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•Introducción a la unidad
•El docente en el salón de clase
•El docente en la comunidad
•Cierrede la unidad
Referencias bibliográficas
Bienvenidos y bienvenidas a la cuarta unidad:
Por lo tanto, el desarrollo de sus funciones debe concebirse desde un punto de vista
teórico filosófico que obligue al docente a reflexionar y dimensionar su papel como
agente de transformación que rompe las paredes del aula y de la escuela para
situarse como puente con la comunidad y los padres, promoviendo el sentido de
corresponsabilidad en la construcción de ciudadanos que participen en su contexto
social y cultural. Así pues, no puede haber replanteamiento curricular adecuado a las
circunstancias de los estudiantes sin modificar el rol del docente.
En la unidad 1 abordó las seis líneas de política pública que propone la Nueva Escuela
Mexicana (NEM), por lo que ya cuenta con algunos elementos que le permiten vislumbrar
la función del docente dentro del salón de clase como un facilitador que más allá de la
apropiación de contenidos favorece el desarrollo de la habilidad de aprendizajes
permanentes.
Es necesario comprender que los procesos cognitivos son determinados por las condiciones
sociales. El aprendizaje situado es una forma de dar significado desde las actividades
cotidianas, mismas que se llevan a cabo en la vida diaria. En este sentido nada sucede sin
un contexto en el que tanto los alumnos como el docente están inmersos; son sujetos
activos y, sobre todo, transformadores de ese contexto.
La escuela se concibe entonces como un espacio social del conocimiento desde donde el
docente se desempeña y contribuye al proceso de intercambio colectivo. El docente desde
el aula distingue necesidades del entorno y establece líneas de acción, trabaja con
situaciones de aprendizaje reales en las que proporciona los recursos tanto intelectuales
como socio emocionales para que el estudiante desarrolle conocimientos, habilidades,
destrezas y capacidades. El docente es un estratega que, a partir de planear su
intervención, diseña andamiajes que se componen como un sistema de apoyo para que el
alumno construya su aprendizaje.
Entendemos el andamiaje como una aproximación didáctica para que el alumno desarrolle su
capacidad, mediante la planeación por parte del docente de elementos que constituyen una tarea a
resolver.
“Según Vigotsky, en el proceso de aprendizaje se constatan dos niveles de desarrollo: el actual, que
representa lo que el aprendiente sabe, y el potencial, que representa lo que este puede llegar a saber.
En su teoría, acuña el término zona de desarrollo próximo (ZPD) con el que hace referencia a un grado
de conocimiento que se halla un nivel inmediatamente por encima de aquel que el aprendiente posee
en un momento determinado. Según esta teoría, el aprendizaje es más eficaz cuando el aprendiente
trabaja con otra persona; a través de la interacción, el aprendiente construye su conocimiento y
puede progresar del desarrollo actual hacia el potencial”.2
Este es uno de los primeros puntos en los que le invitamos a reflexionar sobre su futuro papel como
docente de Educación Media Superior (EMS). ¿Cómo lo concibe, como aquel que transmite
conocimiento, quien propicia el aprendizaje o el que crea condiciones para el aprendizaje?
El docente además de establecer un diálogo permanente con el alumno de EMS tiene como tarea
favorecer el aprendizaje autorregulado. En palabras de Schunk (1994), “sólo puede denominarse
autorregulado aquel aprendizaje en el que los sujetos autogeneran sus propias actuaciones,
sistemáticamente encaminadas a alcanzar las metas de aprendizaje formuladas o elegidas”.
Cabe señalar que trabajar para el desarrollo del aprendizaje autorregulado es muy importante la
metacognición. Frente a los entornos cambiantes que día a día enfrentan nuestros alumnos es
innegable la necesidad de acompañarlos en el desarrollo de habilidades de tipo superior. Trabajamos
la metacognición cuando nuestro alumno toma consciencia de lo que aprende más allá de los
A esta altura del camino es necesario hacer otra pausa y reflexionar: ¿puedo como docente fomentar el
desarrollo de habilidades que no poseo o principios éticos y morales con los que no concuerdo?
Uno de los elementos que influyen de forma determinante en el aprendizaje desde lo social es la observación de
otras personas y de la influencia de sus actos en el entorno; bajo este supuesto el profesor se convierte en un
modelo a seguir que en gran medida, de forma involuntaria, influye y permea las conductas, creencias y formas
de relación del estudiante. Como docente se hace obligada la reflexión en torno al peso de su vínculo con los
alumnos y sobre todo de las prácticas que lleve a cabo en el aula.3
¿Sabe cuál es el perfil del docente de EMS que plantea la Nueva Escuela
Mexicana?
Se reconoce como personal docente al profesional que asume
ante el Estado y la sociedad la corresponsabilidad del
aprendizaje de los educandos en la escuela, considerando sus
capacidades, circunstancias, necesidades, estilos y ritmos de
aprendizaje y, en consecuencia, contribuye a los procesos de
enseñanza y aprendizaje, como promotor, coordinador, guía,
facilitador, investigador y agente directo del proceso educativo.
