El ser humano es la única criatura que ha de ser
educada. Distinción entre hombre y animal
La educación (definición) comprende los cuidados, la
disciplina y la instrucción.
Cuidado: precauciones de los padres para que los niños
no hagan un uso perjudicial de sus fuerzas. A diferencia de los animales que no requieren cuidado en sentido estricto.
Disciplina: elemento que convierte la animalidad en
humanidad. Ideas centrales
El animal es tal por su propio instinto y se guía por él. Por el
contrario, el hombre posee una razón que le permite formar su propia conducta.
Pero la educación no la puede sacar el hombre de sí
mismo y por tal razón necesita que otros le enseñen.
El género humano en tanto género debe sacar de sí mismo
las disposiciones propias de su género. No obstante el hombre ha caído en la barbarie.
Análisis de cita: “La disciplina impide que el hombre,
llevado por sus impulsos animales, se aparte de su destino, de la humanidad”. Análisis de cita: “la disciplina es meramente negativa, esto es, la acción por la que se borra al hombre la animalidad; la instrucción, por el contrario, es la parte positiva de la educación”. (¿Es la animalidad algo que debe ser borrado?)
Para no “caer en la barbarie” (estar con independencia
de la ley) es necesario someter al niño a la disciplina. Los niños son enviados a la escuela no solo para que aprendan sino para que se habitúen a permanecer tranquilos y hacer lo que se les ordena. (discusión, Chávez, Hitler) El hombre tiene una inclinación natural a la libertad, y por eso hay que disciplinarlo para que no siga sus caprichos. (¿qué noción de libertad maneja Kant?)
Si no disciplina al niño cuando es pequeño, será muy
difícil cuando sea grande.
Parece que Kant sostiene que existe en el ser humano
una inclinación hacia la libertad pero que esta libertad no es “noble” en los “salvajes” al servicio de los europeos, ellos poseen más bien una inclinación a la barbarie. Hay que acostumbrar al niño a que siga los preceptos (mandatos) de la razón.
No se puede dejar al niño “ a su voluntad” pues esto
hace que permanezca en él la barbarie.
Tampoco le sirve de nada ser mimado pues se frustrará
cuando intervenga en los asuntos del mundo.
Extraño argumento del canario y los gorriones.
Por medio de la educación el hombre llega a ser
hombre Los hombres son educados por otros hombres educados. Si hay deficiencias en la educación de los últimos y estos tampoco logran disciplinar a sus estudiantes, entonces, habrá que decir, según Kant, que son malos educadores.
Extraña conjetura sobre un ser superior que puede ser educado. Según Kant, esta hipótesis nos permitiría ver el alcance de la educación.
Como la educación educa y enseña, no se puede saber hasta dónde
llegan las disposiciones del hombre.
Kant demanda un experimento para determinar las disposiciones
naturales del hombre.
Los poderosos no piensan sino en sí mismos y no les interesan “los
laboratorios” de la educación. (casos colegios experimentales) Kant cree que estos experimentos harían que el hombre se acerara un poco más a la perfección.
Análisis de cita: “La falta de disciplina es un mal mayor que
la falta de cultura; ésta puede adquirirse más tarde, mientras que la barbarie no puede corregirse nunca”.
Tras la educación está el gran secreto de la perfección de
la naturaleza humana.
Positivismo kantiano: La naturaleza humana se
desenvolverá cada vez mejor por medio de la educación que será, de acuerdo con Kant, cada vez mejor. Entre otras cosas, este modelo “progresista” de la educación hará al ser humano más “dichoso”. Hay que establecer un proyecto de una teoría de la educación así sea un irrealizable o (tal vez) inacabable.
Una teoría de la educación tiene un cierto carácter
prescriptivo y normativo. Resulta ser un ideal, así no se ejemplos ejemplos en la experiencia. ¿cómo sería una educación perfecta?
Si la idea de una educación perfecta es exacta, tal vez
[Serie Textos (Centro de Estudios de la Realidad Colombiana (Bogotá Colombia)) no. 6] Sideri, S._ Jiménez, Margarita - Historia del desarrollo regional en Colombia (1985, CIDER, Fondo Editorial CEREC)