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Jesús el Logos

Juan 1:1 ‘’ En el principio era el Verbo, y el


Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.’’
Aparece también en 1 Juan 1:1 y Apo. 19:13
El término griego “LOGOS”
Fue una palabra conocida y familiar en las discusiones filosóficas del
tiempo de Juan, tanto como es entendido en estas discusiones y como el
significado natural de la palabra misma. Ella expresa en forma apropiada
la verdad que Jesucristo es el gran revelador del Padre. Juan lo expresa en
otra parte así: “A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo,
que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer.” (Juan.
1:18)
Jesús el Logos
El titulo de logos es exclusivo de Juan en el
Nuevo Testamento.
El título de λoγος es predominante en la
cristología clásica de la Iglesia antigua. No
solo aparece en el evangelio de Juan, sino
que se puede encontrar escasamente en el
N.T. en 1 Juan 1:1 y Apocalipsis 19:13
EL LOGOS EN JUAN
Juan, lo introduce en el evangelio para hablar de la relación
que existe entre la revelación de Dios en la vida de Jesús y la
pre existencia de Jesús. En el evangelio de Juan entendemos
a Jesús revelando al Padre en sí mismo, por antonomasia
Jesús es el Padre, por lo tanto, así como el Padre es Dios,
Jesús es Dios.
EL LOGOS EN JUAN
En el evangelio de Juan vemos las funciones ulteriores de
Cristo, aquel de quien dice que estaba “en el principio con
Dios”. Juan lo describe como aquel cuya vida en “carne” es
el centro de toda la historia de la salvación y de la
revelación misma de Dios. Jesús el verbo es el apocalipsis
mismo de Dios
EL LOGOS EN JUAN
En el Antiguo Testamento se escribe: “En el principio
creó Dios los cielos y la tierra” y Juan escribe así
también “En el principio existía la Palabra (Logos) y
todas las cosas fueron hechas por ella”. Ofreciendo
así el nuevo Génesis.
EL LOGOS EN JUAN
En el Antiguo Testamento se escribe: “En el principio
creó Dios los cielos y la tierra” y Juan escribe así
también “En el principio existía la Palabra (Logos) y
todas las cosas fueron hechas por ella”. Ofreciendo
así el nuevo Génesis.
EL LOGOS EN EL HELENISMO
El logos aparece por vez primera en Heráclito, reaparece
en los escritos especialmente en el estoicismo, en donde
es concebido como una ley suprema del mundo. Por tal
razón cuando hablan del logos lo interpretan como alma
impersonal y panteísta de este mundo, siendo
todo lo contrario al logos de Juan.
EL LOGOS EN EL JUDAÍSMO
Con bastante frecuencia el Antiguo Testamento presenta el acto creador
como la palabra de Dios (Gn.1, 3; Sal. 32:9;); a veces parece atribuir a la
palabra acción por sí misma, aunque no independiente de Yahvé
(Is.55:11; Za.5:1-4; Sal.106:20; 147:15).
En el rabinismo palestino la Palabra (Memra) es mencionada a menudo,
al menos en los Tárgumes: es el Memrá de Yahvé que vive, habla, y
actúa; sin embargo, si se procura determinar en forma precisa el
significado de la expresión, frecuentemente aparenta ser solo una
paráfrasis por la que el targumista sustituye el nombre de Yahvé.
LA IDEA DEL LOGOS APLICADA A JESÚS
En el evangelio de Juan el título Logos se atribuye a Jesús sólo en el
prólogo. Ese título no se encuentra en otra parte. En los escritos
primitivos del cristianismo, Ignacio de Antioquia es el único que lo
emplea sin un influjo directo del evangelio de Juan.

La identificación del Logos con Jesús sólo ha podido producirse


después de su muerte, lo mismo que la aplicación a Jesús del
título tan importante como Kyrios. La atribución a Jesús del
título Logos es fruto de una reflexión teológica.
LA IDEA DEL LOGOS APLICADA A JESÚS
La “palabra” (logos) de Jesús, es decir, la palabra que él ha anunciado
desempeña en todo el evangelio de Juan un papel importante. Jesús aporta
luz, vida, y verdad porque él mismo es la Luz la Vida la Verdad. Lo mismo
sucede en relación con al Logos: trae la palabra, porque él mismo es la
Palabra
El logos que Jesús proclama es al mismo la revelación eterna
de Dios. La palabra de Dios que se identifica con el logos
predicado por Jesús, es la verdad (Jn.17:17) Jesús mismo es la
verdad en persona. (Jn.14:6)
LA IDEA DEL LOGOS APLICADA A JESÚS
Juan no trata de un Logos estoico abstracto, ni del Logos mitológico; sino de
un Logos que se hace carne (hombre) y que justamente por eso es el Logos.
Juan acepta afirmaciones relativas al Logos, tomadas no solo del A.T. sino del
helenismo. Los griegos hablan del Logos sin conocerle porque ellos
desconocían al Logos hecho carne.
Solo podremos hablar del Logos cuando hablamos de la acción del
Logos. Así el prólogo de Juan pasa rápidamente a la acción de del Logos:
“Todas las cosas fueron hechas por él”. Dios se revela primero en la
creación. Jesús vive la palabra de Dios a la vez que la anuncia: él mismo
es la palabra de Dios
LA IDEA DEL LOGOS APLICADA A JESÚS

Dios se ha revelado en la vida de Jesús. Dios se ha


hecho visible en la persona de Jesús, un ser
humano. “Habito entre nosotros”.

Bendiciones!

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