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Posición de las obras de toma en relación

con los niveles en el vaso


• Con el objeto de obtener la capacidad de descarga necesaria, la toma

debe colocarse a una distancia mínima abajo del nivel de operación del
vaso, para poder disponer de la carga necesaria para la circulación en la
obra de toma.

• En las presas que se almacena agua para riego, uso doméstico, o para

la conservación de elementos naturales, las obras de toma deben


colocarse lo suficientemente bajas para vaciar todo el espacio destinado
al almacenamiento; sin embargo, se pueden colocar a una altura algo
mayor que la del techo del rio, lo que depende de la elevación mínima
establecida para el almacenamiento en el vaso.
Posición de las obras de toma en relación
con los niveles en el vaso
• Como se acostumbra a dejar un espacio en el vaso

inactivo para el depósito de sedimentos, en este caso la


posición del umbral de entrada adquiere mucha
importancia, porque debe tener la altura necesaria para
evitar interferencia en los depósitos de sedimentos, pero
al mismo tiempo debe estar lo suficientemente baja que
permita un vaciado parcial o completo debajo de la
superficie superior del almacenamiento inactivo.
Posición de las obras de toma en relación
con los niveles en el vaso
• El tamaño de la salida de un conducto para una descarga

dada, varía de acuerdo con una relación inversa con la


carga disponible para efectuar la descarga:

𝑸𝟐
𝑯𝑻 = 𝑲𝟏 𝒉𝒗 𝒐 𝑯𝑻 = 𝑲𝟐 𝟐
𝒂
• HT: carga total disponible para producir la circulación

• Q: descarga que debe producir la obra de toma

• A: área necesaria del conducto


Posición de las obras de toma en relación
con los niveles en el vaso
• En la fig. 247 (A), se ilustra la relación anterior en un proyecto determinado. Si
la carga útil para la obra de toma se aumenta de 1.6(A) a 4.6(B), el diámetro
correspondiente del conducto se puede disminuir de 6’ a 4.75’.
Lo que demuestra que el tamaño del conducto se puede disminuir en forma
considerable si se aumenta el nivel del espacio de almacenamiento inactivo.
• La reducción de la capacidad del espacio activo que resulta al aumentar el
nivel del inactivo 3’, tendría que compensarse añadiendo una capacidad
equivalente al nivel superior del embalse.
• Así, se pueden emplear estudios económicos para determinar el tamaño
adecuado de la salida, en relación con el nivel mínimo de almacenamiento.
Condiciones que determinan la forma del proyecto

La forma que puede tener una obra determinada depende de:

• Requisitos hidráulicos

• Adaptabilidad del lugar

• Relación recíproca entre obra de toma y los procedimientos

de construcción.

• Otras construcciones auxiliares del aprovechamiento.


Condiciones que determinan la forma del proyecto

• Por ejemplo, la disposición de la obra de toma y del vertedor puede


arreglarse de manera que las descargas de ambas estructuras se
hagan a un estanque amortiguador común (Fig. 248). En esta
instalación la entrada de la toma rodea la entrada de la torre para el
vertedero, y el tubo de la toma se extiende a lo largo de la parte
superior del conducto vertedor y descarga en este último a alguna
distancia debajo de la entrada del vertedor.
• La topografía y la geología de un lugar pueden tener una gran
influencia en la selección del sistema. Algunos lugares pueden
resultar adecuados para construir un conducto enterrado para la obra
de toma, mientras que en otros, se puede utilizar tanto una estructura
de estas como de un túnel.
Condiciones que determinan la forma del proyecto
• Cuando la geología de la cimentación es desfavorable, como las capas
gruesas de materiales sueltos o de roca de calidad inferior, puede impedir la
selección de un sistema en que se emplee un túnel. Por otra parte, los
lugares ubicados en cañones angostos con laderas empinadas pueden
imponer el túnel como única solución para la obras de toma.
• Algunos lugares que son favorables para una obra de toma de túnel tienen
condiciones desfavorables para los portales, lo que dificulta hacer las
conexiones entre las estructuras de entrada y de salida con el resto de la
obra de toma. En este caso, puede constituir una solución con tramo central
de túnel con dos extremos de conducto enterrado (Fig. 244).
Condiciones que determinan la forma del proyecto

• La obra de toma para una presa baja, ya sea para derivar el

agua a un canal o para dejarla correr por el rio, con frecuencia,

puede consistir en un canal abierto o en un conducto enterrado

colocado en la ladera de la presa.

• Cuando la obra de toma se va a construir a través del terraplén

de una presa de tierra, se puede usar una estructura del tipo

cerrada, que puede consistir de unidades sencillas o múltiples

de tubo enterrado o de cajo (Fig. 240).


Condiciones que determinan la forma del proyecto

• En las presas de tierra más altas, en las que no sería posible emplear

una obra de toma de canal abierto, la salida puede llevarse a través,

debajo o alrededor de la presa, como conducto enterrado, o a través

de la ladera como un túnel. Según la posición que tenga el mismo de

control, el conducto o túnel puede trabajar como canal abierto,

trabajar a presión en algún tramo de su longitud, o trabajar forzado

en toda su longitud.
Condiciones que determinan la forma del proyecto

• Según el método de control y las condiciones de funcionamiento


hidráulico de la estructura, el acceso para la operación de las
compuertas puede ser por un puente a una torre de toma aguas
arriba, por un pozo al nivel de la corona de la presa, por una
banqueta dentro del conducto o túnel con entrada por el extremo de
aguas abajo, o por un conducto separado o túnel de acceso.
(Instalaciones típicas Figs. 241 a 244).
• En las presas de concreto, la instalación de las obras de toma se
hace generalmente a través de la presa formando en ella un
conducto o canal de descarga o con un tubo ahogado en la masa de
concreto.

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