Arquitectos: Carlos Andrés García, Gabriel Romero Villota y Eduardo Mejía
Área: 8546.0 m2 STUDIOGRAM Colegio Pradera El Volcán
• Un nuevo ambiente educativo continuo e
ilimitado en donde diversas espacialidades singulares se encuentran flotando en una única superficie que caracteriza cada uno de los lugares que conforman el programa, a manera de un espacio pedagógico libre y sin fronteras, incluso con la ciudad misma, permitiendo que las distintas ramas del conocimiento interactúen entre sí y fortalezcan nuevos enlaces al generar actividades grupales de alto valor cognitivo.
• Para lograr esta deseada continuidad
espacial exterior/interior, interior/interior, imaginamos que el edificio es una mega- aula (en donde todos los espacios del colegio son lugares activos en la formación académica), mucho más grande y compleja que la convencional cerrada y direccionada, permitiendo la simultaneidad, variedad e integración de actividades. EXTERIOR
En su exterior, el proyecto habla de la estabilidad y
solidez que una Institución educativa debe ofrecerle a su comunidad como un hecho urbano firme, constante y permanente; mientras que en su interior el proyecto habla de lo inesperado, lo imprevisto, del descubrimiento y la curiosidad intelectual, siendo este el espacio enriquecido, escenario de una nueva pedagogía dinámica e interactiva. ESPACIOS
Construimos diversas condiciones espaciales
estimulantes e inesperadas acorde a los nuevos modelos pedagógicos que buscan la integración y polivalencia como escenarios de la forma contemporánea para llegar al conocimiento, definiendo como estrategia la conformación de un único volumen que contenga en su interior un espacio flexible; siendo este un gran contenedor de experiencias pedagógicas el cual permite la co- existencia en su interior de múltiples actividades debido a la flexibilidad de su composición estructural mediante pórticos de luces intermedias. ESPACIOS
El edificio se recorre en un paseo académico
multidireccional. Entorno al patio principal o plaza de formación la cual hemos planteado como una superficie inclinada de baja pendiente, permitiendo un escenario a cielo abierto para el colegio y la comunidad, además de ser el foco del espacio público circundante al proyecto; iniciando el recorrido mediante una rampa y una escalera muy tendida que va entregando a medios niveles hacia los vestíbulos, patios y distintos ambientes pedagógicos, haciendo del recorrido un hecho académico en sí mismo, que va descubriendo y articulando los escenarios propicios para la construcción contemporánea de conocimiento; llegando a la cubierta como punto cumbre de este recorrido. Espacios diáfanos
lugar carente de divisiones y
obstáculos, que resulta despejado. Una oficina de grandes dimensiones que solo presenta un escritorio y una silla puede ser calificada como diáfana. Lo mismo puede decirse respecto a una vivienda con pocos muebles y adornos. En el primer nivel, se plantean las áreas colectivas y de posible uso por parte de la comunidad, Biblioteca, CIRE, Administración, Comedor y sus áreas de abastecimiento. En el nivel 0.00 se plantea el ingreso exterior al Auditorio por parte de la comunidad mientras los estudiantes lo pueden hacer desde el interior del colegio independizando los flujos y recorridos.
En las plantas superiores se
plantean las aulas todas en comunicación directa con los pasillos, ambientes con cerramientos móviles que son versátiles según el uso.