú eres el que alienta toda vida y
el latir sin tregua de mi corazón te manifiestas de múltiples maneras en la creación. Reconociéndote
El lector reza el avemaría en nuestras manos, en nuestro latir, en nuestra voz, en la fuerza de
nuestros brazos, exultamos sin temor con todas las maravillas que
proclama tu salmo 29.
• 2° lector
El Dios de la gloria truena, es Yahvé sobre las inmensas aguas.
Voz de Yahvé con fuerza. Es Yahvé que desgaja los cedros. Voz
Cristo que entras ante el Padre, nosotros los peregrinos queremos
que lleves ante toda La Iglesia triunfante, lo que tú orabas cuando de Yahvé que afila llamaradas. Voz de Yahvé que sacude desier-
eras peregrino tal como aparece en el salmo 9 y 10, 2-18: tos que estremece encinas. Yahvé da el poder a su pueblo, ben-
Te doy gracias Yahvé de todo corazón. Cantaré tus maravillas, dice a su pueblo con la paz
quiero alegrarme y exultar en ti. Mis enemigos retroceden, pere- El lector reza el padrenuestro y el avemaría
cen delante de tu rostro. Has borrado su nombre para siempre.
Pero Yahvé se sienta para siempre, es refugio para el oprimido,
ciudad fortificada en tiempos de angustia. En Ti confíen los que
saben tu nombre, pues Tú, Yahvé, no abandonas a los que te • 1° lector
buscan. Ten piedad de mí, mira mi aflicción. Tú eres el que me Ven creador Espíritu de los tuyos la mente a visitar, a encender
recobras de las puertas de la muerte para que yo cuente gozoso en tu amor los corazones que de la nada te gustó crear. Dios te
tu salvación. Van los impíos al seol, los que se olvidan de Dios a salve María etc.
Tú, promesa magnífica del Padre que el torpe labio vienes a sol- va radiante de gloria, recamada de oro y entre brocados es lle-
tar, con tu luz ilumina los sentidos, los afectos inflama con tu vada al Rey. Tras ella va un coro de vírgenes doncellas, danzan-
amor. Dios te salve María etc. do alegres, primorosas y bellas. Los pueblos todos honrarán tu
Con tu fuerza invencible fortifica la corpórea flaqueza y corrup- historia.
ción. Dios te salve María etc. El lector reza el padrenuestro y el avemaría
Lejos expulsa al pérfido enemigo. Danos pronto tu paz. Dios te
salve María etc. • 1° lector
Con el salmo 18, 21-28 digamos: Yahvé me recompensa conforme
a mi justicia, me paga conforme a la pureza de mis manos, por-
• 2° lector que he guardado sus caminos, he sido ante Él irreprochable.
Siendo Tú nuestro guía toda culpa logremos evitar. Dios te salve Yahvé es piadoso con el piadoso, intachable con el que no tiene
María etc. tacha, con el puro es puro y con el ladino es sagaz. Yahvé salva
Dénos tu influjo conocer al Padre. Denos también al Hijo cono- al humilde y abate a los altaneros. Virgen Madre, alégranos jun-
cer y en Ti, del Uno y Otro, Santo Espíritu creer. Dios te salve to a ti.
María etc. El lector reza el avemaría
Lava todo lo manchado, riega lo que es árido, sana lo que sufrió
golpe mortal, doblega lo que es rígido, calienta lo que es gélido, • 2° lector
lo descarriado ven a gobernar. Dios te salve María etc. Gloria al Virgen madre que entras a la gloria decimos con el salmo 16, 5 ss:
Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en un principio etc. Yahvé la parte de mi herencia, me asignas un recinto de deli-
cias, mi heredad es primorosa para mí. Por eso se me alegra el
corazón, mis entrañas retozan, y hasta mi carne en seguro des-
• Organizador o el encargado de anunciar este misterio cansa, pues no has de abandonar mi alma al seol, ni dejarás a
4° Misterio glorioso: LA ASUNCIÓN ¿Quién es Ésta que va tu amigo ver la fosa. Me enseñarás el camino de la vida, hartu-
subiendo cual aurora naciente, bella como la luna, brillante como el ra de goces delante de tu rostro, a tu derecha delicias para
sol, terrible como un ejército formado en batalla ? (Cantar de los siempre.
Cantares 6, 10 y siguientes) Cantar jubilosos un avemaría y luego decir:

Llenos de gozo por tu alegría decimos al que te colmó de bienes:


Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en un
Virgen madre con el salmo 45, 11 ss decimos: principio etc.
Hija, mira y a mí tu oído inclina, deja el amor de tu padre y na-
ción, que el Rey está prendado de tu esplendor. Él es tu dueño,
pon tu alma en sus manos que los pueblos vendrán con dones • Organizador o el encargado de anunciar este misterio
soberanos y los poderosos esperan de ti su favor. La Hija del rey
5° misterio glorioso: LA CORONACIÓN DE MARÍA
COMO REINA DE LO CREADO. Un gran portento apareció en el
cielo: Una mujer, cubierta por el sol, apoyadas sus plantas en la • 2° lector
luna, coronada su sien con doce estrellas... dio a luz un varón... y a Con el salmo 48 (47), 12 ss decimos:
la mujer le fueron concedidas dos alas de águila potente para em- El monte Sión se regocija, exultan las hijas de Judá a causa de
prender el vuelo a su refugio en el desierto. (Apocalipsis 12, 1 - 5, y 14). tus juicios. Andad por Sión, corred en torno de ella, enumerad
sus torres, recorred sus palacios para contar a la edad venidera
Contigo Virgen Madre, después del Cristo, la más sencilla, la de que así es Dios, nuestro Dios por los siglos de los siglos, Aquel
ojos claros y limpios como los del Niño que tuviste en los brazos, que nos conduce.
la desapercibida, la obediente como el Hijo, la casta sin concupis- Cantar el avemaría con júbilo
cencias, la del perdón y la angustia como el Cristo postrado, la Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en un princi-
del amor y comprensión a toda criatura con generosidad sin lími- pio....
tes junto a tu Hijo en la cruz, te proclamamos reina y decimos
Pidiendo por el Papa y por toda La Iglesia peregrinante recemos la sal-
con el hermoso salmo 103 que con frecuencia orabas: ve.....
Bendice, alma mía, al Señor, no olvides sus muchos beneficios.
El perdona todas tus culpas, cura tus dolencias, rescata tu vida
de la fosa. Te colma de amor y ternura. Otorga el derecho a los
oprimidos, señaló el camino a Moisés, es tardo a la cólera y lle-
no de amor. No guarda rencor, aleja de nosotros nuestras rebel-
días. Es tierno como un padre con sus hijos y sabe de qué esta-
mos plasmados, se acuerda que somos polvo. El hombre pasa
como flor del campo, como un soplo ya no existe. Pero el amor
de Dios es de siempre y para siempre para los que le temen.
Bendigamos a Dios en todas sus obras y en todos los lugares.
El lector reza el Padre nuestro y el avemaría

• 1° lector
Desde siempre reina porque estabas junto al Rey y le decías en-
tregada con el salmo 23:
Eres mi Pastor, nada me falta, me apacientas con frescura y re-
poso en tu agua fresca. Me guías con justicia y no me dejas caer
por amor a tu nombre. Aunque caminé por valle tenebroso, nun-
ca tuve miedo pues Tú estabas junto a mí
El lector reza el avemaría

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