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de contraerse y de relajarse.
El cuerpo humano está compuesto por unos 650
músculos distintos y se caracterizan por adaptarse con
gran facilidad.
Existen distintas formas de clasificar a este músculo,
algunas de ellas son:
Esqueléticos.
Lisos.
Cardíacos.
Músculos Esqueléticos
Estos músculos, junto con los tendones, son los que
mantienen unido al esqueleto.
Gracias a estos músculos, el cuerpo adquiere forma y sus
movimientos pueden ser controlados por el individuo.
Permiten llevar a cabo la función locomotora y se destacan
por contraerse rápida y velozmente.
De los 650 músculos que componen el cuerpo humano,
unos 600 entran dentro de esta categoría, y se ubican
principalmente en los brazos, pecho, piernas y abdomen.
También se los conoce bajo el nombre de voluntarios,
puesto que el individuo los mueve voluntariamente.
Músculos Lisos
Estos músculos están compuestos de células lisas,
largas y angostas y se ubican en los órganos internos
(como intestinos y estómago) y vasos sanguíneos.
Estos músculos son controlados por el sistema
nervioso autónomo, y no por el individuo, es por esto
que también se los conoce bajo el nombre de
involuntarios.
Funcionan de forma similar a los esqueléticos, el
tiempo que tardan en contraerse es mayor y no se
agotan tan fácilmente.
Músculos Cardíacos
Estos músculos son los responsables de que el corazón
puede llevar a cabo las contracciones que permiten
transportar la sangre fuera de este órgano.
Además recubren sus paredes y se caracterizan por
tener una estructura estriada.
Tamaño, forma y ubicación
Largos: son potentes, largos y angostos y pueden ser
tanto planos como fusiformes. El bíceps y el recto del
abdomen son algunos ejemplos.
Cortos: su longitud es muy corta, sin importar su
forma. Estos músculos se ubican por ejemplo en la cara
y cabeza.
Anchos: estos músculos se caracterizan por tener
todos sus diámetros similares. Suelen ser angostos y
con forma aplanada. Un ejemplo es el dorsal ancho de
la espalda
Orbiculares: tienen formas circulares. Son aquellos
que por ejemplo se ubican en la lengua y párpados.