El perfil del docente se compone de seis dominios, de los cuales
derivan los criterios e indicadores deseables para el docente de
la Nueva Escuela Mexicana
Por otra parte, es necesario favorecer la formación de los estudiantes en las distintas dimensiones de desarrollo
(académica, emocional-afectiva, cuidado y consciencia físico-corporales y responsabilidad social) a través del currículum
fundamental y el ampliado. Por tanto los contenidos son un recurso más; el docente tiene que encaminar su labor a
acciones que propicien en un primer momento cambios en las mentalidades y en los ambientes escolares sin dejar de lado
que conoce la unidad de aprendizaje curricular asignada, los vínculos con otras y es a partir de la concepción de esta red de
conocimientos interrelacionados y de las características de los estudiantes que promueve los aprendizajes.
3 Contreras, J., y Sepúlveda, C. (2015). El modelaje como fuente de aprendizaje. Disponible en Centro Recursos VALORAS:
www.valoras.uc.cl
4 SEP. (2019). La Nueva Escuela Mexicana: principios y orientaciones pedagógicas. SEP/SEMS. P. 15.
Como puede observar el proyecto de la Nueva Escuela
Mexicana tiene como una de sus bases el humanismo.
Como señala Arteaga, “la NEM asume la educación desde el humanismo, base filosófica
que fundamenta los procesos del Sistema Educativo Nacional, permitiendo desde ella
establecer los fines de la educación y los criterios para nuevas formas de enseñanza y
aprendizaje; así como para vislumbrar nuevos horizontes de avance social, económico,
científico, tecnológico y de la cultura en general, que conducen al desarrollo integral del ser
humano en la perspectiva de una sociedad justa, libre y de democracia participativa”.5
Desde esta postura del nuevo humanismo se sitúa a los estudiantes en el centro del
proceso educativo; son concebidos como seres integrales, en constante cambio e
influenciados por el contexto interpersonal. Esta visión nos obliga a considerar la
colectividad y la individualidad como un binomio indisoluble. En la colectividad se
establecen vínculos e interacciones para los que son necesarios el reconocimiento y
respeto a las diferencias de quienes la integran.
La visión que tiene el docente de la escuela, de la comunidad y de las relaciones que se gestan en estos espacios es también
una dimensión del currículum que permea la formación de los alumnos, por lo que parte sustantiva del trabajo del docente
estará encaminado a que los alumnos se integren, participen y colaboren en y con la comunidad.
Uno de los principios más importantes en los que se fundamenta la NEM es la participación en la transformación de la
sociedad. “En la NEM la superación de uno mismo es base de la transformación de la sociedad. El sentido social de la
educación implica una dimensión ética y política de la escuela, en cualquier nivel de formación, lo que representa una
apuesta por construir relaciones cercanas, solidarias y fraternas que superen la indiferencia y la apatía para lograr en
conjunto la transformación de la sociedad”.6
Recuerde también que las dimensiones del desarrollo del estudiante, emocional- afectiva, el cuidado y la consciencia físico-
corporal, están vinculadas con la responsabilidad social, uno de los ocho principios que rigen la Nueva Escuela Mexicana, de
las que el docente no puede ser ajeno, su práctica no puede desvincularse del contexto social y de las condiciones y
relaciones concretas en las que se dan los procesos de aprendizaje. Estas relaciones tienen que construirse bajo una mirada
de horizontalidad y priorizando lo que Freire llamó el método dialogal: “Esto presupone la comprensión del otro (par,
estudiante, padre de familia, directivo, vecino, gobernante, etcétera) como alguien situado en un contexto particular desde el
que habla, siente y actúa; un Otro que es condición necesaria para que tenga lugar un método dialogal, en particular, dentro
del escenario educativo”.7 Entendemos pues el diálogo como condición necesaria para establecer una interacción base de los
procesos de enseñanza y aprendizaje en el entorno escolar, es decir, un diálogo pedagógico; pero también la necesidad de
que nuestros estudiantes aprehendan el diálogo y lo trasciendan, que sea una herramienta que les permita construir en la
comunidad relaciones de respeto a las diferencias, igualdad, democracia y paz.
Consideremos que si bien este diálogo pedagógico que establezca el docente debe basarse en lo que los
estudiantes conocen y viven, también debe trabajar con contenidos curriculares. Sabemos que los
contenidos curriculares durante mucho tiempo se abordaron desde una visión atomizada, en algunos
casos con esfuerzos por establecer la vinculación con otras áreas temáticas o disciplinas, pero
únicamente con la finalidad de favorecer desempeños o bien como elemento secundario o
complementario; estas propuestas centradas en la fragmentación del conocimiento para su abordaje
desde las asignaturas, obligaba a los docentes a centrarse en los contenidos concretos de la misma y
perder de vista la obligada y necesaria transversalidad, que debe existir en un plan de estudios que
atienda las necesidades reales de un contexto complejo e integral como es el mundo real.
Así la Nueva Escuela Mexicana plantea para la Educación Media Superior un currículum fundamental
conformado por 3 áreas de acceso al conocimiento y a la experiencia: Ciencias Sociales, Ciencias
Naturales y Humanidades y cuatro ejes transversales: Pensamiento lógico matemático; comunicación
verbal, no verbal y escrita; conciencia histórica y cultura digital. Estos cuatro ejes transversales son
recursos socio cognitivos que fungirán como herramientas para que los estudiantes accedan al
currículum fundamental y se logre su desarrollo integral.
COMUNICACIÓN VERBAL, NO VERBAL Y ESCRITA
PENSAMIENTO LÓGICO-MATEMÁTICO
CULTURA DIGITAL