INGENIERÍA MECÁNICA Y ELÉCTRICA

Turbomáquinas Aplicadas
Ciclo : VII
Semestre : 2019 – II
Docente : Ing. Roger Silva Mares

Semana 2
Sesión 3
 Teoría de las
Turbomaquinas
Hidráulicas
Ecuaciones básicas para el estudio de las Turbomaquinas

Para el estudio de las Turbomaquinas

hidráulicas es necesario recurrir a tres
ecuaciones de la mecánica de fluidos:

Ecuación de continuidad

Ecuación de Bernoulli

Teorema del impulso

 Ecuación de Continuidad

Corresponde a la conservación de la materia en un

flujo, y es una de las ecuaciones fundamentales del
flujo de fluidos, por lo que debe cumplirse siempre.
Considerando un tubo de corriente limitado por dos

secciones cualesquiera, S1 y S2 perpendiculares al

flujo, se puede escribir como:
Es decir, la masa de fluido que atraviesa la sección
S1 por unidad de tiempo es igual a la que atraviesa la
sección S2 por unidad de tiempo.
Considerando que el flujo másico se puede expresar
como el producto de la densidad por el caudal, la
ecuación anterior, puede escribirse también como:

Sobre esta ecuación general, se puede hacer otra

simplificación. En el caso particular de que se trate
de un mismo fluido incompresible, 1  2, se tendrá:
A su vez, el caudal volumétrico puede expresarse como el
producto de la velocidad media por la sección perpendicular
al flujo, quedando entonces:

Resulta evidente que la velocidad media en un flujo

incomprensible es inversamente proporcional a la
sección.
 Ecuación de Bernoulli
Esta ecuación muestra la conservación de la energía mecánica
en un flujo, y es la segunda ecuación fundamental del flujo de
fluidos.
Para un flujo incompresible y en ausencia de rozamiento, se
puede escribir:

Que representa que la suma de la energía de presión, más

la energía potencial, más la energía cinética, del fluido, se
conserva.
La ecuación anterior está expresada en unidades de alturas
de fluido. Dependiendo de su aplicación, puede expresarse en
otras unidades. En el caso concreto de máquinas de fluidos,
suele ser útil trabajar en unidades de potencia, para lo cual
sólo hay que multiplicar todos los términos por la densidad, la
gravedad y el caudal (·g·Q).
Además, se debe notar que en esta ecuación, 𝜶𝟏 y 𝜶𝟐 son
factores de corrección para la energía cinética, teniendo en
cuenta que se emplean valores de velocidad media para
evaluarla. Sin embargo casi nunca son considerados debido a
que es muy difícil determinarlos.
En un flujo real, cuando se pierde energía por rozamiento
(fricción), es necesario añadir un término para considerarla.
De esta forma, la ecuación queda:

Donde el valor de f es calculado mediante en diagrama de Moody

Diagrama
de Moody
Si, además, entre S1 y S2 hay máquinas de fluidos, generadoras
(que aportan energía al fluido) o motoras (que toman energía
del fluido), habrá que considerarlas en un término adicional:
 Teorema del Impulso o de la Cantidad de Movimiento

El teorema del impulso o de conservación de la cantidad de

movimiento en un flujo, es la tercera ecuación fundamental del
flujo de fluidos.

Se deriva de la segunda ley de Newton, es una ecuación

vectorial, por lo que para evaluarla hay que descomponerla en
sus componentes ortogonales, y sirve para determinar la fuerza
que ejerce un fluido sobre un conducto o viceversa.

De forma general, se puede enunciar como que la aceleración

que experimenta un flujo entre dos puntos (o, por decirlo de otro
modo, la variación de su cantidad de movimiento) se debe a la
resultante de las fuerzas externas que actúan sobre dicho flujo.
Tomando las dos secciones 1 y 2 como en los casos
anteriores, se puede escribir de forma simplificada:

Generalizando, para considerar todas las fuerzas

externas, se puede escribir:
Para poder hablar propiamente de fuerzas “exteriores”, es
necesario definir como está conformado el sistema.
En este caso, el sistema lo constituye el fluido, limitado por
las secciones S1 y S2 y el conducto por el que fluye.
El conducto es exterior al sistema.
Se produce aceleración del flujo, tanto cuando cambia el
módulo de la velocidad media entre el punto 1 y el punto 2,
como cuando cambia la dirección (cambian los módulos de
cada una de las componentes)
La Figura muestra la aceleración en estas
dos situaciones, que se podrían asimilar a
la presencia de un estrechamiento en la
conducción (o una boquilla, cambio del
módulo de la velocidad) y a la presencia
de un codo (cambio en la dirección).
En ambos casos se produce una fuerza.
La ecuación se emplea para estimar la
fuerza que ejerce el fluido sobre el
conducto, o viceversa, considerando
todas las fuerzas exteriores al sistema,
entre la que se incluye la que ejerce el
sólido sobre el fluido.
Sirve para cualquier situación en que se
produzca contacto entre un flujo de fluido
y un sólido
Para determinar la fuerza F que
ejerce el fluido sobre el sólido (la
conducción en este caso), hay que
considerar todas las fuerzas
exteriores que se ejercen sobre el
sistema (el fluido, representado por
la zona sombreada).
Las fuerzas exteriores que se
consideran son las siguientes:
el peso del fluido (G), la presión que
ejerce el resto del fluido sobre la
sección 1 (p1·S1), la presión del
fluido sobre la sección 2 (p2·S2), y la
que ejerce la conducción sobre el
fluido (–F).
Ecuación Fundamental
de las Turbomáquinas:
Ecuación de Euler
La ecuación de Euler se deduce a partir del teorema del
impulso .
Considerando cómo se han definido las velocidades del
fluido anteriormente (triangulo de velocidades), es
necesario adaptar la ecuación a la nomenclatura usada
cuando se trabaja con movimientos relativos. Por tanto,
se puede escribir:
Donde, las presiones empleadas son presiones relativas, y
F representa la fuerza ejercida por el fluido sobre el
conducto, entre las secciones 1 y 2, es decir, sobre el
rodete (álabe) al atravesarlo.
En la mayor parte de las situaciones, y en su aplicación a
turbomáquinas en particular, el peso del fluido comprendido
entre las secciones 1 y 2 es despreciable frente al resto de
las fuerzas, de modo que la ecuación se puede simplificar
a:
La fuerza F es precisamente la que produce el intercambio de
energía entre el fluido y la turbomáquina.
En turbomáquinas, lo más habitual es hablar de potencias. La
fuerza F está relacionada con la potencia de propulsión,
también conocida como potencia técnica, Pt, que se obtiene
del producto escalar del vector fuerza por el vector velocidad
lineal de desplazamiento del rodete:

La expresión de la fuerza, se puede separar en dos términos, uno

de ellos relacionado con la sección 1 y el otro con la sección 2.
Lo mismo se puede decir de la velocidad lineal de
desplazamiento del rodete, que es diferente en la sección 1 y 2.
Donde los términos entre paréntesis corresponden a los
productos escalares de los vectores correspondientes.
Los vectores S1 y S2 tienen dirección radial, por lo que son
perpendiculares, respectivamente, a las velocidades u1 y
u2, de modo que su producto escalar se anula. Así, la
ecuación se simplifica a:
Recordando el triangulo de velocidades

Además de potencia técnica, es bastante común hablar, en

máquinas de fluidos, de trabajo técnico (específico, Wt), y
de par motor (Mt). Para el trabajo técnico, la expresión
queda: